SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.3 número5Discriminación y estimación del área con labranza de conservación empleando imágenes SPOT 4Resistencia a roya amarilla (Puccinia striiformis f. sp. tritici) en variedades de trigo harinero (Triticum aestivum L.) índice de autoresíndice de assuntospesquisa de artigos
Home Pagelista alfabética de periódicos  

Serviços Personalizados

Journal

Artigo

Indicadores

Links relacionados

  • Não possue artigos similaresSimilares em SciELO

Compartilhar


Revista mexicana de ciencias agrícolas

versão impressa ISSN 2007-0934

Rev. Mex. Cienc. Agríc vol.3 no.5 Texcoco Set./Out. 2012

 

Artículos

 

El sistema agropecuario de información en la Frailesca para promover la innovación de tecnologías*

 

The farming information system in La Frailesca to promote innovation of technologies

 

Pedro Cadena Iñiguez

 

Red de Transferencia. Campo Experimental Centro de Chiapas-INIFAP. Carretera Ocozocoautla-Cintalapa, km 3, Ocozocoautla de espinosa, Chiapas. Autor para correspondencia: cadena.pedro@inifap.gob.mx.

 

* Recibido: julio de 2011
Aceptado: junio de 2012

 

Resumen

Como una herramienta metodológica de trabajo para promover la innovación de tecnologías agropecuarias, se propuso el Agricultural Knowledge Information System and Rural Development (AKIS-RD) o Sistema de Información Agropecuaria (SAI) en la región del estado de Chiapas conocida como la Frailesca, donde actores promotores y actores receptores, se organizaron y trabajaron bajo una lógica de mercado a través de convenios para promover la innovación de tecnologías ligadas al cultivo del maíz, los resultados basados en una muestra de cinco despachos que están acreditados como agentes PROCREA ante el Banco de México (BM), 52 organizaciones y 194 productores, indican que existen visos de que dichas dinámicas organizacionales sean un sistema agropecuario de Información, sin embargo, la lógica de mercado marcada por los promotores de la estrategia sólo privilegia la plusvalía del dinero, pero no aparecen evidencias de procesos completos de capacitación o educación que empoderen a los actores receptores. El reacomodo de las actividades de los actores, las tareas compartidas entre lo público y lo privado, la organización para promover y recibir tecnología y servicios favorece una mayor participación de los grupos sociales y promueven el desarrollo tecnológico sin que esta sea considerada como innovación.

Palabras clave: AKIS, Chiapas, desarrollo rural innovación, maíz.

 

Abstract

As a metholodogical work tool to promote the innovation of farming technologies, the Agricultural Knowledge Information System and Rural Development (AKIS-RD) or Farming Information System (SAI) was proposed in the region in the state of Chiapas known as La Frailesca, where promoting and recipient actors organized themselves and worked under a market principles, through agreements to promote the innovation of technologies linked to the planting of maize. The results, based on a sample of five offices, that are accredited as PROCREA agents before the Banco de Mexico (BM), 52 organizations and 194 farmers, indicate that there are signs of these organizational dynamics being an agricultural Information system. However, the market principles, marked by the promoters of the strategy, only privilege the added value of money, yet there is no evidence of complete training or education programs that empower the recipient actors. The rearrangement of the actors' activities, the tasks shared between the public and private, the organization to promote and receive technology and services favors a greater participation of social groups and promotes technological development, without it being considered an innovation.

Palabras clave: AKIS, Chiapas, rural development, innovation, maize.

 

Introducción

El sistema agropecuario de información (SAI) o el Agricultural Knowledge Information System and Rural Development (AKIS/RD) por sus siglas en inglés, es una de las herramientas metodológicas para el diagnóstico territorial. Idea concebida por Róling en 1986, consiste en que los procesos de investigación, extensión, educación y las acciones que realicen los productores como receptores de las acciones, no deben ser actividades separadas, sino vinculadas como un proceso interrelacionado, de tal manera que cada componente del SAI, comparta experiencias que enriquezcan el proceso, (Róling, 1988 y Róling 1990), más tarde Alex y Byerlee (2000), apuntaron una secuencia de pasos para definir las relaciones y el flujo de información entre los actores que intervienen y como estas tienen su efecto en el desarrollo territorial, para recabar información que nos permita tener un diagnóstico territorial para proponer, planificar y ejecutar acciones de desarrollo.

