Editorial

 

Diez años de promover una agenda alternativa de investigación y acción

 

Raúl Delgado Wise

 

En 2013, la Red Internacional de Migración y Desarrollo (RIMD), al igual que la revista Migración y Desarrollo, celebran el décimo aniversario. Si bien el camino recorrido no ha estado exento de escollos y dificultades, los resultados alcanzados a lo largo de esta primera etapa han sido altamente gratificantes. Muchos de los objetivos que inicialmente nos trazamos se han cumplido con creces, lo que no sólo renueva nuestro entusiasmo y compromiso, sino que nos plantea nuevos y cada vez más ambiciosos retos para los años por venir.

Al hacer un breve recuento de los primeros diez años de la RIMD, vemos con entusiasmo los alcances de nuestros aportes al pensamiento crítico en materia de migración y desarrollo. Frente a la postura dominante, que visualiza a las remesas como detonantes del desarrollo en los países de origen y a la gestión de las migraciones como una tentativa de regular los flujos migratorios bajo una limitada racionalidad de mercado (labor matching), a través de la RIMD hemos impulsado una mirada alterna, que en sentido metafórico denominamos perspectiva del Sur. Más que una antítesis de la perspectiva unilateral y sesgada impulsada por los gobiernos de los países receptores de migrantes y los organismos internacionales, se trata de una visión comprehensiva de la problemática, donde el desarrollo y los derechos humanos ocupan un sitio central.

La adopción de esta postura ha significado abrir el campo de visión desde donde se venía analizando la relación entre migración y desarrollo, trascendiendo las perspectivas ahistóricas dominantes y contextualizando el fenómeno en el marco de la globalización neoliberal. La profundización del desarrollo desigual se devela como una de las principales causas de fondo de la migración contemporánea y permite visualizarla como un desplazamiento esencialmente forzado, en contraste con el carácter «libre y voluntario» que le atribuye el pensamiento neoliberal.

Los derechos humanos figuran, en nuestra concepción, como un aspecto intrínseco e inseparable de la relación entre migración y desarrollo, cuyo abordaje abarca temas tan sensibles para la comunidad migrante como la explotación laboral, la exclusión y discriminación social, la inseguridad humana y la criminalización. Asimismo, lejos de invisibilizar, hemos reconocido e intentado situar, en su justa dimensión, las contribuciones de los migrantes a los países y sociedades de destino. En similar tenor, con la finalidad de construir una visión balanceada sobre las implicaciones de la migración para los países de origen, y sin desconocer los aportes de las remesas, consideramos necesario poner sobre la mesa de debate los costos humanos, sociales, económicos, políticos y culturales que la migración entraña. Todo ello nos ha abierto la puerta para desencadenar una importante y necesaria desmitificación de los supuestos que prevalecen en el campo de estudios, que han sido caldo de cultivo de las posturas xenófobas que permean la opinión pública y de las políticas públicas impulsadas por los principales países receptores de migrantes al amparo de la doctrina de seguridad nacional.

En relación con esto último hemos desplegado una importante iniciativa: la construcción de un Sistema de Información sobre Migración y Desarrollo (SIMDE) y la elaboración de un conjunto de indicadores estratégicos, sólidamente fundamentados, acerca de las causas de la migración y sus implicaciones para los países de origen, tránsito y destino, así como para los migrantes y sus familias. Esta iniciativa ha sido respaldada por un grupo interdisciplinario de especialistas y se apoya en un escrupuloso manejo de datos e información.

Nuestra apuesta ha sido al trabajo e investigación colectivos. Quienes integramos individual e institucionalmente la RIMD, dimos cuerpo e impulsamos una agenda de investigación abierta y comprometida socialmente. A través de ella hemos fomentado el debate e intercambio de ideas con diversas audiencias y en múltiples niveles, lo que nos ha permitido atraer a nuestras filas a algunos de los más destacados líderes del pensamiento crítico y progresista mundial, incluyendo a nuevas generaciones de académicos y representantes de la comunidad migrante. Entre las actividades y proyectos relevantes, encaminados en esa dirección, podemos mencionar los cuatro congresos internacionales organizados por la Red en Zacatecas, Cocoyoc, Heredia y Quito; el portal bilingüe de internet (www.migracionydesarrollo.org); la colección editorial «Desarrollo y Migración» que ha publicado más de 80 libros bajo el sello de Miguel Ángel Porrúa, y la revista Migración y Desarrollo, que con el presente registra 20 números publicados en español e inglés.

