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Boletín médico del Hospital Infantil de México

versão impressa ISSN 1665-1146

Bol. Med. Hosp. Infant. Mex. vol.67 no.2 México Mar./Abr. 2010

 

Estadísticas vitales

 

La mortalidad por tumores malignos en menores de 20 años en México, 1990-2008

 

Mortalidad due to malignant tumors in a population under 20 years old: Mexico, 1990-2008

 

Sonia B. Fernández Cantón1, Gerardo Perdigón Villaseñor2

 

1 Centro Nacional para la Salud de la Infancia y Adolescencia, Secretaría de Salud

2 Departamento de Ediciones Médicas, Hospital Infantil de México Federico Gómez, México D.F., México

 

Autor de correspondencia:
Dra. Sonia B. Fernández Cantón
Correo electrónico: sonia_fernandez@prodigy.net.mx

 

Fecha de recepción: 26-01-10.
Fecha de aceptación: 28-01-10.

 

La revisión de las cifras correspondientes a la mortalidad por cáncer resulta de vital importancia, no sólo porque este padecimiento representa la segunda causa de muerte en la población de menores de 20 años (superada únicamente por los accidentes), sino porque constituye una clara evidencia del impacto de la transición epidemiológica que se vive en nuestro país.

Si bien, en relación al total de defunciones por tumores malignos que ocurren en la población en general (67 048 durante 2008), las muertes por esta causa entre los menores de 20 años (2 239 en el mismo año) representan un porcentaje aparentemente bajo (3.3%), el comportamiento al interior de los grupos etáreos muestra una tendencia al incremento, situación contraria a la que se registra en la mayoría de los países desarrollados, cuyas tasas de mortalidad por neoplasias muestran una paulatina reducción.

De las cifras oficiales de mortalidad emitidas por el INEGI entre 1990 y 2008 se desprende que durante ese periodo se registraron cerca de 40 mil muertes de menores de 20 años, con un promedio ligeramente superior a las 2 000 muertes anuales correspondientes a una tasa promedio de 5.1 muertes por cada cien mil habitantes de ese grupo de edad. El comportamiento a través de los años muestra que la mortalidad ha aumentado ligeramente. La distribución porcentual al interior de los grupos de edad muestra que la proporción de muertes es mayor conforme la edad aumenta, de tal forma que si se considera el total acumulado de las muertes a lo largo del periodo analizado, cerca del 4% de ellas ocurre antes de cumplir un año de edad, en tanto que 30% ocurren entre los 15 y los 19 años, con una proporción que va de 20 a 23% para los niños entre 1 y 14 años (Tabla 1).

Del análisis de las tasas de mortalidad mostradas en la Figura 1 destaca, como era de esperarse, que la menor frecuencia de muertes durante el periodo la menor frecuencia de muertes durante el periodo corresponde a menores de un año (3.75 muertes por cien mil niños de la edad), en tanto que la mayor se observa entre los adolescentes de 15 a 19 años (6.50 por cada cien mil adolescentes). Este análisis se complementa de manera importante con la revisión de la variación en el peso relativo que tienen las muertes por tumores respecto al total de causas, y que para los menores de 20 años en general cambia de 1.9% en 1990 a 4.4 en 2008 (Fig. 2). Al interior de los grupos etáreos cabe destacar el comportamiento del grupo de 1 a 4 años (cuyo peso relativo se triplica de 2.2 a 6.9%) y el del grupo de 5 a 9 años (con un incremento de 2.5 veces su peso inicial, de 7.4 a 18.1%). Para los menores de un año, el dato permanece prácticamente igual.

El comportamiento antes descrito puede ser interpretado como parte del proceso de la transición epidemiológica, la cual no solamente afecta a las enfermedades crónicas no-transmisibles del adulto, sino también enfermedades propias de la infancia. De tal forma que el menor porcentaje de neoplasias en 1990 podría deberse a una mayor frecuencia de patologías tales como diarreas, infecciones respiratorias, enfermedades inmunoprevenibles potenciadas por tasas de desnutrición infantil más elevadas que las actuales. En la medida que estas enfermedades han descendido, la importancia relativa del cáncer en 2008 cobra relevancia.

Debe señalarse que el descenso de las tasas de mortalidad observado en países desarrollados se ha dado a consecuencia de los avances en materia de investigación sobre prevención, tratamiento y detección temprana. Ocupan sin duda, un lugar relevante, los procedimientos exitosos de quimioterapia para la reducción de leucemia, así como el desarrollo en las técnicas diagnósticas y de tratamiento, lo que ha incidido en el incremento de la supervivencia de los niños. En nuestro país, si bien existen avances importantes para ciertos segmentos de la población, persisten muertes ocasionadas por detección tardía de los casos y un acceso aún limitado a terapias eficaces contra el cáncer a pesar de la inclusión de la atención gratuita a los Servicios de Salud, prevista recientemente por el Seguro Popular.

Respecto a cuáles fueron los principales tipos de tumores que afectaron en 2008 a la población menor de 20 años, la Tabla 2 señala como los más frecuentes las leucemias (que representan más del 44% de las muertes), seguidas por los tumores del sistema nervioso, los linfomas, los tumores óseos y los sarcomas.

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