SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.10 número especial 22La sostenibilidad y resiliencia de un sistema agroforestal de secano para el altiplano semiárido de MéxicoUn sistema agroforestal de secano para el altiplano semiárido de México índice de autoresíndice de materiabúsqueda de artículos
Home Pagelista alfabética de revistas  

Servicios Personalizados

Revista

Articulo

Indicadores

Links relacionados

  • No hay artículos similaresSimilares en SciELO

Compartir


Revista mexicana de ciencias agrícolas

versión impresa ISSN 2007-0934

Rev. Mex. Cienc. Agríc vol.10 spe 22 Texcoco mar./abr. 2019

https://doi.org/10.29312/remexca.v0i22.1860 

Artículos

Tipología de productores de nopal tunero en Pinos, Zacatecas

Maria Eddy Mendoza-Orozco1 

Francisco Javier Morales-Flores1 

Santiago de Jesús Méndez-Gallegos1  § 

1Campus San Luis Potosí-Colegio de Postgraduados. Iturbide 73, Salinas de Hidalgo, San Luis Potosí. CP. 78600. (mendoza.eddy@colpos.mx; franciscojmf@colpos.mx).


Resumen

La tipificación de productores es importante para el diseño, implementación y aplicación eficiente de políticas, programas y estrategias dirigidas a grupos específicos. Los agricultores de Pinos, Zacatecas tienen como principal fuente de ingreso económico el cultivo de tuna. Estos productores reciben apoyos económicos gubernamentales; sin embargo, los beneficios no se han visto reflejados en el adecuado desarrollo y productividad de sus huertas. Con la finalidad de que dichos apoyos se distribuyan priorizando las necesidades de los productores, se planteó identificar las formas de producir tuna basadas en la edad y actividades de los productores y en las relaciones de apoyo que establecen. Para ello, se aplicó una encuesta a 38 productores en noviembre de 2014. Mediante un análisis multivariado, una correlación de variables y un análisis de componentes principales (CP) se determinaron grupos de productores con características distintivas. Se generaron 10 tipos de productores de tuna (r2 de 0.69) basadas en 4 CP: la edad y el ingreso por cultivar tuna son las variables más determinantes (25% de la variación), el rendimiento de tuna (17%), el ingreso por una actividad complementaria (15%) y la relación con socios en la producción (12%). Se identificaron como necesidades prioritarias para el desarrollo de la actividad tunera, incrementar el rendimiento de producción, así como crear y fortalecer vínculos con productores locales y foráneos. La tipificación de productores permite priorizar y agilizar la distribución de apoyos a los grupos más vulnerables. Es prioridad diseñar estrategias que mejoren la productividad y calidad de la tuna y ampliar su comercialización.

Palabras claves: Opuntia ficus-indica; análisis multivariado; manejo de cultivos; producción agrícola; relaciones sociales

Abstract

The typification of producers is important for the design, implementation and efficient application of policies, programs and strategies directed to specific groups. The farmers of Pinos, Zacatecas have as their main source of economic income the cultivation of prickly pear. These producers receive government economic support; however, the benefits have not been reflected in the proper development and productivity of their orchards. In order for these supports to be distributed prioritizing the needs of the producers, it was proposed to identify the ways of producing prickly pear based on the age and activities of the producers and the support relationships they establish. For this, a survey was applied to 38 producers in November 2014. Through a multivariate analysis, a correlation of variables and a principal component analysis (CP), groups of producers with distinctive characteristics were determined. Ten types of prickly pear producers were generated (r2 of 0.69) based on 4 CPs: age and income from prickly pear cultivation are the most determining variables (25% of the variation), yield of prickly pear (17%), income for a complementary activity (15%) and the relationship with partners in production (12%). They identified as priority needs for the development of the “tunera” activity, increase the yield of production, as well as create and strengthen links with local and foreign producers. The classification of producers allows prioritizing and expediting the distribution of support to the most vulnerable groups. It is a priority to design strategies that improve the productivity and quality of the prickly pear and expand its commercialization.

Keywords: Opuntia ficus-indica; agricultural production; crop management; multivariate analysis; social relations

Introducción

Opuntia ficus-indica es considerada la especie de mayor importancia agronómica a nivel mundial por la producción de fruto, brotes y forraje (Kiesling, 2008). México es el líder productor de tuna a nivel mundial, además de contar con la mayor superficie y número de cultivares comerciales, aunque existe una predominancia de cultivares de pulpa blanca (Sumaya et al., 2010). De manera particular, en el estado de Zacatecas, el municipio de Pinos es el principal productor de tuna a nivel nacional con un rendimiento de 186 125 t y una superficie de 13 360 ha (SIAP, 2014). El fruto proveniente de este municipio es comercializado nacional e internacionalmente; sin embargo, no todos los productores tienen la misma posibilidad de integrarse al mercado de este producto.

