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Agricultura, sociedad y desarrollo

versión impresa ISSN 1870-5472

agric. soc. desarro vol.8 no.1 Texcoco ene./abr. 2011

 

La gestión de las presidentas municipales rurales de Tlaxcala, México, de 1992 a 2010, desde la percepción de las protagonistas

 

Administrations of rural municipal female presidents in Tlaxcala, México, 1992 to 2010, from the protagonists' perception

 

María Eugenia Chávez-Arellano1, Verónica Vázquez-García2

 

1 Programa Universitario de Investigación en Ciencias Sociales y Humanidades. Universidad Autónoma Chapingo. (marigen_98@yahoo.com)

2 Estudios para el Desarrollo Rural. Campus Montecillo. Colegio de Postgraduados (verovazgar@yahoo.com.mx)

 

Resumen

La representación de las mujeres en las alcaldías apenas alcanza en México 3%. El estado de Tlaxcala destaca porque el porcentaje de mujeres que han presidido presidencias municipales rebasa el promedio nacional, alcanzando 10% en 2005. En este documento se presenta parte de los resultados obtenidos en una investigación que se realizó en Tlaxcala sobre la presencia de las mujeres rurales en puestos de representación municipal. El periodo abarcado fue de 1992 a 2010, y nos concentramos en 14 mujeres que ocuparon la presidencia de las alcaldías en municipios de menos de 20 000 habitantes. El objetivo fundamental fue rescatar las experiencias de las presidentas y expresidentas en este período para conocer de viva voz la forma en que se incorporaron a la vida política y las estrategias por ellas instrumentadas durante sus gestiones. Como parte de lo resultados encontramos que las presidentas en cuestión, a pesar de encontrarse en una situación de poder legítimo, se enfrentan a situaciones en las cuales la desigualdad y la dominación de género aparecen como parte de un discurso incorporado a lo largo de la vida y ampliamente compartido tanto por hombres como por mujeres y expresado en las prácticas y estrategias que, pese a todo, les permiten sacar su gestión de manera exitosa.

Palabras clave: Cultura, mujeres rurales, municipio, política.

 

Abstract

Representation of women in municipal governments barely reaches 3% in México. The state of Tlaxcala stands out because the percentage of women that have presided in municipalities exceeds the national average, reaching 10% in 2005. In this document, part of the results obtained in a study carried out in Tlaxcala about the presence of rural women in municipal representation positions is presented. The period covered was from 1992 to 2010, and we focused on 14 women who occupied the municipal presidencies in municipalities of less than 20 000 inhabitants. The fundamental objective was to rescue the experiences of municipal presidents and former presidents during this period, to get to know directly how they became involved in political life and the strategies implemented by them during their administrations. As part of the results, we found that the presidents in question, in spite of finding themselves in situations of legitimate power, face situations in which inequality and gender domination appear as part of a discourse incorporated throughout life and widely shared by both men and women, and expressed in the practices and strategies that allow them to manage their administrations successfully, in spite of everything.

Key words: Culture, rural women, municipality, politics.

 

Introducción

La participación política de las mujeres en general y específicamente su participación en puestos de representación como las presidencias municipales, es un tema que poco a poco se hace presente en los análisis académicos, pese a que ellas apenas alcanzan alrededor de 3% (Massolo, 2003; Barrera y Aguirre, 2003; Sam, 2000, 2002, 2003).

En el medio rural la participación de las mujeres como presidentas municipales adquiere especial importancia si consideramos que en muchos estados de la república el sistema de cargos rige una buena parte de la vida política de las comunidades. Este sistema, además, es portador de una serie de tradiciones que en muchos casos excluye a las mujeres o sólo permite su participación en actividades específicas (Barrera, 2006).

La participación de las mujeres o la ausencia de éstas en política merece una atención especial, toda vez que responde a su condición de género subordinado, la cual le ha relegado históricamente a permanecer en el ámbito de lo privado realizando labores socialmente asignadas a su condición de mujeres y negándoles la posibilidad de expresarse públicamente.

Barrera y Aguirre (2003) señalan que aunque ha sido "muy modesto" el incremento de la presencia de las mujeres en las presidencias municipales desde que, en 1923, se eligió a la primera en Guerrero, se ha sostenido una tendencia positiva de participación, especialmente desde la década de los ochenta.

Específicamente en el estado de Tlaxcala, que es donde se realizó este estudio, Sam (2002) ha dado cuenta de la importancia que representa en el estado la incorporación de las mujeres a diversos cargos de elección popular. Esta autora hace énfasis en lo particularmente difícil que resulta para las mujeres acceder a cargos en los ayuntamiento; fundamentalmente debido a la "preeminencia de prácticas tradicionales, caciquiles y (...) una visión androcéntrica" (Sam, 2002), así como por algunas prácticas que se basan en los usos y costumbres que tienden también a limitar su participación. No obstante, el porcentaje de presidentas municipales en este estado ha sido mayor al promedio nacional; pues mientras Barrera (2006) y Massolo (2003) señalan que sólo 3.8% del total nacional son mujeres, en 2005 en Tlaxcala, seis de 60 ayuntamientos (10%) eran presididos por ellas.

En el presente documento se destacan básicamente dos cuestiones: las experiencias personales de las protagonistas respecto a cómo vivieron su administración y conjugaron su vida personal con la vida pública que les impuso la presidencia, así como las particularidades de las gestiones de las 14 mujeres que fueron entrevistadas durante 2008 y que gobernaron 11 municipios desde 1992 hasta el trienio 2008-2010.

Nos interesa dar cuenta de las experiencias que cada una de las mujeres expresó como importantes para describir su gestión, en tanto que consideramos que las experiencias significativas que tienen lugar en un contexto de sentido aparecen articuladas a la vida personal de las protagonistas y son expresadas en razón de la importancia que cada una de ellas le otorga a lo que le parece significativo (Schutz, 1974). En este sentido, partimos de que lo que la gente expresa como percepción de su realidad es una interpretación de la realidad que se le presenta como dada, establecida. La existencia de realidades distintas como producto de construcciones sociales e históricas particulares permite a cada sujeto interpretar, desde sus vivencias y experiencias, aquello que constituye su mundo. Partimos de la hipótesis de que las mujeres que participan de la vida política de sus comunidades deben enfrentarse a diversas acciones de exclusión y rechazo mediante la puesta en práctica, tanto en el ámbito familiar como en el ambiente público, de estrategias personales que les permiten accionar en el ambiente político y demostrar su eficiencia.

 

Metodología

La primera actividad que realizamos en 2008, fue la identificación del número de mujeres que habían sido presidentas municipales desde 1992 a entonces, con el objeto de tener un panorama amplio sobre la incorporación de mujeres en este nivel de administración pública antes y después de la alternancia política estatal y nacional. A nivel estatal, en 1999 llega un gobernador de un partido diferente al PRI por primera vez, y en 2000 se da el acceso del PAN a la presidencia de la república.

La documentación proporcionada por la Biblioteca del Congreso del Estado de Tlaxcala nos permitió identificar 20 presidentas municipales en el periodo señalado. Dado que nuestro interés era centrarnos en comunidades pequeñas, decidimos ocuparnos de aquellos municipios con menos de 20 000 habitantes, básicamente por tres razones: a) existen trabajos que indican que la mayoría de los municipios gobernados por mujeres son de baja población; por ejemplo, en 1995, 62% de los municipios gobernados por mujeres tenían menos de 20 000 habitantes; en 1998, 51%; en 2000, 74% (Fernández, 2003), b) la elección de estos municipios permitía establecer un punto de comparación entre ellos debido a su homogeneidad poblacional; c) la relación que se establece en poblaciones pequeñas resulta más cercana entre la población, lo cual implica un conocimiento más directo de la vida de quienes intentan dirigir la vida política local proporcionando elementos de aceptación o rechazo muchas veces basados en la reputación de la persona. A partir de esta selección, nos quedamos con 15 mujeres de 11 municipios.

Una vez identificadas las mujeres y sus municipios, elaboramos una guía de entrevista estructurada con el fin de obtener información sobre algunos aspectos biográficos de las presidentas y expresidentas, así como sus experiencias políticas previas al ejercicio de sus gestiones, durante sus gestiones y su vida política posterior.

