SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.5 número13El Acuerdo de Asociación Transpacífico: Entendiendo el impacto económico para México y CanadáSangleyes en Manila: Algunas percepciones de las autoridades capitalinas, 1603-1630 índice de autoresíndice de materiabúsqueda de artículos
Home Pagelista alfabética de revistas  

Servicios Personalizados

Revista

Articulo

Indicadores

Links relacionados

  • No hay artículos similaresSimilares en SciELO

Compartir


México y la cuenca del pacífico

versión On-line ISSN 2007-5308

Méx.cuenca pac vol.5 no.13 Guadalajara ene./abr. 2016

 

Análisis

Los perfiles de los residentes japoneses en Guadalajara en 20091

The profiles of Japanese residents in Guadalajara in 2009

Takako Nakasone* 

*Universidad de Guadalajara, Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades. Profesora del Centro de Lenguas Extranjeras del Departamento de Lenguas Modernas. Guanajuato 1045, Col. Alcalde Barranquitas, Guadalajara, Jalisco, México. Correo electrónico: tak0209nak@hotmail.com


Resumen:

En este estudio se muestran los perfiles de los residentes japoneses en Guadalajara en el año 2009; su composición sociodemográfica de acuerdo con el género, rango de edad, ocupación, nivel educativo, razones para vivir en Guadalajara, zonas de residencia, entre otros. Se basa en datos cuantitativos recogidos por la autora. Previo a este análisis se hizo una revisión histórica de la clasificación de los inmigrantes japoneses en México.

Palabras clave: perfiles; datos básicos; residentes japoneses; Guadalajara

Abstract:

This study shows the profiles of the Japanese residents in Guadalajara in 2009; their sociodemographic composition according to gender, age range, occupation, education level, reasons for living in Guadalajara, areas of residence, among others. It is based on quantitative data collected by the author. Before this analysis, came up for a historical review of the classification of Japanese immigrants in Mexico.

Keywords: profiles; basic data; Japanese residents; Guadalajara

Introducción

Después de la Segunda Guerra Mundial, Japón mantuvo un rápido crecimiento entre los años 1955 y 1973. Posterior al milagro japonés, el país registró un crecimiento estable y vivió una burbuja económica hasta 1991: cuando su economía decayó en lo que hoy se conoce como las "dos décadas perdidas", que abarca, incluso, la crisis mundial de 2007. Dicho estancamiento, después de una larga prosperidad, generó cambios significativos en el sistema social japonés, pasando de la estabilidad a la movilidad, particularmente en la condición laboral.

Dos de las prácticas japonesas de empleo más conocidas se desplomaron abruptamente; la primera en referencia a la asignación de salarios y promociones en función de la antigüedad de los trabajadores, la segunda a la seguridad de adquirir un empleo de por vida una vez que una persona se contrataba. Básicamente se derrumbó el modelo de vida estable en el que los individuos tenían garantizadas las dos condiciones anteriores al concluir sus estudios universitarios y unirse a una empresa. Los jóvenes, además de distanciarse de aquel modelo, indirectamente también renunciaban al posible estancamiento dentro de las empresas y fue así que nació una tendencia en la que las personas elegían un estilo de vida propio.

En este mito de autorrealización, bajo el impase social japonés, los individuos comenzaron a dirigir la mirada al extranjero como un destino para escapar de la sociedad japonesa con el fin de buscar "un estilo de vida ideal", "búsqueda de sí mismo para crear una identidad propia", "el modo de vida propio", etc. Se configuró entonces un fenómeno japonés conocido como "migración por estilo de vida" o "migración orientada al consumo", que persigue la calidad de vida y estiliza la vida en Australia y Canadá (Fujita, 2008; Kato, 2009; Nagatomo, 2013; Hamano, 2014). En la presente investigación, con los datos obtenidos sobre los perfiles de los japoneses en Guadalajara, se tendrán pistas para averiguar si ellos también pertenecen a este grupo, extrayendo algunos datos característicos de la encuesta realizada en 2009.

Inmigración japonesa en México

Históricamente Falck Reyes y Palacios (2009 y 2014) argumentan la existencia de los primeros japoneses en Guadalajara con testimonios documentales del siglo XVII. Por otro lado, Ota Mishima (1982) completó el estudio histórico de las inmigraciones de japoneses en México desde 1890 hasta 1978. Haciendo referencia a estas dos fuentes, es posible clasificar las migraciones japonesas como se muestra en el Cuadro 1.

Cuadro 1 Clasificación cronológica de los tipos de migración japonesa a México 

Fuente: elaboración propia con base en las clasificaciones de Ota Mishima (1982), se añadió el caso del siglo XVII de Falck Reyes y Palacios (2009 y 2014) y se incluyó el éxodo obligatorio de la Segunda Guerra Mundial como octavo tipo de migración, por considerarlo migración interna.

En la primera etapa del siglo XVII se presentaron cuatro sucesos diferentes que brindaron a algunos japoneses la oportunidad de emigrar a la Nueva España.2 Algunos de ellos se quedaron permanentemente en tierras exóticas y por lo menos cuatro personas ya están identificadas como los primeros inmigrantes japoneses en Guadalajara (Falck Reyes y Palacios, 2009: 43). Ello fue permanente hasta finales del siglo XIX; durante este periodo no se fortalecieron las relaciones diplomáticas entre estos dos países.

