En mayo de 2023, las juntas directivas de la Federación Mexicana de Especialistas y Residentes en Medicina Familiar A.C. (FMERMF) y del Consejo Mexicano de Certificación en Medicina Familiar A.C. (CMCMF) develaron una placa en la casa de los médicos familiares del país, dentro de las instalaciones del CMCMF, con la siguiente inscripción: «La Medicina Familiar somos todos, pero trabajando juntos la engrandecemos». Esta frase, más allá de lo plasmado en la placa para la posteridad, tiene un mensaje profundo y filosófico, haciendo alusión a la necesidad imperiosa, más que nunca, de trabajar de manera colaborativa ambas instituciones conglomerando a todos los médicos familiares del país para empoderar la especialidad y buscar cambios paradigmáticos en la sociedad y los sistemas de salud.

La FMERMF es un organismo técnico, normativo y autónomo, cuyas funciones sustantivas son la educación médica continua, así como la representación académica, científica, social y política en México, Iberoamérica y el mundo, a través de la Confederación Iberoamericana de Medicina Familiar (CIMF) y la Organización Mundial de Médicos de Familia (WONCA), respectivamente, para fortalecer sus competencias al ejercer la disciplina, acordes a la atención del paciente y sus familias, así como a la normatividad legal, ética y deontológica aplicable en nuestro país y en el mundo.

En la Gestión 2021-2023, la FMERMF marcó un nuevo rumbo de la institución a través de la construcción y el desarrollo de la planeación estratégica, que consistió en la identificación sistemática de las oportunidades y de las amenazas que podrían haber sucedido en el futuro, lo cual, combinado con otros datos relevantes, proporcionó la base para las decisiones que se tomaron, siempre buscando el diseño de un mejor futuro para la especialidad, esto último a través de cuatro ejes estratégicos (Tabla 1) que marcaron una inflexión paradigmática en los procesos.

El primer eje planteado, que hace alusión a la implementación de un modelo de gestión de calidad¹ bajo la construcción de novo de una cultura del mejoramiento continuo como meta organizacional, permitió brindar una mayor satisfacción al usuario (socio) de nuestros servicios, en el marco de nuestra política organizacional desarrollada por la junta directiva. La implementación de un modelo de calidad tuvo un papel transformador, otorgando un valor agregado a la educación médica continua en el ámbito de la especialidad, con su impacto en eficiencia organizacional, mejoramiento continuo, control o reingeniería de procesos, optimización de recursos, aumento del desempeño y productividad. Esto último se traduce en dos hechos contundentes y emblemáticos que respaldan lo descrito previamente:

El segundo eje, que consistió en la profesionalización de todos los procesos de la FMERMF, se desarrolló mediante el análisis y la autocrítica responsable de la institución a través de la Gestión 2021-2023, tomando como premisa que las organizaciones, al día de hoy, enfrentan grandes dificultades, producto de un entorno económico, social y político complejo, derivado de la alta volatilidad y la incertidumbre de los mercados, de la educación y de los sistemas de salud, aunado a los perjuicios de una pandemia mundial (COVID-19)³ que irrumpió en el normal funcionamiento de estas, perturbando la vida cotidiana de los habitantes del planeta, con graves consecuencias en pérdidas de vidas humanas, recursos financieros y materiales, tanto para las sociedades como para las organizaciones e instituciones, cambiando bruscamente la manera de hacer las cosas, entre otros aspectos relevantes. En este contexto, la gestión apostó por reducir el componente político de la vida civil institucional y virar a un componente altamente técnico y profesionalizado, no para verlos de manera separada, sino más bien para clarificar unas posiciones y unas reglas del juego que pueden favorecer el rendimiento institucional. Esto, sin duda, se logró con un liderazgo disruptivo⁴ y transformacional⁵, ambos íntimamente relacionados con la implementación de creatividad, resiliencia e incertidumbre, buscando una obligatoriedad para sorprender a los usuarios con nuevas propuestas, ideas que nadie esperaba, pero siempre en la búsqueda de resultados exitosos, contribuyendo a la satisfacción de los especialistas en medicina familiar en México. Como datos contundentes que describen las líneas anteriores podemos citar:

El tercer eje se fundamentó en la búsqueda incansable del empoderamiento del especialista en medicina familiar en México, Iberoamérica y el mundo. En este sentido, el empoderamiento implicó para la FMERMF un tipo de intervención y cambio social que se basó en las fortalezas, las competencias y los sistemas de apoyo que promovieron el cambio en las asociaciones civiles. Parte del atractivo del concepto nace del énfasis en resaltar los aspectos positivos del talento humano especialista en medicina familiar. Un abordaje bajo una perspectiva «compleja» generando un brinco cuántico en la institución fue la conformación de equipos de alto rendimiento en medicina familiar, lo cual fue uno de los más importantes retos de la FMERMF en esta gestión y en toda la vida institucional de esta. En este modelo se reconoció su importancia no solo para incrementar la productividad de educación médica de la FMERMF, sino también para consolidar procesos de gestión humana como estrategia fundamental para el fortalecimiento del talento humano, del desarrollo organizacional y punto sustantivo en la creación de ambientes de creatividad. Por otro lado, la palanca del desarrollo interdisciplinario de la FMERMF fueron las alianzas estratégicas, entendiéndose estas como elementos esenciales de la competitividad para que las instituciones mantengan una presencia fuerte y efectiva en un mundo globalizado. Sin duda, las alianzas estratégicas⁸formaron parte de un proyecto en el que se desarrolló un ambiente de confianza entre ambas partes (Tablas 2 y 3).