Aunque inicialmente documentamos 15 presidentas, sólo fue posible entrevistar a 14 de ellas debido a problemas de disposición y tiempo por parte de una de ellas. Todas las entrevistas fueron grabadas con autorización de las involucradas, transcritas completas y trabajadas de acuerdo con los temas incluidos en la guía de entrevista. En este documento sólo nos ocupamos de lo referente a sus experiencias durantes sus gestiones, de manera que los testimonios que aparecen aquí corresponden a esas partes de las entrevistas.

 

Quiénes son las presidentas (y sus municipios)

El Estado de Tlaxcala, de acuerdo con los datos de INEGI, se localiza geográficamente en la región centro-oriental de la República Mexicana entre los 97°37'07" y los 98°42'51" de longitud oeste y los 19°05'43" y los 19°44'07" de latitud norte, y está situado en las tierras altas del eje neovolcánico, sobre la Meseta del Anáhuac. Es el estado más pequeño del país, ya que su superficie territorial es 0.2% del territorio nacional, con 4060.93 km2.

De los 60 municipios en que se divide el estado, 10 presentan un grado muy bajo de marginación, 29 tienen un grado bajo, 17 un grado medio y tan sólo 4 presentan un grado alto.

Específicamente, los municipios que han gobernado las alcaldesas de nuestro estudio varían tanto en extensión como en condición socioeconómica. Altzayanca y Terrenate son los municipios en donde la mayoría de la población se dedica al sector primario y están clasificados con un índice de alta marginalidad. Acuamanala, San Lorenzo Axocomanitla, Tzompantepec y Xalostoc son municipios de baja marginalidad, mientras que Apetatitlán y Totolac, cercanos a la capital del Estado y donde predominan las actividades del sector terciario, son de muy baja marginalidad. El resto: Hueyotlipan, Muñoz de domingo Arenas y Sanctorum, aunque presentan un ligero mayor porcentaje de población dedicada al sector primario no podría decirse que hay una sector predominante, y son considerados de marginalidad media.

Según Sam (2003) en 1950 fueron elegidas las primeras mujeres que tuvieron cargos políticos en Tlaxcala; sin embargo éstas siempre han estado "subrepresentadas" en cargos de importancia. En los períodos estudiados por nosotras, la representación de mujeres en gobiernos municipales ha variado, destacando el trienio 2005-2007 durante el cual hubo seis presidentas (10% del total) y el trienio actual 2008-2010 en que hay cinco presidentas (8.3%).

En 12 de los 14 casos, era la primera vez que una mujer ocupaba el cargo en su municipio. Apetatitlán y el municipio de Terrenate, habían tenido con anterioridad una presidenta. Nueve de ellas llegaron a la presidencia por el PRI, dos por el PT, dos por el PRD y una por el PAN.

En relación con su estado civil; cinco son casadas, una vive en unión libre, siete son solteras y una separada. Las edades fluctúan entre 28 y 57 años al momento de asumir la presidencia, dando un promedio de edad de 40 años. De las cuatro más jóvenes (entre 28 y 32 años) tres llegan al inicio de su gestión solteras y una casada, quien al final tiene su primer hijo. Cuatro del total no tienen hijos.

Su nivel de instrucción escolar es, en general, superior al promedio de sus comunidades, de tal manera que tenemos una con primaria, dos con bachillerato, una con estudios comerciales, dos maestras y ocho con estudios de licenciatura, cinco de las cuales tienen estudios relacionados con el magisterio.

Sólo tres de ellas no tienen antecedentes familiares en política, las demás han tenido padres, tíos o hermanos que han participado en diversos cargos de sus comunidades, que pueden ir desde presidentes de comunidad, regidores, diputados o presidentes municipales también; en cuyos casos también se identificó una militancia activa en partidos políticos.

Las del primer periodo (Leonor, Teresa y Gabriela) fueron designadas por el partido (PRI) o un personaje importante del mismo como candidatas y, a partir del periodo que se inicia en 1995, todas las representantes por el PRI se han visto sujetas a un proceso de elección interna del partido para decidir la candidatura. Las candidatas por otros partidos, como el PT o el PAN han seguido procesos varios en las contiendas internas.

 

¿En qué se diferencia una administración encabezada por una mujer?

Algunos estudios realizados sobre presidencias municipales encabezadas por mujeres señalan tres elementos a destacar: 1) una mayor preocupación de las mujeres por eficientizar el uso de recursos; 2) mayor honestidad; 3) un trato más directo con la gente, e incluso una política de puertas abiertas. Resulta difícil encontrar un punto de convergencia que defina una administración femenina. De hecho, creemos que el ejercicio real de la alcaldía está en mucho determinado por el tipo de relación que la presidenta tenga con su partido y con los militantes del mismo en su región; con la relación que logra establecer con el gobierno estatal, con la gente de su comunidad, con su particular perspectiva sobre el ejercicio del poder, así como con su condición de género, aunque esto no sea en todos los casos una condición que les haga sentir en desventaja.

De acuerdo con lo relatado por las presidentas, las experiencias son muy variadas y diverso el desempeño; sin embargo es posible destacar una serie de elementos comunes para estas 14 mujeres: excepto una de ellas, la mayoría tienen estudios medios o universitarios que las hacen destacar por encima del promedio educacional de sus comunidades (7.17, destacando Apetatitlan y Totolac con un nivel de instrucción de 9.10 y 9.54 años respectivamente); la mayoría proviene de familias con una tradición importante de participación política en diversos niveles; casi todas tenían un arraigo importante en su comunidad, y las que no, habían logrado una presencia importante mediante su participación en actividades políticas o de desarrollo social previas (Leonor, Francisca, Porfiria, Juana) o por ser parte de una familia conocida en la localidad (Teresa, Gabriela, Marisa); todas ellas pueden ser consideradas mujeres con cierta trayectoria laboral previa exitosa ya sea como empresarias (Leonor, Marisa), como ejecutivas del sector privado (Gabriela) o como directoras de escuelas o dirigentes sindicales (Emma Yolanda, Beatriz, Socorro o Clementina).

Aunque la mayoría de estas presidentas han gobernado por el PRI, podemos identificar un cambio importante en la forma de elegir a las candidatas. Este cambio se da a partir del periodo que corresponde al de los gobiernos de Leonor, Teresa y Gabriela que tuvieron lugar de 1992 a 1994. Este periodo se caracteriza porque las candidatas a presidentas municipales no se vieron sometidas a un proceso de elección interna por parte del partido, como sucedió con otras candidatas en periodos posteriores. La candidatura de cada una de ellas fue decisión de "la cúpula del partido", lo cual implicó que otros interesados en la misma candidatura se sometieran a la designación oficial. Los dos siguientes periodos también corresponden a gobiernos femeninos priístas, pero las candidatas contienden ya al interior de su partido para obtener la candidatura. Es a partir de 2005 que comienzan a tener presencia alcaldesas de partidos diferentes, entre ellos PRD, PT y PAN.

En la siguiente parte exponemos por periodos (trienios) algunas de las experiencias de ser presidentas expresadas por ellas mismas.

 

Las viejas prácticas. 1992-1994

Leonor y Teresa gobernaron los dos municipios que, en nuestra muestra, son considerados los de más alta marginación. Gabriela gobernó un municipio cercano a la ciudad de Apizaco con bajo nivel de marginación. En los tres casos fueron presidentas por el PRI y su candidatura a la alcaldía fue por designación directa del partido, aunque ya en las elecciones constitucionales se enfrentaron a uno o dos partidos de oposición. Las tres presidentas de este periodo son originarias del lugar que gobernaron pero todas, por razones de estudios o trabajo permanecieron largas temporadas fuera de su municipio.

Leonor sale muy joven a trabajar al Estado de México, donde permanece 34 años, se casa, tiene hijos y logra formar un pequeño taller de costura donde se maquilaba ropa interior. En 1986 regresa a su lugar de origen y lleva consigo el taller, el cual se convierte en su forma de vida y da trabajo a mujeres de su comunidad. Sin embargo, ya desde que trabajó en la colonia La Aurora de Ciudad Nezahualcoyotl se ocupaba de "juntar gente" para ir a Toluca a hacer demandas específicas.