Una de las principales causas es la baja calidad de la tuna, la cual es afectada, entre otras cosas, por el deficiente manejo de las plantaciones. Para mantener la calidad de la tuna, los productores deben enfrentar diversos problemas que se les presentan año con año. Entre ellos destacan la incidencia de plagas y enfermedades, los precios bajos de la tuna (Márquez et al., 2012), el ineficiente manejo agronómico y la comercialización deficiente. Adicionalmente, la falta de organización y recursos económicos (García et al., 2004; García et al., 2008). Tienen limitantes como: nula asesoría técnica, apoyos gubernamentales ineficientes y alto costo en la adquisición de insumos y maquinaria. Estos son aspectos que impiden el desarrollo de sus cultivos y ocasionan merma en la producción tunera.

Entre las acciones que realizan algunos productores para mitigar estas limitantes es inscribirse a programas de apoyo gubernamentales con la finalidad de recibir un ingreso económico adicional para afrontar a erogaciones del manejo de sus plantaciones; sin embargo, no se refleja en un fruto de calidad, ni en su comercialización. Tampoco en el mejoramiento de su ingreso económico y por consecuencia su nivel de marginación se acentúa, de manera particular para aquellas familias que dependen de la tuna.

Una forma de eficientizar estos apoyos es conocer el tipo de productores que se dedican al cultivo de tuna, ya que éstos se caracterizan por presentar rasgos distintivos entre ellos, dados por las peculiaridades del manejo de su plantación y por sus relaciones interpersonales que establecen entre ellos. Para conocer esta distinción es pertinente caracterizar la tipología de productores. Esta técnica permite determinar prioridades acordes a cada tipo de productor, así como identificar los componentes que se deben considerar al diseñar y aplicar estrategias de planeación en sus unidades productivas (Santos et al., 2014).

Asimismo, la tipificación fundamentada en un análisis multivariado permite mayor eficiencia en el diseño de políticas públicas de desarrollo rural territorial. Además, permite a los tomadores de decisiones focalizar los esfuerzos hacia los grupos más vulnerables o con necesidades particulares, al mismo tiempo que agilizan y hacen más eficaz la distribución de los recursos y proporcionan una base para la participación oportuna (Marshall et al., 2014). Una tipología de productores puede propiciar la aplicación de políticas de fomento diferenciadas a través de la discriminación entre grandes y pequeñas explotaciones (Martínez et al., 2009).

Considerando que no existe una diferenciación entre productores de tuna que permita implementar programas de intervención eficientes y acordes a sus necesidades, el objetivo del estudio fue identificar los tipos de productores de nopal tunero en Pinos, Zacatecas.

Materiales y métodos

La presente investigación se realizó en el municipio de Pinos, Zacatecas (Figura 1). El cual está ubicado en la región sureste del estado de Zacatecas. Pertenece a la provincia fisiográfica Campo Volcánico Meridional. Se sitúa en los 22º 16’ 58” latitud norte y 101° 47’ y 101° 34’ 51’’ de longitud oeste, su altura es de 1 900 msnm. La temperatura media anual es de 16.2 °C y una precipitación media anual de 447.8 mm (CONAGUA, 2014).

Figura 1 Ubicación del área de estudio.  

Para tipificar a los productores de nopal tunero de Pinos, Zacatecas se aplicaron encuestas a 38 productores, donde se incluyeron variables cuantitativas y cualitativas que para su análisis fueron transformadas numéricamente. Dichas variables contemplaron aspectos tales como: la edad del productor, el grado de estudios, la superficie sembrada, el rendimiento de tuna, la transmisión de conocimiento técnico, la actividad principal y secundaria y su porcentaje de ingreso respectivo, la orientación al mercado y las relaciones de socio, líder o consejero con productores locales o foráneos. Se analizaron 23 atributos y se descartaron las 12 variables que presentaron menos de 20% o más 80% de respuestas comunes entre productores. Esta decisión se basó en el hecho de que indicaban una tendencia clara de aporte de información homogénea.

Posteriormente se realizó un análisis multivariado con el paquete estadístico Statistical Analysis Systems (SAS). Se correlacionaron las 11 variables restantes y se eliminaron aquellas con una alta dependencia entre sí (Pearson a r2 > 0.7 o < -0.7). Se determinó la influencia de las características de los productores usando componentes principales (CP) con datos estandarizados (media cero y varianza 1). Después se graficó la dispersión de los 38 productores utilizando los dos componentes más importantes (CP1 y CP2) y se formaron grupos de productores por similitud en las características evaluadas, utilizando la varianza interna mínima de los grupos como clasificador (Ward). Se identificaron las características que definieron la formación de grupos y se describieron los rasgos similares de cada grupo. Los grupos de productores de tuna se unieron de acuerdo a las necesidades de acción de cada uno.