En 1897 llegaron 35 japoneses motivados por los cultivos de café en Chiapas, entre ellos viajaban un supervisor, 29 contratados (pero uno murió en el trayecto hacia México) y seis independientes; entre los contratados había colonos agrícolas de segundo tipo y emigrantes libres de tercer tipo (Ueno, 2009: 31). Posteriormente llegaron más de 10 mil braceros que prestarían sus servicios en trabajos duros; no obstante, la mayoría logró cruzar la frontera hacia Estados Unidos (Ota Mishima, 1997: 56). El quinto tipo de migración fueron los ilegales, quienes tenían el objetivo de ingresar a Estados Unidos utilizando a México como trampolín, debido al impacto de la ley restrictiva de inmigraciones asiáticas en Estados Unidos (Ota Mishima, 1982: 63-65).

Derivado del convenio firmado entre México y Japón en 1917, llegaron profesionistas japoneses como médicos, farmacéuticos, odontólogos, etcétera (Ota Mishima, 1997: 57). Una vez que los japoneses se establecieron en México, surgió un fenómeno de acompañamiento de sus familiares con el fin de instalarse con los inmigrantes que ya habían llegado; se les denomina yobiyose (Ota Mishima, 1982: 67-93). Según Peddie (2006: 81), la mayoría de los japoneses en México en 1941 pertenecían a la clase media-baja.

Puntualizando sobre los yobiyose, ellos eran familiares de los inmigrantes japoneses, principalmente mujeres que se casaron con japoneses radicados en el extranjero. Los inmigrantes masculinos querían casarse con japonesas y perpetuar su visión de regresar a Japón una vez alcanzado su objetivo económico (Misawa, 2002). Era común que los inmigrantes japoneses conocieran a sus futuras esposas por medio de fotografías que ellas enviaban desde Japón. A partir de 1940 se aceleró la tasa de matrimonio exogámico con no-nikkei (los japoneses inmigrantes y sus descendientes) en paralelo al surgimiento de nisei (segunda generación) y sansei (tercera generación).

Según Misawa (2002), los issei (primera generación) esperaban que los nisei se casaran con algunos nikkei debido a que por la derrota en la guerra, prácticamente descartaban la posibilidad de regresar a su país; este fenómeno elevó sustancialmente el vínculo familiar. Otro motivo fue la perpetuidad (herencia) de sus negocios y para asegurar una vida digna en su vejez sin el subsidio público. Era notable el deseo de las japonesas de la primera generación de que sus hijos se unieran con nikkei, sobre todo porque estadísticamente ellas vivirían más que sus maridos y existía la necesidad de ser atendidas en su vejez en un entorno familiar a su cultura. Ellas solían procurar escuelas japonesas para sus hijos y propiciar el matrimonio endogámico.

Por otro lado, los nisei también anhelaban que sus hijos tuvieran parejas nikkei; sin embargo, sus motivos eran diferentes a los de la primera generación, pues en este caso lo que buscaban era un mejor entendimiento cultural entre la pareja y la familia involucrada. De esta manera, la reproducción japonesa en México sigue vigente; sin embargo, cada día se observa un incremento en el matrimonio exogámico.

A raíz de la Segunda Guerra Mundial, los japoneses que se encontraban en el país fueron obligados a trasladarse a Guadalajara y al Distrito Federal. Antes de la guerra había 51 japoneses en Guadalajara (cifra obtenida del Cuadro 12 de Ota Mishima, 1997: 100), pero el número aumentó con motivo de la migración forzada de 300 japoneses de otras ciudades del país (estimaciones de Kumazawa y Yamaguchi en entrevistas de Ota Mishima, 1982: 98). El mismo Kumazawa afirmó que la mitad de los inmigrantes internos decidieron permanecer en Guadalajara (Ota Mishima, 1982: 102). También se estableció un campo de refugio para los japoneses, ubicado en la hacienda de Castro Urdiales, en el municipio de Tala, Jalisco (Peddie, 2006: 89).

Por último, el milagro económico japonés de la posguerra impulsó la expansión multinacional de las empresas japonesas. En la actualidad siguen llegando ingenieros y técnicos japoneses a México debido a estrategias empresariales. Por todo lo expuesto se considera que es pertinente investigar la inmigración japonesa a Guadalajara en nuestra época.

Padilla de la Torre (2008) describió los sentidos que adquieren las prácticas mediáticas entre la comunidad de japoneses en la ciudad de Aguascalientes en relación con su percepción e integración a un entorno ajeno a su cultura. La misma Padilla de la Torre comenta que el caso de la comunidad japonesa ha sido escasamente estudiado a pesar de contar con más de 20 años en Aguascalientes. El resultado de su investigación revela que con la Internet y los servicios en línea que ofrecen las tiendas departamentales, los supermercados, las franquicias internacionales o la propia escuela, es posible vivir en un ambiente japonés aislado sin contacto con los locales, citando los siguientes enunciados de algunos entrevistados: "Paso más tiempo aquí, convivo sólo con japoneses, por eso no aprendo el idioma y por consiguiente no lo requiero" (profesor japonés, 55 años) (Padilla de la Torre, 2008: 24).

[Los japoneses] platican de lo que pasa en Japón, siguen conectados allá [...] Hablan de los artistas, de lo que pasó [...] Generalmente hablan de Japón. Yo siempre salgo a fumar en el patio de la empresa y ellos platican puras cosas japonesas y yo siempre informo que ayer pasó esto y [...] no saben nada de lo que está pasando aquí [...] Así es que están viviendo en el extranjero, en este caso aquí en Aguascalientes, pero siguen como si estuvieran en su país (traductor japonés, 57 años) (Padilla de la Torre, 2008: 24).