Ya de regreso en Alzayanca, Leonor se distinguió por su activa participación en las actividades de la CNC, e incluso llegó a ser presidenta del PRI en su municipio. Su constante participación y asistencia a actividades del partido fuera de su municipio y de su estado la llevó a ser conocida por Beatriz Paredes, entonces gobernadora del estado y quien, según su propio testimonio, la designó candidata a la alcaldía

...fui secretaria de acción femenil del partido, después me nombraron presidenta del desarrollo de la mujer campesina, tuve varios nombramiento y fueron pasando los años. Fui presidenta del partido de aquí del municipio y ya después iba o voy cada año al congreso de la CNC que es 26, 27 y 28 de agosto y pues hemos salido a varias partes, hemos ido hasta la frontera y una vez fuimos al congreso de la CNC, después de ese congreso íbamos a los Pinos y ese día nos dijo la gobernadora: ahora no vamos a ir a los Pinos, ahora yo los invito a cenar a Garibaldi y sí fuimos y ahí estuvimos y dice ya me voy, pero ya hablé con los muchachos y alguien de ustedes va a ser presidente de su municipio, y a cual mas me dijeron vas a ser tú Leonor y yo no, ni lo había pensado, ni ilusiones me hago, tú vas a ser, porque pus yo me di a conocer por mi trabajo o sea que cuando empecé a andar yo me pegué mucho con la del DIF y ya había muchos paquetes de apoyo y no había en que ir y yo les prestaba la camioneta o me veían las señoras no sea mala no nos presta su camión pa que me vayan a dejar, tonces se daba frijol, harina, pescado, se daban muchas cosas por parte del DIF y hoy ya no hay nada y entonces yo me día a conocer en las comunidades y ya le digo que cuando dijo eso la gobernadora que alguien de nosotros iba a ser presidente y me decía te vas a ir tú Leonor, no creo, decía yo y pues que sí, y eran cinco señores y yo dentro del partido, entonces ya la licenciada fue la que me ayudó a que yo quedara...

No obstante la designación directa por parte de la gobernadora, Leonor tuvo que enfrentar descontentos en su comunidad, tanto por su designación como por su triunfo final como presidenta

Empezó un secretario o no sé qué era que en ese año que él se lanzó que quería ser presidente, él trabajaba en Tlaxcala con la licenciada Beatriz, entonces a él lo llamó y le dijo que no, que no que me dejara porque yo iba a ser, entonces él, desde esa vez, quedó de secretario o no sé cómo se llame de atención ciudadana, entre un gobernador o entre otro, él siempre está en ese cargo. Luego se llamó a los seccionales, a los del consejo y hubo una votación y entonces me propusieron a mi. De los cinco que querían, pues Emiliano ya no porque 10 había hecho a un lado la gobernadora, y los otros cuatro pues se alinearon y dijeron que yo fuera y ora verán que eso fue bien a fin de año, nos llamaron al partido y un señor que es dueño de la tienda de acá arriba le decía que no, que yo no, y le decían bueno ¿qué motivos tienen? ya había yo sido electa, ya todos los votos que yo tenía y decía: no nosotros lo que queremos es que renuncie ella, bueno Toño pero dime ¿por qué motivo? pus porque nunca ha gobernado una mujer y le dijeron: pus será la primera, pues sí pero no la queremos. Estuvimos de las 11 de la mañana a las 11 de la noche el 30, ya pasó el día primero, el día 2 que nos vuelven a llamar porque era la toma de posesión y otra vez que no y que no. Y él ya había puesto a los regidores, se juntó con los otros candidatos y ya cada quien había puesto sus regidores y yo defendía al primer regidor y ese sí se me quedó y a tanto dijeron bueno vamos a hacer una cosa, vamos a hacer un referéndum si de aquí a abril la señora no la hace pues entonces pasas tú Toño, porque él era el suplente. Y sí hicieron el referéndum pero yo seguí y se calmó el señor...

Leonor atribuye su permanencia a la limpieza con que manejó los recursos, así como a su habilidad para comprometer a las autoridades estatales en apoyos complementarios para su municipio

...para aquel tiempo yo hacía las compras no ponía a nadie a hacer las compras, pero si yo hacia las compras de tal comunidad, yo me llevaba al presidente de esa comunidad...

...un día vinieron los de los deportes, nos llamaron a todos los presidentes y ahí dijo el gobernador que para Tetla la restauración que esto, que l'otro y me vio que hice así (movía la cabeza), porque todo para Tetla y me dijo: "a ver el de Atzayanca quiero dos hectáreas para su unidad deportiva y media para la casa de los maestros" y le dije: mire yo lo que más quiero es el camino vecinal de Alzayanca a La Garita, y que agarra y les dice me atienden a mi presidenta, pero no me la traigan a vueltas y ya que me dicen hay que ver al licenciado Martínez... Y que me ve y me dice: "Leonor ¿qué anda usted haciendo?" Pues me mandó el gobernador que se necesita maquinaria para abrir el camino vecinal a La Garita D8, "no tengo mas que D7 pero yo lo consigo y voy a hablar con Gurza para que nos pongamos de acuerdo" y le dije sí pero del techo financiero ni un cinco, "no doña Leonor esto va a ser muy aparte" y que me dice que les hiciera una hornada de papas y con eso estaban pagados. ¡Pues pa pronto!

Sin embargo, tuvo que enfrentar inconformidades

...de esas compras a mi me sobró recurso y en un cabildo yo les dije miren me sobró tanto ¿cómo ven si compramos tubo para La Garita que no alcanzó del techo financiero? y me dijeron que sí y ya que hice esa compra y todo y luego que se me ponen que ¡no! que ellos querían el dinero que había sobrado de sus compras y ya le dije al secretario, enseña la hoja del cabildo de tal fecha y sí que vean sus firmas (...)

Entonces [una señora] se juntó con esos que querían su cambio, y que me toman la presidencia, según que me tomaron la presidencia, empezaba el cabildo a las 11 y ese día nos íbamos a comer a La Garita y que empieza el perredista: nos va usted a dar lo que sobró de nuestras compras o tomamos la presidencia. Pus como ustedes digan y dicen unos presidentes de una comunidad "no que quien sabe qué" les dije ¿me quieren ayudar? ¿Sí? pues entonces cálmense, cálmense no va a pasar nada, si se quieren ir váyanse yo me quedo, ah no, nos quedamos, me metí al privado y abro la ventana y le digo a don Gerardo cierre los zaguanes que no entre nadie y nadie entró. Cerramos todo y nadie entró, según que me la tomaron y luego pus ya pasó todo.

Teresa, al igual que Leonor, permanece fuera de su comunidad por largos periodos, pero ella lo hace porque su familia la manda estudiar, primero a Puebla y después a la Ciudad de México donde se gradúa de trabajadora social y se emplea en el Hospital Infantil de México. Aunque ella señala que cada fin de semana regresaba a la casa paterna, siente que tiene poco arraigo en la comunidad, pero considera que acceder a la presidencia le puede permitir hacer algo por su región ya que es "un pueblo que está muy marginado". Teresa también señala cómo tiene que enfrentarse a problemas originados con rivales desde la campaña y la importancia que tiene el llegar con cierta preparación al cargo. Ella consideró que necesitaba sentirse protegida e imponer cierto respeto mediante la creación de una policía municipal

...verdaderamente cuando llega uno con el desconocimiento total de la administración municipal, de la política, este, gente muy resentida de que le ganó uno la elección, son muchos problemas en la presidencia, y hay que ir con un poco de conocimientos, bueno entonces yo dije mm mujer, ya había habido una mujer acá, acá es la tercera.

(...) entonces yo dije, camino número uno, yo me voy a ir por orden, por eso como están las cosas, pero yo necesito orden ¿no? ¡Orden! no tenía policía municipal. Mujer y sin policías, ¡Me quiero morir!. Que la organizo, que voy a Tlaxcala, el director de la policía judicial estatal era mi amigo, el señor era de acá y ya que le digo: ¿Oiga Don Felipe, cómo organizo la policía? dijo, este, hay que ver a Barraza que les den una capacitación y si se las llevamos. Nos dieron la capacitación, que servicio al ciudadano, que defensa personal, que servicio público, que la calle, que los sentidos y vialidad y les dieron vialidad, defensa personal, servicio al ciudadano, tan, tan. Ellos andaban en una camioneta, con muchas comodidades, les pagaba sus comidas y todo para que fueran a lo que iban a capacitarse y ya como a los dos meses... les compré sus uniformes, ya que se los ponen, los botones, las chamarras... estrenaron los uniformes, se empujaban unos con otros porque no querían salir, les daba pena.