El AKIS-RD o SAI, es un sistema en el cual la información agropecuaria es generada, transformada, transferida, consolidada, recibida y retroalimentada de una manera que estos procesos funcionen sinérgicamente que enriquezcan el conocimiento y la utilización por parte de los productores. También es considerado como un conjunto de organizaciones y o personas vinculadas, las cuales son las encargadas de los procesos de generación, transformación, transmisión, almacenamiento, reencuentro, integración, difusión, utilización y apropiación del conocimiento, con un solo objetivo: apoyar la toma de decisiones que coadyuve en la mejora de la calidad de vida de la población rural y urbana según sea el caso.

Se requiere un diagnóstico de línea base, de tal manera que podamos realizar en cierto tiempo un diagnóstico de los impactos. Al analizar el cumplimiento de las metas, los indicadores deben ser el incremento regional de la productividad, una mejora en los niveles de vida o bien indicadores de sustentabilidad, así como las acciones de capacitación que se hayan realizado entre los usuarios de tal manera que se logre un empoderamiento de los actores.

El Banco Mundial (2000) y FAO (2005), conceptualizan al AKIS-RD o SAI, como vínculos que establecen las instituciones de investigación, educación y extensión para mejorar la vida de la población rural, donde el corazón de todas las actividades son los productores y sus familias y todos comparten sus experiencias y conocimientos con metas comunes, mejorar la productividad de los sistemas agropecuarios sin menoscabo de los recursos naturales. El SAI también es llamado como sistema de conocimiento, los cuales se definen como una red de actores quienes a través de vínculos creados ex profeso intercambian información y conocimientos Engel (1997).

Es considerado como el conjunto de organizaciones y personas del sector público o privado que comparten información, y la interacción de los actores que generan información, procesos, integración, difusión y utilización o adaptación de los conocimientos, ideas, procesos o servicios para la resolución de problemas. Es un proceso de comunicación e intercambio de experiencias, información, servicios o tecnología, intervienen diversos arreglos y convenios entre los actores.

Lionberger (1986); Kaimowitz etal. (1990) y Manzo (1994); Cadena, (2004) sugieren al AKIS o SAI como la herramienta metodológica que puede ayudarnos a explicar cómo se organizan los actores y el tipo de relaciones existentes entre estos. Los actores y actrices que intervienen en el proceso son promotores(as), y receptores de tal manera que uno transmite la información hacia el otro, indistintamente de la dirección inicial. Esto es que, pueden ser primero los actores y actrices receptores(as) quienes envíen información hacia los actores o actrices promotores(as) o viceversa. En el siguiente modelo conceptual se presentan los principales elementos que conforman el AKIS-RD o SAI.

El primer elemento (creación-generación) de este sistema está conformado por la información que un actor tiene disponible o conforma para ser transmitida a otro. En forma operacionalizada este actor puede ser desde un centro de investigación, un agente bancario, un promotor de ventas, una institución gubernamental y todo aquel que tenga información disponible de ser compartida con los demás actores. El segundo elemento (intercambio-difusión) se refiere a un mecanismo de transmisión, por medio del cual los actores promotores la hacen llegar a otro actor o éste último la adquiere del lugar donde se encuentre. En el modelo de comunicación tradicional esto serían los extensionistas.

El tercer elemento (utilización/adopción) se refiere a un receptor o actor usuario de la información que puede ser ofrecida por los dos primeros elementos. Conformado por un productor varón o mujer de manera individual u organizada, capaz de recibir la información de los actores restantes y transmitir su propia información al resto de los elementos que conforman el modelo. Se esperaría que el modelo en cada uno de sus subsistemas tuviera una retroalimentación hacia los demás elementos que lo constituyen, por lo que visto de una manera reflejada los usuarios de la información también tienen información que compartir, por lo tanto este modelo tiene una lectura en ambos sentidos. Los elementos están dentro de un contexto sociocultural y ambiental, el cual influye en las interrelaciones.

Lionberger (1986); Kaimowitz etal. (1990); Engel (1997); Manzo, (1994) y Cadena (2004) retoman lo definido por Róling (1988) y acotan que el objetivo central del SAI es el beneficio de los usuarios mediante las actividades que realizan los diferentes subsistemas que lo integran, o bien que todos los esfuerzos estén encaminados a resolver la problemática de ellos, se busca que los campesinos y sus familias no sean simples recipientes, sino como un vehículo para compartir ideas y principios, buscando las causas y dirigiendo las soluciones.

De acuerdo con Kalaitzandonakes (1999) y el BM, (2000) y FAO, (2005), el AKIS-RD o SAI es una excelente oportunidad para que otros actores que no sean solamente del sector público, inviertan en los procesos de generación de tecnología, educación y extensión para el desarrollo agropecuario. Lo anterior es una corriente ampliamente constituida en Europa, Estados Unidos de América, sobre todo en investigación básica, otrora área exclusiva del sector público, también en los procesos de extensión y promoción, los cuales enmarcados en un entorno neoliberal son muy agresivos en su intento por ganar el mercado.

