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Revista mexicana de ciencias forestales

Print version ISSN 2007-1132

Rev. mex. de cienc. forestales vol.4 n.17 México May./Jun. 2013

 

Artículo

 

Evaluación del aumento en peso de cervatos cola blanca alimentados con diferentes fórmulas lácteas

 

Assessment of weight increment of white-tailed fawns fed with different milk formulas

 

Fernando N. González Saldívar1, Juan C. Ontiveros Chacón1, José I. Uvalle Sauceda.1, Gustavo Moreno Degollado2 y Jorge Ramsy Kawas Garza3

 

1Facultad de Ciencias Forestales, Universidad Autónoma de Nuevo León. Correo-e: fer1960_08_10@hotmail.com

2Centro de Producción Agropecuaria, Universidad Autónoma de Nuevo León.

3Facultad de Agronomía. Campus Universitario Escobedo, Universidad Autónoma de Nuevo León.

 

Fecha de recepción: 11 de febrero de 2013.
Fecha de aceptación: 12 de abril 2013.

 

RESUMEN

El estudio se desarrolló en el Centro de Mejoramiento Genético del Venado Cola Blanca del Centro de Producción Agropecuaria UANL, en el que se evaluaron los pesos al nacimiento y el crecimiento de cervatos de venado, mediante el registro de medidas corporales y de peso durante el periodo de lactancia. Para ello se formaron tres grupos: el primero se alimentó con el sustituto de leche Kitzenmilch® el segundo con Lactoplex® y el tercero con leche de cabra, a partir de una rutina de alimentación predeterminada. Se realizaron mediciones corporales de largo total, circunferencia de tórax, altura a la cruz, entre otras, las cuales se correlacionaron con el peso y la edad. El promedio de peso al destete fue de 17.22 ± 3.69 kg para todos los grupos, con diferencias significativas entre el conjunto alimentado con leche de cabra = 21.21 ± 1.98 kg, con respecto a los que ingirieron Lactoplex® y Kitzenmilch® (P ≤ 0.05). Además, se determinaron diferencias significativas en los alimentados con Lactoplex®, 16.73 ± 1.56 kg y Kitzenmilch®, 13.88 ± 2.68 kg (P ≤ 0.05); no así entre hembras y machos (P ≥ 0.05). Se concluye que los cervatos que consumieron leche de cabra tuvieron el mayor crecimiento, con diferencias significativas en relación con los otros grupos de crianza.

Palabras clave: Cervatos, aumento en peso, fórmulas lácteas, leche de cabra, Odcocoileus virginianus Zimmermann 1780, venado cola blanca.

 

ABSTRACT

The study was conducted at the Centro de Mejoramiento Genético de Venado Cola Blanca of the Centro de Producción Agopecuario, UANL where weight and growth of deer fawns were evaluated since birth, by recording body measurements and weight during lactation. Three groups were formed: the first was fed milk replacer: Kitzenmilch® and the second with Lactoplex®, the third group was fed with goat milk through a feeding routine default; bodily measurements were made: total length, chest girth, wither height, among others, correlating these with weight and age. The average weaning weight was 17.22 ± 3.69 kg for all groups, showing significant differences between the group fed with goat milk = 21.21 ± 1.98 kg compared to the groups fed with Lactoplex® and Kitzenmilch® (P ≤ 0.05 ). In addition, significant differences were found in the groups fed with Lactoplex® = 16.73 ± 1.56 kg and Kitzenmilch®, 13.88 ± = 2.68 kg (P ≤ 0.05), which did not happen between males and females (P ≥ 0.05). In conclusion, the group of fawns fed with goat milk was the fastest growing, obtaining significant differences in regard to the other care groups.

Key words: Fawns, weight increment, milk formulas, goat milk, Odcocoileus virginianus Zimmermann 1780, with-tailed deer.

 

INTRODUCCIÓN

En México existe un gran número de especies que pueden ser aprovechadas cinegéticamente. En el noreste del país, el venado cola blanca texano (Odocoileus virginianus Zimmermann 1780) es una de las más importantes, ya que aporta 45 % de los ingresos generados por el turismo cinegético (INE-Semarnat, 2002), que ascienden a 140 millones de dólares anuales (Redes Consultores, 2002). A partir de que los propietarios de los predios reconocieron el potencial de esta especie para generar ingresos mediante la cacería deportiva, se han incrementado los esfuerzos por mejorar su hábitat y manejarla en busca de aumentar y mejorar la calidad de sus poblaciones (Villarreal, 1999).