Como menciona Befu (2006), también Padilla de la Torre concluye que paradójicamente cada vez que se desarrolla más la globalización de las empresas niponas, la comunidad japonesa (de chuzaiin)3 en el extranjero puede desenvolverse sin necesidad de relacionarse con los demás habitantes de la ciudad.

La información de Ota Mishima (1982 y 1997) a partir de esta última clasificación no ha sido actualizada recientemente. Lo que se puede añadir a esa información es la existencia de los descendientes japoneses. Entre estos nikkei, en particular algunos nisei, que ya fueron mencionados arriba, permanecieron en Japón un tiempo para estudiar y trabajar con el fin de regresar a México: a ellos se les denominaron como kiboku (traducido como "regreso a México"). Ese fenómeno no pasó solamente en México sino en Estados Unidos ocurrió lo mismo, pero en este caso fueron nombrados como kibei (traducido como "regreso a Estados Unidos"). Según Kinjo (2006), el papel que desempeñaron los kibei para heredar y desarrollar las comunidades okinawenses4 de Estados Unidos fue relevante, mientras que otros nisei y sansei se asemejaron cada vez más a los nativos. Se dice que estos tipos de kibei, kiboku, etc. tienden a conservar una fuerte etnicidad japonesa, más aun que los japoneses en Japón.

En el caso de Perú, en donde se conserva una comunidad étnica muy fuerte (alrededor de 70% en la tasa de endogamia), 30,000 entre 80,000 japoneses-peruanos fueron a Japón (Takenaka, 1999). Ellos desempeñan un papel dialéctico cuando traen la viveza de su cultura desde Japón, fomentando la fortaleza de la comunidad transnacional e impulsando a sus miembros a partir a Japón. Además, estos migrantes de retorno crean su propia identidad híbrida, diferenciándose de la japonesa y de la peruana debido a que son tratados como extranjeros tanto en Japón como en Perú, son un grupo minoritario. La actualidad nos dice que ellos también se han desilusionado con su visita a Japón al darse cuenta de que ya no representa el entorno que la primera generación describía; en Perú, se reúnen para compartir los valores étnicos de la honestidad, la confianza, la responsabilidad y la puntualidad.

Por otro lado, existe una investigación sobre la calidad de vida o los modos de consumo de los japoneses en Guadalajara (Carrillo Regalado, Okabe y Kakihara, 2013; Campos Ruiz y Limón Herrera, 2014). Según el estudio, su calidad de vida es buena después de analizar los medios de transporte, los servicios médicos, las residencias, etcétera.

Método

El objetivo de este estudio es identificar algunos rasgos de los residentes japoneses en Guadalajara. Los sujetos de esta investigación son de nacionalidad japonesa, nacidos y/o crecidos en Japón, quienes llevan más de un año de estancia en Guadalajara y no tienen de momento planes de regresar a Japón. Se excluyen a estudiantes y turistas que suelen quedarse poco tiempo debido a que sus circunstancias son diferentes.

La técnica empleada fue la encuesta, pues se trata de un trabajo de campo exploratorio en donde no hay información disponible sobre el tema, con el fin de alcanzar el objetivo de plasmar los agentes y la estructura de la comunidad japonesa en Guadalajara. Se formuló un cuestionario (Anexo)5 en el cual se incluyeron preguntas acerca de su perfil básico y de su estancia, mismo que se aplicó a cinco conocidos y se solicitó su opinión antes de realizar la encuesta oficial. Respetando sus opiniones, se modificaron algunas preguntas.

La técnica empleada para contactar a los informantes fue el snowball sampling, misma que considera a pocos informantes para que después ellos inviten a sus conocidos a participar en esta investigación; así sucesivamente crecerá el tamaño de la muestra, como una "bola de nieve". Es una técnica útil para una población pequeña y que aparentemente es invisible en la sociedad. Desde finales de septiembre de 2009 hasta mediados de diciembre de 2009 se realizó la recolección de datos en japonés, abordando el tema de la estancia de los japoneses en Guadalajara. Finalmente se colectó la información de 102 participantes6 de un universo de 201 personas (Cuadro 2).

Cuadro 2 Cantidad de residentes japoneses en México y en la zona metropolitana de Guadalajara (Número de personas) 

Fuente: extracción de los primeros estados de México y los principales municipios de la zona metropolitana de Guadalajara que cuentan con mayor número de residentes japoneses, según el Censo General de Población y Vivienda (INEGI, 2010).

Los datos obtenidos los denominaremos en adelante como la "primera encuesta de la población de origen japonés radicada en Guadalajara para la construcción de su perfil sociodemográfico".

Resultados

La muestra de 102 encuestados se distribuyó por sexo y edad tal como se muestra en el siguiente Cuadro. Aunque se utilizó la técnica de snowball sampling, la proporción de los encuestados no es desequilibrada. El promedio de edad de los hombres (47.7 años) es mayor que el de las mujeres (40.7 años); la mediana también difiere por casi 10 años; así que la muestra de las mujeres resultó más joven que la de los hombres. En general, la desviación estándar es grande debido a la variación de las edades: existen personas de 19 hasta 92 años.

Por el carácter exploratorio de esta primera investigación, se clasificó la variable de edad en seis grupos: menos de 29 años, de 30 a 39 años, de 40 a 49 años, de 50 a 59 años, de 60 a 69 años, y más de 70 años. Debido a que las muestras por generaciones varían en tamaño, se indicará en las Gráficas siguientes el número real de cada muestra debajo de los porcentajes correspondientes. Es notoria la presencia de dos grupos en particular: los de entre 30 y 39 años (38 personas) y los de entre 60 y 69 años (20 personas). Más aún, 54% de la muestra resultó menor a 40 años, evidenciando la juventud de los encuestados; así pues también se destaca en esta muestra que la mayoría de los japoneses residentes no son jubilados. En particular, el número de mujeres japonesas menores de 40 años supera al de los hombres; fenómeno que no se observa en las generaciones mayores.

