Apéndice: medidas de ahorro

 

Perlizadores

Dispositivos que se enroscan en la llave y generan un chorro de agua gasificado al mezclar agua con aire, manteniendo la misma presión o incluso aumentándola, en comparación con los sistemas tradicionales. Su ahorro depende del modelo, diámetro y presión de agua.

Por lo general, una llave suministra entre unos 15 y 20 litros por minuto; pero si se utiliza un dispositivo ahorrador, se puede reducir hasta llegar a un suministro de entre 4.6 y 8 litros por minuto (Ente Público del Agua, 2006).

 

Reductor volumétrico

Estos dispositivos limitan el caudal de la ducha hasta lograr suministros de hasta 6.8 litros por minuto, dependiendo de la presión, diámetro y diseño del reductor. Se pueden incorporar en la cañería o en el mango de la ducha, por lo que algunos incorporan un sistema giratorio que impide que la manguera se enrede y la protege de posibles roturas.

 

Mangos ahorradores para duchas

Dispositivos que mezclan agua con aire, un sistema similar al de los perlizadores, pero logrando un chorro más disperso. Por lo normal, una ducha suministra entre 15 y 20 litros por minuto; pero si se utiliza un dispositivo ahorrador, se puede reducir hasta lograr un suministro de entre 6.3 y 10.8 litros por minuto. Al instalarlo, el usuario percibirá que el caudal es el mismo e incluso que la presión de agua es mayor, pero se limitará el consumo real (Ente Público del Agua, 2006).

 

Cisternas con doble pulsador (WC inteligente)

Los dispositivos de doble descarga permiten discernir su consumo mediante dos pulsadores independientes. Con un pulsador se produce el vaciado total de la cisterna de entre 9 y 12 litros (vaciado utilizado para el transporte de las defecaciones), y con el otro pulsador se obtiene un vaciado parcial de tres litros (utilizado para transporte de orina).

La sola instalación de este equipo posibilita ahorrar más de la mitad del agua, en comparación con sistemas de descarga completa, gracias a la discriminación de uso, que para orina se asume al menos seis veces más utilizada que para deposiciones.

 

Ecosanitarios

El baño ecológico es un sistema de deposición de desechos humanos que separa la orina de las heces por medio de una taza separadora. No usa agua para su operación. Estos baños se usan en distintas partes del mundo, en especial en zonas rurales, pero también existen iniciativas y diseños para entornos urbanos (Winblad et al., 2004). Una de sus principales limitaciones es que para poder utilizarlos de manera apropiada requieren de cambios en las conductas acostumbradas. La elección del mejor tipo de baño ecosanitario depende en gran medida del clima, temperatura, humedad, disponibilidad de recursos, disponibilidad de material seco (que se utiliza en el proceso de deshidratación), número de usuarios y condiciones de mantenimiento.

La materia fecal queda separada de la orina, permitiendo así su secado y posterior descomposición en una de las cámaras aisladas del ambiente, que adquiere temperatura y ventilación gracias a la captación de energía solar a través de las cubiertas de las cámaras y el tubo de ventilación. El producto final de las cámaras es un abono inocuo.

Las ventajas de este sistema son:

• No necesita agua para su funcionamiento.

• Puede ser integrado a una vivienda existente.

• No contamina el suelo ni las aguas subterráneas.

• Después de un año en reposo, el material que se genera en sus cámaras es inocuo e inodoro; por lo tanto, su manipulación no constituye un riesgo sanitario.

• Su diseño es adaptable a diferentes culturas locales.