En el caso de Gabriela, 20 y 10 años más joven que Leonor y que Teresa respectivamente, ella se incorpora a una campaña política en medio de una especie de escisión en su partido porque había dos propuestas para candidatos pero ninguno quería ceder. De esta manera, la gente le pide su participación y acepta. Gabriela, al igual que sus compañeras presidentas de ese periodo, ha vivido fuera de su estado. Ella ha ocupado puestos ejecutivos en la iniciativa privada y convencida de que esto le ha dado una perspectiva más racional de la organización y el trabajo señala

...pues por mis mismos valores, por mi mismo estilo de vida, por mi mismo perfil, yo no iba a prometerles cosas que no podía comprometer, ¿no? decirles siempre lo que tienes comprometido, es mi trabajo, mi mejor esfuerzo y ya, yo nunca he dicho no, mira te voy a dar, no, porque no va conmigo, y bueno me comprometo al trabajo y trabajo fuerte, y siempre he pensado que la mejor forma de trabajar es con el ejemplo. Yo llegaba a las 8 de la mañana todos los días a la presidencia, ya arreglada y todo y a trabajar...

El gobierno de Gabriela trabajó muy de acuerdo con las políticas de solidaridad promovidas por el gobierno federal de aquella época; logrando, a decir de ella misma, una altísima participación de la gente "siempre superando metas". Pero también tuvo que enfrentar algunos obstáculos que intentaron ponerle para el buen ejercicio de su administración, tal como lo deja entrever

...cuando yo llegué te dicen que te van a dar cabida y entonces empiezas a trabajar, y pues que todo el ayuntamiento se ponen de acuerdo para decir que no están de acuerdo contigo y entonces ya te obstaculizan el trabajo o se retiran todos y entonces ya no tienes con quien, y el órgano máximo del municipio o del gobierno es el cabildo.

Aunque Gabriela no es muy explícita respecto de quién o por qué se ve obstaculizada en su trabajo inicial, es posible inferir que, al igual que Leonor, tuvo que enfrentar algunos descontentos por parte de sus compañeros de partido a quienes define en algún momento como sus "enemigos más recalcitrantes", quizá debido a su designación.

De los tres casos, sólo en una ocasión hubo una alusión directa a la condición de mujer como factor de descontento por parte de algunos pobladores, el caso de Leonor. Sin embargo, Teresa considera que en su comunidad las mujeres no tienen objeciones al respecto y el machismo no funciona como obstáculo para las presidentas, toda vez que antes que ella hubo otra alcaldesa. Gabriela considera que su capacidad de liderazgo y su visión empresarial, así como la apertura y facilidad que tiene para escuchar y canalizar las inquietudes de la gente fueron cualidades suficientes para su buen desempeño.

 

La transición. 1995-1998 y 1999-2001

En los dos trienios siguientes gobernaron cuatro presidentas del PRI los municipios de Sanctorum, Hueyotlipan, Muñoz de Domingo Arenas y Tzompantepec. Tanto la alcaldesa de Sanctorum como la de Hueyotlipan eran maestras y ambas habían tenido varios años de ejercicio profesional antes de contender por la presidencia. En ambos casos, hay una alusión expresa por parte de ambas acerca del machismo imperante en sus comunidades y como elemento importante de ataque a sus gestiones; aunado al rechazo a los mandatos de mujeres se dan contiendas partidistas y pugnas por el poder al interior de la comunidad y del mismo partido.

Cuando Clementina gana la elección de Sanctorum contra el PRD no puede tomar posesión, pues este partido ocupa la presidencia en señal de descontento. Ella evalúa su experiencia como dura en la presidencia, debido a su condición de mujer y al atraso de la comunidad

...le comentaba que ha habido tres presidentas en el municipio con la actual, la primera presidenta fui, pues su servidora. Y vaya que fue duro, dura la situación porque Sanctorum tiene cierto atraso, yo considero que llegar a Sanctorum es encontrar un atraso de unos 20 años o más ¿si? ¿Por qué? no sabría a que factor cargarle a esta situación, pero sí están atrasados o son muy tradicionales, por lo tanto muy machistas. Llegó al grado de que en el período en que empezamos a trabajar pues, por coincidencia murieron algunas personas y comentaron. ¡No pues es por la fulana, vieja que está acá, porque es la que trajo la mala suerte!

...había muchos problemas, muchos problemas, que no aceptaban. Tan es así que cuando tomé la protesta, lo hice a un lado de la iglesia porque nos habían tomado la presidencia.

Emma Yolanda estudió para maestra y desde hace muchos años vive en el Estado de México, muy cerca de Distrito Federal, pero, como ella misma dice: "no he dejado de vivir aquí, pero tampoco he dejado de vivir allá". Hasta la fecha, pasa la mitad de la semana en Hueyotlipan. Ella proviene de una familia de gran arraigo en la región y que es muy respetada porque sus abuelos "...eran compadres de medio mundo, era un pueblo chico, entonces al ser compadres, mueren algunos compadres, [la abuela] recoge a los ahijados, en fin; pero además de eso, me imagino que ella tenía, pues tenía principios políticos y controlaba todo, no se hacía nada hasta que ella no dijera se hace esto, no se empezaba una fiesta hasta que no llegaba ella..."

Como parte de una familia desahogada económicamente, le preocupa el atraso de su región y el papel marginal que tienen las mujeres, eso es lo que según ella le motiva para ser presidenta.

... había situaciones que a mi no me gustaban, ¿si? sobre todo por la marginación tan grande que tiene la mujer, por el machismo que existe, principalmente en los pueblos y en los municipios mm, por eso es que me animé a ser presidenta, con mucho trabajo mm, porque ustedes saben que a la mujer siempre le ha costado, tiene que trabajar cinco veces más que al hombre y aunque hay mujeres trabajadoras, macheteras, constantes, tenaces, serias, formales, honestas. El hombre, bueno no quiere decir que no haya hombres así, pero bueno era un reto que yo tenía. Y la finalidad era, no solamente que fuera Emma Yolanda presidenta, que fuera la que abriera las puertas para otras mujeres.

La maestra dice haberse enfrentado a ocho candidatos por su propio partido, y especialmente haber retado a uno que era propuesto por una persona que "tenía el control y siempre decidía quien iba a ser presidente". Sin embargo atribuye su triunfo al trabajo fuerte que realizó con la gente pobre de las comunidades.

Emma Yolanda también se enfrentó a la toma de la presidencia por parte de un rival que no es su contrincante partidista pero sí pertenece a una familia que ha tenido tradicionalmente el mando de la comunidad y ejercido del poder de "poner" a sus candidatos a la presidencia. A las tres semanas de iniciado el periodo de Emma es acusada, sin aparente fundamento, de haber tomado dinero. De hecho califica el suyo como un periodo difícil con dos tomas de presidencia porque no aceptaban que ella estuviera gobernando "sólo por ser mujer". Fueron dos años de su gobierno con problemas y tensión, lo cual no terminó sino hasta que el presidente de su partido -según ella lo cuenta- pide una licencia para contender para gobernador y deja de tener influencia en Hueyotlipan.

Por su parte Marisa y Porfiria, durante su contienda a la candidatura de su partido, también se enfrentaron a rivales importantes, pero ambas se imponen en la votación general y luego ganan las elecciones constitucionales; es decir, las que habrán de colocarlas como presidentas municipales.

Es importante señalar que estas dos presidentas ejercen su gestión en un período en el cual el gobierno estatal está por primera vez en manos un partido diferente al PRI. El PRD llega representado por Sánchez Anaya, un expriísta que debe gobernar el estado con 44 presidentes municipales del PRI, de un total de 60. Marisa y Porfiria, ambas del PRI, establecen relaciones muy diferentes cada una con el gobierno estatal, pero en ambos casos con consecuencias negativas para sus respectivas gestiones. Veamos sus experiencias.