Resultados y discusión

El análisis de la información obtenida permitió realizar la caracterización de los productores de nopal tunero de Pinos, Zacatecas. En cuanto a la edad ésta oscilo de 27 y 73 años. Este límite de edad es similar a la edad registrada por Venado et al. (2015) para productores de nopalito en Tlalnepantla, Morelos (19 a 68 años). Por su parte Márquez et al. (2012) mencionan que la edad promedio de productores de nopal tunero en Axapusco, Estado de México es de 60 años. Asimismo, se resalta, que en los tres estudios se aprecia que en la producción de tuna están inmersos productores en mayor proporción de adultos mayores, lo cual implica que por su edad presentan limitantes para realizar actividad física al llevar a cabo las prácticas de manejo requeridas.

Lo anterior, dificulta brindar el desarrollo de capacidades y habilidades de manera adecuada. Por tanto, estos productores requieren de estrategias de producción que no impliquen un esfuerzo físico que dañe su integridad. Esta situación se complica ante la imposibilidad de contratar mano de obra externa. Por otro lado, son personas con una experiencia considerable en el cultivo de nopal y transmiten conocimientos a las nuevas generaciones de jóvenes al heredar la tradición a sus familiares.

Esto permite dar continuidad a la producción de tuna y nopal y da identidad al lugar (Santos et al., 2014), ya que la identidad y el arraigo de los pobladores hacia la agricultura se dan en todo cultivo y lugar. Pinos es el municipio con mayor producción de tuna y por ello, el relevo generacional es un valor intangible que debe ser aprovechado con políticas que apoyen a estos productores que van envejeciendo.

Respecto al grado de escolaridad, 63% de los productores cursaron la secundaria y 37% la primaria. En afinidad Venado et al. (2015), destacan que 47% curso la secundaria y 26% la primaria, 17% tienen nivel medio superior y 8% superior. Por tanto, se deduce que los productores de Pinos, Zacatecas tuvieron menor posibilidad de estudiar, posiblemente porque las condiciones de ingreso de esta zona son más precarias y el traslado a las escuelas se complica por la lejanía. Es clara la necesidad de fortalecer los niveles de educación; sin embargo, debe ser orientada hacia las nuevas generaciones para que el nivel de educación les aporte las características de inventiva, innovación y curiosidad por descubrir nuevos esquemas de manejo y mejora de los canales de comercialización, usos emergentes en torno al nopal, además de las herramientas para comprender los procesos biológicos ligados al desarrollo de las plantaciones de tuna.

En cuanto a la superficie cultivada de tuna por productor, esta oscila de 0.25 a 57 ha, siendo mayor, a la registrada por Venado et al. (2015), quienes mencionan que cada productor de nopal verdura en Tlalnepantla, Morelos tiene en promedio 5.5 ha cultivadas, similar superficie de tuna fue obtenida por García et al. (2004). Asimismo, García et al. (2008) reporta 2.8 ha de tuna por productor para el estado de San Luis Potosí. Riojas y Fuentes (2006), destacan que los productores que obtienen volúmenes mayores tienen más posibilidad de integrarse al mercado internacional. En relación al rendimiento de tuna es de 1.8 a 60 t ha-1, comparado con las 6.1 t ha-1 promedio reportadas por García et al. (2004) en la misma zona de estudio. Ante la reducida superficie con que se cuenta, es importante y necesaria la organización de los productores y el diseño y aplicación de estrategias de manejo que estandaricen el producto y logren una diferenciación del mismo, así como incrementar el rendimiento y la calidad de la tuna.

Es importante mencionar, que 45% de los productores de tuna de la comunidad estudiada mostraron un fuerte arraigo hacia la producción de este cultivo y obtienen 100% de su ingreso por dicha actividad. Esto representó un aspecto positivo en la organización y cooperación local para hacer de la tuna una fuente de ingresos sólida. Es benéfico el interés que tienen los agricultores en continuar con el cultivo, sobre todo al considerar que aquellos productores con fuerte identidad ocupacional son más flexibles al cambio debido a su capacidad adaptiva y pueden ser menos vulnerables ante situaciones no previstas (Marshall et al., 2014). Al respecto Checa y Velázquez (2014) señalan que el contexto histórico de las relaciones sociales de un sitio determinado fortalece la capacidad y disposición del trabajo en conjunto. Una forma de incentivar estas relaciones es mediante acciones colectivas que permiten a los pobladores mantener su identidad y ampliar su mercado. También pueden ser fortificadas por planes, por proyectos comunes y por la unificación de criterios acerca del futuro de la producción de nopal en la comunidad (Ramos, 2014) sobre todo si se considera que, en Pinos, Zacatecas el cultivo de tuna es una actividad muy arraigada, aunque no dependen completamente de este negocio.

