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Revista mexicana de sociología

On-line version ISSN 2594-0651Print version ISSN 0188-2503

Rev. Mex. Sociol vol.85 n.3 Ciudad de México Jul./Sep. 2023  Epub Sep 01, 2023

https://doi.org/10.22201/iis.01882503p.2023.3.60781 

Temas de coyuntura

In memoriam Pablo González Casanova

Raúl Romero Gallardo1 
http://orcid.org/0000-0002-2371-3033

1Instituto de Investigaciones Sociales


Pablo González Casanova y del Valle (1922-2023) estudió en la Escuela Nacional Preparatoria Gabino Barreda (plantel 1) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), cuando esta se encontraba ubicada en lo que hoy es el Antiguo Colegio de San Ildefonso. Después obtuvo un diploma en contabilidad por la Escuela Bancaria y Comercial e ingresó a estudiar jurisprudencia en la UNAM, carrera que pretendía cursar a la par que aprendía historia en un programa conjunto por la misma UNAM, la Escuela Nacional de Antropología y El Colegio de México (Colmex). Pero el plan de estudios implicaba tiempo completo y el Colmex otorgaba beca para ello. Fueron estos los motivos que llevaron a González Casanova a abandonar los estudios de jurisprudencia y dedicarse de lleno a la historia, relata Andrés Lira en el prólogo a Pablo González Casanova. Obras históricas, 1948-1958, publicado por El Colegio de México (2013).

En 1947, con la tesis titulada “El Misoneísmo y la modernidad cristiana en el siglo XVIII”, y con un jurado integrado por José Gaos, Silvio Zavala y José Miranda, entre otros, González Casanova obtendría el título de Maestro en Ciencias Históricas con la distinción magna cum laude.

Apoyado por el Colmex, el Instituto de Investigaciones Sociales (IIS) de la UNAM y el gobierno de Francia, González Casanova llega a finales de 1947 a París, para realizar estudios de doctorado en la Universidad de la Sorbona. En su trabajo de investigación sería asesorado por Fernand Braudel, y obtendría el título con la tesis “Introducción a la sociología del conocimiento de la América Española a través de los datos de la historiografía Francesa” (“Introduction à la Sociologie de la Connaissance de l’Amérique Espagnole à travers les données de l’Historiographie Française”). Consigue en 1950 el Doctorado en Letras, con especialidad en Sociología, reconocido además con la distinción Mention trés honorable.

Fernand Braudel, alumno y heredero de las preocupaciones intelectuales de Marc Bloch y Lucien Febvre, transmitió a González Casanova la necesidad del conocimiento interdisciplinario para comprender un mundo rápidamente cambiante en todas sus escalas. Para traer a México esos novedosos planteamientos, Don Pablo -llamado así con respeto y con cariño- tradujo en 1952, junto a Max Aub, el libro Introducción a la Historia, de Marc Bloch, para el Fondo de Cultura Económica.

La incorporación de nuevos métodos, técnicas y estrategias de investigación del conocimiento interdisciplinario por parte de González Casanova comenzaría a verse reflejada en sus primeros libros, donde a la visión histórica se suma la visión económica, politológica, sociológica, demográfica, etcétera: Sátira anónima del siglo xviii, antología en colaboración con José Miranda (1953); Una utopía de América (1953); La ideología norteamericana sobre inversiones extranjeras (1955); La literatura perseguida en la crisis de la Colonia (1958); Estudio de la técnica social (1958) y La democracia en México (1965).

Al escribir lo más cercano a su autobiografía, Proceso de análisis e investigación: autopercepción intelectual de un proceso histórico (1995), González Casanova relataría que fue en esta etapa en Francia donde transitó de la historia de las ideas a la sociología del conocimiento. En sus artículos académicos de esa época puede observarse esta transición, así como una mayor presencia en sus investigaciones de temas como la explotación, el desarrollo, la democracia, la educación y la enseñanza: Aspectos políticos de Palafox y Mendoza (1944); Un estudio de sociología religiosa (1947); Sociología de un error (notas sobre la mentalidad primitiva) (1949); La sátira popular de la Ilustración (1951); El auge del comercio francés en las Indias Españolas (1952); Ideología de la primera industrialización mexicana (1952); El problema del método en la reforma de la enseñanza media (1953); Ensayo sobre México (1954); Sociología y economía (1955); El don, las inversiones extranjeras y la teoría social (1957); Sobre la situación política de México y el desarrollo económico (1958); La democracia como camino de la ciencia social y del conocimiento político (1958); El desarrollo, la política y la ciencia social (1958); Las ciencias sociales y la Guerra Fría (1960); La opinión pública en México (1961), y México: el ciclo de la revolución agraria (1962).