Marisa considera que la suya fue una administración llena de errores que achaca a su inexperiencia, entre otras cosas porque al final de su gestión tuvo que "vender una propiedad para dejar todo limpio". Ella llega a la candidatura de su partido debido a que en su comunidad es muy conocida por su capacidad de gestión y de convocatoria para reunir gente cuando se requería. Además fue secretaria del Consejo de Integración de la Mujer en Tlaxcala y regidora.

Marisa declara que su triunfo lo debe a las mujeres debido a que:

...la gente me aceptaba y bueno, a mi se me hacía raro porque aquí en el municipio nunca había habido una mujer, y aquí hay mucho machismo de parte de los hombres. ¡ay no! ¿por qué una vieja? Bueno, si yo fui presidenta fue porqué las mujeres me apoyaron, desde luego las mujeres que me estimaban y eso. Sí, sí, no seas tonta y aunque mi marido no quiera nosotras te vamos a ayudar... hubo señoras que se peleaban con su esposo por apoyarme, pero mire, bendito sea Dios, me dio mucho orgullo, mucho gusto porque yo jugué en el proceso interno con dos partidos más y pues les gané por mucho

Expresa sentimientos encontrados en relación con su gestión, pues al tiempo que señala que "estuvo muy bonita la administración", reconoce que:

A medio periodo, yo ya me quería salir, pero dije: y ahora como voy a quedar mal con las mujeres, es primera vez que nos van a postular y que yo ya me rajé, ¡no! no, no, no. Me aguanto, me aguanto y me aguanto y si. Y luego así una vez también con los regidores, como que querían someterme, no, aquí para eso estoy yo y para que trabajen para decidir, no, ustedes no me van a decir qué hacer y luego entonces imagínate, pues mejor me hago a un lado y mejor pásenle ustedes y ustedes deciden qué hacer, y no, pues como vieron que ya estaba así enojada pues ya, les digo aquí les entrego ya sus llaves, pero yo no voy a ser títere de nadie.

Marisa atribuye parte de los problemas que tuvo en la administración al hecho de haberse mantenido fiel a su partido y no aceptar la invitación del gobernador para cambiarse

...y me dice (el gobernador) ¿sabe que? Ahora yo le voy a hacer una nueva invitación, me dice, ya se la hice en una vez anterior y no aceptó usted. Lo mismo dice, que se vaya con nosotros a nuestro partido (...) Le digo no, sigo en lo mismo, yo soy muy firme en mis cosas... no, no acepto, no acepto. ¡Piénselo! No, no tengo nada que pensar, desde ahorita se lo digo que no y ya, no hubo apoyo, no hubo tal apoyo, no hubo nada, fue entonces que yo tuve que vender una propiedad para dejar todo limpio.

Porfiria, por su parte, considera que parte de su triunfo lo debe a la reputación de su padre y sus hermanos, quienes gozan de una presencia importante en la comunidad, de manera que en las campañas la balanza se inclina hacia ella "...en razón directa del trabajo que mi papá había hecho en la comunidad, yo recuerdo que siempre andaba metido, qué de comisariado ejidal, qué en la Sociedad de Padres de Familia, incluso siempre estaba bien metido cuando yo estaba en la escuela, mis hermanos mayores ya habían tenido sus cargos de representación en las juntas patrióticas, o sea, lo que sea de cada quién, la imagen de mi familia era buena ¿no?"

Es una perspectiva compartida por parte de las presidentas, que la suya debe ser una administración clara, en varios casos hablan de no comprometerse más que con su trabajo, y varias comparten la idea de que su condición de mujeres rompe con algunas representaciones sociales de lo que es un "buen" presidente. Porfiria lo explica de manera muy clara

...la ciudadanía empieza a ver mal a su presidente porque no cumple las promesas, en particular que hacen en la campaña política, entonces a las personas, si le dan trabajo en la presidencia, si les hacen una obra en su calle, si les benefician de manera directa, dicen que el presidente es la octava maravilla, pero si el presidente no le da trabajo a tus familiares, (...) y todo lo que usted quiera, si no le dan, lo ven mal, es un malo, no cumplió con las expectativas, esa es la dinámica, al menos en el municipio... Yo creo que en 70% de los 60 municipios del estado de Tlaxcala se cumple esa perspectiva. O sea no me das trabajo, no me haces una obra en mi calle, no me invitas a comer, no me invitas a tomar una copa, eres pésimo. Dicen que el político debe ser borracho y compartido.

La administración de Porfiria en Tzompantepec también comienza de manera accidentada, como en el caso de Clementina, debido a inconformidades generadas desde el proceso electoral, especialmente con una persona que impugna el proceso, argumentando que Porfiria era demasiado joven, inexperta y soltera para contender.

...termina el proceso electoral, viene la calificación, incluso conservo un ejemplar del periódico oficial donde emite su veredicto al consejo general del Instituto Electoral, en donde menciona que la señora Margarita Pérez Martínez no es elegible, [pero dijo] que iba a tomar la presidencia, ¿Cuál presidencia? Si no tenía yo presidencia, estaba tomada, estaba tomado [el palacio municipal] por el grupo del PRD. Claro, era presidenta electa, no había tomado protesta y me mandan traer de la Secretaría de Gobernación, que en el afán de mantener la estabilidad política, la gobernabilidad, que si quería tomar protesta tranquila, que le diese todo lo que me pidiera y que me callara la boca. Y dije ¡No le doy nada! ¿Cómo que no? No le voy a dar nada, esta señora ya me hizo enojar. Ya me hizo enojar y no le voy a dar nada. ¿Cómo? Ya tomamos protesta, este, con bastante incertidumbre, la presidencia sucia, porque estaba tomada, el palacio estaba cerrado, vamos, en estado bastante peculiar, y todavía estando ya como presidenta municipal, me encuentro algún día al candidato del PRI, en aquella ocasión pierde la gobernatura por primera vez el PRI, me encuentro al candidato en un evento y me dice "¿Sabes qué Porfiria? Estoy muy molesto contigo, le das algo a Margarita porque si no, yo no sé lo que pueda pasar". Le dije ajá sí señor, ¡Le voy a dar! Y dije, no le doy nada y ya, se quedó sin nada la señora.

En un primer momento, ella es electa como candidata del PRI, y como tal llega a la presidencia. Sin embargo, la amable relación personal y de trabajo que establece con el gobernador de un partido diferente al suyo genera suspicacias e inconformidades entre sus colegas. Porfiria nunca achaca su experiencia de renuncia a su partido a la relación cordial que mantiene con el gobernador, pero sí reconoce las consecuencias negativas que su decisión tuvo. La relata de la siguiente manera

Nos llevaron meses si, y cada año críticas y todo lo que ustedes quieran ¿no? Pero yo les decía a mis colaboradores: vamos a tratar de hacer el trabajo lo mejor posible, se cometen muchos errores, porque yo no conozco al ser perfecto que llegue y que ya acabó, (...) Pero si estuvieron los tres años, hartando y fastidiando, incluso yo, fue tanta la presión del Revolucionario, sí me hartó, que yo renuncio públicamente.

...después fue un... y pues fuimos la comidilla a ocho columnas en los principales diarios del estado y la noticia traspasó las fronteras del estado

... y a partir de ahí hablaban de hacerme un juicio político, yo no sabía siquiera que no soy sujeto de juicio político, yo pedí que me hicieran auditoria desde el primer ejercicio, yo, yo, ya saben que va a ver auditoria, todos los municipios se van a auditar, yo voy a solicitar, si ustedes me autorizan, voy a solicitar la situación de la auditoria si tanto se preocupan de los recursos, pues mi tesorero, se aplica la auditoria, nos hacen las observaciones, con un supuesto faltante por 4800, el caso es que menos de 5000 pesos y el señor lo guarda en su escritorio y por ahí me empiezan a agarrar, nos desfalcó en recursos, entonces soy una ratera, y todo lo que ustedes se puedan imaginar, los medios de comunicación ayudan o desayudan ¿no? Aunque muchas veces yo les decía a mis compañeritos reporteros, si se supone que toda la carrera nos están insistiendo mucho que es un trabajo de investigación difícil, porque como reporteros, nos vamos siempre con la primer versión, mjm, ¿Por qué no van y dicen sabes que, confírmanos no? Si efectivamente, la auditoria, el dictamen general dice que mi cuenta pública no tiene omisiones, no tiene errores, claro, que se cumplió con los principios fundamentales de la contabilidad, de la administración, vamos. que no hay problema, pero efectivamente ellos dicen que cinco mil y tantos pesos que no están justificados, si están justificados pues, que ellos no quisieron darles la justificación y pues empezaron a entablar muchos procedimientos, me retiraron la firma de mis cuentas bancarias. Sí se fueron bastante duro en mi contra...