Una de las claves para tener éxito en el manejo del venado cola blanca es detectar y corregir los factores limitantes para su desarrollo (Moen, 1978), mismo que es determinante en la dinámica poblacional de la especie (Cook et al., 1971). La incapacidad de los cervatos débiles para mamar explica de 50 a 60 % de la mortalidad observada en los neonatos criados en cautiverio y alimentados con dietas de baja calidad (Murphy y Coates, 1966; Verme, 1962). Long et al. (1965) identificaron la ingesta de nutrientes como uno de los principales factores que afectan al crecimiento de los individuos y poblaciones de venados. Basados en esto, varios autores han tratado de definir los requerimientos nutricionales y los efectos de sus deficiencias (Warren et al., 1982).

En el presente estudio se evaluaron los pesos al nacimiento, el crecimiento corporal y aumento en peso desde el nacimiento hasta el destete de cervatos de venado cola blanca alimentados con tres diferentes fórmulas lácteas.

 

MATERIALES Y MÉTODOS

Localización y descripción del área de estudio

El estudio se llevó a cabo en la Unidad de Manejo y Conservación de la Vida Silvestre (UMA) denominada Centro de Mejoramiento Genético del Venado Cola Blanca, ubicada en el Centro de Producción Agropecuaria de la Universidad Autónoma de Nuevo León, el cual se localiza en el kilómetro 145 de la carretera Monterrey-Ciudad Victoria, en las coordenadas 24°47´N; 99°32´O, y una altitud de 350 m (Figura 1).

El tipo de clima según Köppen modificado por García (1981), citado por González (2004), es subtropical y semiárido con un verano cálido. La temperatura media mensual del aire oscila entre 14. 7 °C en enero a 22. 3 °C en agosto, aunque se alcanzan temperaturas de 45 °C durante el verano. La precipitación media anual es aproximadamente de 805 mm, con una distribución bimodal.

En general, los picos de precipitación máxima ocurren durante los meses de mayo, junio y septiembre. Los suelos que se identifican en el sitio son Vertisoles profundos de una coloración gris-oscura; arcillo-limosos con alto contenidos de Montmorillonita, los cuales se expanden y contraen en respuesta a cambios en los contenidos de humedad.

La vegetación predominante es el Matorral Espinoso Tamaulipeco o Matorral Subtropical Espinoso (Cotecoca-SARH, 1973; SPP-INEGI, 1986).

En diciembre del 2010 se inició la actividad reproductiva de 28 hembras de diferentes edades: 11 de 1.5 años, 2 de 2.5 años y 15 de más de tres años, para ello se utilizaron cinco machos de excelente calidad, y se conformaron 5 grupos de cruza compuestos por un semental y su respectivas hembras; cada uno se conformó de acuerdo a la edad y características fenotípicas de los individuos; y se colocó en un corral de aproximadamente 0.4 ha, cercado con malla venadera de 2.45 m de altura, y en los que se acondicionaron bebederos y comederos; ahí permanecieron durante la época reproductiva, hasta la temporada de partos. Se realizaron monitoreos matutinos y vespertinos del 20 de junio al 10 de agosto del 2011, para visualizar el total de las hembras en cada corral; además se buscaban hembras con señales de posparto, o con diferencias en el volumen del vientre. Ante cualquiera de estas señales, se ingresaba para buscar a los cervatos, pesarlos y levantar un acta de nacimiento con los siguientes datos: identificación de la madre, del padre y del cervato, peso, sexo y tipo de parto.

La evaluación del crecimiento de los cervatos se hizo a partir de tres grupos de crianza, integrados por ocho individuos de tres a cinco días de nacidos, cuatro hembras y cuatro machos, distribuidos al azar en orden de aparición durante la época de partos: de julio a agosto de 2011. Los cervatos se identificaron con un número consecutivo, de acuerdo al orden de nacimiento, dicha marca se colocó en la oreja mediante un tatuaje, también se colocó el número correspondiente a cada animal. Dicho manejo se realizó entre el tercero y quinto día de nacido, con la finalidad de asegurar una buena ingesta de calostro.

La alimentación de los cervatos se realizó por etapas y con una variante de la rutina propuesta por Trainer (1962) y Pekins y Mautz (1985). En el Cuadro 1 se muestran los periodos y la duración de cada tratamiento, así como las fases en las que se aplicó cada uno de ellos.

Al grupo 1 se le proporcionó una fórmula láctea denominada Kitzenmilch® al 2 una fórmula láctea denominada Lactoplex® y al 3 leche de cabra pasteurizada producida por diferentes ganaderos de la región citrícola de Nuevo León.

