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Gaceta médica de México

On-line version ISSN 2696-1288Print version ISSN 0016-3813

Gac. Méd. Méx vol.141 n.4 Ciudad de México Jul./Aug. 2005

 

Actividades académicas

 

La Academia Nacional de Medicina.
Espejo de la vida de un país*

 

National Academy of Medicine of Mexico

 

María Elena Anzures–López

 

*Conferencia magistral "Dr. Ignacio Chávez", 2 de febrero de 2005

 

Señor doctor Misael Uribe,
Presidente de la Academia Nacional de Medicina.
Señor doctor Julio Frenk, Secretario de Salud,
honorables miembros de la mesa de honor, académicos honorarios, presidentes de departamento, señores y
señoras, académicos.

 

Agradezco a la mesa directiva de nuestra corporación el honor que me han conferido al encargarme dictar la conferencia magistral "Dr. Ignacio Chávez" instaurada por el doctor Antonio Fraga Mouret hace 15 años para honrar la memoria de uno de los médicos más distinguidos de México que tuvo la decisión de hacer que cambiaran las circunstancias para formar mejores médicos desde su posición de director de la Facultad de Medicina primero, después como fundador del primer Instituto de Cardiología que hubo en el mundo dedicado a fomentar no sólo la mejor atención de los pacientes sino la investigación y la difusión del conocimiento y que fue modelo de los demás institutos que surgieron en nuestro país y más tarde como rector de la UNAM. El doctor Ramón de la Fuente Muñiz fue quien inauguró esta conferencia, en la que hizo una alocución a la vida del doctor Ignacio Chávez.

Al honrar la memoria del doctor Ignacio Chávez en este recinto, honramos también uno de sus principales afectos como lo es la Academia Nacional de Medicina, de la que fue presidente a los 36 años de edad y en la que dejó rastros perdurables de su preocupación por el perfeccionamiento del quehacer médico, y de su insistencia de que el médico sea también un hombre culto y un humanista, ya que su posición privilegiada de atención a seres humanos enfermos no debe ser menospreciada ni mercantilizada.

El ejercicio de la medicina, ya de por sí complejo, se ve confrontado con múltiples retos, como son el avance de los conocimientos, de la ciencia pura, que más rápido que en otras épocas encuentran su aplicación en la tecnología y del modo de asumir el reto de atender de la mejor manera al paciente, de hacer frente a los cambios sociales y económicos y a la vez no caer en el mercantilismo y en la medicina defensiva que han mostrado de manera contundente sus maleficios en otros países.

La Academia es un ser vivo, su cerebro es la Mesa Directiva, sus órganos son los comités, sus células cada uno de sus miembros, como ser vivo, ha crecido y se ha desarrollado al parejo del país del cual es un espejo que refleja los acontecimientos, pero es un espejo vivo que no los refleja pasivamente, influye con decisión en ellos para modificar las circunstancias desfavorables y marcar los derroteros para mejorarlas.

Nace mestiza como la mayor parte de los habitantes de este país, con raíces europeas y mexicanas.

El segundo imperio nos legó tres cosas importantes: el sistema métrico decimal ya que México fue el primer país de América en que se implantó. El paseo de la Reforma y la Academia Nacional de Medicina.

Fundada en 1864 desde el principio manifiesta su decisión de ser nacional y no metropolitana, ya que tiene socios correspondientes en varias ciudades del país como Guanajuato, San Luis Potosí, Irapuato, Guadalajara, Puebla, Querétaro, Pachuca, Mérida, Monterrey, Durango, Mazatlán y Veracruz. También mantiene relaciones estrechas con otros países como Francia, España, Italia, Cuba, Estados Unidos y Argentina con sus socios correspondientes.

Como es imposible señalar todos los logros de sus miembros, sólo haré unas cuantas referencias a grandes pinceladas, más bien gruesos brochazos, de algunas de las figuras que se distinguieron por sus acciones en el curso de los 142 años de su existencia.