Respecto a la ocupación de los encuestados (Gráficas 1 y 2), los hombres japoneses menores de 40 años son empleados o docentes. A partir de los 40 años aparecen los propietarios: 11% del total de la muestra tienen su propio negocio. Entre los de 60 y 69 años, los jubilados ocupan 42% de dicha generación; no obstante, sólo 7% de la muestra son jubilados. La mitad de los que tienen 70 años o más se dedican a atender su propio negocio. En el caso de las mujeres, no existen amas de casa menores de 30 años, aunque es notable este estatus una vez superada esta edad, pues en general, una tercera parte de ellas son amas de casa. Ninguna mujer mayor a los 50 años es empleada. A pesar de que el número es menos significativo que el de los hombres, existen mujeres japonesas propietarias de su negocio. El estatus de "otros" en las Gráficas se refiere a las personas que no contestaron, o bien, a quienes no contaban con trabajo o a los estudiantes que se mezclaron en la realización de esta encuesta.

Fuente: Primera encuesta de la población de origen japonés radicada en Guadalajara para la construcción de su perfil sociodemográfico

Gráfica 1 Ocupación (hombres) 

Fuente: Primera encuesta de la población de origen japonés radicada en Guadalajara para la construcción de su perfil sociodemográfico.

Gráfica 2 Ocupación (mujeres) 

El lugar de origen de cada individuo varía: casi todas las prefecturas japonesas tienen representatividad en Guadalajara; sin embargo, con sólo las cinco prefecturas de mayor aporte de inmigrantes se suma 47% (Figura 1), es decir, más o menos la mitad de los residentes vienen de Tokio, la capital, así como de Kanagawa, Aichi, Osaka (prefecturas desarrolladas y cuyas poblaciones son las más grandes después de Tokio) y Yamanashi que se localiza cerca de la capital.

Figura 1 Lugar de origen 

Tokio cuenta con 10% del total de la población de Japón, es decir, 12.9 millones de entre 127.5 millones de habitantes en 2009 (Statistics Bureau, Director-General for Policy Planning, Statistical Standards & Statistical Research and Training Institute, 2010), así que no es raro que estas prefecturas destaquen con la mayor población emigrante. La cifra de Tokio crece en la categoría de más de 60 años, pues 44% de los originarios de esta ciudad son mayores de 60 años. Las prefecturas de Hokkaido, Hyogo, Shizuoka y Kioto se encuentran entre las 13 de mayor población en Japón. Por el contrario, Yamanashi (0.87 millones) y Ehime (1.44 millones) tienen poca población en comparación con otras prefecturas; se trata de dos prefecturas cuya población se ha reducido debido a motivos sociales, es decir, por la emigración al interior o exterior del país, que se complementa con una baja natalidad.

En cuanto al nivel escolar de los residentes japoneses (Gráficas 3 y 4), si consideramos como de alta escolaridad a quienes estudiaron en escuelas tecnológicas, colegios comunitarios, universidades y posgrados, entonces tenemos que alrededor de 82% de los encuestados pertenecen a esta categoría.7 Si nos enfocamos en los graduados de universidades y posgrados, 77% de los hombres tienen este grado de estudio, mientras que 55% corresponde para el caso de las mujeres. Los menores de 30 años cuentan en su mayoría con título universitario; específicamente, 87% de los hombres menores de 40 años alcanzaron este grado, mientras que los mayores de 40 y menores de 69 años alcanzaron la tasa de 70% para estudios universitarios o de posgrado. Cuanto más joven es la generación de hombres, más altos son sus estudios. Este teorema también aplica a las mujeres, pero el porcentaje es menor que el de los hombres. Existe en esta muestra una persona que se graduó de la secundaria, quien llegó a México en los años treinta.

Fuente: Primera encuesta de la población de origen japonés radicada en Guadalajara para la construcción de su perfil sociodemográfico.

Gráfica 3 Últimos estudios (hombres) 

Fuente: Primera encuesta de la población de origen japonés radicada en Guadalajara para la construcción de su perfil sociodemográfico.

Gráfica 4 Últimos estudios (mujeres) 

Si se comparan estos datos con los promedios de Japón (Cuadro 3), se puede observar una tasa superior de alta escolaridad en los japoneses de Guadalajara. Mientras que poco menos de la mitad de los japoneses, en Japón, truncaron sus estudios en nivel bachillerato, más de 65% de los encuestados que radican en Guadalajara completaron sus estudios universitarios o de posgrado; esta proporción es enorme, puesto que la tasa de estudios universitarios es más del doble en el caso de los hombres en Guadalajara y más de cuatro veces para las mujeres en Guadalajara cuando se comparan con las de Japón. Es innegable que los japoneses en Guadalajara cuentan con altos estudios.

Cuadro 3 Total de encuestados según sexo 

Fuente: Primera encuesta de la población de origen japonés radicada en Guadalajara para la construcción de su perfil sociodemográfico.

Cuadro 4 Comparación de la proporción de los últimos estudios de los japoneses en Guadalajara (2009) con los promedios de Japón (2010) 

Nota: el cálculo aplica a la población de 15 años o más, excluyendo a la población matriculada y estatus desconocido.

Fuente: elaboración propia basándose en los resultados de la encuesta aplicada por la autora y el National Statistics Center (2010).

