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Estudios de Asia y África

versión On-line ISSN 2448-654Xversión impresa ISSN 0185-0164

Estud. Asia Áfr. vol.56 no.2 Ciudad de México may./ago. 2021  Epub 11-Jun-2021

https://doi.org/10.24201/eaa.v56i2.2715 

Reseña

Blai Guarné, ed. 2018. Antropología de Japón. Identidad, discurso y representación. Barcelona: Bellaterra. 312 pp.

1ferranidus@gmail.com

Guarné, Blai. 2018. Antropología de Japón. Identidad, discurso y representación. Barcelona: Bellaterra, 312p.


La publicación de Antropología de Japón. Identidad, discurso y representación, editado por Blai Guarné en Edicions Bellaterra, nos invita a reflexionar sobre un fenómeno cultural fundamental en el desarrollo del Japón moderno y contemporáneo: el pensamiento esencialista nihonjinron (teorías sobre los japoneses) y sus derivaciones identitarias, discursivas y representacionales. Con este fin, Guarné ha reunido y publicado ensayos inéditos en español de los principales especialistas en la materia que proporcionan las claves para comprender en profundidad la cuestión del esencialismo cultural japonés a través de una diversidad de enfoques teóricos y metodológicos, como la antropología, la sociología, la historia del pensamiento, la teoría de la representación, los estudios culturales y los estudios literarios.

El grueso del volumen consta de quince capítulos, divididos en tres grandes apartados. El primero de éstos gira en torno a la identidad, y su hilo conductor lo constituyen los conceptos de “cultura”, “relato” y “nacionalismo”. El segundo se centra en el discurso, a través de las ideas de “Japón”, “Oriente” y “modernidad”. Por lo que respecta al tercer apartado, está dedicado al problema de la representación y gravita alrededor de las nociones de “diferencia”, “diversidad” y “desigualdad”. Finalmente, el volumen se cierra con un epílogo en el que se presenta un diálogo entre Seán Golden y Naoki Sakai sobre las ideas de “traducción”, “modernidad” y “nacionalismo cultural” en relación con Asia Oriental.

Pese a que el pensamiento nihonjinron ha ido variando con la fluctuación de los intereses hegemónicos imperantes en la sociedad japonesa, y se ha adaptado a cambios estructurales acaecidos tras puntos de inflexión históricos, su mínimo común denominador a lo largo del tiempo ha sido la preocupación por determinar de manera unívoca y totalizante los principios ontológicos particulares de la “japonesidad” en contraste con la universalidad de “Occidente”. Desde esta perspectiva, en el capítulo introductorio, Guarné realiza una aproximación cultural a la posguerra japonesa y observa cómo las variantes del pensamiento nihonjinron han ido proporcionando, a través de distintas fases, “las formas de imaginación histórica necesarias para navegar la difícil conciliación entre el pasado inmediato y la realidad del presente, soslayando el incómodo legado de la guerra y rearmando el relato del progreso de la modernización nacional” (21). Guarné identifica cómo estas “formas de imaginación” se han basado en “la replicación sistemática de imágenes estereotípicas sobre la homogeneidad cultural, la excepcionalidad lingüística y la orientación grupista de una sociedad orgánicamente integrada que hace de la armonía y la observación jerárquica sus valores más pregones” (11), y han establecido “un esquema significativo de una persistencia sólo proporcional a su eficacia en difuminar los resortes discursivos a través de los que opera” (11). Este planteamiento deviene programático en la orientación de todo el volumen, concebido precisamente para decodificar ese conjunto de resortes discursivos que, naturalizado en su proceso de reproducción, es capaz de generar “en términos de verdad los objetos que compulsivamente representa, diluyendo los límites entre la descripción y la prescripción de lo que se consideran la cultura e identidad japonesas” (11). Al partir de este enfoque desmitificador, el nihonjinron no se aborda en el libro simplemente como discurso, sino también como ideología, lo que habilita un análisis científico más profundo de su fenómeno.

El primer apartado, dedicado a la identidad como relato en el nacionalismo cultural, parte de las consideraciones de Harumi Befu sobre la construcción de la identidad nacional japonesa a través de la definición idealizada de la cultura nipona, en contraste con la no menos idealizada cultura occidental. Bajo premisas similares, Takeo Funabiki analiza la evolución histórica de la literatura nihonjinron mediante la tesis de que este tipo de libros alcanza su máxima popularidad en momentos en que la identidad japonesa se encuentra en un estado de “desasosiego” en relación con Occidente. A continuación, siguiendo este hilo y pasando de un plano general a uno más específico, Tamotsu Aoki analiza una obra emblemática de la literatura nihonjinron: la monografía de la antropóloga estadounidense Ruth Benedict (1946), The Chrysanthemum and the Sword: Patterns of Japanese Culture, y reflexiona sobre el éxito que ha tenido en Japón y su influencia en la interpretación de la identidad cultural japonesa en contraste con un Occidente personificado en Estados Unidos.

