Introducción

El turismo es una actividad económica dinámica y en rápida expansión en el mundo. En las últimas décadas, el movimiento de turistas ha alcanzado importantes niveles de crecimiento, sin precedentes en la historia de la humanidad. Conforme la sociedad ha evolucionado, sobre todo a partir del periodo que va del término de la Segunda Guerra Mundial a la fecha, se han hecho más asequibles los medios de transporte aéreo, terrestre y marítimo; se ha incrementado el ingreso de las familias y se ha avanzado en materia de derechos laborales -más visible en los países desarrollados y algunos en vías de desarrollo- lo que ha consolidado un mercado turístico cada vez más maduro y diversificado.

El surgimiento del internet y el comercio electrónico también ha contribuido a acelerar el turismo. La masificación de la industria de viajes ha llevado en la actualidad a considerar un replanteamiento y debate de los beneficios del turismo, revaluando los efectos positivos y negativos que producen los grandes volúmenes de visitantes sobre los recursos naturales, culturales y humanos de los centros turísticos, tal y como ha sido la experiencia vivida en ciudades como Barcelona, Venecia, Ámsterdam o Dubrovnik, por mencionar algunos casos destacados.

Del lado de la oferta, el surgimiento de los sistemas de reservaciones on-line, los globalizadores (GDS) y plataformas como Airbnb, Uber y el uso del Bitcoin, están revolucionando la también llamada "industria sin chimeneas", donde los prestadores de servicios turísticos tradicionales como los hoteles, las aerolíneas y las agencias de viajes, por mencionar los más conocidos, han sufrido una verdadera transformación en los últimos años.

Según cifras de la Organización Mundial de Turismo (OMT), durante 2018 se registró la llegada de más de 1400 millones de turistas internacionales, una cifra récord. Previsiones del mismo organismo señalan que para 2030 se estará superando la llegada de 1800 millones de turistas internacionales.

En este sentido, México es actualmente unos de los destinos preferidos para los turistas internacionales, el séptimo más visitado según el último ranking mundial de la OMT. Cifras del Banco de México muestran que, durante 2018, nuestro país recibió un total acumulado de 41.3 millones de turistas internacionales (con pernocta), además de 55.2 millones de excursionistas (46.9 millones de excursionistas fronterizos y 8.3 millones de pasajeros de cruceros).

En contraste con el destacado lugar que se ocupa respecto al arribo de visitantes internacionales, México se ubica en el lugar décimo sexto en la captación de ingresos de divisas por este concepto. Según cifras oficiales, durante 2018 nuestro país captó 22.5 mil millones de dólares procedentes del turismo internacional, lo que permite vislumbrar el reto para que esta actividad genere mayores ingresos para los involucrados en un futuro próximo.

El turismo en Yucatán 2006-2018

En los últimos años el turismo en Yucatán ha mostrado un crecimiento sostenido en sus principales indicadores, conformándose en un motor que genera ingresos y empleos dentro del sector servicios de la entidad. Según cifras del INEGI, el turismo representó el 10.1% del valor agregado censal bruto de la economía de Yucatán (2013), empleando a un total de 56 646 personas en la entidad.

Según los mismos Censos Económicos del INEGI, durante 2013, se contabilizaron 10320 establecimientos de servicios relacionados con la actividad turística en el estado, los cuales representaron el 10.5% de las unidades económicas de turismo en el país.

Entre 2006 y 2018, la afluencia de visitantes con pernocta en establecimientos de hospedaje del estado de Yucatán tuvo una tendencia al alza, pasando de registrar 981684 visitantes en 2006 a 1786000 personas observadas en 2018. Con excepción de 2009, cuando se registró una baja por la crisis de la influenza y se vivieron las consecuencias de la crisis financiera en los Estados Unidos de 2008, el mercado turístico en la entidad ha continuado su crecimiento, como se observa en el Gráfico 1.

Fuente: Datatur.