En relación a las actividades productivas de los agricultores, ellos además de dedicarse a la tuna, también son ganaderos, jornaleros, emigrantes o comerciantes, lo que les brinda entre 20 y 50% de su ingreso económico. Los productores de Pinos tienen actividades complementarias como la ganadería, además de recibir apoyo económico proveniente de las remesas enviadas por sus familiares (García et al., 2004). No obstante, el hecho de tener actividades adicionales podría traer como consecuencia la pérdida del conocimiento y la tradición del cultivo de nopal tunero en la región.

La pluralidad de actividades se presenta en aquellos lugares en donde las actividades agropecuarias han perdido centralidad y ya no son la única fuente de ingresos de los productores rurales (Santos et al., 2014). Esto refleja que se está perdiendo poco a poco el interés en realizar actividades relacionadas con el campo, aunado al insuficiente e inoportuno apoyo económico y de organización que aseguren la rentabilidad de los sistemas agrícolas. Otro aspecto a considerar, es que en la búsqueda de fuentes alternativas de sustento para mantener a sus familias descuidan sus huertas. Las limitantes técnicas de mantenimiento de las parcelas con tuna han provocado el abandono paulatino de las huertas (Márquez et al., 2012). Entre estas destacan el manejo inadecuado de las huertas, la presencia de plagas y enfermedades, la baja calidad de tuna, los bajos precios de venta y la baja rentabilidad del cultivo.

Los productores de tuna se dedican a la venta o autoconsumo del fruto, sin agregarle valor como producto semiterminado para su venta o la transformación en mermeladas, dulces u otros coproductos. La mayoría de productores destinan su producción para venta local, a intermediarios y muy pocos la comercializan a Estados Unidos de América. Esto refleja la diferencia de oportunidades de mercado debido a que no cumplen con los estándares de calidad del fruto y solo algunos tienen la oportunidad y posibilidad de introducirse al mercado nacional e internacional. El problema de la comercialización no solo implica a productores de nopal tunero, sino también de otros cultivos (Santos et al., 2014). Esta comercialización limitada es causada por un mercado insuficiente, aunado a que es un fruto de temporal y su precio es variable. Una situación que se presenta en San Luis Potosí con los productores de tuna es que solo venden 40% de su producción (García et al., 2008).

La mayoría de los productores se relacionan con productores locales (67%), en relaciones como líder (un modelo a seguir), consejero (búsqueda de información relacionada con la producción) o socio (necesidad de apoyo económico), 24% no establece relación alguna por lo que se consideran productores que trabajan de manera individual, 8% se relaciona únicamente con productores foráneos (fuera de su propia comunidad) y el restante 1% de productores tratan con productores foráneos y locales. Estas relaciones de producción se dan por conversaciones con agricultores experimentados o con familiares que se dedican a dicha actividad (Riojas y Fuentes, 2006) o por recomendaciones específicas (plagas y enfermedades) de otros agricultores y vendedores de agroquímicos (Márquez et al., 2012).

Son relaciones muy locales y espontaneas, dado que puede existir escasa interacción y poca cooperación entre productores por la competencia existente. Algunas relaciones se vuelven más cercanas llegando a relaciones de compadrazgo (Ramos, 2014). La falta de confianza y organización no permite un desarrollo satisfactorio para los habitantes tuneros de Pinos, Zacatecas, ya que 18% de los productores trabajan individualmente, el 10% con productores foráneos y 72% con productores locales; sin embargo, sus relaciones no son extensas, ya que siempre trabajan con los mismos compañeros.

Con el fin de diferenciar grupos de productores de nopal tunero por similitud de sus características en la forma de producción, se realizó un análisis multivariado. Este método nos permitió identificar rasgos distintivos que forman grupos de productores con características similares. Inicialmente se analizaron 23 variables, de ellas 12 fueron eliminadas por la homogeneidad de sus respuestas. Se identificó una correlación muy alta entre los productores a los que pide consejo y los productores con los que se asocia (0.802), lo que implica que el productor de tuna acude a las mismas personas líderes para buscar consejo. Se identificó una dependencia entre el ingreso económico por tuna y el ingreso económico por otras actividades, estas variables se identificaron como mutuamente excluyentes (-0.848) por lo que ya no se analizaron. Posteriormente, se realizó un análisis de componentes principales (CP) con nueve variables.

Este método permitió determinar cuatro CP con una varianza de 0.695 y un total de cinco variables con mayor impacto (Cuadro 1). El primer componente principal está determinado por la edad del productor y el ingreso por la producción de tuna (25% de varianza explicada). El segundo componente está relacionado con el rendimiento de tuna producido por los productores (17% de varianza explicada). El tercer componente es por la orientación económica de las actividades complementarias del productor que le generan ingresos (15% de la varianza). El cuarto componente está definido por la asociación con otros productores de tuna ya sean locales o foráneos (12%).

Cuadro 1 Análisis de componentes principales de 38 productores de nopal tunero y nueve variables, en el municipio de Pinos, Zacatecas. 

