Introducción

El tinamú canelo (Crypturellus cinnamomeus) es un ave de afinidad neotropical, pertenece al orden Tinamiformes, familia Tinamidae, presenta una longitud entre 25.5-29.0 cm y su peso oscila entre 350 y 500 g (^{Howell y Webb 1995}). Para la NOM-059-SEMARNAT-2010 (^{SEMARNAT 2010}) es una especie bajo protección especial (Pr), y para la Unión Internacional de Conservación de la Naturaleza (^{UICN 2017}) es considerada en preocupación menor (Least Concern). Los tipos de vegetación donde se distribuye en México son los bosques tropical caducifolio, tropical subcaducifolio o subperennifolio y tropical perennifolio, en una cota altitudinal desde el nivel del mar hasta los 1800 m (^{Stiles y Skutch 1990}, ^{Howell y Webb 1995}). Generalmente se alimenta de frutos, semillas e insectos que recoge del suelo del bosque (^{González-Salazar et al. 2014}), es de hábitos solitarios y elusivo a la presencia humana.

De las cinco especies de Tinamiformes registradas en México, el tinamú canelo presenta la distribución más septentrional (^{Gomes et al. 2014}). Se ha registrado desde el noroeste y noreste del país hacia el sur a través de Belice, Guatemala, excepto en una franja central; al sur, en Centroamérica, se distribuye del lado del Pacífico, formando una franja en El Salvador, Honduras, Nicaragua, y en Costa Rica llega el límite de su distribución solamente en la parte noroeste (^{Gomes et al. 2014}). En México se distribuye en la vertiente del Golfo de México en los estados de Nuevo León (^{Borré et al. 2011}), Tamaulipas, San Luis Potosí, Guanajuato, Puebla, Veracruz, Oaxaca, Tabasco, Chiapas, Campeche, Yucatán y Quintana Roo (^{Peterson y Chalif 1998}). Asimismo, de acuerdo con este último autor hay una población alopátrida de C. cinnamomeus formando una angosta franja costera en el Pacífico respecto de las poblaciones del este de México, con distribución desde Sinaloa, Nayarit, Jalisco, Colima, Michoacán y hasta el noroeste de Guerrero.

Para Guerrero, esta especie es la única del Orden de los Tinamiformes que se distribuye en el estado, su presencia en la entidad se reconoció desde el siglo pasado, con base en especímenes procedentes de los alrededores de Acapulco y áreas de baja altitud en la Sierra de Atoyac (^{Navarro-Sigüenza 1998}). Durante la expedición de ^{Leopold y Hernández (1944}, ²⁰⁰⁰) se obtuvieron ejemplares y registros auditivos de tinamú canelo de la localidad del Ciruelar, municipio de Atoyac de Álvarez. Asimismo, ^{Navarro-Sigüenza (1992}, ¹⁹⁹⁸) en su análisis sobre la distribución altitudinal de las aves en la Sierra Madre del Sur en Guerrero, y la distribución geográfica y ecológica de la avifauna en Guerrero confirmó la presencia del tinamú canelo en la localidad de Río Santiago, municipio de Atoyac de Álvarez, a una altitud de 600 msnm.

Existen 14 registros de la especie realizados por observadores de aves para Guerrero en Playa Troncón, municipio de Zihuatanejo; Nueva Delhi, Retrocesos, La Pintada, municipio de Atoyac; y El Tejoruco, municipio de Acapulco. De igual manera, se presenta un registro en la localidad de Filo de Caballos, municipio de Leonardo Bravo (^{eBird 2017}, ^{GBIF 2017}).

Las poblaciones del tinamú canelo en México presentan controversias taxonómicas, ya que mientras algunas autoridades reconocen una sola especie (^{American Ornithological Society 2017}); ^{Howell y Webb (1995)}, ^{Navarro-Sigüenza (1998}) y ^{Gomes et al. (2014)}, sugieren que con base en el aislamiento geográfico y las diferencias morfológicas que presentan los individuos de las poblaciones de la vertiente del Pacífico, respecto aquellos de las poblaciones del Golfo de México (e.g., ausencia de bandas dorsales en el plumaje del macho adulto), que son dos especies, denominando a las poblaciones del oeste como C. occidentalis, o bajo el sinónimo de C. cinnamomeus subsp. occidentalis, retomando la propuesta de Salvatori (1895) (^{GBIF 2017}), quien describió a las poblaciones del Pacífico, con localidad tipo en San Blas, Nayarit, México. Es posible que de acuerdo con definiciones alternativas al concepto biológico de especie (^{de Queiroz 2005}), como la definición filogenético-evolutiva (^{Navarro y Peterson 2004}) que considera al aislamiento geográfico como un atributo específico, sean reconocidas como dos especies distintas. Asimismo, documentar nuevos registros de la especie en la vertiente del Pacífico permitirá delimitar con certeza su área de distribución y contribuirá a mejorar el conocimiento ecológico de la especie.