Por lo que respecta al capítulo de Kosaku Yoshino, se centra en el estudio de un tipo distinto de literatura nihonjinron, como son los manuales de comunicación intercultural publicados por las multinacionales japonesas, y en cómo, a través de estos textos, se produce, reproduce y consume el pensamiento esencialista sobre la cultura nipona. Finalmente, para cerrar este primer apartado, Yoshio Sugimoto analiza la articulación del relato nihonjinron en los distintos estratos que conforman la sociedad japonesa, desde la perspectiva de que dicho relato emplea la escala de valores y los estilos de vida de los grupos sociales dominantes como criterios para definir las características de la cultura nipona en su conjunto.

El segundo apartado, dedicado a las nociones de “Japón”, “Oriente” y “modernidad” como formaciones discursivas, empieza con un capítulo de Nobukuni Koyasu en el que se analiza la formación histórica del concepto de Nihon minzoku (nación japonesa) y se destaca su origen moderno como artefacto político fruto del nacionalismo, con lo cual se desmitifica su pretendida naturaleza atávica y esencial. Lo sigue el texto de Eiji Oguma, que nos descubre la evolución de las autoimágenes de los japoneses y observa su diferencia sustancial antes y después del punto de inflexión que supuso 1945 como año en el que la construcción nacional nipona dejó, por la fuerza, de estar conformada por aspiraciones coloniales. Kang Sangjung continúa este mismo hilo y muestra cómo, en el plano académico, los estudios orientales jugaron un papel clave en el proyecto colonial del Estado japonés a través del impulso de la división Oriente-Occidente. Esta formulación dicotómica al servicio de los intereses imperialistas de Japón la aborda también Stefan Tanaka a través del estudio concreto del pensamiento de uno de los intelectuales más influyentes del régimen colonial nipón, Ōkawa Shūmei. Por último, el apartado concluye con un ensayo de Naoki Sakai en el que se despliega un análisis crítico de cómo la contraposición cronológica premodernomoderno, estrechamente ligada a la oposición geopolítica Oriente-Occidente y al antagonismo cultural particularismouniversalismo, ha servido para comprender y fomentar la posición que ocupan determinadas naciones en relación con otras, y cómo se ha posicionado históricamente Japón en este juego de dualidades. La tercera parte, dedicada a las políticas de la representación y el reconocimiento, se abre con un ensayo de Ignacio López-Calvo sobre la evolución de la representación literaria de los nikkei (descendientes de emigrantes japoneses) nipoperuanos a través del estudio paradigmático de la obra de Mario Vargas Llosa, que, según el autor, se ha ido alejando de su antiorientalismo inicial para abrazar un orientalismo marcado por la transmisión de una imagen de los japoneses que bascula entre lo exótico y lo abyecto. Todavía en el plano de la representación, pero desde la perspectiva inversa, Joy Hendry nos acerca en su capítulo a las réplicas de edificios occidentales que proliferaron en los parques temáticos de Japón a partir del boom de la internacionalización de la década de 1980, y reflexiona sobre si se trata de un fenómeno típico de la posmodernidad o si también tiene raíces en la tradición cultural japonesa, en la que la copia y la mímesis son habilidades altamente valoradas.

A continuación, volviendo al ámbito literario, John Lie aborda la complejidad de la experiencia identitaria zainichi (residentes coreanos en Japón) mediante el análisis de la literatura de dicha minoría. A partir del concepto de Kafka de “literatura menor”, Lie desarrolla la tesis de que, en contraste con las teorías de Deleuze y Guattari, la identidad zainichi reflejada en las producciones literarias de este grupo surge de la renuncia a lo político, lo colectivo y lo esencializador, como fruto de un proceso de desreconocimiento. En estrecha relación con el tema de las minorías, Tessa Morris-Suzuki analiza en su capítulo la paradoja entre la necesidad de Japón de fomentar la llegada de trabajadores inmigrantes para contrarrestar el envejecimiento de su población y la ausencia de medidas políticas en esta dirección. En lugar de atribuir los motivos de esta falta de reforma a elementos culturales, Morris-Suzuki encuentra la explicación en los límites de la nacionalidad japonesa impuestos por las autoridades estadounidenses y el gobierno nipón durante la posguerra. Finalmente, siguiendo la materia migratoria, Roger Goodman cierra este apartado con un análisis crítico de la noción de “homogeneidad japonesa” y pone el foco en la diversidad cultural de Japón y en las minorías que se hallan en los márgenes de su sociedad, en un texto que constituye un contrapunto preciso al apartado sobre nacionalismo cultural que abre el libro.

En definitiva, estamos ante un volumen que ofrece una perspectiva inmejorable de las dos últimas décadas de la antropología de Japón, así como las herramientas epistemológicas necesarias para comprender en profundidad la formación de la sociedad japonesa moderna y contemporánea, así como las contradicciones y los retos a los que se enfrenta.

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