 

Análisis estadístico

Se realizaron pruebas de t de Student no pareadas con los datos de los pesos al nacimiento de los cervatos, además de una prueba de proporciones para determinar la existencia de diferencias significativas en las proporciones de hembras y machos. Para analizar el crecimiento y el consumo entre los grupos se hizo un análisis de varianza multifactorial con interacción entre sexos y grupos por periodos de crecimiento. Se utilizaron la fórmulas de coeficiente de determinación y regresión lineal para el análisis estadístico de las correlaciones:

Coeficiente de determinación (r2) Spiegel y Estephens, 2009)

 

Ecuación de regresión lineal (Spiegel y Estephens, 2009)

 

RESULTADOS Y DISCUSIÓN

Pesos de los cervatos al nacimiento

Se tuvo un total de 26 partos de los 28 esperados (92% de pariciones), en un periodo de 37 días, que comprendió del 2 de julio al 8 de agosto del 2011.Los tipos de parto fueron: 3% (1/26) triple, 62% (16/26) dobles y 35% (9/26) sencillos, para un total de 44 cervatos, de los cuales 59% (26/44) fueron machos y 41% (18/44) hembras. La media de los pesos fue de 3.29 ± 0.54 kg, con un peso máximo de 4.4 y un mínimo de 2.4 kg.

Respecto a la proporción de machos (26/44) y hembras (18/44), no se obtuvieron diferencias significativas, y la probabilidad de ocurrencia resultó de 50 % (P ≥ 0.05), aunque hay una diferencia de ocho animales entre cada sexo.

En cuanto a los pesos al nacimiento por el tipo de parto tampoco hubieron diferencias significativas (Figura 2), con una media en los ejemplares de partos sencillos de 3.57 ± 0.71 kg y la de los cervatos de partos dobles de 3.20 ± 0.46 kg (P ≥ 0.05).

Los pesos máximos y mínimos son mayores a los citados por Nelson y Woolf (1985), de 2.9 ± 0.3 kg y a los de Carstensen et al. (2009), quienes consignaron pesos al nacimiento de 2.8 ± 0.01 y 3.0 ± 0.01 kg, superiores a los registrados por Bartush y Garner (1979), cuyos valores fueron de 2 kg; sin embargo los pesos obtenidos en este estudio son más bajos que los de Verme (1989) de 3.4 a 4.1 kg (pesos promedio), durante varios años de evaluación de venado cola blanca criados en cautiverio.

En el presente trabajo se determinó un peso promedio arriba del documentado por Bartush y Garner (1979), para la misma subespecie; sin embargo, Verme (1963) menciona valores al nacimiento de 3.5 kg para cervatos hijos de hembras bien alimentadas; Nelson y Woolf (1985) obtienen diferencias en peso al nacimiento de cervatos entre un año y otro, dentro de la misma área, lo que pudiese explicar las diferencias en el peso al nacimiento entre los cervatos del estudio que se describe y los de Bartush y Garner (1979). Aunado a esto se concuerda con lo expuesto por Verme (1962), Murphy y Coates (1966), y Thorne et al. (1976), quienes observaron que dicho parámetro es afectado por la desnutrición de las madres, pero en el caso de los cervatos de la UMA Centro de Manejo y Mejoramiento Genético del Venado Cola Blanca las progenitoras de los cervatos se mantuvieron en excelente condición durante todo el año, y, en especial, en el último tercio de la gestación, que también justifica la baja tasa de mortalidad que se tuvo de las crías del nacimiento al destete, ya que se han correlacionado altos índices de mortalidad con bajos pesos al nacimiento, y estos, a su vez, con la desnutrición de las madres en el último tercio de la gestación en algunas especies de cérvidos, tanto en vida libre como en cautiverio (Miller y Braugton, 1974; Thorne et al., 1976; Verme, 1977; Fairbanks, 1993; Carstensen et al., 2009).

Estos resultados coinciden con los de Verme (1963), Nelson y Woolf (1985) y Verme (1989) para el venado cola blanca, pero difieren de lo citado por Fairbanks (1993), que obtuvo un peso al nacimiento mayor en las hembras que en los machos de berrendo; Clutton-Brock et al. (1982) registraron un peso al nacimiento superior en los machos de ciervo rojo; Mueller y Sadleir (1980) en venado cola negra; Bartush y Garner en venado cola blanca, y Robinette et al. (1973) consignan diferencias significativas entre machos y hembras en venados Bura.