Destaca que a pesar de la apertura que el AKIS-RD o SAI proporciona para el crecimiento y participación de instituciones privadas en el desarrollo rural, el sector público debe liderar las acciones de investigación en áreas prioritarias para el Estado. La participación de los productores ha sido descrita como modelos alternativos de investigación - participación, entre ellos, Byerlee y Collinson (1983) y corroborada posteriormente en estudios por separado de Chambers (1993) y Kumar (1993). Los resultados con estos modelos han generado experiencias interesantes, donde los investigadores(as), extensionistas se han involucrado en procesos de innovación tecnológica en forma directa con los beneficiarios de las acciones de desarrollo.

Que la población rural se involucre en los procesos de concepción, planeación, ejecución, desarrollo y evaluación de los proyectos de desarrollo o la generación de innovaciones proporciona una herramienta valiosa para el AKIS/RD o SAI, ya que las posibilidades de éxito de cualquier iniciativa serán mayores a medida que los principales beneficiados estén involucrados en el proceso.

Manzo (1994) indicó que la eficiencia del modelo AKIS o SAI radica fundamentalmente en el tipo y grado de vínculos y entramados que ocurren entre los subsistemas de generación o creación, diseminación o extensión y los usuarios de la información. Por otro lado Havelock (1986) citado por Long y Villarreal (1993) y Long (2001), mencionan que los beneficios y los conflictos entre los actores proceden de los intercambios, las negociaciones y los vínculos establecidos en el AKIS/RD o SAI, en el cual no están exentas las confrontaciones entre dos o más actores o actrices, indicaron que a pesar de los convenios y arreglos siempre ocurrirán conflictos en el intercambio. Lo anterior es corroborado por Engel (1997); Long (2001); De Souza y Cheaz (2001); Echeverri (2002); Ramírez (2002), estos autores concluyen que en las relaciones entre los actores siempre traerá un acuerdo, una negociación o un conflicto.

Eponou (1993) realizó una tipología de los vínculos y mecanismos que se dan en el AKIS-RD o SAI, los define como: cualquier dispositivo o procedimiento estructural o administrativo usado para mejorar y complementar los procesos de generación y transferencia de tecnología. En cada actividad o vínculo entre los actores, se definen mecanismos que permiten monitorear, planificar, desarrollar, evaluar y retroalimentar todo el proceso.

Desde 2004 a 2009, se realizó en la Frailesca, Chiapas un estudio donde se analizaron las dinámicas que se establecieron entre algunos actores que intervienen en la producción agropecuaria, para los fines de este documento solamente se muestra un extracto de los arreglos que los actores promotores y los actores receptores han realizado para entablar una comunicación y los vínculos necesarios para lograrla en el cultivo de maíz de temporal. Se utilizó como herramienta metodológica el AKIS-RD o SAI, comparado con los enfoques lineales de transferencia de tecnología para promover la innovación, término ampliamente descrito conceptualmente para la descripción de los procesos no tradicionales de transferencia de tecnología por Manrrubio et al. (2007); Ferreli Annis et al. (2008); Aguilar et al. (2010); Deschamps y Escamilla (2010).

La Frailesca, Chiapas, consta de cinco municipios de los cuales, tres son los principales productores de granos básicos y ganadería de doble propósito. El estudio se realizó en cinco despachos acreditados como agentes PROCREA que ofertan créditos de avío y refaccionario a grupos organizados de productores y productoras en el cultivo de maíz y ganado de doble propósito. El marco de muestreo fueron 194 productores, para ello se usó la fórmula sugerida por Snedecor y Cochran (1967), los individuos son seleccionados al azar con reemplazo, se estudió a 52 organizaciones, además de lo anterior, algunas herramientas etnográficas como: la entrevista, el sondeo y la encuesta fueron usadas para lograr los resultados mostrados.

 

Dinámicas de organización entre los actores y actrices, promotores(as) y receptores(as) en la Frailesca, Chiapas.

En la Figura 2, se pueden observar en forma esquemática las dinámicas entre los actores privados, así como el entramado organizacional que los productores realizan para acceder a créditos. Bajo esta organización de actores y actrices, promotores(as) y receptores(as), se distingue un actor o actriz que centraliza y coordina las actividades en torno a los proveedores de insumos y de servicios, contrata los servicios de asistencia técnica y canaliza los recursos crediticios a través de la banca comercial. Este es quien deriva las acciones de otros actores que apoyan al despacho o agente parafinanciero, así como la asistencia técnica hacia los productores. Los despachos realizan un exhaustivo trabajo de investigación, por un lado para asegurar una cartera de clientes seguros y poder afianzarse como agentes parafinancieros ante las instancias que los acreditaron y por otro lado de asegurarse a quien están acreditando.

