El 4 de abril de 1951, Daniel Cosío Villegas anunciaba al historiador José Bravo Ugarte la próxima aparición del primer número de la revista Historia Mexicana. En carta a Bravo Ugarte, que se conserva en el Archivo Histórico de El Colegio de México, Cosío Villegas decía que el “campo exclusivo” de la revista trimestral sería, “como su nombre lo indica, la historia de nuestro país”.

A 70 años de la fundación de Historia Mexicana puede asegurarse que así ha sido: pocas revistas académicas han dedicado tanto espacio a explorar las múltiples dimensiones de la historia nacional. Las formas de investigar y escribir sobre esa historia han cambiado a lo largo de las décadas y se han desplazado de un eje interpretativo a otro, conforme se redibuja el horizonte historiográfico y se enriquece la disciplina en su diálogo con las ciencias sociales.

El presente número celebra las siete décadas de Historia Mexicana con un ejercicio de balance crítico de la publicación. El lector encontrará un recorrido por el tratamiento que se ha dado a cada periodo de la historia de México y por los enfoques analíticos y variaciones temáticas que han predominado en el campo historiográfico. El itinerario aquí descrito refleja la propia evolución de la historia académica en México y su constante renovación metodológica.

En fases sucesivas de la publicación han sido más concurridas la historia de las ideas o la historia económica, la historia cultural o la historia política. De perspectivas centralistas se ha pasado a otras con mayor énfasis en la historia regional o en la apertura al entorno internacional. En las últimas décadas, temas como las migraciones y exilios, los recursos naturales y el medio ambiente, las comunidades indígenas y las luchas femeninas, han ganado centralidad en los estudios históricos.

La historia de México ha dejado de ser ese “campo exclusivo” del que hablaba Cosío Villegas en su carta a Bravo Ugarte. Pero sigue siendo el punto de partida para profundizar en las diversas regiones y núcleos demográficos que componen el país y para avanzar, desde miradas comparativas o transnacionales, en el estudio de las dinámicas de la globalización.

Este número, en el que colaboran académicas y académicos que han marcado tan decisivamente la investigación y la enseñanza de la historia, dentro y fuera de El Colegio de México, como Josefina Zoraida Vázquez, Andrés Lira, Clara Lida y Pilar Gonzalbo, es también un homenaje a todas y todos aquellos colegas que han intervenido en la dirección, la edición y la impresión de esta revista, que hoy nos llena de orgullo.