González Casanova se incorporó como investigador científico al iis desde 1943, y en 1967 obtuvo la titularidad. En esa etapa de su trayectoria académica, el apoyo de Lucio Mendieta y Núñez sería muy importante.

Con una sólida formación académica y una carrera en ascenso, González Casanova ocupó por aquellos años los cargos de secretario general de la Asociación de Universidades (1953-1954), director de la Escuela Nacional de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM (1957-1965) y director del Instituto de Investigaciones Sociales (1966-1970). El intelectual se consolidaba también en la conducción de instituciones y en 1970 sería electo como rector de la UNAM, cargo en el que estuvo sólo dos años (1970-1972).

A su llegada a la rectoría, González Casanova ya contaba con un importante diagnóstico sobre diferentes problemas nacionales, entre los que destacaba el problema educativo. Lo anterior puede observarse en textos como El problema del método en la reforma de la enseñanza media (1953), Educación superior y desarrollo económico (1968) o Aspectos sociales de la planeación de la educación superior (1970), por mencionar algunos. En su discurso de toma de posesión como rector, hablaría sobre la “democratización de la enseñanza”, la “apertura de los estudios superiores a más estudiantes”, y “una mayor participación en las responsabilidades y decisiones universitarias”. Se anunciaba así el inicio de un proyecto de avanzada que ha marcado la historia de la UNAM y del país, un proyecto orientado a “enseñar a muchos y enseñar a un alto nivel”.

Ya como rector de la UNAM, el autor de La democracia en México impulsó la creación de los Colegios de Ciencias y Humanidades (CCH) y la Universidad Abierta, con los que, además de crear opciones educativas de nivel medio superior y nivel superior, se puso a la vanguardia en la construcción de espacios interdisciplinarios. González Casanova formulaba así una opción para abrir la universidad a más personas y mantener e incluso elevar la calidad educativa: formar grupos de enseñanza-aprendizaje, en todos los niveles, autónomos y articulados en diálogo. Comunidades de conocimiento, grupos que se enlazaran y combinaran en las escuelas, las universidades, los institutos y los laboratorios, pero también en los centros de trabajo, en los barrios y en las comunidades. En cierto sentido, se sintetiza en este planteamiento mucho de la revolución pedagógica y epistemológica que Don Pablo aprendió en el Colegio de México y con el diálogo interdisciplinario en Francia.

La obra de González Casanova es extensa y compleja de resumir. Su primer texto académico largo del que se tiene registro es de junio de 1944, y su publicación más reciente es de septiembre de 2021. Se trata de 78 años de trabajo constante, de reflexión académica, de creación de instituciones, de participación política. Entre sus principales libros, además de los ya mencionados, ubicamos Las categorías del desarrollo económico y la investigación en ciencias sociales (1967); Sociología de la explotación (1969); Imperialismo y liberación en América Latina (1978); La nueva metafísica y el socialismo (1982); La hegemonía del pueblo y la lucha centroamericana (1984); El poder al pueblo (1985); Los militares y la política en América Latina (1988), y Las nuevas ciencias y las humanidades. De la academia a la política (2004). Junto a estas obras, habría que sumar otros libros también de autoría propia, y en los que aparece como coordinador o como coautor, en los que se profundiza en temas como el desarrollo latinoamericano, la violencia política en América Latina, la clase obrera, elecciones y democracia, partidos políticos, colonialismo interno y colonialismo global, matemáticas y ciencias sociales, socialismos, liberación y democracia, y sobre el vínculo entre el sistema de dominación y acumulación capitalista y el ecocidio. Hay que destacar también su trabajo constante en la formación y actualización de conceptos en las ciencias sociales y en los pueblos indios, así como su continua preocupación sobre los diálogos y los avances entre las ciencias sociales, el pensamiento crítico, las ciencias de la complejidad y lo que el definía como las nuevas ciencias.

Una de las cualidades del doctor Pablo González Casanova y del Valle es que su arduo y profundo trabajo teórico se combinó con la conducción y formación de instituciones y redes académicas. Don Pablo era capaz de materializar en estas y en organizaciones sociales lo que estaba reflexionando. Ese pensar-hacer lo llevó a los cargos ya mencionados, y también al de presidente de la Asociación Latinoamericana de Sociología (1968-1972 y 1983-1985), consejero de la Universidad de las Naciones Unidas (1982-1988), fundador y director desde 1986 del Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Humanidades, de la UNAM, que en 1995 se convirtió en el Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades y que González Casanova dirigiría hasta el 10 de marzo de 2000. También se desempeñó como presidente del Consejo Superior de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (1988-1990).