En esta organización tanto los actores y actrices, promotores(as) y receptores(as) utilizan recursos fiscales, recursos de los proveedores de insumos y recursos de los productores. Como resultado de lo anterior se realiza una mezcla de recursos, donde la parte principal de la inversión además del riesgo lo pone el productor, ya que él paga todo el proceso. La dinámica de flujos entre los actores que promueven se da de la siguiente manera:

El FIRA establece y autoriza un programa de créditos PROCREA entre sus agentes distribuidos por todo el territorio nacional.

El despacho PROCREA local, recibe el techo financiero para elaborar su programa de créditos locales y convoca (2A) a los proveedores de servicios e insumos (distribuidores de agroquímicos, venta de fertilizantes, aseguradoras agropecuarias, distribuidores de semillas, etc.) para colaborar en el programa de los fideicomisos del maíz.

El despacho PROCREA subcontrata el servicio de asistencia técnica a su propia filial.

La oficina de asistencia técnica promueve el programa de producción de maíz, entre los productores los cuales tienen como requisito el estar organizados.

Las organizaciones de productores se enlistan y envían listados al despacho PROCREA, al mismo tiempo que otorgan la cesión de derechos del PROCAMPO (5A) como garantía del crédito solicitado.

Con el programa definitivo, el PROCREA solicita a la banca comercial la ministración de los créditos globales, quien a su vez lo solicita al FIRA.

Autorizado el programa y ministradas la partes solicitadas al banco comercial por el PROCREA, el despacho otorga vales para que los agroquímicos y fertilizantes y en su caso semillas sean canjeados en las tiendas que participan en el programa de maíz. También otorgan dinero para realizar algunas prácticas de preparación del terreno y siembra.

Cuando el cultivo llega a la cosecha, los productores venden a la MASECA su producción a un precio pactado al inicio del ciclo.

La MASECA funge como retenedor del crédito y es quien paga al despacho PROCREA y en su caso a los actores que aún se les debe (entre ellos el banco comercial).

En la cuota que los productores pagan, se incluye la parte correspondiente al pago de la asistencia técnica que de acuerdo a la normativa establecida por el FIRA, los productores se ven beneficiados con 80% del costo total de la asistencia técnica el cual es absorbido por el FIRA, en tanto que ellos pagan 20% restante de este servicio durante el primer año.

Producto de esta organización y dinámicas para desarrollar a productores de maíz, 86.3% de los productores indicaron que este esquema de asistencia técnica de los despachos PROCREA es mejor que el que recibían hace cinco años por la SAGARPA. Los grupos fueron formados por amigos muy cercanos y familiares, lo cual funciona como una filosofía de éxito para los actores promotores, ya que los miembros de cada grupo son muy cuidadosos en la selección de sus integrantes para no tener problemas con la cartera vencida por aceptar miembros con historial crediticio negativo.

Los productores evaluaron la calidad del servicio de asistencia técnica, 65% indicó, que se debe a que el técnico estuvo pendiente en todo el proceso productivo, 21.3% manifestó que recibieron buenas asesorías y con la oportunidad que las requerían, al respecto López-Báez et al. (1999) indicaban mediante el programa de los granos del sur, que un factor de éxito para lograr la innovación de tecnologías sería que la asistencia técnica fuera oportuna y acorde en las etapas del proceso productivo.

El 46% de los productores indicaron que la asistencia técnica fue mejor debido a que recibieron la visita de 1 a 3 veces por semana, este porcentaje de frecuencia de visitas no tiene comparación respecto a otros programas de asistencia técnica tradicional. El 44% recibió la visita de los técnicos de 1 a 2 veces por mes, esta frecuencia de visitas puede compararse con cualquier programa de asistencia técnica normal.

Como resultado de lo anterior 81.25% aceptó las innovaciones propuestas por los despachos PROCREA, los productores manifestaron haber incorporado algún componente a su sistema de producción. El 48.75% indicó haber cambiado su método de siembra, reduciendo la distancia entre matas y entre surcos. Por otro lado 30% incorporaron semillas mejoradas, 2.5% cambio su método de fertilización ya que aplicó fertilizantes foliares. La distancia entre surcos en promedio es de 80 cm, al igual que entre matas, y en cada mata se siembran de tres a cuatro semillas, para la siembra es muy común el uso del "espeque"; sin embargo, cada vez es más frecuente la renta de maquinaria agrícola para el surcado y siembra. Si bien estos cambios han modificado la actividad de los productores y con ello han obtenido incrementos en la producción de maíz, también es cierto que los actores y actrices y promotores(as) sólo se han preocupado por transferir una tecnología que beneficie a los productores, ello no significa que hayan realizado una capacitación para lograr un empoderamiento de los actores receptores.

