Creación literaria
Segundo poema de Estefanía◊
* Universidad Nacional Autónoma de México, Dirección General de Publicaciones y Fomento Editorial. Correo electrónico: odette_alonsoyodu@yahoo.es
Desde una ventana parecida vi esa playa
los barcos que rielaban la corriente
las torres del puerto
la cárcel vieja al fondo.
En los diques
el viento era un rugido
resplandor de mercurio
agua pesada.
Una estela sobre el mar dejó ese vuelo
y un olor a guayaba
azúcar que se hiela en el vasillo.
Mientras caía la noche hablábamos de espantos
ánimas que deambulaban por la penitenciaría
quejidos que soltaba el maderamen.
En el espejo vi los ojos de una niña
sentí el veneno de sus uñas en mi boca.
Dormimos abrazadas
la noche era una luna en el asfalto
su risa retumbaba en mi cabeza.
Con el vaho del invierno
las semillas se amargaron.
Canta de un raro modo el viento
nos perturba.
Dos llamas paralelas
dan al atardecer una apariencia insólita.
Hará falta un manantial
un salto hacia el vacío
un sortilegio.
Ella volvió en silencio
con una máscara de odio que era falsa.
Me amaba
como siempre
y yo la amaba.
Con pasos torpes
parodiábamos el ritmo
de esa corriente esdrújula
esa doble mirada.
Húmedas
a la intemperie
extendimos los brazos.
¿Cuánto de nuevo traen estas aguas viejas?
¿Cuánto hay de antiguo en tanta novedad?