Núm. de variables Varianza Varianza Acumulada Ecuación
2 0.2534 0.2534 CP1= - 0.454 edad del productor - 0.447 porcentaje de ingreso económico por producción tunera
1 0.1734 0.4267 CP2= 0.548 rendimiento de tuna
1 0.1496 0.5764 CP3= 0.564 actividad económica secundaria
1 0.1187 0.6951 CP4= 0.636 relación con socios

El análisis de conglomerados permitió la formación de 10 grupos de productores de tuna que explica 66% de las variaciones en las características de producción de tuna (Figura 2). Los grupos 2, 3 y 4 agrupan al 50% de productores de tuna, mientras que los grupos 9 y 10 ubican a productores individuales por características muy diferentes al resto de productores. En un estudio realizado por Martínez et al. (2009) formularon un análisis similar definiendo tres tipos de productores de alimentos ecológicos en España.

Figura 2 Formación de grupos de productores de tuna en el municipio de Pinos, Zacatecas, a una r2 de 0.669 (línea punteada) y separación jerárquica de grupos. (G= grupo, letra minúscula = identificador de cada grupo).  

Adicional a la descripción general de los productores de tuna, se integran las características distintivas de cada grupo formado.

  1. productores exclusivos de tuna sin edad definida (G1-l): conformado por productores de tuna de edad variable entre 34 y 63 años, dependientes de ingreso económico exclusivamente por el cultivo de tuna (100%) y rendimientos bajos de producción (1.8 a 5 t ha-1). No se dedican a otras actividades económicas y tienen relación con productores de la misma localidad e inclusive foráneos.

  2. productores de tuna indecisos (G2-d): productores con edad variable (de 34 a 60 años), cuyo ingreso económico por el cultivo de tuna es variable (20 a 80%) ligado a actividades fuera del ámbito agrícola y ganadero. Tienen rendimientos de producción variables (3 a 30 t ha-1) con socios locales.

  3. productores rurales (G3-q): productores adultos de edad entre 52 y 59 años, con ingresos económicos predominantes de la tuna (50 a 100%) y rendimiento variable (2.5 a 38 t ha-1) que complementan su ingreso con la actividad ganadera, relacionados con socios locales.

  4. productores no rurales (G4-g): productores adultos mayores (55 y 73 años), con ingreso económico predominante de la tuna (50 a 100%) y rendimientos bajos de producción (5 a 20 t ha-1) que complementan su ingreso con actividad ganadera y fuera del área rural y tienen socios locales.

  5. productores adultos con productividad muy baja (G5-k): productores en edad entre 42 y 61 años, con ingresos económicos predominantemente de la tuna (50 al 100%). Su rendimiento de producción es muy bajo (de 3 a 5 t ha-1) y no tienen actividad secundaria. Su relación es local o trabajan individualmente.

  6. productores exclusivos de tuna, adultos y adultos mayores (G6-p): productores en edad de adulto a adulto mayor (48 a 69 años) con ingreso económico proveniente de la tuna (100%) y que se dedican únicamente al cultivo de tuna. Tienen rendimientos altos de producción (46 a 50 t ha-1) y tienen socios locales. Uno de los productores trabaja individualmente.

  7. productores adultos jóvenes (G7-m): productores jóvenes (33 a 38 años) con un ingreso económico predominante de la tuna (80 a 100%). Uno de ellos también es ganadero. Tienen rendimientos de producción altos entre 40 y 60 t ha-1 con socios locales.

  8. productores adultos jóvenes indecisos (G8-c): productores jóvenes (27 a 36 años) con ingresos provenientes de la tuna (50 a 60%) así como rendimientos muy bajos de producción (2 y 12 t ha-1). Tienen actividades complementarias como ganadería u otras fuera del ámbito rural y están relacionados con socios foráneos.

  9. productor exclusivo de tuna, adulto (G9-ñ): productor de edad mediana (43 años) dedicado únicamente al cultivo de tuna y por ende ingreso total exclusivo (100%). Con rendimiento de producción medio (12 t ha-1) relacionado con socios locales.

  10. productor de tuna, adulto mayor (G10-o): productor adulto mayor (73 años) con ingreso exclusivo por la producción de tuna y dedicado exclusivamente a ella. El rendimiento de producción es muy bajo (3.5 t ha-1) y trabaja individualmente. Esta diferenciación fortalece y corrobora la relevancia en apoyos diferenciados, atendiendo los objetivos y las necesidades productivas de cada grupo.

En relación a la separación de grupos, éstos se dispersaron en primera instancia por la edad del productor y por su dependencia económica de la actividad tunera, siendo los principales criterios de clasificación (Figura 3). Los grupos 10, 6 y 3 son los grupos de mayor edad y que dependen al 100% de la actividad tunera, mientras que los grupos 8 y 2 están integrados por productores jóvenes que dependen muy poco de la actividad tunera. De acuerdo al rendimiento de producción de tuna que es la siguiente razón de separación, los integrantes del grupo 7 son los productores más importantes de tuna; mientras que los productores del grupo 4 tienen los menores volúmenes de producción de tuna.