El 50% de los productores indicaron que los créditos baratos fueron el principal beneficio que les dejó trabajar con los despachos PROCREA, ya que ofertan créditos de avío para la producción de maíz a una tasa de Certificados de La Tesorería del Gobierno de México (CETES), en un lapso de cinco a seis meses, razón suficiente para los productores para denominar como "baratos" en comparación con los créditos informales y con los ofertados por la banca comercial. Un 30% indicó que fueron los insumos y semillas baratas los principales beneficios que recibieron de los despachos, en tanto que 10% manifestó que obtienen mayor producción con los paquetes tecnológicos promovidos. Sólo 10% de la muestra no percibió algún beneficio.

En la siguiente figura se ejemplifica una abstracción de los elementos, los vínculos y mecanismos que se construyeron en esta dinámica de actores: las relaciones que se dan entre estos subsistemas o elementos son perfectamente coordinadas por el subsistema de generación de información, quien convoca, agrupa esfuerzos, promueve, gestiona supervisa y recupera los créditos otorgados. Sin embargo, ello no es impedimento para que los otros subsistemas tengan acuerdos y convenciones entre ellos. El papel que juega el subsistema de generación de información es fundamental, ya que es quien aglutina los esfuerzos de los actores que trabajan con él, discrimina o privilegia a los posibles proveedores de insumos, logra una relación ventajosa al realizar compras al mayoreo por parte de este subsistema.

De acuerdo con el modelo teórico propuesto solamente se alcanzan a distinguir dos elementos de los tres propuestos, dado que el primer subsistema de la generación o creación de la información, tiene inmerso al segundo subsistema dentro de su propio subsistema y esto puede tener lógica, ya que es una forma de controlar la correcta aplicación de un paquete o de una serie de tecnologías, además de disminuir costos. Sin embargo, es importante notar la inyección de recursos públicos a través de la banca de primer piso, en este caso el BM a través del FIRA, y aunque existen recursos por parte de los usuarios y de los proveedores de insumos estos no forman parte sustancial de la operatividad de los actores promotores. Cada actor crea sus vínculos, los cuales son propuestos en primera instancia por los promotores de la estrategia hacia los usuarios, dichos vínculos tienen una importancia y prioridad, las cuales en la figura son de diferente grosor, a mayor grosor mayor es el intercambio o flujo unidireccional y esta parece ser una constante entre los cinco despachos referidos como agentes PROCREA estudiados.

La relación que existe entre los subsistemas de generación y difusión es la de una relación contractual, donde el primero subcontrata dentro de su propia empresa al segundo para un fin determinado, por ello el segundo está subordinado al primero. En éste AKIS-RD o SAI el usuario se caracteriza por los vínculos funcionales que establece con el subsistema de generación de información, ya que recibe, paga y modifica el tipo, periodicidad de la asistencia técnica y modifica el quehacer del actor que los promueve. Por otro lado los vínculos que realiza con los proveedores de insumos y servicios son vínculos que él mismo forja y construye, sin que haya retroalimentación entre los dos. Miller (2006) indicó que para un efectivo sistema agropecuario de información con fines de transferir tecnología, se requiere además de tecnologías, mercados, capacitación, y una buena organización.

Los productores son quienes corren los mayores riesgos, pagan casi todo el proceso y son los que agregan valor al dinero que los despachos PROCREA reciben del FIRA. Con excepción de los apoyos que los productores reciben del Estado a través del PROCAMPO y de la parte proporcional que paga el FIRA en el concepto de la asistencia técnica, todos los riesgos los corre el productor, ya que se trabaja con el ciclo de temporal. Si bien este entramado organizacional cumple con algunos elementos esenciales que la génesis del SAI propone, también es cierto que faltan algunas actividades de capacitación y educación que posibiliten el empoderamiento de los actores sobre todo de los usuarios. Todo indica que sólo se trata de un proceso de reproducción del dinero entre el Estado, los despachos PROCREA y los productores.

Aunque los créditos que se otorgan a los productores son de fácil acceso para los productores con un historial limpio, también hay que destacar que los requisitos y garantías solicitadas por esta alternativa de financiamiento rural son accesibles para todo tipo de productores y es notorio que detrás de todo el proceso está el Estado. Por otro lado los promotores obtienen solamente la plusvalía del dinero inyectado por el Estado para hacerlos funcionar como agentes PROCREA, es conveniente y pertinente realizar un estudio por separado cuando los recursos públicos ya no estén presentes para ver la sostenibilidad del SAI como sistema de trabajo entre los actores de la Frailesca, Chiapas.