En esta nota presentamos dos registros fotográficos y dos videograbaciones del tinamú canelo (Crypturellus cinnamomeus) tomados con cámaras trampa Long Range IR E2 1224 con sensor de movimientos infrarrojo, mismos que están depositados en el canal de Asociación Civil Bosque Nuboso, A.C. (https://youtu.be/HBYinITt3ms, https://youtu.be/hB_CKlviWCg), así como registros auditivos de la especie, realizados por el primer autor, en una localidad distinta de aquella donde se documentaron los registros fotográficos. Los registros fotográficos fueron incidentales, ya que se evaluaba la presencia y uso de hábitat de carnívoros medianos y grandes en el ejido de Azinyahualco, municipio de Chilpancingo. Las cámaras trampa fueron distribuidas en diferentes tipos de vegetación del área de conservación voluntaria, esta última establecida por los ejidatarios. La identificación taxonómica, con base en las fotografías y videos del ave, se realizó por medio de guías de campo para las aves de México (^{Howell y Webb 1995}, ^{Peterson y Chalif 1998}). El nombre científico de la especie se corroboró en el Checklist ^{AOU (2016)} y, el nombre común de las aves de México (^{Escalante et al. 2014}).

Registros

Los registros fotográficos y videos de los individuos de tinamú canelo los documentamos aproximadamente a 1.73 km al suroeste de la localidad de Azinyahualco, municipio de Chilpancingo, Guerrero. Los registros se realizaron el 1 de enero de 2017; 10:05 h, y el 19 de enero de 2017; 11:16 h. En ambos registros se observa a un individuo de tinamú canelo forrajeando en el suelo (17°23’39.24” N, 99°34’12.12” O, WGS84, 1,507 msnm, Figura 1), del lado oeste de la vertiente del río Azinyahualco tributario del río Papagayo (Figura 2). El tipo de vegetación donde se registraron los individuos es bosque de pino encino, con especies dominantes: Pinus oocarpa, P. maximinoi, Quercus planipocula, Q. scytophylla y Q. castanea.

Figura 1 Individuo de tinamú canelo (Crypturellus cinnamomeus) fotografiado mediante una cámara trampa, en la localidad de Azinyahualco, municipio de Chilpancingo, Guerrero. 

Figura 2 Distribución del tinamú canelo (Crypturellus cinnamomeus) en Guerrero; el área de distribución potencial (^{Navarro-Sigüenza y Peterson 2007}) en color café. Los registros tomados de ^{Global Biodiversity Information Facility (2017)} en círculos color verde, los registros de ^{eBird (2017)} en círculos color azul y los registros de Azinyahualco y Acahuizotla representados con una estrella. 

Asimismo, hemos logrado registros auditivos del tinamú canelo en la localidad de Acahuizotla, Guerrero (17°21’31.71” N, 99°27’45.28” O, 796 msnm), durante los meses de septiembre y octubre del 2016, en horarios vespertinos, en bosque tropical caducifolio cuya composición florística fue obtenida en campo, con especies como: Bursera bipinnata, B. tecomaca, Pseudobombax ellipticum, Actinocheita filicosa, Ceiba aesculifolia, Neobuxbaumia multiareolata, Euphorbia tanquahuete, Haematoxylum brasiletto, Guazuma ulmifolia, Pithecellobium dulce, Gliricidia sepium y Plumeria rubra, entre otras especies, así como elementos de bosque tropical subcaducifolio: Astronium graveolens, B. simaruba, Enterolobium cyclocarpum, Hymenaea courbaril, Peltogyne mexicana y Tabebuia rosea.

Discusión

Los inventarios faunísticos tradicionalmente se elaboraban a través del muestro directo en campo, con la recolecta de especímenes u otras evidencias y aplicando las técnicas curatoriales clásicas para la preservación a largo plazo de las muestras, optimizando el trabajo de campo. Actualmente con el desarrollo tecnológico de software y de instrumentos eficaces de investigación en campo, como las cámaras trampa de activado automático para la toma de fotografías o videos al paso de los animales (^{Rovero et al. 2013}, ^{Gallina 2017}), y la toma directa de información como la grabación de voces, asimismo, la elaboración de técnicas sofisticadas para la obtención de muestras, por ejemplo, para estudios genéticos y moleculares, y el modelado de áreas de distribución a través de sistemas de información geográfica (^{Soberón et al. 2017}), han facilitado extraordinariamente el trabajo en campo. En ese sentido la tecnología se ha convertido en una herramienta indispensable para el estudio y reconocimiento de la biodiversidad (^{Rovero et al. 2013}). Los registros del tinamú canelo en Azinyahualco mismos que fueron obtenidos mediante el uso de cámaras trampa y Acahuizotla aquí presentados son relevantes porque apoyan la ampliación del área de distribución y constituyen los registros a mayor altitud para la especie en Guerrero. Información que permite una mejor aproximación al conocimiento ecológico de la especie. Respecto del registro del tinamú canelo logrado en la localidad de Filo de Caballos, municipio de Leonardo Bravo (^{eBird 2017}), consideramos que éste es discutible ya que se localiza en un área de bosque de pino-encino, a una altitud de 2,485 msnm donde las condiciones ecológicas son inapropiadas para la especie. Asimismo, es recomendable realizar estudios detallados sobre esta especie para obtener atributos morfológicos y muestras de plumas o sangre que ayudarán a dilucidar su problema taxonómico.