Figura 3 Distribución de productores de tuna en Pinos, Zacatecas por CP 1 y 2 (r2= 0.69).  

Estos últimos grupos contienen a productores entre 33 y 73 años con más de 50% de ingresos económicos por la actividad tunera. Los productores más jóvenes pueden tener una visión de ingreso económico más amplia, ya que no se dedican solo al cultivo de tuna y por ello, podrían tener mayor disposición a cambiar la tradición del cultivo y estar interesados en crear y promover otras fuentes de ingreso económico. Por otro lado, se les puede incentivar para que dirijan su atención primordialmente a la producción de tuna debido a que son adultos jóvenes que tienen capacidad para realizar actividades del campo.

A fin de facilitar el diseño de estrategias para los productores de tuna, se conjuntaron los grupos de productores con debilidades compartidas. Estas estrategias se listan a continuación.

La primera estrategia está enfocada a los grupos 2 (productores indecisos), 4 (productores no rurales), 5 (productores adultos con productividad muy baja), 9 (productores exclusivos de tuna, adultos) y 10 (productores exclusivos de tuna, adultos mayores). Para estos productores se debe tener como objetivo prioritario: incrementar el rendimiento de tuna a un nivel de 30 t ha-1, además, crear vínculos con productores locales y foráneos, es recomendable al menos una relación externa por productor. La segunda estrategia es para los grupos 1 (productores exclusivos de tuna sin edad definida) y 3 (productores rurales). Los objetivos a cumplir para este grupo de productores son: incrementar el volumen de producción, fortalecer las relaciones existentes por medio de acciones de trabajo en conjunto que aporten beneficios y crear nuevos vínculos con productores foráneos. La tercera estrategia se enfoca a los grupos 6 (productores exclusivos de tuna, adultos y adultos mayores) y 7 (productores adultos jóvenes) para crear vínculos con productores foráneos. La cuarta estrategia está dirigida al grupo 8 (productores adultos jóvenes indecisos) y consiste en incrementar el volumen de producción y fortalecer las relaciones existentes.

Cada estrategia está encaminada a mejorar el estado actual de los productores de tuna, mediante acciones que permitan incrementar el volumen de producción de tuna ligado al adecuado manejo de las plantaciones, así como, incrementar la calidad de fruto, fortalecer las relaciones interpersonales y la vinculación con productores foráneos con la intención de ampliar el mercado.

Esta dirección de la visión de trabajo en conjunto podría generar relaciones con empresas que permitan la transformación de la tuna y extender su área de comercialización. Al ampliar el mercado se generarán mayores ingresos, lo que podría direccionar a los productores a retomar el cultivo de tuna como su actividad prioritaria. Lo anterior, es trascendental para evitar perder la tradición, el conocimiento en el cultivo de este recurso y la identidad de la región y de esta manera evitar el desplazamiento de las familias hacia zonas de trabajo fuera de su localidad. Por otro lado, es necesario el fortalecimiento de las relaciones de trabajo con una proyección a futuro, ya que la falta de organización y cooperación limitan el fortalecimiento de la producción (Checa y Velázquez, 2014). Estos autores mencionan que las iniciativas en comercialización y la adquisición de recursos económicos que sean aplicados a las plantaciones ayudan a mitigar la vulnerabilidad del sistema productivo.

Los productores que están constituidos en cooperativas tienen la posibilidad de vender a precio fijo o pactado dentro y fuera del país (Riojas y Fuentes, 2006), lo que apoya el valor fundamental de la organización para lograr un desarrollo comunal e incrementar los ingresos económicos de una región. Cabe mencionar, que solo 29% de los productores de tuna en Pinos, Zacatecas está organizado formalmente (García et al., 2004).

Los productores pueden organizarse; a través, de asambleas comunales, siendo un importante mecanismo para la toma de decisiones y con resultados satisfactorios en la producción y comercialización. Estos espacios de cooperación se crean a partir de la conformación de grupos con ideales similares, además de que impulsa los sistemas hacia el éxito al proveer un crecimiento económico para la comunidad (Ramos, 2014). Por otro lado, la confianza es fundamental ya que brinda seguridad en la percepción de las personas hacia el emprendimiento de acciones nuevas (Checa y Velázquez, 2014). Los productores de tuna de Pinos, Zacatecas que no tienen formas de organización desarrolladas, limitan la posibilidad de desarrollar su sistema productivo. Una consideración, es que se deben crear estrategias de intervención que incluyan al mayor número de actores posibles. En este contexto, los grupos organizados y con fuertes relaciones tienen mayor orientación al cambio representado como adopción de nuevas tecnologías (Marshall et al., 2014).