La propuesta para desarrollar un AKIS-RD o SAI regional.

En La Frailesca existen instituciones del sector público que realizan su actividad para promover un desarrollo agropecuario a los productores desde 1974, organizaciones de productores que tienen un devenir histórico desde los años 60's, instituciones financieras públicas y privadas que financian proyectos productivos y de comercialización desde hace 20 años. Además de lo anterior se tienen actores emergentes en el área de créditos como son las parafinancieras y los despachos o agentes PROCREA, despachos privados de asistencia técnica y servicios que ofertan sus estrategias en la región desde 1991.

Con la apertura comercial y la desaparición de empresas paraestatales de comercialización, surgieron a principios de los años 90's empresas comercializadoras y agroindustriales que pueden darle un valor agregado a los productos agropecuarios, existen instituciones de investigación y enseñanza que iniciaron sus actividades a mediados de los años 70's y que a la fecha han generado tecnologías y practicas mej oradas que apoyan la producción agropecuaria, las universidades con enfoque agronómico han graduado a dos generaciones por año de nuevos profesionales en el área agropecuaria en los últimos15 años.

¿Qué falta? al parecer todo marcha sobre ruedas; sin embargo, cada uno de los actores y actrices antes mencionados camina por su cuenta apegado a una normatividad interna que los limita, son ocasionales los encuentros entre una o más instituciones para compartir ideas, esfuerzos, recursos humanos, financieros y materiales en favor de la población rural. En el área de la Frailesca existieron esfuerzos coordinados por La Fundación Produce Chiapas, A. C. y otros actores para la producción de maíz en 1998; sin embargo, las relaciones entre los actores no prosperaron más allá de ese ciclo de cultivo, por ello proponemos el siguiente esquema de trabajo cuyo enfoque metodológico se basa en las sugerencias realizadas por Eponou, (1993) y para el contexto regional tiene buena aceptación. En esta propuesta se propone que las acciones deben estar propuestas, coordinadas, desarrolladas y evaluadas por instituciones del sector público y del sector privado.

1. Planeación: las instituciones que realizan generación de tecnología básica y aplicada tanto las de investigación, como las de enseñanza superior, públicas y privadas deben partir del diagnóstico comunitario que se realice para detectar los principales problemas productivos. Para ello se deben conjuntar los recursos humanos, materiales y financieros a fin de evitar la duplicidad, crear nuevos cuadros de investigadores y reforzar los vínculos y mecanismos de trabajo entre las instituciones que interaccionen, una propuesta más acabada, novedosa y que contiene este elemento se encuentra en López-Baéz et al. (2007) aunque su objetivo es la gestión de cuencas hidrográficas, es aplicable a cualquier esfuerzo de trabajo conjunto.

2. Actividades profesionales de colaboración: mediante la combinación del trabajo de expertos en la generación de tecnología y la extensión para realizar tareas especificas que mejoren la eficiencia y efectividad, así como del intercambio de información que permita una retroalimentación entre los participantes. Se sugieren visitas de campo, entrevistas y parcelas de demostración donde los esfuerzos sean conjuntados, además del trabajo de las instituciones o empresas privadas que ofrecen servicios o créditos.

3. Intercambio de recursos: producto de las etapas anteriores, es necesario el intercambio de recursos, donde las partes establecen sus convenios de trabajo, se determina el grado, tiempo y magnitud de los intercambios, sobre todo de los recursos financieros y los productos que se vayan a obtener con tales convenios.

4. La extensión del conocimiento y de la información: las oficinas públicas que aún realizan extensión como las secretarías de agricultura de los estados, así como las que generan tecnología deben trabajar en forma coordinada, los técnicos de las primeras sean capacitados por las segundas, de tal manera que las acciones de capacitación y educación se inicien con los primeros dos elementos de la propuesta de AKIS-RD o SAI. Para lograr lo anterior Cadena et al. (2009), proponen una estrategia multimedia donde la generación de publicaciones, reportes, videos, días de campo, reuniones de trabajo y seminarios sean las herramientas o mecanismos para capacitar e intercambiar la información entre quienes generan la información y los encargados de extenderla; sin embargo, para lograr que los productores se apropien de las tecnologías, se deben buscar alternativas de acción en las cuales sean los representantes de las organizaciones, los productores mismos o algún miembro de sus familia sean los capacitados para obtener un mejor entendimiento de la información transmitida.