Marisa y Porfiria son presidentas municipales en un periodo durante el cual comienza a gobernar el estado un partido diferente al PRI, por lo que deben tomar una decisión acerca de cómo establecer relación con el partido gobernante. Ambas tienen que asumir las consecuencias de su decisión; las cuales, aunque de manera diferente, son negativas para sus gestiones. Marisa se ve mermada en su situación económica personal pues debe acudir a sus propios recursos para saldar las cuentas municipales ante el supuesto retiro de apoyo económico del gobierno estatal. Porfiria debe enfrentar conflictos políticos fuertes con su propio partido debido a la simpatía mostrada hacia un gobernador de oposición.

 

La alternancia partidista. 2005-2007

El periodo correspondiente a este trienio, aparte de ser en el que hay una mayor representación femenina se caracteriza porque estas alcandías fueron ganadas por partidos diversos: Socorro, de Acuamanala por el PT, María del Rayo, de Apetatitlán, y Janet, de Axocomanitla por el PRD, Juana de Totolac, y Georgina de Sanctorum, por el PRI.

Socorro es una maestra con amplia trayectoria como supervisora de zona y representante sindical dentro del SNTE. Ella considera que los representantes de gobiernos anteriores en su comunidad no han tenido la capacidad suficiente para gestionar lo que se puede y debe lograr, y por tanto decide participar como candidata a presidenta municipal. Decide buscar un partido alternativo al PRI, PAN y PRD pues tienen varios candidatos, por lo cual se acerca al PT, quien la postula sin contrincantes internos. Ella se enfrenta a candidatos del PRI, PAN, PRD y Convergencia, aunque ella era la única mujer y

...con mínimas posibilidades de ganar. Pues aquí ganan los candidatos que tienen las familias más numerosas y los que sueltan cosas (...) la nuestra no, la nuestra pues sí se les repartieron algunos apoyos en despensas, en playeras, en cosas así ¿no? pero si, la ciudadanía si quiso que otro tipo de persona gobernara (...) fui la única, no había aquí militantes del PT, era un partido que no lo conocían. La gente votó por la persona.

María del Rayo y Janet son las presidentas que más jóvenes han llegado a su gestión (30 y 28 años), ambas por el PRD. A diferencia de otros casos en los cuales ha existido una amplia trayectoria de militancia política personal o familiar, así como experiencia en el medio magisterial, como directoras, supervisoras o representantes sindicales, estas expresidentas tenían una presencia de activismo político de corto tiempo. En ambos casos fueron cuestionadas durante sus campañas, no sólo por su condición de mujeres que aspiraban a la alcaldía, sino por su juventud e inexperiencia. De acuerdo con sus testimonios, las críticas y ataques a que se enfrentaron fueron más dirigidas a su condición de jóvenes que de mujeres, pese a que María del Rayo había sido diputada plurinominal por su partido. Ella consideró que su acceso a la presidencia se lo debe al voto de jóvenes y mujeres, y evalúa la suya como una administración sin grandes dificultades, en cuyo manejo exitoso tuvo mucho que ver su experiencia previa como diputada.

...sí me sirvió mucho la experiencia del Congreso, muchísimo, yo no hice compromisos de, te voy a terminar tu calle ¿no? ni te voy a poner agua, nada por el estilo, sino que mi único compromiso era que íbamos a atender la mayor cantidad de demandas ciudadanas, pero buscando recursos adicionales, porque los recursos del municipio no iban a alcanzar (...) si nos limitamos o siempre el presidente municipal se limita solamente a administrar los recursos que te llegan de la Federación no te alcanza, no te alcanza, es muy poquito y además nos falta mucho, tener mucha conciencia de que tenemos que pagar impuestos...

Janet llega a la presidencia en un municipio en el que ya había habido una alternancia política con el PRI (el Partido del Trabajo gobernó antes que ella) y como resultado de una campaña muy activa que se apoyó en el prestigio de su familia que, sin tener algún tipo de trayectoria política, es considerada respetable en su comunidad. Su periodo aparece como una gestión sin problemas graves, debido a que, por el margen de votos que obtuvo al ganar, logra que una parte importante de su cabildo sea de su partido político, lo que le da seguridad. Por otro lado, ella toma la decisión de mantener informados a sus regidores de todos los movimientos financieros que se tenían que realizar en Axocomanitla

...lo que yo traté siempre de hacer, desde un inicio, fue informarles, siempre los mantuve informados, oigan esto así, esto y esto va a funcionar así, y lo vamos a hacer así y que opinan de esto. Yo les tomaba su punto de vista a ellos, para poder decidir, aunque no fuesen cosas que el ayuntamiento necesariamente las tenía que aprobar o desaprobar ¿no? O sea decisiones que a lo mejor me competían sólo a mi, yo les tomaba su punto de vista ¿no?

Pero fundamentalmente, tal como lo señala, fue su capacidad de negociación con los partidos opositores lo que le evitó enfrentarse a una "toma de la presidencia"

...al llegar a la presidencia... los partidos políticos te piden cargo administrativo ¿no? Nos tienes que dar, y si no das aquí te quemamos la presidencia. No, es que no haces compromisos pero ellos lo sienten así, que debes apoyar con puestos administrativos y que si no es así, pues no te van a dejar gobernar, te van a toman la presidencia y... aquí yo recuerdo que siempre ha sido así, problemas, problemas, problemas, problemas. Al pasado presidente hubo año y medio de toma de presidencia (...) Entonces a mí me decían bueno si no cedes, te van a tomar la presidencia, va a haber problemas, bueno cero. Al PRI le di dos puestos administrativos, al PAN uno, al PT uno y a Justicia Social uno. Y eso me permitió la gobernabilidad y jamás tuve un problema político en los tres años.

Beatriz y Juana son las dos presidentas por el PRI durante este periodo, pero sus experiencias son muy diferentes. Mientras que Beatriz pertenece a una familia de trayectoria y presencia política en el municipio de Sanctorum, Juana debe su arraigo y presencia en Totolac a su esposo, quien sí cuenta con una trayectoria política de años.

El padre de Beatriz fue presidente municipal "dos veces seguidas presidente, una le tocó en el período de la gobernadora Beatriz Paredes y otra en la de don Tulio Hernández", de manera que Beatriz atribuye, como en otros casos, el interés de la gente de su pueblo porque ella sea presidenta a la obra de su padre.

...sobre todo la imagen de mi padre fue lo que me ayudó mucho, porque en Sanctorum toda la gente comentaba eso, es hija de don Francisco. Ah! bueno, es hija de don Pancho. Y es que cuando yo iba a las casas o a las reuniones masivas con la gente me decían, pues nosotros supimos que era una hija de Don Pancho y, pues no lo dude, cuente con nuestro voto.

Beatriz tenía 22 años de servicio como maestra y un negocio en la comunidad de Benito Juárez, de donde es originaria, cuando comienza la campaña a la presidencia. Ella considera que cuando contiende internamente por la candidatura del PRI, le falta el respaldo del partido, el cual se inclina, a decir de ella, de manera abierta por los otros dos contendientes, lo cual significa una situación harto tensa.

Y yo iba al partido a dejar mis documentos y como que no había el apoyo, no había la atención, hubo incluso una ocasión en que una persona que estaba ahí en, como le llaman, en la oficina... me dijo. ¡Mira maestra, nosotros sabemos que tú eres prepotente, que tú le hablas a la gente golpeado y no, así no vas a ganar, me dice: tú tienes que ser humilde! (...) Y bueno de plano dije, les tengo que demostrar lo contrario, y me hacían dar muchas vueltas con mis documentos, iba a las doce de la noche, a la una de la mañana, en la tarde, que me faltaba esto, que me faltaba aquello y bueno, un problema desde el registro, me la complicaron muy fuerte, este, no hubo el apoyo, yo se los he dicho, después en reuniones posteriores al partido, o sea, yo, no sentí el apoyo del partido, de verdad, nunca sentí el apoyo, y este, en varias personas, no solo en una, sino en los dirigentes que estaban ahí, no sentí el apoyo. Entonces resulta que cuando se hace la interna, al segundo lugar le llevo por el doble de votos.