En los últimos lustros del siglo XIX y primeros del XX una figura impresionante es Eduardo Liceaga, quien sin ser higienista, es nombrado director del Consejo de Salubridad y a posteriori hace los estudios necesarios en Europa para sanear la ciudad de México al construir el sistema de atarjeas y albañales ocultos que substituyeron las acequias abiertas, proporcionar agua potable entubada que proviene de manantiales limpios y hacer las modificaciones apropiadas en los edificios existentes para que tengan las instalaciones sanitarias correspondientes. Propone que antes de hacer la construcción de casas en las nuevas colonias como la Roma, la Juárez y la Condesa, se urbanicen con trazado y pavimentación de calles, construcción de banquetas, alcantarillado, agua potable, luz eléctrica y obligación de sujetar los planos de las casas por construir a los reglamentos de sanidad. Organiza y hace modificar las leyes para que las ciudades fronterizas y los puertos sean regidos desde el punto de vista sanitario por la federación para homologar sus reglamentos. Instala estufas de desinfección en los puertos para impedir la entrada de enfermedades epidémicas como el cólera o la peste. Trae consigo la vacuna contra la rabia, de manos del propio Pasteur, la fabrica y enseña a producirla en lo que sería después el Instituto de Higiene que produciría además la vacuna antivariolosa y los sueros antitetánico, antidiftérico, antialacránico entre otros. Sanea los litorales para erradicar la fiebre amarilla y combatir la malaria. Planea y supervisa la construcción del primer hospital moderno en México que es el Hospital General, que cumplirá 100 años este sábado. Cuando alguien le pregunta ¿cómo es que ha podido hacer tantas cosas? Responde con esta fórmula: hay que tener " fe en el éxito de lo que va a emprender, constancia para perseverar y paciencia para esperar el resultado"

 

Nombres de calles

A la vera del Hospital General que estaba fuera de la ciudad, se fundó la colonia de los doctores y la Academia proporcionó el nombre de muchos de sus mejores miembros como: Dr. Vertiz, Dr. Jiménez, Dr. Carmona y Valle, Dr. Villada, Dr. Liceaga, Dr. Río de la Loza, Dr. Martínez del Río, Dr. Márquez, Dr. Lucio, Dr. García Diego, Dr. Lavista, Dr. Olvera, Dr. Terrés para engalanar sus calles.

 

Revolución

Cuando estalla la Revolución todo el país se convulsiona y cambia radicalmente. El Presidente Madero la nombra "Órgano Consultivo del Gobierno Federal" y aunque sigue funcionando la Academia durante la Revolución y es fama que sus sesiones de los miércoles sólo se suspendieron una vez durante la entrada de uno de los ejércitos a la capital, su situación como todo el país se torna precaria. En abril de 1912 es despojada de sus instalaciones en la Facultad de Medicina por el director el doctor Aureliano Urrutia. Aunque instituciones generosas como el Instituto Médico Nacional la acogen para que realice sus sesiones, hasta que se instala en Bolívar 13 y pasa después a la Facultad Odontológica en octubre de 1916, antes de volver a ocupar su sitio en la Escuela de Medicina. La agitación producida por la revolución se refleja en que además de los cambios de sede no ingresan nuevos académicos en 1913, 1915 ni en 1921 y en cinco años sólo lo hacen 18.

Al empezar el segundo cuarto del siglo XX y con el país ya en vías de pacificación ingresan los médicos que le darán brillo y harán progresar no sólo a la Academia sino al país, médicos de la talla de Ignacio Chávez, Ayala González, Aquilino Villanueva, Mario Torroella, Gustavo Baz, Darío Fernández, y muchos otros, todos ellos fundadores de especialidades fundadores de Institutos e impulsores de la medicina moderna mexicana.

 

Inmigración española

La inmigración republicana española al término de su guerra civil inyectó a México con una pléyade de hombres y mujeres profesionistas e intelectuales y la Academia se enriqueció con hombres de la talla de Isaac Costero, Rafael Méndez, José Guerra, Ramón Pérez Cirera, Magin Puig por nombrar a unos cuantos.

 

Posguerra mundial

Los egresados de la Universidad Nacional y de otras facultades del país iban a Europa, principalmente a Francia y Alemania a perfeccionar sus estudios, lo que después se llamó hacer estudios de posgrado; así lo hicieron Eduardo Liceaga, Darío Fernández, Ignacio Chávez y muchos otros. Al término de la II Guerra Mundial, los graduados de México giraron 45 grados hacia el norte y en lugar de hacer sus estudios de posgrado en Europa, los hicieron y los siguen haciendo principalmente en los Estados Unidos de Norteamérica como José Joaquín Izquierdo, Horacio Zalce etc.