Gráfico 1 Evolución de la afluencia de visitantes con pernocta en el estado de Yucatán 2006-2018 

Según estimaciones de la Secretaría de Fomento Turístico (SEFOTUR), durante 2019 el visitante promedio en Yucatán genera un gasto promedio diario de $2650 pesos corrientes, sin incluir transportación foránea. Este gasto se distribuye principalmente entre los rubros de hospedaje, alimentación, transportación interna, tours, visita a atractivos turísticos y compra de souvenirs, entre otros.

En términos nominales, se estima que durante 2018 la actividad turística en el estado generó más de $7055.8 millones de pesos en la economía del estado.

Desde 2001, el Gobierno del Estado ha mantenido una política pública para el fomento de la actividad turística, que inició con la creación de la Secretaría de Turismo -hoy Secretaría de Fomento Turístico-, la cual implementa diversas acciones de promoción y desarrollo turístico en la entidad, a partir de planes y programas previamente establecidos.

En el contexto nacional, Yucatán se encuentra entre los estados que superan los dos millones de turistas con pernocta al año, lo que lo ubica en la posición 22 en cuanto al número de turistas recibido, pero se encuentra entre los estados que más crecen en este aspecto, de 2008 a 2018 su Tasa de Crecimiento Media Anual (TMCA) fue de 4.3%, por encima de la media nacional que fue de 3.5 %; siendo el séptimo estado que más creció en el período analizado.

De esta manera, en los últimos años la actividad del turismo se ha convertido en un pilar fundamental de la economía yucateca; si bien las temporalidades de las series estadísticas disponibles son diversas en cuanto a su año de inicio y no permite estandarizar el punto de partida para un análisis homogéneo, se cuentan en la mayoría de los indicadores con datos suficientes para establecer una tendencia. Como se mencionó anteriormente, se estima que la derrama económica del sector para 2018 ascendió a más de siete mil millones de pesos para el estado; esta cifra presenta un crecimiento promedio anual de 9.4 % ya que en 2007 la cifra estimada rondaba los 4 mil quinientos millones de pesos.

Esta dinámica acelerada ha provocado que ramas de actividad directamente relacionadas, como el hospedaje, registren cifras también positivas. El ingreso hotelero pasó de 341 millones de pesos en el año 2000 a más de mil setecientos millones de pesos en 2018, creciendo a tasa media del 8.9% anual. Otro indicador que da cuenta de la importancia del sector turístico en la economía estatal es la población ocupada en el sector, ha venido registrando tasas anuales crecientes, del 6.0%. Al cuarto trimestre de 2018 el 10.4 % de la población ocupada total se empleaba en actividades relacionadas directamente con turismo. Si esto se compara con la cifra de 2007, que ascendía a 6.6%, significa que en 12 años la participación de la población ocupada del sector creció 3.8 puntos porcentuales.

Oferta turística

La oferta es una característica importante del sector turístico en Yucatán. A partir de los recursos naturales y culturales (tangibles e intangibles) que el estado posee, principalmente aquellos identificados con su herencia maya, se distingue una diversidad de ramas de actividad económica vinculadas al turismo.

La entidad se distingue en este sentido por una natural vocación hacia el turismo y cuenta con importantes íconos ampliamente conocidos a nivel mun dial, como es el caso de Chichén Itzá, segunda zona arqueológica más visitada del país y considerada desde 1988 como Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO. Adicionalmente, este sitio se considera una de las Siete Maravillas del Mundo Moderno a partir de una de las primeras votaciones globales en línea.

La entidad dispone asimismo de una amplia gama de atractivos coloniales, los Pueblos Mágicos de Izamal y Valladolid y atractivos naturales únicos como los cenotes, manglares y playas, por mencionar algo de lo más conocido.

En cuanto a su distribución, se considera que el 55.2% de la oferta de servicios turísticos de la entidad se concentran en la capital del estado, la ciudad de Mérida, en tanto que otros centros turísticos que sobresalen son los Pueblos Mágicos de Izamal y Valladolid, Chichén Itzá, Uxmal, además de Progreso, Telchac Puerto, Celestún y el municipio de Tizimín.