La gestión de Beatriz se centró en atender oportunamente las peticiones y necesidades que la población le demandaba, y le parecía de primordial importancia que la gente se diera cuenta de su disposición a resolver situaciones. Una de sus preocupaciones centrales fue la de llevar finanzas transparentes y que no pensaran que tenía un interés económico en el ejercicio de su gestión, de tal suerte que tuvo que cambiar dos veces de tesorero.

Juana, por su parte, sin ser originaria del municipio, llega a la presidencia de su comunidad dos periodos después de que su esposo quien sí es originario del municipio fuera también presidente. Debido a esto, tuvo que enfrentar algunas críticas que se refirieron al hecho de que su candidatura era la intención que su esposo tenía por prolongar su mandato. Ella atribuye su presencia y aceptación en el municipio papel que desempeñó al frente del DIF durante la gestión de su esposo, por lo cual consideró que fueron las mujeres y los ciudadanos de la tercera edad quienes la llevaron al triunfo, pues ella nunca tuvo apoyo de la "gente política" de su mismo partido. Eran dos situaciones sobre las que se basaron las críticas a su candidatura: por un lado el hecho de que fuera la esposa de un ex alcalde y que fuera mujer pues, según comenta, la inconformidad de los varones se expresaba en frases como "¿por qué una vieja? ¿cómo va a gobernar una vieja? ¿qué, ya no hay hombres?"

Sus obstáculos principales en la gestión tuvieron que ver con sus contrincantes políticos de los partidos de oposición y de lo que ella llama "gente política" que le daba "tres meses de vida en la presidencia".

...los primeros cabildos eran así, los cabildos eran así como que el varón no entendía cómo la mujer iba a decidir y cómo iba llegar a organizar un cabildo y qué era lo que iba a decir y que, o sea todos estaban así como a la expectativa. Y los rumores pus que luego contagian a los demás, yo creo que a todos nos contagian por decir pus ya, dos meses y va pa fuera la señora para que, para demostrarle que Totolac no se deja y que aquí no va a venir una vieja a gobernar y menos de fuera.

Su gestión se caracterizó básicamente por su interés en mantener el consenso en su cabildo y, por tanto, no generar conflicto. Además considera que la visión femenina de la administración está en atender las cuestiones de salud, y en general de asistencia social.

Lo mismo que va administrar el hombre, que es dinero va administrar la mujer, que es dinero, nada más que con la diferente visión, o sea yo creo que mi esposo nunca le hubiera apostado, no le apostaba a la situación de la salud porque lo veía con diferente visión (...) yo siento a veces la diferencia ¿no? de que el varón piensa en el foco, en el adoquín, en otras situaciones que sí son de prioridad; yo como presidenta las entiendo que sí son de prioridad; pero yo también entiendo que yo creo que al varón le falla la situación de analizar como lo que es el hogar ¿no?

 

Presencia de nuevos partidos. 2008-2010

De los cinco municipios encabezados por mujeres durante este periodo, tres conformaron parte de nuestra muestra debido al número de habitantes, por las razones que señalamos al inicio. A la alcaldesa de uno de ellos no fue posible entrevistarla. Las presidentas de Terrenate y de Xalostoc sin embargo, sí nos proporcionaron sus testimonios en relación con la experiencia que recién estaban iniciando, pues fue durante el primer trimestre de 2008 que estuvimos con ellas y sus gestiones habían comenzado en enero de ese mismo año.

Ambas presidentas tienen en común que ninguna era la primera mujer que ocupaba la alcaldía. Felícitas de Xalostoc es la segunda y Francisca de Terrenate es la tercera mujer que encabeza el ayuntamiento de esta región. En ambos casos llegan a la presidencia por primera vez como candidatas por partidos diferentes al PRI, pero sus procesos y experiencias incipientes son diferentes.

Felícitas es una maestra con veinte años de servicio, una plaza de directora de escuela y ha sido representante sindical de su delegación del SNTE. Ella se acerca por primera vez a la actividad política debido a que al haber trabajado en varias escuelas de distintas comunidades del municipio, "mucha gente me anima, entre ellos pues mi familia ¿no? mi papá estaba muy enfermo y me dice mi mamá, ¿sabes hija? éntrale, dale una satisfacción a tu padre que todavía está con nosotros, como mujeres el corazón como que ahí nos sienta ¿no?" Su padre es una persona respetada pues también fue presidente municipal 40 años atrás, dejando una buena imagen de su gestión. De acuerdo con su testimonio, ella es directamente invitada por gente que milita en el Partido del Trabajo, una institución con una presencia incipiente en el estado de Tlaxcala y que, al igual que en el caso de Socorro, la contempla como candidata única, por lo que no tiene que pasar por un proceso de elección al interior del partido.

Logró la presidencia en una contienda con seis partidos más en un proceso que, como en otros casos, no estuvo libre de los ataques usuales. Actualmente está iniciando un gobierno en el cual impulsa un trabajo por consenso dentro el cabildo, aunque reconoce ciertas dificultades

...es difícil porque es difícil dialogar... yo siento, más que nada, que no tanto por la política sino por lo de que pues a lo mejor las mujeres ¿Por qué me va a mandar? No es que queramos mandar, yo, como les digo, no los vengo a mandar aquí, aquí vinimos a formar un equipo de trabajo y aquí vinimos a consensar ¿no? o sea de hecho no tengo ninguna diferencia con ninguno... ha habido momentos difíciles, yo creo que sí, con los panistas a veces no coincidimos pero, al final, tenemos que llegar a un acuerdo...

Una vez más está presente la percepción de recelo, o cierto rechazo a la posición de poder de las mujeres, especialmente ante grupos de trabajo donde la población predominante es masculina.

Francisca es una mujer soltera que, sin tener un capital político familiar, se forjó a sí misma como una persona preocupada por las necesidades de su comunidad. Ante la falta de apoyo económico por parte de su padre, quien prefirió apoyar a los hijos varones, trabajó desde muy joven para pagarse la preparatoria y la universidad. Durante su época de estudiante participó activamente en la gestión de recursos diversos para arreglar la iglesia de su comunidad y se mantuvo cercana al párroco del lugar quien "la orientaba" para realizar diversas gestiones en beneficio del pueblo, todo ello, según su propia declaración, sin militancia política alguna

Una vez me entra la inquietud, estoy en la prepa y le digo a un maestro que quería; ah porque en la Comunidad Guadalupe Victoria, nuestra iglesia no tenía puertas, estaba toda mal ¿no? entonces le digo a un maestro que yo quería gestionar, ¿como le haría para hacer una solicitud para gestionar puertas y material? Y me dice, yo te voy a ayudar, yo te lo voy a hacer, y todavía me acuerdo que me dijo. Si tu logras gestionar esta petición, no hombre, de ahí no vas a parar, y yo, que va a ser, no le creí pero si me ayudó a hacer la solicitud. Le dije qué es lo que quería y fui, pero encontré a otra persona y me dijo que yo quería una audiencia con el gobernador, en ese tiempo era el Lic. Alfonso-Sánchez Anaya. Un amigo me dijo, no, nunca te van a dar la audiencia y yo... Me acuerdo que iba yo con el uniforme de la prepa, con calcetas y todo ¿no? me dice [mi amigo] ¿sabes? Ahorita va a salir acá, espéralo. No con todo y sus guaruras y toda la cosa me quedé como bicho raro ¿no? y si lo esperé, y cómo me acuerdo que yo estaba en el rincón y él salió y yo creo que le llamé la atención y me dice ¡hola! Y yo ¡hola! ¿Cómo está? Que no sé qué, y la gente con la que iba, ya se va, ay y yo que voy con mi solicitud y que le digo, ¡oiga, le quiero pedir un favor! Quiero que me ayude con unas solicitudes que traigo de mi comunidad y ya le conté todo y me dice ¡No te preocupes, yo te voy a ayudar! Y le dije, pero póngale su firma porque si no, no me van a hacer caso ¿no? ... lo hacía por hacerlo y porque veía la necesidad de mi comunidad ¿no? entonces de ahí logré gestionar eso, después gestioné vivienda, me aprobaron 20 viviendas para la gente...