 

Incorporación de la mujer

En 1953 se dio el voto a la mujer, y en 1957 la Dra. Rosario Barroso Moguel, ingresó a la Academia y abrió sus puertas para que otras mujeres se incorporaran a la misma, sin embargo, pasaron 8 años para que en 1965 ingresara la Dra. Julieta Calderón de Laguna y en 68, 69 y 70 ingresaron sucesivamente la doctora Ma de la Soledad Córdova, la doctora Blanca Raquel Ordóñez de la Mora y la Dra. Ma. Elena Anzures. En 1972 ingresó la Dra. Aline Shunemann de Aluja, en el área de veterinaria. En total hasta 2004 han ingresado 55 mujeres, distribuidas en la mayoría de las áreas. El hecho de que en la actualidad en la mayoría de las escuelas y facultades de medicina la proporción de mujeres que estudia sea mayor que la de hombres, no se ha reflejado todavía en la vida académica.

 

Investigación

Pertenecen a la Academia Investigadores de renombre mundial como Donato Alarcón Segovia, Adolfo Martínez Palomo, Luis Benítez Bibriesca, Patricia Alonso de Ruiz, Fabio Salamanca. Una mención muy especial es para el Dr. Carlos Canseco, que en su doble papel de académico y miembro del Club Rotario movilizó todos sus recursos para lograr el financiamiento y la tecnología para implantar la semana nacional de vacunación y aplicar la vacuna contra la poliomielitis en forma masiva.

La Academia Nacional de Medicina que me acoge desde hace 35 años trata de mantener su posición a la vanguardia, en cuanto a la selección depurada de sus nuevos miembros numerarios, titulares, honorarios y correspondientes y puede llamarse realmente nacional porque sus miembros están en todo el país.

Ha utilizado los avances informáticos para tener video conferencias interactivas con lugares lejanos, graba sus sesiones en videos y discos compactos, y está en el proceso de digitalizar toda su revista.

La velocidad vertiginosa con que avanzan las ciencias básicas y la aplicación tan veloz de sus descubrimientos en la tecnología y la terapéutica hacen que la información que adquieren los médicos al egresar de sus escuelas se vuelva obsoleta en pocos años, consciente de ello la Academia implantó desde 1994 el curso de actualización denominado Programa Nacional para Médicos Generales, que distribuido en varias sedes le permite acceder a lugares alejados y a tener casi 12,000 alumnos.

 

Secciones

En 1866 tenía seis secciones: I Patología, II Higiene, Medicina Legal y Estadística Médica, III Medicina Veterinaria, IV Materia Médica y Farmacología, V Fisiología y Antropología, y VI Ciencias auxiliares.

En 1879 aumenta a 12 secciones: 1 historia natural médica, 2 física y química médica, 3 anatomía normal y patológica, 4 fisiología, 5 patología y ciencias médicas, 6 patología clínica y terapéutica quirúrgica, 7 obstetricia, 8 higiene, 9 estadística y enfermedades reinantes, 10 medicina legal, 11 farmacología y farmacia y 12 veterinaria. En 1890 se agrega la ginecología, la oftalmología y la bacteriología, en 1911 dermatología y sifilografía, enfermedades de las vías urinarias, psiquiatría y enfermedades nerviosas, pediatría e historia de la medicina.

En 1936 se desarrollan en México las especialidades y en la Academia se vuelven a arreglar las secciones aparece la gastroenterología, la cardiología, la endocrinología y enfermedades de la nutrición, la hematología, enfermedades tropicales, cirugía general, ortopedia y cirugía de huesos y articulaciones, fisioterapia y radiología, higiene industrial y enfermedades del trabajo, en 1944 cirugía del sistema nervioso, cancerología, fisioterapia, medicina preventiva e higiene, anestesiología y así se van incorporando las nuevas ramas del ejercicio de la medicina y de la investigación

En la actualidad hay cuatro departamentos:

• Biología médica

• Cirugía

• Medicina y

• Salud Pública y Sociología Médica, que abarcan 59 áreas de trabajo.

Los comités que ayudan a la Mesa Directiva en su trabajo son los siguientes:

• Comité Clínico Terapéutico

• Comité de Consejos

• Comité de Medicina General

• Comité de Insuficiencia Renal Crónica

• Comité de Hemato Oncología en Niños

• Comité de Bioética

• Comité de Enseñanza en Salud

• Comité de Asuntos Internacionales

• Comité de Violencia Intrafamiliar y Sexual

• Comité de Actividades Culturales

• Comité de Educación Médica Continua

• Comité de Apoyo al Patrimonio de la Beneficencia Pública

• Comité de las Adicciones.

