SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.55 número3S. Dube (2017). Subjects of modernity. Time-space, disciplines, margins. Stellenbosch: Africa Sun Media. 180 pp. índice de autoresíndice de materiabúsqueda de artículos
Home Pagelista alfabética de revistas  

Servicios Personalizados

Revista

Articulo

Indicadores

Links relacionados

  • No hay artículos similaresSimilares en SciELO

Compartir


Estudios de Asia y África

versión On-line ISSN 2448-654Xversión impresa ISSN 0185-0164

Estud. Asia Áfr. vol.55 no.3 Ciudad de México sep./dic. 2020  Epub 13-Nov-2020

https://doi.org/10.24201/eaa.v55i3.2623 

Reseñas

S. Rahemtulla (2017). Qur’an of the oppressed: Liberation theology and gender justice in Islam. Oxford: Oxford University Press. 295 pp.

1Centre national de la recherche scientifique, Francia Instituto Francés de Estudios Andinos, Perú, sylvie.taussig@gmail.com

Rahemtulla, S.. 2017. Qur’an of the oppressed: Liberation theology and gender justice in Islam. Oxford: Oxford University Press, 295p.


El libro se presenta como una monografía cuádruple de cuatro importantes actores del pensamiento islámico contemporáneo, cuyo punto en común es su decisión razonada de privilegiar el Corán por encima de otras fuentes islámicas. Se trata de Farid Esack, Asghar Ali Engineer, Amina Wadud y Asma Barlas, dos teóricos de la teología de la liberación islámica y dos teóricas de la igualdad de género. Los cuatro, sin embargo, están involucrados en ambas temáticas con diferentes ponderaciones, lo que justifica su reunión aquí. Las monografías están construidas de manera muy interesante: un trabajo sobre la metodología de cada uno de los pensadores permite comprender sus elecciones hermenéuticas y su preferencia por el Corán. Una breve biografía los sitúa en su contexto específico (Sudáfrica, India, Estados Unidos y Pakistán, respectivamente) y proporciona alimento para la reflexión sobre el alcance universal tanto de la lucha que libraron como del islam tal como lo conciben, como teología y como praxis comprometida con los oprimidos. En la introducción se exponen varios conceptos, así como el posicionamiento de la autora, una mujer musulmana practicante; en este sentido, propone una lectura comprometida y crítica, por ejemplo, de Farid Esack, quien, como los teólogos cristianos de la liberación, hace del Éxodo el paradigma de la liberación. Sin embargo, para Shadaab Rahemtulla, la elección del tawhid (unidad de Dios) como piedra angular es preferible, porque no sucumbe al poder eurocéntrico que dicta las epistemes y porque nos permite permanecer dentro de los recursos enteramente islámicos.

En la introducción, en la que se exponen varios conceptos, se vuelve en particular a la elección de privilegiar el Corán sobre la tradición, a fin de poner de relieve su potencial liberador en las circunstancias actuales, que son muy diferentes de las de la revelación. Esta elección, que implica un énfasis en la justicia social, la crítica de las lecturas tradicionales y la adopción de nuevas prácticas de lectura, la comparten los cuatro autores. Se trata de plantear la ontología como metodología, partiendo de lo que es el Corán, es decir, la palabra de Dios, lo que la tradición no ha hecho; estas elecciones de lectura provocan una reacción muy fuerte de los ulemas. Aquí se lamenta la ausencia de una perspectiva histórica de esta corriente, que parece ser nueva en la teología islámica, aunque la autora insiste en puntos en común con los pensadores islamistas. Hay un debate sobre si el islamismo es la forma musulmana de la teología de la liberación (Gresh and Bayat, 2018), pero la autora no lo prevé y su acercamiento sigue siendo poco claro. ¿Qué son esos puntos en común?

Presentaré brevemente la obra y el pensamiento de los cuatro autores. Esack, nacido en Sudáfrica y activista contra el apartheid, tuvo una infancia muy difícil. Enviado a Pakistán para estudiar en una madrasa, tuvo una educación islámica clásica de la que se emancipó debido a su experiencia en el apartheid para concebir una teología desde los márgenes, seguro de que lo que hay que estudiar es el contexto actual, más que el del siglo VII, porque el Corán es un discurso vivo cuya verdad se revela a través de la praxis, la clave de su investigación teológica. Inspirado en la teología cristiana de la liberación, hace del Éxodo el paradigma principal de su exégesis, siempre que la liberación de uno mismo esté ligada a la liberación del otro: uno debe estar del lado de los oprimidos para trabajar por su propia humanidad, y aquí Esack utiliza el término fitra. El islam para Esack debe comprometerse con la justicia, y con la lucha contra los males que afectan a la humanidad, contra la idea de que los males serían una retribución divina.

Asghar Ali Engineer, nacido en la comunidad de musulmanes Bohra en India, y en desacuerdo con ella, hace del Corán un texto liberador por excelencia, y en él defiende una visión esencialista, aunque también centrada en la praxis. De la cultura chiita, hace de la batalla de Karbala el modelo islámico de la lucha por la libertad, y del martirio de Hussain, el corazón del mensaje del islam, exaltando el valor, el sacrificio y el compromiso con la justicia. Por lo tanto, debemos dejar de lado los sedimentados discursos y prácticas, entre ritos y rituales, que oscurecen la realidad del dios del Corán, que toma partido por los oprimidos contra los que los oprimen. Considerando los conflictos entre hindúes y musulmanes en India, aboga por la laicidad como filosofía nacional que pase por alto las diferencias, mientras que denuncia la forma propia de la laicidad en India que está en los colores del hinduismo, y describe al musulmán como el otro fanático. Su enfoque, a diferencia del de Esack, privilegia el texto escrito y enfatiza el vínculo entre paz y liberación.

