El presente número de EDUCACIÓN MATEMÁTICA es el primero que estuvo a cargo de la reciente jefatura editorial. Este es un buen momento de hacernos eco de la voz de la comunidad ligada a la revista y agradecer a la Dra. Avenilde Romo Vázquez por el trabajo y talento invertido en su labor de jefa editorial durante los último cuatro años; gracias a ella, su equipo de trabajo, editores de sección y árbitros tenemos la oportunidad de recibir una herencia de la cual trataremos de ser dignos.

El proyecto que la nueva jefatura está construyendo para este periodo tiene dos objetivos, por un lado, dar continuidad a EDUCACIÓN MATEMÁTICA manteniendo la misión y los principios que le han dado vida y sustancia por 33 años, así como la calidad de los procesos editoriales y de las publicaciones. Por otro, se propone identificar y mejorar los aspectos del funcionamiento de la revista que podamos atender desde las nuevas condiciones en que se encuentra y crear nuevas oportunidades de desarrollo.

La misión y principios de EDUCACIÓN MATEMÁTICA han quedado plasmados en los siguientes propósitos:

Con base en estos propósitos EDUCACIÓN MATEMÁTICA ha creado la organización y las acciones pertinentes para llevarlos a cabo. Esto ha sido posible gracias al desarrollo social del que ha emergido una comunidad creciente de investigadores y profesores interesados en la investigación sobre la enseñanza y el aprendizaje de las matemáticas, quienes escriben y envían propuestas para su publicación. Así, se ha constituido, y periódicamente actualizado, el Comité Editorial que organiza y gestiona los procesos de recepción y evaluación de manuscritos propuestos para ser sometidos a evaluación; se ha formado un amplio cuerpo de árbitros con formación y experiencia en educación matemática y, finalmente, se ha conformado una comunidad de lectores para quienes la revista es un referente imprescindible para dar cuenta del estado de la investigación en los temas de su elección y como un recurso, a la par de muchos otros, para informarse de las discusiones y soluciones de diferentes problemáticas en el campo de la enseñanza/aprendizaje de las matemáticas.

Pero, a pesar de la gran labor que EDUCACIÓN MATEMÁTICA ha realizado en estos 33 años, hay muchos aspectos que son perfectibles y otros que definitivamente se deben mejorar o incluso rectificar; nunca hace daño una mirada autocrítica si se hace desde un claro reconocimiento de lo que se ha hecho bien. Y es quizá el mejor momento de hacerlo pues han mejorado las condiciones de existencia de la revista ya que, como se comentó en el editorial del número anterior, dos eventos pueden tener una influencia positiva en el desarrollo futuro: la ampliación de la Sociedad Mexicana de Investigación y Divulgación de la Educación Matemática (SOMIDEM) y el convenio de copropiedad de esta con la Universidad de Guadalajara (UdeG). Sin entrar en detalles de los aspectos que se pueden mejorar, estos se organizan en tres dimensiones generales, a saber,

Varios problemas que algunos usuarios de la revista seguramente han sufrido, como el funcionamiento de la plataforma, lentitud de algunos procesos de evaluación, falta de información, etc., los estamos considerando como parte del desglose de esas dimensiones. Estamos haciendo esfuerzos por encontrar la solución a dichos problemas y esperamos que en las futuras secciones editoriales podamos informar acerca de avances en algunos de ellos.