 

Formación de institutos

La Academia Nacional de Medicina ha sido el semillero del cual han salido los fundadores y directores de los Institutos que forman la vanguardia de la investigación como el de Cardiología fundado por Ignacio Chávez, el de la Nutrición fundado por Salvador Zubirán, el Hospital Infantil fundado por Federico Gómez Santos, el de Neurología fundado por Velasco Suárez, el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias, y cuyos siguientes directores también han sido miembros de la Academia. Los coordinadores de los Institutos también son académicos, como Enrique Wolpert, Misael Uribe, Jaime Sepúlveda.

Ha habido entre sus miembros diputados que han ayudado a mejorar las leyes de salud y gobernadores de estados.

Secretarios de Salud: como Salvador Aceves, Guillermo Soberón, Jesús Kumate y actualmente Julio Frenk y subsecretarios como José Laguna, Carlos Gual.

 

Consejos

El aumento de los centros de estudio, Facultades y Escuelas de Medicina en todo el país y su heterogeneidad, así como el nacimiento de las especialidades con numerosos centros de enseñanza de las mismas, hicieron necesario un organismo independiente que valorara la calidad y la capacidad de los egresados para ejercerla, así surgieron los consejos de especialidades y necesitados ellos mismos de un aval exterior, acudieron a la Academia de Medicina primero y después en conjunto con la de Cirugía, para obtener la idoneidad necesaria para su funcionamiento.

Este paso tan importante le ha dado una gran validez a estos consejos cuya función es asegurarse de que los especialistas certificados tengan los conocimientos adecuados que los acrediten como tales, cualquiera que haya sido la Universidad u Hospital que los haya formado y que además se recertifiquen cada cinco años para que el público esté seguro de que están al día en sus conocimientos.

 

Humanismo

Ramón de la Fuente Muñiz expresó en la primera conferencia "Dr. Ignacio Chávez":

"El humanismo ha permeado siempre las actividades de la Academia y de sus miembros, humanismo en su sentido más amplio que es el interés por el hombre, en su naturaleza, en su destino y en ciertas ideas y actitudes acerca de él. Lo esencial es que los valores de la vida y de la dignidad humana se anteponen a otros valores ; el valor más elevado es el hombre mismo y todos los hombres son perfectibles y poseedores de las mismas potencialidades; que la razón, el amor y la tolerancia son necesarios para su bienestar y desarrollo, estas ideas compartieron los humanistas del renacimiento los filósofos de la ilustración y ahora los humanistas seculares y religiosos".

Los hombres y las mujeres que han ingresado a la Academia como numerarios y que en 142 años no llegan todavía al millar, le han dado lo mejor de ellos mismos por lo que esta Academia sigue en actividad ascendente en los primeros años del siglo XXI .

 

Avatares

Ha tenido como un ser vivo que es, padecimientos como la pérdida de su sede en 1912 y de nuevo en 1985 por el terremoto, pero ha sabido salir avante. Fortalecida ahora, 20 años después de la última tragedia en la que se deterioró su casa y se destruyó la estatua de Asclepios que es su emblema, reforzado y renovado el edificio que la aloja, está mejor instalada y gracias a las buenas relaciones con la Real Academia de Cataluña recuperó la estatua que vuelve a presidir sus sesiones desde su pedestal.

En la pared norte contemplamos los rostros de todos los hombres que han presidido sus destinos, todos ellos comprometidos para dar lo mejor de sí mismos y para impulsar a sus compañeros a que se esfuercen en cumplir su misión.

Ha dado secretarios de estado, fundadores de institutos, directores de los mismos y de hospitales, de escuelas y facultades de medicina, investigadores de talla mundial, sus miembros han profesado la docencia y se han destacado en sus especialidades, enumerar a todos ellos no es posible en este espacio porque sería enumerar a los 972 numerarios y a los socios correspondientes y honorarios que la componen.

Así en forma deshilvanada y muy subjetiva he relatado ante ustedes parte de mis impresiones de cómo la Academia Nacional de Medicina es un espejo que refleja la vida del país, pero como lo dije más arriba es un espejo dinámico que ha influido también en sus acontecimientos en el afán perenne de ser mejores cada día.

Muchas gracias

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