5. La retroalimentación del AKIS-RD o SAI: la retroalimentación debe ser construida por vínculos y mecanismos de enlace y comunicación que mejoren las actividades tanto de los elementos que generan y formulan la información, como los que la extienden o difunden y los usuarios, de tal manera que cada subsistema que incluye el AKIS-RD o SAI se beneficie con el intercambio de experiencias. Para detectar lo anterior se deben realizar evaluaciones de las acciones, programas o apoyos transferidos o implementados, con los actores participantes.

6. Coordinación: esta es una etapa que en la mayoría de los programas de desarrollo no se lleva a cabo o surgen muchos conflictos entre los que intervienen en un programa, la propuesta es un actor que tenga presencia y ascendencia sobre los que están participando de tal manera que al realizar las evaluaciones no tengan un carácter subjetivo.

 

Conclusiones

Es claro que no todos los actores y actrices tanto públicos como privados deben estar incluidos en el AKIS-RD o SAI territorial, sin embargo, al menos se debe conformar con un representante público o privado en uno de los subsistemas propuestos para el sistema de información. La estrategia de los despachos PROCREA representa una opción clara de coordinación entre actores que ofertan servicios para los productores, los cuales ofrecen opciones de crédito, asistencia técnica, un precio y un canal de comercialización por anticipado. El esquema presentado sin ser novedoso si pugna por concientizar a los productores para que todos los servicios que reciben se paguen.

La reorganización y delimitación de las actividades entre los actores permite tener avistamientos de que existe un sistema agropecuario de Información, ya que cumple con los elementos indispensables para ello. Sin embargo, los elementos funcionan de manera imperfecta dado que no existe una verdadera retroalimentación entre estos, además de que los vínculos de intercambio que se construyen son realizados principalmente por los actores promotores.

El reacomodo de las actividades de los actores, las tareas compartidas entre lo público y lo privado, la organización para promover y recibir tecnología y servicios favorece una mayor participación de los grupos sociales y promueven el desarrollo tecnológico sin que esta sea considerada como innovación.

 

Literatura citada

Aguilar, A. J.; Reyes, A. C. y Rendón, M. R. 2010. Del extensionismo agrícola a las redes de innovación rural. Universidad Autónoma Chapingo (UACH). CIESTAAM, CYTED. Chapingo, Estado de México. 281 p.         [ Links ]

Alex, G. and Byerlee, D. 2000. Monitoring and evaluation for AKIS Projects; framework and options. The World Bank, rural development family. Agricultural knowledge and information system (AKIS). Washington, USA. 34 p.         [ Links ]

Byerlee, D. y Collinson, M. 1983. Planeación de tecnologías apropiadas para los agricultores: conceptos y procedimientos". 4ª impresión. CIMMYT, México. 71 p.         [ Links ]

Cadena, I. P. 2004. Actores, estrategias y dinámicas de organización en el agro de La Frailesca, Chiapas. Tesis Doctor en Ciencias. Colegio de Postgraduados en Ciencias Agrícolas. Programa de Estudios del Desarrollo Rural. Montecillo, Estado de México. 183 p.         [ Links ]

Cadena, I. P.; Morales; G. M.; Berdugo, R. J. G.; González, C. M. y Ayala, A. S. 2009. Estrategias de transferencia de tecnología, como herramientas del desarrollo rural. Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP). Centro de Investigación Regional Pacífico Sur. Campo Experimental Centro de Chiapas, Ocozocoautla de Espinosa, Chiapas, México. Libro técnico Núm. 2. 122 p.         [ Links ]

Chambers, R. 1993. Evaluación rural participativa. In: Hudson, N. and Cheatle, R. J. (Eds.). Working with farmers for better land husbandry. Intermediate Technology Publications. London. 87-95 pp.         [ Links ]

Chiapas, 2008. Agenda estadística Chiapas. Gobierno del Estado de Chiapas. Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP). Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. 623 p        [ Links ]

Deschamps, S. L. y Escamilla, C. G. 2010. Hacia la consolidación de un sistema mexicano de innovación agroalimentaria. IICA. México, D. F. 464 p.         [ Links ]

Echeverri, P. R. 2002. Nuevos temas para viejos problemas de la América Rural. Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA). 33 p        [ Links ]

Engel, G. H. 1997. La Organización social de la innovación. Royal Tropical Institute the Netherlands. Chile. 237pp.         [ Links ]

Eponou, T. 1993. Partners in agricultural technology: linking research and technology transfers to serve farmers. ISNAR. Research Report N° 1. The Hague: International Service for National Agricultural Research. The Netherlands. 85 p.         [ Links ]

Ferreli-Annys de; Flores, F.; Gil, L.; González, D.; Montero, N. y Moreno, R. 2008. El papel de la innovación tecnológica en la economía. Ministerio del poder popular para la educación superior. UNESR. Puerto Cabello-estado Carabobo, convenio alcaldía- Fiec. Puerto Cabello, Venezuela. 15 p.         [ Links ]