Crianza en cautiverio de cervatos de venado cola blanca

Se determinó un peso promedio, a los cuatro meses, de 17.22 ± 3.69 kg; sin embargo, el grupo con el promedio más alto correspondió al que se alimentó con leche de cabra, con 21.21 ± 1.98 kg; seguido por el que consumió Lactoplex®, cuyo peso promedio fue de 16.73 ±1.56 kg; y el grupo que ingirió Kitzenmilch®, alcanzó un peso promedio de 13.88 ± 2.68 kg; existe una notoria diferencia en los pesos y, de acuerdo al diseño, el análisis para la evaluación del crecimiento entre los grupos que ingirieron las diferentes fórmulas lácteas (Cuadro 2).

En la Figura 4 se aprecian las ganancias en peso promedio por grupo de alimentación y periodo para hembras y machos. Es evidente que el grupo alimentado con leche de cabra tiene ganancias superiores en los dos sexos, pero entre ellos son muy similares; en los cervatos que consumieron Lactoplex® se registraron valores muy semejantes en ambos sexos; y por último, el alimentado con Kitzenmilch® tuvo ganancias muy irregulares, tanto en hembras como en machos.

Se obtuvo un peso promedio para todos los grupos de 17.22 ± 3.69 kg durante todo el periodo de alimentación (cuatro meses), el cual es más bajo que los referidos en la literatura para periodos de 95 días con 19.4 kg (Long et al., 1961); a los cuatro meses de 21.81 kg (Silver, 1961); a los 105 días, de 20.5 kg (Buckland et al., 1975), y un peso de 20.3 ± 1.8 kg en un lapso de 84 días (Pekins y Mautz, 1985).

Los cervatos que tuvieron mayor ganancia de peso en el presente estudio fueron los alimentados con leche de cabra; resultados similares obtuvieron Long et al. (1961), ya que ellos consignan una ganancia más grande en cervatos alimentados con leche entera de vaca Jersey, con respecto a los que se les proporcionó sustitutos de leche; en tanto que Trainer (1962) menciona que se pueden criar satisfactoriamente cervatos con leche entera de vaca, al igual que Buckland et al. (1975), quienes documentan una crianza de cervatos de venado cola blanca con resultados satisfactorios con leche entera de vaca Holstein. Sin embargo, Silver (1961) cita que sus mejores valores los obtuvo con la fórmula de leche deshidratada; por otra parte, Robbins y Moen (1975) alcanzaron excelentes pesos con un sustituto de leche, cuyo contenido nutricional era cercano a la leche de venado.

El grupo alimentado con leche de cabra fue el que tuvo las ganancias más altas de peso durante todos los periodos y en ambos sexos, además fueron las más cercanas a lo registrado en la literatura (Long et al., 1961; Silver, 1961; Buckland et al., 1975; Pekins y Mautz, 1985). Los consumos también fueron superiores con respecto a los otros dos tipos de alimento y también a los documentados por diversos autores (Buckland et al., 1975; Pekins y Mautz, 1985); algunas de las posibles causas son su alta palatabilidad, la calidad y la digestibilidad de los nutrientes de este tipo de leche.

El grupo alimentado con Lactoplex® tuvo el segundo lugar, después del que consumió leche de cabra, aunque no presentó diferencias significativas en las ganancias de peso en relación con el grupo alimentado con Kitzenmilch®, aun cuando haya tenido un mayor consumo, pero sin diferencias significativas, y estos fueron muy parecidos a los consignados por Buckland et al. (1975) y Pekins y Mautz (1985), a pesar de que las ganancias fueron más bajas. Algunas de las posibles causas de estos resultados pueden ser el alto contenido de materia seca (3% mayor), una menor palatabilidad que la leche de cabra, del origen vegetal de los productos, y la digestibilidad de los nutrientes de los ingredientes que los componen, conjuntamente con las indicaciones de dilución y administración de la fórmula.

El grupo alimentado con Kitzenmilch® presentó las menores ganancias durante todos los periodos de la evaluación, algunas de las posibles causas de este resultado es que tiene menos ingredientes de origen animal de fácil digestión, que el sustituto de leche Lactoplex®, el cual contiene leche descremada en polvo que lo hace más palatable y digestible. Además Kitzenmilch® presenta un alto contenido de materia seca (3% mayor) y grasa (2% más) que Lactoplex® y una menor palatabilidad que la leche de cabra; aunado al origen, y digestibilidad de los ingredientes que lo componen (de origen vegetal), y a la falta de flora intestinal de las crías; sin embargo, es un producto que cuenta ya con varios años en el mercado y se han tenido buenos resultados en la crianza de cervatos.