Aun cuando la RIMD se ha convertido en un referente en el campo de estudios sobre migración y desarrollo, en su concepción nunca la visualizamos como una agrupación o asociación exclusivamente de académicos. Desde un principio hemos caminado de la mano de organizaciones y redes de migrantes, así como movimientos sociales, tanto en los países de origen como de destino y a distintos niveles, que van desde el comunitario hasta organizaciones de corte nacional, regional y global. Muchas son las acciones y logros alcanzados en pro del estrechamiento de relaciones entre academia y sociedad civil. Entre ellas sobresale la activa participación de la RIMD como integrante del comité internacional del Foro Social Mundial de las Migraciones en sus tres últimas ediciones: Rivas-Vaciamadrid, Quito y Manila. Esta participación se enmarca en las alianzas estratégicas que hemos establecido con las principales redes de la sociedad civil vinculadas al fenómeno migratorio y que han hecho posible que nuestra Red figure como la única organización con orientación académica invitada a formar parte del grupo fundador de la Coalición Global sobre Migración.

Asociado a esto último, destaca también nuestro involucramiento en las actividades realizadas por la sociedad civil en el proceso del Foro Mundial de Migración y Desarrollo, desde su primera edición en 2007 y la participación en el foro paralelo de la Acción Global de los Pueblos sobre Migración Desarrollo y Derechos Humanos en sus diversas ediciones, incluyendo la organización del foro celebrado en 2010 en la Ciudad de México, que congregó a cerca de mil participantes procedentes de más de 80 países. Lo significativo de estas actividades es que apuntan a una doble línea de acción estratégica que nos planteamos desde nuestros inicios: contribuir al empoderamiento de las organizaciones y redes de migrantes e incidir en la formulación de políticas públicas a nivel local, nacional, regional y global. En esta última vertiente, hemos colaborado con diversos gobiernos progresistas de América Latina en la perspectiva de impulsar políticas de Estado en materia de migración, desarrollo y derechos humanos.

El fortalecimiento de nuestra organización ha sido vital para el despliegue de las actividades referidas. Para ello ha sido determinante el respaldo material y humano de la Unidad Académica en Estudios del Desarrollo de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAED-UAZ), que funge como sede permanente del secretariado de la Red. Aunque desde su nacimiento la RIMD se definió como una red, nuestros primeros pasos se dieron bajo el modus operandi de una asociación, y no fue sino con el transcurso del tiempo que nos percatamos de los alcances y potencialidades de lo que significaba el trabajo y la organización en red. En esta perspectiva, hemos iniciando una nueva etapa de reestructuración organizativa basada en: i) el establecimiento de nodos regionales, que posibiliten una mayor descentralización de actividades en respuesta a las especificidades de cada región; ii) la recomposición del consejo directivo de manera que garantice una mayor operatividad y representatividad regional, y iii) la integración de un comité científico integrado por reconocidos expertos a nivel internacional.

Bajo este nuevo andamiaje institucional, no cejaremos en nuestros esfuerzos por confeccionar y desarrollar una agenda de investigación vanguardista en el campo, que contemple al menos los siguientes nudos temáticos:

• Integración regional, desarrollo y migración.

• Migración calificada y restructuración de los sistemas de innovación.

• Cambio climático y migración.

• Vínculos entre migración interna, migración internacional y precariedad laboral.

• Indicadores sobre migración, desarrollo y derechos humanos.

• Desafíos del retorno ante la crisis.

• Organización y participación política de la comunidad migrante.

• Gobernanza democrática de las migraciones centrada en los derechos humanos.

A la par del avance en estas líneas, es indispensable que continuemos creciendo y convenciendo, expandiéndonos territorialmente, integrando a nuestras filas a un número cada vez mayor de personas e instituciones afines y fortaleciendo nuestras alianzas estratégicas con organizaciones y movimientos de la sociedad civil, así como con gobiernos progresistas comprometidos socialmente. Sólo así podremos afrontar los retos y desafíos que tenemos por delante para hacer realidad nuestro cometido de contribuir a construir un mundo mejor, donde el desarrollo humano sustentable sea una realidad y la migración se convierta en una opción libre, voluntaria y segura.