Al observar la Figura 2, no cabe duda que los japoneses residentes en Guadalajara no han conformado una colonia étnica. Las colonias que se mencionan en la Gráfica son consideradas "buenas zonas" para vivir; en general se concentran en el occidente de la ciudad; particularmente la línea divisora es la Calzada Independencia-Gob. Luis G. Curiel; en un amplio sentido también es posible considerar la Av. Federalismo-Colón. Aunque algunas personas viven fuera del Anillo Periférico, realmente nadie vive en el oriente, excepto una persona. Específicamente se localizaron a 10 japoneses de esta muestra en la colonia Ladrón de Guevara, ocho en Providencia y cinco en el Country Club; por lo tanto, en el área delimitada por las avenidas Patria, Niños Héroes (Guadalupe) y Federalismo viven 47 japoneses, lo que representa 46% de la muestra.

Nota: cada estrella representa a cada individuo japonés.

Fuente: Primera encuesta de la población de origen japonés radicada en Guadalajara para la construcción de su perfil sociodemográfico.

Figura 2 Colonias en donde viven 

No formar una comunidad étnica o no participar en una comunidad existente no sólo ocurre con los japoneses de Guadalajara; sucede lo mismo en otras metrópolis donde habita un número significativo de japoneses. En el caso de Vancouver, actualmente existen tres comunidades: una de nikkei, otra de mujeres casadas con canadienses y la última de jóvenes residentes temporales japoneses de años recientes (Kato, 2009). Los nikkei en el pasado vivían en una determinada zona de la ciudad; sin embargo, la seguridad de la zona empeoró y tuvieron que buscar nuevos barrios para vivir y entonces se dispersaron por toda la ciudad. En el caso de Guadalajara, es posible considerar que los nikkei aún radican en la colonia Analco, en donde se concentraron muchos japoneses durante y después de la guerra.

Se puede observar en la muestra una tendencia al matrimonio tardío en ambos sexos: nueve de cada 10 mujeres y 100% de los hombres menores de 30 años son solteros; aun en la generación de entre 30 a 39 años, alrededor de 40% de la muestra son solteros (Gráficas 5 y 6). Con referencia al promedio de edad de matrimonio en Japón en 2009, los hombres lo hacen a los 30.4 años, mientras que las mujeres a los 28.6 años (Ministry of Health, Labour and Welfare, 2011). Definitivamente estos solteros no llegaron a Guadalajara a causa de un matrimonio internacional.

Fuente: Primera encuesta de la población de origen japonés radicada en Guadalajara para la construcción de su perfil sociodemográfico.

Gráfica 5 Estado civil (hombres) 

Fuente: Primera encuesta de la población de origen japonés radicada en Guadalajara para la construcción de su perfil sociodemográfico.

Gráfica 6 Estado civil (mujeres) 

Entre los casados es notable la diferencia en la nacionalidad de sus cónyuges entre cada generación; mientras que ninguna de las mujeres menores de 40 años está casada con un japonés, 80% de las mujeres mayores de 40 años sí están casadas con uno (Gráfica 8). Existe una alta posibilidad de que las mujeres de edades de entre 30 y 39 años vinieran a México por sus esposos mexicanos, o bien, se hayan conocido en este país. Por cierto, todos los hombres de la muestra menores de 30 años son solteros, y en dicha generación sólo existe una mujer casada con un hombre de otra nacionalidad. Existe también un japonés mayor de 70 años casado con una nikkei.

Fuente: Primera encuesta de la población de origen japonés radicada en Guadalajara para la construcción de su perfil sociodemográfico.

Gráfica 7 Nacionalidad de cónyuge (hombres japoneses) 

Fuente: Primera encuesta de la población de origen japonés radicada en Guadalajara para la construcción de su perfil sociodemográfico.

Gráfica 8 Nacionalidad de cónyuge (mujeres japonesas) 

Los objetivos de la primera visita varían (Gráficas 9 y 10). En general, el motivo de la primera visita a Guadalajara para la muestra japonesa es el trabajo. En este caso, se refiere a que ellos ya tenían asignada una actividad antes de llegar a Guadalajara; no significa que hayan tenido que buscar empleo. El fenómeno anterior no aplica a las mujeres, quienes en su mayoría llegaron a Guadalajara por motivos de turismo o para aprender español, o bien por el trabajo de su familia, padre o esposo. Se observa que ningún hombre se trasladó a Guadalajara por motivos de matrimonio; no obstante, una de cada 10 mujeres lo hizo para contraerlo. Lo anterior habla de que existe una mayor facilidad de movilidad para las mujeres. Existe un 12% de la muestra mayor de 60 años cuyo motivo fue inmigrar desde su primera visita. Este comportamiento no se identifica en la muestra de menores de 60 años.

Fuente: Primera encuesta de la población de origen japonés radicada en Guadalajara para la construcción de su perfil sociodemográfico.

Gráfica 9 Objetivos de la primera visita (hombres) 

Fuente: Primera encuesta de la población de origen japonés radicada en Guadalajara para la construcción de su perfil sociodemográfico.

Gráfica 10 Objetivos de la primera visita (mujeres) 

Comparando los objetivos de la primera visita con los motivos actuales para vivir en Guadalajara, resulta notoria la diferencia (Gráficas 11 y 12), sobre todo cuando se hace referencia al trabajo. Podemos concluir que muchas de las visitas de turismo originales fueron sustituidas por empleos permanentes. Un caso puede ser que las personas que habían visitado Guadalajara tomaron la decisión de radicar allí por diversos factores de atracción, para luego conseguir un trabajo estable similar a los trabajadores autóctonos. El porcentaje de personas mayores de 50 años que deciden establecerse para "pasar la vida" es notable, en particular en el caso de las mujeres; parece que ellas ya no se preocupan por el trabajo, sino por la calidad de vida que puedan obtener. Podemos considerar que estas personas no tienen la intención de regresar a Japón en su retiro. Por otra parte, mientras 20% de las mujeres dependen de sus maridos, no encontramos a hombres dependientes del "trabajo de sus familiares". Aquí se ve reflejada la característica de la sociedad japonesa, en donde los hombres son el sostén de la familia y las mujeres se encargan del cuidado del hogar.