Food and Agriculture Organization (FAO). 2005. An analytical and comparative review of country studies on agricultural knowledge and information systems for rural development (AKIS-RD). Food and Agriculture Organization of the United Nations. Rome, Italy. 119 p.         [ Links ]

Kaimowitz, D.; Snyder, M. and Engel, P. 1990. A conceptual framework for studying the links between agricultural research and technology transfer in developing countries. In: Kaimowitz, D. (Ed.) Making the link: agricultural research and technology transfer in developing countries. Boulder, Colorado; Westview Press. http://www.fao.org/docrep/W5830E/w5830e05.htm.         [ Links ]

Kalaitzandonakes, N. 1999.The agricultural knowledge system: appropiate roles and interactions for the publics and private sectors. AgbioForum. Volume 2, N° 1. University of Missouri. USA. p 1-5.         [ Links ]

Kumar, K. 1993. An overview of rapid appraisal methods in developmenting settings. In : Kumar, K. (Ed.) Rapid Appraisal Methods, World Bank. Washington, D.C. 8-22 pp.         [ Links ]

Lionberger, H. F. 1986. Toward and idealized system model for generating and utilizating information in modernizing societies. In: Beal, G.; Dissanayake, W. and Konoshima, S. (Eds.). Knowledge generation, exchange and utilization. Boulder, Colorado; Westview Press.         [ Links ]

Long, N. 2001. Development sociology. Actor perspectives. Routledge. New York, USA. 294 p.         [ Links ]

Long, N. y Villarreal, M. 1993. Exploring developing interfaces from the transfer of knowledge to the transformations of meaning. In: beyond the Impasse. New Directions in Development Theory. New Jersey. Zed Books. 140-169 pp.         [ Links ]

López-Báez. W.; Villar-Sánchez, B.; López-Martínez, J. y Faustino_manco, J. 2007. El manejo de cuencas hidrográficas en el estado de Chiapas: un diagnóstico y propuesta de un modelo alternativo de gestión. Publicación Campo Experimental Centro de Chiapas, INIFAP. Ocozocoautla de Espinosa, Chiapas, México. Especial Núm. 3. 62 p.         [ Links ]

Manrrubio, M. R.; Reyes, A.C.; Aguilar, A. J.; Rendón, M. R.; García, M. J. G. y Espejel, G. A. 2007. Innovación: motor de la competitividad agroalimentaria; políticas y estrategias para que en México ocurra. Primera edición. Universidad Autónoma Chapingo (UACH). CIESTAAM/PIIAI. Chapingo Estado de México. 310 p.         [ Links ]

Manzo, R. F. 1994. The role of education and technological change in rural development. Ph D. Thesis. North Caroline State University. USA.         [ Links ]

Miller, D. 2006. Building a new agricultural research and extension system In Afghanistan: initial thoughts. USAID/Afghanistan. 8 p.         [ Links ]

Ramírez, R. 2002. Vinculación campesino- agencia de desarrollo. In: seminario de promoción y combate a la pobreza rural. Colegio de Postgraduados en Ciencias Agrícolas. Montecillo, Estado de México. (Mimeografiado).         [ Links ]

Röling, N. 1988. Extension science; information systems in agricultural development. Cambridge University Press. Reprinted 1990. Great Britain. 233 p.         [ Links ]

Röling, N. 1990. The agricultural research-technology transfer interface: a knowledge system perspective: Kaimowitz, D. 1990. Making the link: agriculture research and technology transfer in developing countries. ISNAR. West View Press. USA. 1- 42 pp.         [ Links ]

Snedecor, W. G. y Cochran, G. W 1967. Métodos estadísticos. Décima impresión, 1984. CECSA. México, D. F. 625-630 pp.         [ Links ]

Souza, S. J. de y Cheaz, J. 2001. La Dimensión institucional del desarrollo sostenible; de las reglas de vulnerabilidad a las premisas de la sostenibilidad en el contexto de cambio de época. Servicio Internacional para la Investigación Agrícola Nacional (ISNAR). San José, Costa Rica. 106 p.         [ Links ]

World Bank (WB) - Food and Agriculture Organization (FAO). 2000. Agricultural knowledge and information systems for rural development (akis/rd). Strategic vision and guiding principles. Food and Agriculture Organization ofthe United Nations. The World Bank. Rome, Italy. 21 p.         [ Links ]

Creative Commons License Todo o conteúdo deste periódico, exceto onde está identificado, está licenciado sob uma Licença Creative Commons