Sr. Editor:
Complementando a los comentarios presentados por investigadores cualitativos en educación en salud y en especial, lo mencionado por Margarita Varela y Tania Vives, sobre la aceptación de este enfoque metodológico a través de la reflexión de sus aportes y elementos que la componen, quisiera agregar que una de las limitaciones para su aceptación, se presenta en el momento de reconocer los resultados obtenidos para difusión académica.
Los editores y/o revisores de revistas científicas, tienden a medir o comparar el diseño investigativo con metodologías clásicas de generación de conocimientos, lo que deja en desventajas en forma inmediata la comprensión e interpretación que rodea al fenómeno estudiado, ya que la “muestra” o su “significancia”, declarado en ocasiones para la no aceptación de algunos escritos, no es lo que busca este tipo de investigación. Es más bien una comprensión más holística de los sucesos, desde el relato o experiencia de la persona indagada, lo que no es posible de cuantificar.
Coincidiendo también con las autoras antes mencionadas, para el momento de impulso de esta mirada investigativa, es necesario también, que las revistas de nuestra área se abran a su aceptación, con sus características propias y únicas, ya que la rigurosidad de una investigación, no la impone un diseño, sino la persona que está investigando.