Los reconocimientos a su labor académica fueron también numerosos. Hasta nuestros días, es el único universitario reconocido como profesor e investigador emérito por la UNAM, en 1984, mismo año en el que obtuvo el Premio Nacional de Ciencias y Artes en Historia, Ciencias Sociales y Filosofía que otorga el gobierno de la República (1984). En 1989 fue nombrado investigador nacional emérito del Sistema Nacional de Investigadores del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología. En 2005 fue ratificado con este nombramiento por su trayectoria de excelencia como investigador y su relevante contribución como forjador de nuevos investigadores.

Otros destacados reconocimientos que recibiría González Casanova son la Medalla de Honor de la Universidad Karl Marx de Leipzig, Alemania, por obra científica en el sector de las investigaciones sociológicas (1971); Medalla “Haydée Santamaría”, entregada por Casa de las Américas, de La Habana, Cuba (1989); Premio Internacional “José Martí”, otorgado por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (2003), y la Orden “José Martí”, otorgada por el gobierno de la República de Cuba (2004), y más de una decena de doctorados honoris causa por universidades nacionales e internacionales.

Pero este pensar-hacer de González Casanova iría más allá de la universidad, y si bien él se definía a sí mismo como un “intelectual orgánico de la universidad pública”, su vida entera está relacionada con una gran cantidad de luchas en América Latina y en el mundo entero. Desde la década de los años cincuenta se sumará a las voces que denunciarán golpes de estado y dictaduras en la región, y articulará redes y colectividades como el Movimiento de Liberación Nacional (1963). Luego del golpe de estado en Chile, en 1973, también apoyará a decenas de intelectuales, artistas y líderes políticos para escapar de la cárcel, la tortura e incluso la muerte. Este apoyo a dirigentes políticos e intelectuales críticos que escapaban de las dictaduras se repetirá en diferentes momentos y países de la región. Por sus posiciones políticas y por el carácter crítico de su obra, Don Pablo también fue objeto de censura: en la década de los años sesenta, el Fondo de Cultura Económica (FCE) se negó a publicar lo que hoy es un clásico de la sociología, traducido ya a 15 idiomas diferentes, La democracia en México, mientras que la dictadura militar de Argentina (1976-1983) prohibió el libro La sociología de la explotación, por considerarlo un libro peligroso.

En 2003, González Casanova impulsaría la Red de Artistas, Intelectuales y Movimientos Sociales en Defensa de la Humanidad y contra el Neoliberalismo, una red que logrará articular a miles de voces en todo el mundo.

La rebelión del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) en 1994 marcaría determinantemente su vida y su participación política. Unos días después de haber estallado la guerra, y convocado por el obispo emérito de San Cristóbal de las Casas, Samuel Ruiz García, González Casanova se sumaría a la comisión de intermediación entre zapatistas y el gobierno federal de México para buscar una salida pacífica al conflicto. Desde entonces, no dejaría de acompañar la causa zapatista. En conversaciones públicas, solía decir que su posdoctorado lo hizo en la Selva Lacandona con los zapatistas. En abril de 2018, el EZLN decidió nombrarlo como el Comandante Pablo Contreras, el único comandante no indígena de la Comandancia General del EZLN.

Pablo González Casanova murió el 18 de abril de 2023, a los 101 años. En su larga vida supo combinar el pensar-hacer en la academia y en la política. Defensor incansable de la universidad pública y de su autonomía, solía decir que ahí estaba el futuro de la humanidad. De ideas firmes y convicciones fuertes, González Casanova sabía de la importancia de respetar y cultivar afecto con quienes no piensan como uno, y buscar coincidencias y entender las razones de quienes piensan diferente y hasta de forma opuesta.

“El verdadero profesor es aquel que sigue estudiando y el verdadero estudiante es aquel que también aprende a enseñar”, solía decir González Casanova, y su decir era también un hacer: hasta sus últimos días no dejó de aprender y maravillarse con los avances científicos y tecnológicos y con quienes se esforzaban en construir un mundo nuevo, y tampoco dejó de enseñar y volverse ejemplo de vida.

Don Pablo ha partido. Nos queda su monumental obra.

1Raúl Romero Gallardo Temas de especialidad: movimientos sociales, autonomías y pueblos originarios, economías criminales, pensamiento crítico latinoamericano. orcid: 0000-0002-2371-3033.

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