El promedio diario de consumo de fórmula láctea fue de 733 ± 249.78 mL, durante todo el periodo de alimentación para todos los grupos, y el mayor se registró en los cervatos alimentados con la leche de cabra, con un promedio de 869.90 ± 174.95 mL, seguido por el grupo alimentado con Lactoplex®, con un promedio de 661.26 ± 168.85 mL y por último, el que ingirió Kitzenmilch®, con un promedio de 633.17 ± 191.59 m (Cuadro 3). Se aprecia una notoria diferencia en los consumos y de acuerdo al análisis; se obtuvieron diferencias significativas entre los grupos de alimentación. El consumo promedio más alto correspondió a los alimentados con leche de cabra (P ≤ 0.05), pero no hubieron diferencias significativas en el consumo entre los grupos que ingirieron las fórmulas comerciales (P ≥ 0.05), ni entre los de hembras y machos (P ≥ 0.05). Aunque, si las hubo entre los meses 3 y 4 (P ≤ 0.05).

En la Figura 5 se observa el comportamiento del consumo promedio de hembras y machos por grupo y periodo, con una superior y clara diferencia en el grupo alimentado con leche de cabra, el cual se comporta de manera contraria en los machos y hembra ya que estas presentan un aumento en consumo de leche los primeros meses de evaluación, que desciende en los últimos meses, y los machos tienen un consumo lineal y ascendente en los primeros tres meses, aunque no hay una diferencia estadística entre sexos; en los grupos de Lactoplex® y Kitzenmilch®, la ingesta es muy similar y sostenida para ambos sexos durante los tres primeros meses, con una pequeña disminución en el último mes.

A pesar de que los pesos fueron menores a los citados por Pekins y Mautz (1985), los consumos promedio que citan son 642.52 mL al día, menores a los que se obtuvieron en el presente estudio, como los reportados por Buckland et al. (1975), de acuerdo con el protocolo de alimentación que utilizó, con un consumo diario de 603.17 mL. diarios lo que indica que aplicaron sustitutos o rutinas de alimentación más eficientes que las aquí descritos.

 

CONCLUSIONES

Los pesos al nacimiento corresponden con los registrados en la literatura para Odocoileus virginianus.

No existen diferencias significativas en el peso al nacimiento entre hembras y machos, ni en los pesos al nacimiento entre tipos de partos (sencillos y dobles), ni en las proporciones de hembras y machos; sin embargo pudiese ser que estos resultados estén influenciados por el tamaño de la muestra.

El grupo de cervatos alimentados con leche de cabra fue el que registró el mayor crecimiento, lo cual es atribuible al origen biológico y digestibilidad de los nutrientes que componen las diferentes fórmulas lácteas. La alimentación de cervatos con los sustitutos de leche cumple con su función de criar cervatos saludables y minimizar las pérdidas o la mortalidad en cautiverio; por lo tanto, se concluye que es posible criar cervatos de venado cola blanca con sustitutitos de leche elaborados a base de leche deshidratada.

Lactoplex® es la segunda mejor opción para la crianza de cervatos para el presente estudio, pues se obtienen individuos con buen desarrollo y pesos al destete.

Los animales alimentados con la fórmula láctea Kitzenmilch® presentaron un peso promedio al destete significativamente menor en comparación con los otros grupos de alimentación.

Finalmente, pese a que la leche de cabra es la mejor opción alimentaria, es recomendable tener presente su disponibilidad, el manejo de la temperatura de la leche para el almacenamiento (refrigeración), la pasteurización, y la vida de anaquel.

Es importante resaltar que los resultados obtenidos en el presente estudio pueden ser de gran utilidad para la conservación y manejo de poblaciones de venado cola blanca en las Unidades de Manejo y Aprovechamiento Sustentable de la Vida Silvestre (UMA).

 

AGRADECIMIENTOS

Al Centro de Producción Agropecuaria de la UANL por su apoyo para prestarnos los animales y realizar la investigación, a la empresa Minerales y Nutrición Animal S.A. (MNA), por permitir que el sustituto de leche para cervatos Lactoplex® fuera probado en este proyecto, a las MVZ Lourdes Alejandra Borrego, y Jessica Ivonne Hernández, por su apoyo e invaluable colaboración en todas y cada una de las actividades de manejo y alimentación de los cervatos en el trabajo de campo y a todos los estudiantes de la Facultad de Ciencias Forestales y de Medicina Veterinaria y Zootecnia que nos ayudaron en el manejo de los animales.

 

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