Finalmente, el cuarto eje de la FMERMF para esta Gestión 2021-2023 consistió en el fortalecimiento de las competencias genéricas y específicas del especialista en medicina familiar, todo ello con el objeto social de esta institución. Para la FMERMF, la educación médica continua fue el conjunto de acciones y recursos dirigidos a cambiar la conducta de los médicos familiares del país para mejorar los resultados de su actuación con los pacientes, tomando como diagnóstico situacional la encuesta nacional de la FMERMF y los resultados de los exámenes de certificación realizados por el CMCMF. La educación médica continua⁹ que desarrolló la FMERMF para fortalecer las competencias genéricas y específicas fue amplia y no se limitó a la educación formal desarrollada con una gama de experiencias de muy diversa índole presencial (congresos, seminarios, rallys de capacitación), sino que también incluyó el fomento del autoaprendizaje y la educación a distancia. Además de la difusión con alta accesibilidad a los cursos de capacitación de las alianzas estratégicas para los médicos familiares del país, la FMERMF realizó acciones concretas para potenciar este rubro:

Finalmente, es importante señalar que, más allá de lo hasta aquí descrito, la FMERMF logró generar tendencias, cultura organizacional, clima organizacional favorable para gestiones venideras y formación de talento humano preparado para futuras generaciones.

Por otro lado, el CMCMF es un organismo técnico, normativo y autónomo, con 35 años de existencia, cuyas funciones sustantivas son la certificación y recertificación (certificación vigente) de los médicos familiares para validar que sus competencias al ejercer la disciplina sean acordes a la atención del paciente y sus familias, y a la normatividad legal, ética y deontológica aplicable en nuestro país.

La junta directiva del CMCMF, Admi­nistración 2021-2023, se encuentra comprometida con el fortalecimiento de sus procesos, en particular con la evaluación de los médicos familiares, que permite determinar el nivel de sus capacidades técnicas, científicas y humanas, dando certidumbre a la población de que se cumplen los estándares nacionales requeridos de educación, conocimiento, experiencia y competencias para proporcionar una atención a la salud con alta efectividad¹. Por ello, ha desarrollado un sistema de gestión de calidad para el CMCMF y ha implementado un proceso de evaluación más acorde al momento histórico de la evolución de la medicina y sus sistemas de atención a la salud, que permite a los médicos sustentantes interrelacionar su conocimiento y sus habilidades, reflejando el mundo real de su ejercicio profesional para asociar los contenidos teóricos y prácticos que se aprenden en la formación como médicos familiares con los problemas típicos a los que se enfrentan en el mundo laboral.

Durante esta administración, en 2021 se emitieron 1725 certificaciones y 740 recertificaciones a médicos familiares, y para el año 2022 se incrementó la cifra a 2159 certificaciones y 823 recertificaciones. Estos datos son halagadores y prometedores a la vez, por dos motivos: el primero nos permite comprobar que los profesionales de la medicina familiar están aceptando su responsabiliad ante la sociedad mexicana de prepararse con evidencias para cumplir con su cometido en esta apasionante disciplina de la salud, y el segundo corrobora el trabajo colegiado realizado en el seno del CMCMF, no solo como un organismo que debe realizar ciertas actividades para ofertar sus funciones sustantivas, sino también como un cuerpo colegiado comprometido y a la vanguardia, con la experiencia necesaria y la capacidad para evaluar de manera objetiva las competencias del médico familiar.

El próximo mes de julio de 2023, el CMCMF modificará la forma de evaluación de las competencias para el médico familiar, pasando a utilizar un examen clínico objetivo estructurado en línea (web ECOE)¹⁰-¹² que permitirá la cualificación de las habilidades y destrezas de los médicos sustentantes, con lo que se encaminará a la innovación junto a otros organismos certificadores de competencias, impulsando la formación y la superación de los profesionales.

De esta manera, este organismo certificador cumplirá con su compromiso ante los especialistas que conforman la medicina familiar, y ante la sociedad mexicana, de garantizar el libre acceso, la imparcialidad, la transparencia y la objetividad de los procesos de evaluación y certificación, así como la excelencia en la operación y en el servicio que brindan a los usuarios.

A la vez, la actual administración trabaja de manera continua e intensa en diversas líneas de acción que permiten fortalecer sus procesos de evaluación, entre las que se encuentran las siguientes:

La fuerza del CMCMF se encuentra en cada médico familiar certificado, así como en cada asociación, sociedad o colegio constitutivo que promueve sus procesos de certificación y recertificación. De la misma manera que la fuerza y la solidez de nuestra disciplina, así como de los organismos constitutivos, se encuentra en su Consejo de Especialidad.

La reflexión final: demos los pasos necesarios todos juntos, sin enfrentamientos ni oportunismos, porque si lo hacemos, esos pasos serán más firmes, rectos y rápidos, y nos permitirán permanecer siempre comprometidos en continuar trabajando por un proceso de certificación y recertificación de alta calidad para nuestra especialidad en beneficio de la sociedad mexicana.