Fuente: Primera encuesta de la población de origen japonés radicada en Guadalajara para la construcción de su perfil sociodemográfico.

Gráfica 11 El principal motivo para vivir en Guadalajara (hombres) 

Fuente: Primera encuesta de la población de origen japonés radicada en Guadalajara para la construcción de su perfil sociodemográfico.

Gráfica 12 El principal motivo para vivir en Guadalajara (mujeres) 

No hay gran diferencia entre los segmentos analizados respecto a la ocupación que tenían en Japón antes de emigrar e México (Gráficas 13 y 14). Los puntos a resaltar son: a) no hay ninguna mujer que haya sido enviada por alguna empresa japonesa; b) solamente tres personas estaban desempleadas en Japón; en particular, todas las personas menores de 50 años realizaban alguna actividad; c) ninguna mujer menor de 60 años fue ama de casa en Japón, y d) 75% de la muestra tenía alguna actividad económica en Japón.

Fuente: Primera encuesta de la población de origen japonés radicada en Guadalajara para la construcción de su perfil sociodemográfico.

Gráfica 13 Ocupación antes de venir a México (hombres) 

Fuente: Primera encuesta de la población de origen japonés radicada en Guadalajara para la construcción de su perfil sociodemográfico.

Gráfica 14 Ocupación antes de venir a México (mujeres) 

Cuando se les preguntó si deseaban vivir en Japón en el futuro, la proporción de las respuestas fue la siguiente: "sí" (36% de los hombres y 31% de las mujeres), "no sé" (34 y 43%, respectivamente) y "no" (30 y 27%). Pocos menores de 50 años se negaron a este ofrecimiento; por el contrario, más de la mitad de la muestra mayor de 60 años en el caso de los hombres y más de la mitad de la muestra mayor de 50 años para las mujeres respondieron "no" a esta pregunta (Gráficas 15 y 16). ¿Qué factores les impulsan a tomar cada decisión? En el fondo, para las personas que contestaron "todavía no sé", ¿habrá preocupaciones latentes sobre la vida futura de Japón? Es interesante analizar el caso en los jóvenes, pues ellos no cuentan con una pensión japonesa que suele resolver las necesidades de las personas de mayor edad en el extranjero; asimismo, si los jóvenes deciden regresar a Japón en el futuro, las oportunidades laborales y de especialización en un segmento laboral se reducen, lo cual mermaría su desempeño y desarrollo en su país.

Fuente: Primera encuesta de la población de origen japonés radicada en Guadalajara para la construcción de su perfil sociodemográfico.

Gráfica 15  ¿Desea vivir en Japón en el futuro? (hombres) 

Fuente: Primera encuesta de la población de origen japonés radicada en Guadalajara para la construcción de su perfil sociodemográfico.

Gráfica 16 ¿Desea vivir en Japón en el futuro? (mujeres) 

Por otro lado, más o menos la mitad de los japoneses no conviven frecuentemente con otros japoneses; en el caso de los hombres japoneses, la cifra es mayor y 71% de ellos no se reúnen (Gráfica 17), mientras que sólo 39% de las mujeres hacen lo mismo (Gráfica 18). Es posible suponer que los hombres japoneses suelen reunirse sólo en marcos ocupacionales; es decir, en las empresas japonesas en donde pudieran asistir también otros empleados japoneses. Por el contrario, las mujeres japonesas de Guadalajara sí suelen reunirse con otros japoneses, es posible deducir que en su mayoría son del mismo género por lo que la tasa es mayor que los hombres (incluyendo la respuesta "a veces", 61% de las mujeres se reúnen con otros japoneses, mientras que sólo 30% de los hombres lo hace). Una de cada tres mujeres japonesas de Guadalajara es ama de casa (Gráfica 2) y según parece, entre ellas se juntan ocasionalmente para comer, tomar café, asistir y organizar fiestas de cumpleaños para sus hijos, etcétera.

Fuente: Primera encuesta de la población de origen japonés radicada en Guadalajara para la construcción de su perfil sociodemográfico.

Gráfica 17 ¿Convive con otros japoneses en Guadalajara? (hombres) 

Fuente: Primera encuesta de la población de origen japonés radicada en Guadalajara para la construcción de su perfil sociodemográfico.

Gráfica 18 ¿Convive con otros japoneses en Guadalajara? (mujeres) 

Es posible identificar por lo menos dos grupos de señoras japonesas: un grupo de edad mayor a los 40 años y otro menor de 40. El último grupo es distintivo porque lo constituyen en su mayoría mujeres casadas con mexicanos. Se supone que las amas de casa suelen quedarse en el hogar, pero sus relaciones étnicas siguen activas, más aún que otros japoneses; ocasionalmente sus esposos participan en los eventos, mientras los esposos (incluyendo los hombres mexicanos) de las mujeres de mayor edad no participan. El otro punto destacable es que más de la mitad de las mujeres menores de 30 años no frecuentan a otros japoneses, mientras que la mayoría de las otras generaciones lo hacen (considerando que la generación de entre 40 y 49 años está constituida por sólo dos personas en esta muestra de estudio).