Amina Wadud es una americana negra convertida al islam, y Shadaab Rahemtulla aprovecha esta oportunidad para contar la historia del islam negro en Estados Unidos. Se formó en ciencia islámica en la universidad y luego se trasladó a Malasia, donde estuvo expuesta al movimiento de Sisters in Islam (SiS), que la influyó tanto como a ellas. Favoreciendo el Corán y el contexto como fuente legítima y lugar de encuentro de la voluntad divina (a diferencia de la sharía), sus libros están influidos por la teoría del “doble movimiento” de Fazlur Rahman, y se centran en la relación entre el islam y la justicia de género. Sin embargo, rechaza el término “feminismo” porque implica la crítica de las religiones, así como un alejamiento de la religión, y prefiere llamarse a sí misma “pro fe, profeminista”. Para la autora, sin embargo, su propuesta de una “lectura femenina del Corán” es problemática porque es esencialista. No obstante, con base en el texto, en particular en la experiencia de Hagar, madre de Ismael, y en la idea de Tawhid y Khilafa, construye un feminismo alternativo que pretende integrar el género a la teoría ética islámica.

Por último, Asma Barlas es una americana-pakistaní, la única de los cuatro pensadores aquí presentes que no ha hecho ningún estudio islámico. Al igual que los otros tres, se dedica a la crítica de los hadices y la tradición de la interpretación, pero ella ve el Corán como un texto que esencialmente lucha contra el patriarcado. Se basa en particular en el caso de Abraham y en la vida del propio Mahoma, así como en la interpelación coránica de Umm Salama. El núcleo de su trabajo es la noción de tawhid, la indivisible soberanía de Dios, que no puede ser ni hombre ni padre. Sin embargo, al negarse a ver las posibles interpretaciones androcéntricas del Corán, Barlas tiende a la apologética y a la esencialización.

El volumen considera a dos pensadores de la teología de la liberación y a dos pensadoras de la igualdad de género. Ambas corrientes no están puramente yuxtapuestas, ya que una conclusión nos permite tomar una posición más elevada e identificar los elementos estructurales que las acercan; a saber: en primer lugar, la elección del Corán como fuente principal. La lectura es, en los cuatro casos, holística o global, pero nunca comenta el texto completo, a diferencia de los comentarios clásicos, que seguían el Corán versículo por versículo y tenían un enfoque enciclopédico; favorecen los comentarios temáticos que les hacen buscar elementos en todo el texto coránico. Para Shadaab Rahemtulla, hay un vínculo intrínseco entre el holismo textual y el compromiso con el comentario temático. Además -y esto también en contraste con la tradición exegética-, la experiencia se integra, en los cuatro casos, como una fuente autorizada. Todos los libros de estos autores contienen descripciones de las realidades de la vida, la opresión, etc., y no se limitan a lo que normalmente se reconoce como teología. Sin embargo, no se trata sólo de un contexto, sino de una nueva fuente, que resuena con el fin de la pretensión de objetividad propia del comentario clásico. El reconocimiento de la subjetividad, explica la autora, implica una teología contextual (lo que es muy distinto de decir que la teología es dependiente del contexto): el enfoque temático, orientado principalmente en torno a la liberación socioeconómica, la igualdad de género y el pluralismo religioso, permite poner al individuo y sus preocupaciones en el centro de la teología. Éste es el primer elemento común, que es más que un elemento.

El segundo elemento es la materialidad de los libros publicados por estos autores, y que se caracterizan por su brevedad y su accesibilidad. Debe inscribirse en la historia de la imprenta y de la educación de masas, que es reciente en el mundo árabe-musulmán, y que ha creado nuevos productores y consumidores de conocimientos islámicos. En este contexto debe situarse la creación de un tipo de conocimiento diferente, que se opone al conocimiento clásico, y que no se origina en los lugares tradicionales de educación islámica. Estas producciones pertenecen a un registro académico y están dirigidas a una élite académica: su consigna, dictada por el mercado del libro, es la claridad y la “comerciabilidad”.

El tercer punto es la verdadera lucha por las causas, contra el racismo, contra el imperialismo americano, por los palestinos, a lo que se añade su compromiso con el pluralismo, ya sea intra o interreligioso.

Esta conclusión general es muy interesante; no debe hacernos olvidar, sin embargo, que la autora no trata de los posibles vínculos ideológicos entre las dos corrientes ni con el islamismo. Ella especifica que el enfoque temático no implica una politización del islam, sino un desplazamiento de las preocupaciones religiosas (por excelencia, la salvación) a las cuestiones mundanas; es un inmanentismo en el que Dios (aquí el tawhid, su unidad) actúa como paradigma. El trabajo monográfico está muy bien realizado, desde la descripción de las ideas de los autores, sus métodos y la génesis de su pensamiento, hasta la encrucijada de su experiencia.

Referencia

Geesh, A. y Bayat, A. (2018). Is Islamism the Muslim form of liberation theology? Orient XXI. Recuperado de https://orientxxi.info/magazine/is-islamism-the-muslim-form-of-liberation-theology,2527Links ]

Creative Commons License Este es un artículo publicado en acceso abierto bajo una licencia Creative Commons