La tendencia registrada de la oferta turística para el periodo 2008 a 2018 es ascendente; el número de habitaciones creció a una tasa anual del 3.5% y las unidades de hospedaje, que aglutinan a las diferentes categorías de establecimientos, lo hace a una tasa media de anual del 3.2%; este crecimiento está diversificado tanto en Mérida como en el interior del estado, donde sus tasas anuales son de 3.8% y 3.0% respectivamente. En números absolutos cada año se incorporaron cerca de 388 habitaciones. El crecimiento registrado en las habitaciones disponibles es similar, el número de unidades hospedaje que registra la misma tasa anual para Mérida, de 3.0%, y 3.4 % para el interior del estado. No obstante el crecimiento sostenido en la oferta disponible, las tasas de ocupación hotelera promedio se han mantenido constantes, entre el 51% y el 63 %, en Mérida, y entre el 25% y 30%, en el interior del estado (Gráfico 2).

Fuente: cálculos propios con datos de la Secretaría de Fomento Turístico del estado de Yucatán.

Gráfico 2 Procentaje de ocupación hotelera 

Demanda turística

En cuanto a la demanda turística, las cifras son positivas y con crecimiento constante en todos los segmentos. La llegada de turistas a Yucatán pasó de un millón trecientos mil en el año 2008 a un millón setecientos mil en 2018; destacando el arribo de turistas nacionales. Si bien registra tasas positivas, las cifras de arribo de turistas extranjeros tienen un comportamiento un poco más discreto. Destacan por su crecimiento exponencial los segmentos de cruceros, reuniones y visitantes a zonas ecológicas. En 11 años, se triplicó el número de barcos que atracaron en el puerto de Progreso, lo que permitió tener un crecimiento de 16.9% anual en el número de pasajeros que arriban al estado por esta vía. Con la ampliación de la oferta de sitios de zonas ecológicas como los cenotes X'kekén y Samulá, la incorporación del parador de El Corchito y el mirador de Uaymitún, la cifra de visitantes a estos sitios superó los 477 mil en 2018; por su parte, el turismo de reuniones registra una tasa media de crecimiento del 11.1 % anual y permite el arribo de más de 80 mil visitantes al año.

Conclusiones

Yucatán se encuentra en sintonía con la tendencia mundial del crecimiento turístico. Para la entidad, el turismo es una actividad dinámica y que ha adquirido mayor importancia en la economía estatal, debido a los recursos naturales, culturales (tangibles e intangibles) que posee. Actualmente, este sector registra un ritmo de crecimiento superior al promedio nacional, ubicándose en el top 10 de las entidades que más crecen.

Esta expansión ha posicionado al sector turístico como estratégico para el desarrollo del estado. Su participación en la economía es creciente y acelerada, consolidándose en los últimos años como una de las "industrias" que mayor aportación hacen al Producto Interno Bruto estatal, generando ingresos y empleo.

Debe destacarse que, en los últimos años, este incremento de la actividad se ha diversificado desde el punto de vista geográfico: si bien en Mérida aún se concentra la mayor oferta de infraestructura turística, en el interior del estado también se registran importantes tasas de crecimiento, aunque se hace evidente la ausencia de ciertos servicios turísticos necesarios para el visitante.

Sin duda, de continuar la tendencia de expansión de la oferta y demanda de servicios turísticos, en los próximos años esta actividad continuará representando una opción viable para contribuir al desarrollo de Yucatán. Por lo anterior, se debe fomentar tanto desde la política pública como desde el sector privado un crecimiento equilibrado y sustentable para potencializar los efectos positivos y reducir aquellas consecuencias adversas que el aumento de esta actividad conlleva, evitando las experiencias contrarias observadas en otros destinos del mundo.

Mérida, Yucatán, octubre de 2019