Conclusión

Resumiendo los resultados, es posible clasificar los tipos de residentes japoneses de acuerdo con el siguiente Cuadro:

Fuente: elaboración propia.

En esta investigación se identifican nueve tipos de residentes japoneses en Guadalajara (aunque este estudio excluye los residentes temporales y estudiantes); se observa también una alta escolaridad de los mismos. El lugar de origen de Japón es variado, es decir, no vienen de un lugar específico; no obstante, el lugar de vivienda en Guadalajara señala una tendencia étnica: mayor concentración en el occidente de la ciudad. Los jóvenes menores de 30 años y la mitad de los adultos menores de 40 años son solteros; se observan matrimonios tardíos ya que en edades medianas suelen formar una familia. Se identifica una peculiaridad en la nacionalidad de los cónyuges de las mujeres japonesas: la mayoría de las generaciones a partir de 40 años poseen esposos japoneses, mientras que ninguna mujer menor de 40 años se casó con un japonés; es altamente probable que las mujeres de mediana edad acompañaran a sus esposos japoneses hasta Guadalajara, pero el objeto de las mujeres jóvenes es diferente.

Lo anterior puede observarse al contrastar los motivos de la primera visita con los motivos posteriores para vivir en Guadalajara: algunas mujeres argumentaron que el trabajo de sus familiares fue la razón fundamental para permanecer; por otro lado, se confirma lo anterior cuando las principales razones de la primera visita de los hombres japoneses fueron por el trabajo, el estudio y el turismo, pero ahora la mayoría vive por el trabajo conseguido en Guadalajara. Las personas que argumentaron que están en Guadalajara para pasar la vida son las que se consideran como inmigrantes "por estilo de vida" u "orientados al consumo".

No cabe duda que los japoneses no vinieron a Guadalajara para salir del atolladero, debido a que 75% tenían alguna actividad en Japón.8 Destaca que justamente una tercera parte de los japoneses encuestados desean regresar a Japón en el futuro aunque surjan inconvenientes por su edad (sería complicado ganarse la vida en dichas circunstancias, rehaciendo su vida desde cero). El último punto característico de los japoneses es la convivencia étnica: los hombres se abstienen de dicha actividad, mientras que las mujeres buscan oportunidades para congregarse, sobre todo con quienes comparten situaciones en común (generación, nacionalidad de cónyuge, hijos, etcétera).

Es conveniente seguir analizando los perfiles de los inmigrantes japoneses en Guadalajara para esclarecer más los aspectos que favorecen los modos de adaptación; queda como pendiente indagar sobre la educación de los hijos, el lenguaje, la comunicación con los nativos, etc.; por ello se recomienda que estos temas sean examinados en futuras investigaciones.

Referencias bibliográficas

Befu, H. (2006). "Globalization as Human Dispersal: Nikkei in the World", en L. R. Hirabayashi, A. Kikumura-Yano y J. A. Hirabayashi (eds.), New World, New Lives: Globalization and People of Japanese Descent in the Americas and from Latin America in Japan (pp. 28-56). Kioto, Japón: Jinbun Shoin. (En japonés.) [ Links ]

Campos, R. M., y Limón, H. M. (2014). "El modo de vida de la comunidad japonesa en la zona metropolitana de Guadalajara", en T. Okabe y R. S. Carrillo (coords.), Relaciones México-Japón en el contexto del Acuerdo de Asociación Económica (pp. 203-240). Guadalajara, México: Universidad de Guadalajara/Universidad de Seijo/ucla Program on Mexico, Profmex/World/Juan Pablo Editor. [ Links ]

Carrillo, R. S., Okabe, T., y Kakihara, T. (2013). "Nihon chokusetsu toshi no tame no chiiki teki yoin: mekishiko harisuko shu no jirei" [Factores regionales por la inversión directa japonesa: El caso del estado de Jalisco, México]. En J. A. Arroyo, A. D. Rodríguez, R. S. Carrillo, T. Okabe y T. Kakihara (eds.), Regional development in Mexico: Socio-economic regional development and foreign direct investment (pp. 31-92). Tokio, Japón: The Institute for Economic Studies of the Seijo University. [ Links ]

Falck, R. M., y Palacios, H. (2009). El japonés que conquistó Guadalajara: La historia de Juan de Páez en la Guadalajara del siglo XVII. Guadalajara, México: UdeG-cucsh. [ Links ]

_______. (2014). "Los primeros japoneses en Guadalajara", México y la Cuenca del Pacífico, 17(50): 89-124. [ Links ]

Fujita, Y. (2008). Cultural Migrants: Young Japanese and Transnational Media. Tokio, Japón: Shinyosha. (En japonés.) [ Links ]

Hamano, T. (2014). Nihon jin josei no kokusai kekkon to kaigai iju: tabunka shakai osutoraria no henyo suru nikkei komyuniti [El matrimonio y la migración internacional de las japonesas: La comunidad nikkei que se transforma en la sociedad multicultural, Australia]. Tokio, Japón: Akashi shoten.Links ]

INEGI. (2010). Censo de Población y Vivienda, 2010. Recuperado de http://www.inegi.org.mx/sistemas/olap/proyectos/bd/consulta.asp?p=17118&c=27769&s=est# (cruce de variables de "lugar de nacimiento" con "entidad y municipio"). [ Links ]

Kato, E. (2009). "Jibun sagashi" no imin tachi: Canada Vancouver, samayou nihon no wakamono [Inmigrantes que buscan "su propia identidad": Jóvenes que vagan en Vancouver, Canadá]. Tokio, Japón: Sairyu sha. [ Links ]