Conclusiones

Existe una diferenciación entre productores de nopal tunero en Pinos, Zacatecas que puede ser orientada con estrategias de promoción del sistema productivo en medidas concretas tales como incrementar los volúmenes de producción y la creación y fortalecimiento de relaciones sociales.

La aplicación del análisis multivariado permitió determinar una tipificación de productores tuneros por similitud de características. Se identificaron 10 tipos de productores de tuna basados en la edad del productor, los ingresos provenientes de la venta del cultivo, el rendimiento de tuna producida, la existencia de una actividad económica complementaria y la creación de relaciones. Sobre estos tipos de productores se ha facilitado el diseño de cuatro estrategias para incrementar los volúmenes de producción y promover las relaciones productivas. El análisis de la tipificación de productores permitió reconocer que, en el municipio de Pinos, Zacatecas existe una bipolaridad productiva debido a las oscilaciones en el rendimiento de tuna que van de 1.8 a 60 t ha-1. El conocimiento de rasgos distintivos será una base para el diseño y aplicación de estrategias de desarrollo eficientes direccionadas a cada grupo de productores y permite priorizar además de agilizar la distribución de apoyos a los grupos de la sociedad más vulnerables. De manera independiente a la definición de tipos de productores, se deben generar estrategias que permitan la vinculación y organización entre productores locales y foráneos. Estas relaciones deben atender la sostenibilidad del sistema productivo, la calidad del producto, así como la comercialización para lograr un desarrollo en la producción de tuna en Zacatecas.

Literatura citada

Checa, M. M. y Velázquez, V. M. 2014. Los sistemas agroalimentarios localizados como elemento de análisis: retos y dificultades para su conformación. El caso de Tampico Alto, Veracruz. México. Sociedades Rurales, Producción y Medio Ambiente. 28(14):134-140. [ Links ]

Chikowo, R.; Zingore, S.; Snaap, S. y Johnston A. 2014. Farm typologies, soil fertility variability and nutrient management in smallholder farming in Sub-Saharan Africa. Nutr. Cycl. Agroecosyst. 100 (1):1-18. [ Links ]

CONAGUA. 2014. Comisión Nacional del Agua. Sistema Meteorológico Nacional. Normales Climatológicas Zacatecas. Periodo de 1981-2010. http://smn.cna.gob.mx/index.php?option=com_content&view=article&id=160&tmpl=component. [ Links ]

Daloglu, I.; Iverson, N. J.; Riolo, L. R. y Scavia, D. 2014. Development of a farmer typology of agricultural conservation behavior in the American Corn Belt. Agric. Systems. 129:93-102. [ Links ]

Engler, O. J.; Abson, J. D.; Feller, R.; Hanspach, J. y von Wehrden, H. 2017. A social-ecological typology of rangelands based on rainfall variability and farming type. Journal of Arid Environments. 148:65-73. [ Links ]

García, E. J.; Méndez, S. J.; Rössel, D.; Talavera, D. y Hernández, I. 2008. El nopal tunero en San Luis Potosí (situación actual y recomendaciones técnicas). Departamento de difusión del Colegio de Postgraduados. 1a (Ed.). San Luis Potosí, SLP, México. Folleto para productores núm. 2. 35 p. [ Links ]

García, E. J.; Peña, B.; Estrella, N.; Manzo, F. y Delgado, R. 2004. Estrategia para el desarrollo rural integral y sostenible en la región de Pinos, Zacatecas: el binomio nopal tunero-migración como su elemento central. In: el nopal: tópicos de actualidad. Esparza, G.; Valdez, R. D. y Méndez, S. J. (Eds.). 1ra edición. COED. Universidad Autónoma Chapingo-Colegio de Postgraduados. Texcoco, Estado de México, México. 273-291 pp. [ Links ]

Guiomar, N.; Godinho, S.; Pinto-Correia, T.; Almeida, M.; Bartolini, F.; Bezák, P.; Biró, M.; BjØrkhaug, H.; Bojnec, S.; Brunori, G.; Corazzin, M.; Czekaj, M.: Davidova, S.; Kania, J.; Kristensen, S.; Marraccini, E.; Molnár, Zs.; Niedermayr, J.; O’Rourke, E.: Ortiz-Miranda, D.; Redman, M.; Sipiläinen, T.; Sooväli-Sepping, H.; Sumane, S.; Surová, D.; Sutherland, L. A.; Tcherkezova, E.; Tisenkopfs, T.; Tsiligiridis, T.; Tudor, M. M.; Wagner, K. y Wästfelt, A. 2018. Typology and distribution of small farms in Europe: Towards a better picture. Land Use Policy. 75:784-798. [ Links ]

