Es probable, non casu, sed demonstrationem, que la actual epidemia de obesidad (ese fantasma que recorre el mundo, al decir de los editores invitados de este número) tenga alguna de sus causas enraizadas en el paleolítico superior. Cuando el hombre dejaba la cueva en busca del sustento de todos, reclamaba de manera implícita la parte de mejor calidad de la caza o recolección para sí mismo, como garantía de la perpetuación de su actividad de proveedor. Así, sus dependientes debían conformarse con los retales para su propia subsistencia. Como nos recuerda F. Engels en su obra de 1884, El origen de la familia, la propiedad privada y el Estado, donde el primer antagonismo de clases aparecido en la historia coincide con el desarrollo del antagonismo entre el hombre y la mujer y la primera opresión de clases, la del sexo femenino por el masculino.

Ese estado de desigualdad se universaliza con el arribo del modo de producción capitalista desarrollado, que convierte a los medios masivos de comunicación, dominados por los estratos económicos más altos, en instrumento de seducción y castigo a la vez. Mientras las estrategias de marketing inducen por una parte a los más desposeídos (económica y culturalmente) al consumo de artículos de baja calidad, por otra los castigan erigiendo a seres humanos con una delgadez insostenible, en paradigmas de imagen y bienestar. Como consecuencia de esa manipulación, se les asignan valores a los alimentos en dependencia de una calidad discutible y con frecuencia inverificable: no es lo mismo un salmón de criadero que uno “silvestre”, no es lo mismo un huevo “normal” que uno proveniente de una gallina con “pastoreo libre”. Aquí, los estratos económicos más altos reclaman los alimentos de mayor calidad a través de la discriminación de precios.

Los trabajos que aparecen en este número brindan un amplio panorama de los estudios sobre alimentación. Como bien señalan los editores invitados (apelando a las estructuras epistémicas desarrolladas por Rolando García) tienen un carácter fuertemente interdisciplinario, que se manifiesta a través de su diversidad y de los niveles de organización. Si bien la bibliografía sobre estos temas ha crecido en los últimos años a una tasa notable, las contribuciones de este número lo convertirán en un referente obligado en futuras investigaciones.