Kinjo, H. (2006). "Between Assimilation and Dissimilation: Bicultural Kibei-Nisei and the Okinawan Community", Imin kenkyu nenpo [The Annual Review of Migration Studies], núm. 12, pp. 89-107. (En japonés.) [ Links ]

Ministry of Health, Labour and Welfare. (2011). Heisei 21 nen jinko dotai tokei geppo nenkei (gaisu) no gaikyo [Estado general de la estadística mensual sobre la población en 2009 (número redondo)]. Recuperado de http://www.mhlw.go.jp/toukei/saikin/hw/jinkou/geppo/nengai09/kekka4.htmlLinks ]

Misawa, T. (2002). "Mekishiko Nikkei imin kazoku ni okeru kekkon no sedai encá" [Transformación intergeneracional sobre el matrimonio en las familias de nikkeis en México]. En T. Yanaguida (ed.), Raten amerika no nikkei jin: kokka to esunishiti [Los nikkeis en América Latina: Estado y etnicidad] (pp. 123-152). Tokio, Japón: Keio gijuku daigaku shuppan kai. [ Links ]

Nagatomo, J. (2013). Nihon shakai wo nogareru: osutoraria heno raifusutairu iju [Escapar de la sociedad japonesa: La migración por estilo de vida hacia Australia]. Tokio, Japón: Sairyusha. [ Links ]

Nakasone, T. (2013). Los inmigrados e inmigrantes japoneses en Guadalajara (1970-2011): Su comunidad y sus adaptaciones. Tesis de doctorado. Guadalajara, México: Universidad de Guadalajara. [ Links ]

National Statistics Center. (2010). 2010 Population Census. Recuperado de http://www.e-stat.go.jp/SG1/estat/List.do?bid=000001038689&cycode=0Links ]

Ota, M. M. (1982). Siete migraciones japonesas en México, 1890-1978. México: El Colegio de México. [ Links ]

_______. (1997). "Características sociales y económicas de los migrantes japoneses en México", en M. M. Ota (coord.), Destino México: Un estudio de las migraciones asiáticas a México, siglos XIX y XX (pp. 55-121). México: El Colegio de México. [ Links ]

Padilla, D. M. (2008). "Japón en Aguascalientes. Nuevos medios y geografías", Investigación y Ciencia, núm. 42, pp. 22-27. [ Links ]

Peddie, F. (2006). "Una presencia incómoda: La colonia japonesa de México durante la Segunda Guerra Mundial", Estudios de Historia Moderna y Contemporánea de México, núm. 32, pp. 73-101. [ Links ]

Statistics Bureau, Director-General for Policy Planning (Statistical Standards) & Statistical Research and Training Institute. (2010). Jinko suikei [Estimación de la población]. Recuperado de http://www.stat.go.jp/data/jinsui/2009np/pdf/gaiyou.pdf#page=1Links ]

Takenaka, A. (1999). "Transnational Community and Its Ethnic Consequences: The Return Migration and the Transformation of Ethnicity of Japanese Peruvians", American Behavioral Scientist, 42(9): 1459-1474. [ Links ]

Ueno, H. (2009). Los samuráis de México: La verdadera historia de los primeros inmigrantes japoneses en Latinoamérica. México: Asociación México-Japonesa. [ Links ]

1Este artículo es una versión enriquecida del apartado "Gráficas del cruce de variables sobre los resultados de las encuestas para los japoneses residentes en Guadalajara" del capítulo "Argumentaciones para sostener las hipótesis" de la tesis doctoral "Los inmigrados e inmigrantes japoneses en Guadalajara (1970-2011): su comunidad y sus adaptaciones" de la autora, aprobado en agosto de 2013.

2Consúltese a Falck Reyes y Palacios (2009 y 2014) para los detalles de estos cuatro casos.

3Son empleados japoneses que las empresas en Japón envían al extranjero; son contratados por empresas japonesas en Japón y reciben sueldos con un tabulador japonés; generalmente ellos regresan a Japón después de periodos que van de dos a cinco años.

4Okinawa es un estado que se ubica en el sur de Japón y que enviaba emigrantes masivamente a América Latina y Estados Unidos. El vínculo étnico es firme y existen 75 asociaciones, clubes o sociedades exclusivamente para ellos en el mundo y cada cinco años se realiza el Festival Uchinanchu para que los nikkeis se reúnan en la tierra de origen de sus ancestros.

5En este artículo se presentan algunos resultados característicos de la encuesta. Consúltese a Nakasone (2013) para obtener toda la información.

6Entre estas cifras, 98 respondieron la encuesta en el periodo ya descrito y cuatro lo hicieron en el año 2011 debido a que en aquel momento no se encontraban en Guadalajara. Se considera que la variación de las respuestas en función del tiempo es insignificante, por ello se sumaron estas cuatro adicionales al estudio.

7A propósito, la razón por la que no existen encuestados hombres graduados de colegios comunitarios se debe a que normalmente estos estudios (literatura, disciplinas básicas, puericultura, enfermería, etc.) tienen mayor aceptación entre las mujeres.

8El otro estudio (Nakasone, 2013) también muestra que 34 entrevistados japoneses de entre 35 personas llegaron a México sin relación alguna con la situación económica de Japón; sólo una persona afirmó que su llegada a México tuvo que ver con el periodo glacial del empleo en Japón.

Anexo

Formato de encuesta para japoneses

Recibido: 06 de Julio de 2015; Aprobado: 02 de Agosto de 2015

Creative Commons License Este es un artículo publicado en acceso abierto bajo una licencia Creative Commons