Jelsma I., Woittiez L. S. Ollivier J. y Hadi D. A. 2019. Do wealthy farmers implement better agricultural practices? An assessment of implementation of Good Agricultural Practices among different types of independent oil palm smallholders in Riau, Indonesia. Agric. Systems. 170:63-76. [ Links ]

Kiesling, R. 1999. Origen, domesticación y distribución de Opuntia ficus-indica. USA. J. Professional Association Cactus Development. 3:50-59. [ Links ]

Köbrich, C.; Rehman, T. y Khan, M. 2003. Typification of farming systems for constructing representative farm models: two illustrations of the application of multi-variate analyses in Chile and Pakistan. Agricultural Systems. 76:141-157. [ Links ]

Márquez, S. R.; Torcuato, C.; Almaguer, G.; Colinas, M. T. y Khalil, A. 2012. El sistema productivo del nopal tunero (O. albicarpa y O. megacantha) en Axapusco, Estado de México. Problemáticas y alternativas. Rev. Chapingo Ser. Hortic. 18(1):81-93. [ Links ]

Marshall, A.; Stokes, J.; Webb, P.; Marshall, A. and Lankester, J. 2014. Social vulnerability to climate change in primary producers: a typology approach. Netherlands. Agric. Ecosys. Environ. 186:86-93. [ Links ]

Martínez, P. F.; Schwentesius, R.; Martínez, J. M. y Gómez, M. A. 2009. Características y comparativa de los productores de alimentos ecológicos en el sureste de Europa: el caso de la región de Murcia, España. México. Agrociencia. 6(43):649-657. [ Links ]

Prokopy, L. S.; Floress, K.; Klotthor-Weinkauf, D. y Baumgart-Getz. 2008. Determinants of agricultural best management practice adoption: Evidence from the literature. Journal of Soil and Water Conservation. 63(5):300-311. [ Links ]

Ramos, A. 2014. Producción de nopal y dinámicas de interacción social en Tlalnepantla, Morelos (2005-2008). México. Sociedades Rurales, Producción y Medio Ambiente. 28(14):71-101. [ Links ]

Riojas, M. E. y Fuentes, A. T. 2006. Caracterización del manejo del cultivo de tuna (Opuntia spp.) en los municipios de Ojuelos de Jalisco y Pinos, Zacatecas, México. In: avances en la XVII Semana de investigación científica en el CUCBA. 595-601 p. [ Links ]

Santos, V. M.; Zuñiga, M.; Leos, J. A. y Álvarez, A. 2014. Tipología de productores agropecuarios para la orientación de políticas públicas: aproximación a partir de un estudio de caso en la región Texcoco, Estado de México, México. Sociedades Rurales, Producción y Medio Ambiente. 28(14):47-69. [ Links ]

Rodríguez, C. L.; Pascual, U. y Niemeyer, M. H. 2006. Local identification and valuation of ecosystem godos and services from Opuntia scrublands of Ayacucho, Peru. Ecological Economics. 57:30-44. [ Links ]

SIAP. 2013. Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera. http://www.siap.gob.mx/cierre-de-la-produccion-agricola-por-estado/. [ Links ]

Suárez, J. 2015. Producción integrada de alimentos y energía a escala local en Cuba: bases para un desarrollo sostenible. Pastos y Forrajes. 38(1):3-10. [ Links ]

Sumaya, T. T.; Suárez, N. S.; Cruz, E.; Alanís, G. y Sampedro, J. G. 2010. Innovación de productos de alto valor agregado a partir de la tuna mexicana. México. Rev. Mex. Agron. 14:435-441. [ Links ]

Venado, R.; García, F.; Bahena, G.; Alpuche, O.; Saldaña, M. C. y Sainz, M. J. 2015. Caracterización de las unidades de producción de nopal verdura en el municipio de Tlalnepantla Morelos, México. In: Memoria del XIV Simposium-Taller Nacional y VII Internacional de Producción y Aprovechamiento del Nopal y Maguey. Campus de Ciencias Agropecuarias -UANL. Escobedo, NL. México. 1-11 pp. [ Links ]

Wanjiku, K. J.; Stellmacher, T.; Biber-Freudenberger, L. y Borgemeister, C. 2018. Organic and conventional agriculture in Kenya: A typology of smallholder farms in Kajiado and Murang’a counties. Journal of Rural Studies. 57:171-185. [ Links ]

Wilmer, H.; Derner, D. J.; Fernández-Giménez, E.; Briske, D. D.; Augustine, J. D.; Porensky, M. L. 2017. Collaborative Adaptive Rangeland Management Fosters Management-Science Partnerships. Rangeland Ecology & Management. 71:646-657. [ Links ]

Recibido: Diciembre de 2018; Aprobado: Febrero de 2019

§Autor para correspondencia: jmendez@colpos.mx.

Creative Commons License Este es un artículo publicado en acceso abierto bajo una licencia Creative Commons