Francisca se dio a conocer en las comunidades de su municipio debido a su capacidad de gestión, activismo y voluntad de ayuda. Apoyó en la construcción de viviendas, de canchas de juego. Al terminar sus estudios de leyes, trabajó para la Secretaría de Fomento Agropecuario, actividad que le permitió no sólo tener un conocimiento más cercano de los manejos para proyectos de apoyo al medio rural, sino tener un contacto continuo con comunidades. Esta experiencia es la que le despierta la inquietud y la aspiración a la presidencia municipal.

Por su trabajo en Fomento Agropecuario, ella está cerca de la administración panista y decide acercarse a ese partido buscando la candidatura para la presidencia de su municipio. Inicialmente le es negado el apoyo, pero finalmente, en un proceso interno de encuestas y "exámenes", logra convertirse en la candidata por el PAN. Sin embargo, no cuenta con el apoyo de todos los participantes del partido e incluso genera desconfianza y pocas expectativas de ganar.

... y todavía otro compañero me dijo ¿y cómo es posible que ésta mujer, pero así, que ésta mujer, tenga la oportunidad, no, esta mujer no garantiza el triunfo, y se lo digo de frente presidente ¡ella no va a ganar! Y luego otro compañero también me dijo que pues, que no tengo la experiencia, que pues yo nunca he estado en este medio y que pues yo no iba a ser un buen elemento...

En la contienda constitucional, pese a que pierde la cabecera municipal, gana la elección y se convierte en presidenta municipal de Terrenate. Considera que su triunfo lo debe a mujeres y jóvenes. En el inicio de su gestión, señaló cómo, por defender al tesorero y director de obras de su elección, se enfrentó a un cabildo completo en contra, pero que logró convencer mediante al argumento del cambio.

Francisca está al frente de un municipio de alta marginalidad, lo cual, de acuerdo con sus testimonios, permite "bajar muchos apoyos por ley" y eso es parte de su plan de trabajo con el cual está logrando, en el corto tiempo que va de su gestión, el apoyo de su cabildo y los acuerdos más importantes para una gobernabilidad sin altercados. Ella representa la primera alternancia política después de años de hegemonía priísta, y está tratando de llevar recursos a las comunidades más pequeñas y menos favorecidas.

 

Participación de mujeres en alcaldías encabezadas por ellas

La conformación de los cabildos está determinada por la población, y el número de comunidades, y usualmente tiene una representación partidaria de los diversos contendientes. Es importante que, con excepción de la administración de Janet, las de las demás presidentas no incluyeron mujeres como colaboradoras directas. Janet tuvo una tesorera y una contadora general del municipio, pero el resto sólo contó con las secretarias como personal femenino de las alcaldías. Incluso algunas de las presidentas expresaron su inclinación a trabajar preferentemente con hombres, debido a que las mujeres suelen ser más "celosas" y provocar "chismitos".

De hecho, en dos casos, el de Leonor y el de Porfiria, tuvieron que enfrentar rivalidades importantes con mujeres de sus comunidades, tanto en la campaña como durante la gestión.

Algunas apreciaciones al respecto quedan ilustradas en los siguientes testimonios

Había una Luchita que andaba de revoltosa (...) esa Luchita me echó unos [volantes] así, me pintó así con mucho cabello, me pintó enseñando la lengua, yo nunca uso botas, me pintó de botas, de mini-falda, y una de leperadas pero fue Antonio, esa tal Luchita y una que se llama Estela, esas nunca van a llegar, hagan lo que hagan, nunca van a llegar... (Leonor)

...es fabuloso trabajar con hombres, porque son objetivos. ¡Esto sirve bien, esto no sirve, vámonos! y las mujeres no somos así, las mujeres, no sé si lo noten, pero si la ven que va con la media rota, la misma mujer la está criticando y un hombre le dice "tu media esta rota" ¿si? No hemos logrado todavía la integración, la unión, el apoyo entre mujeres, si llega una mujer a algún puesto; (cuchicheos, no,no, no creo que sirva.) en lugar de decir, "Que bueno que esté aquí, yo le voy a dar mi punto de vista, le voy a hablar, le voy a decir, que en lo que quiera le voy a apoyar para que suban más mujeres, entre más gente esté allá de nuestro sexo, probablemente jalen así como nosotras" ¿no? (Clementina)

...muchos varones lo dicen y es cierto, no tenemos la cultura de trabajar entre mujeres, nos cuesta mucho, nos cuesta mucho ¿no? y sí, lo venías sintiendo y lo tenías que venir sobrellevando... (María del Rayo)

... lo primero a lo que me enfrento, yo creo que ya con consigna del partido con el que hemos estado en disputa en este municipio, que hace mucho tiene presencia, el PRD, entonces dijeron pus una mujer pus otra mujer ¿no? y una mujer muy fuerte, muy persistente ¿no? en sus ideas (...) fue un poquito difícil porque la regidora del PRD llevaba la consigna de que tenemos que tirarla ¿no? (Juana)

La percepción de las presidentas respecto de la forma de ser de las mujeres como compañeras de trabajo es una elocuente muestra cómo los estereotipos de las mujeres chismosas o envidiosas hacen difícil su participación en actividades que han sido por largo tiempo desempeñadas por varones y han estado apoyadas en muchos casos por los usos y costumbres de las comunidades. El hecho de que sea una mujer quien "reconozca" estas actitudes como obstáculos en el exitoso desempeño de las labores públicas como los puestos de representación política implica que las mujeres que han superado esas actitudes se acercan más a una forma dominante de ver las relaciones entre géneros.

 

Mejor administración y honestidad

Hay una tendencia generalizada a suponer que las mujeres son mejores administradoras de recursos y son más honestas en puestos públicos que los hombres. Si son buenas administradoras o no, dependerá mucho de la historia personal y la experiencia laboral de cada cual. Recordemos que estas mujeres han tenido experiencia de trabajo previas que en diferentes niveles les ha dado una experiencia particular de organización de sus propios recursos. Por otro lado, la administración de los recursos de sus alcaldías no es algo que depende enteramente de ellas, sino de lo que aprueben los cabildos y los consensos que logren obtener. Eso sí habla de una cierta capacidad de liderazgo que por su posición logran legitimar.

La cuestión de la honestidad es algo que no podemos conocer del todo, especialmente porque no tenemos un parámetro de comparación con administraciones de hombres. Sin embargo, sí podemos decir que fue una preocupación recurrente en los testimonios de estas mujeres que sus gestiones aparecieran como transparentes. La vocación de servicio es un discurso propio de todos aquellos que aspiran a los cargos de elección y que se muestran como banderas de acciones cargadas de honestidad, pero además, en estos casos el reconocimiento que la gente ha hecho a su trabajo ha sido central en la valoración que ellas mismas hacen de su gestión. Leonor, por ejemplo, se expresa orgullosamente no sólo de haber realizado un número importante de obras para su municipio, sino de haber sido la primera que visitó comunidades que por su difícil acceso habían sido relegadas por candidatos y anteriores presidentes municipales. Respecto de su trabajo realizado, nos comenta

...yo hice muchas muchas obras, nadie me ganó y ya Antonio dijo "discúlpame pero estaba equivocado contigo, pero aquí de todos los que ha habido nadie te ha ganado en obras", yo eché mucho pavimento, luz, drenaje profundo, traje la mano de chango pero no vamos lejos aquí en Concepción Hidalgo yo hice cuatro cuadras de pavimento, para julio que vino el gobernador ya vino a inaugurar esas obras, a mi me daban el techo financiero a principios de agosto, pero uno de Libre me daba el crédito, hice varios auditorios que yo los metía como salón de usos múltiples y me decían "no va a ser auditorio", ay como crees es salón de usos múltiples, hice uno en la comunidad de Tecopilco de 42 por 22 y hice el de Carrillo, el de Cárdenas y el de San José Buenavista. Y en las Cuevas y el Jonguito ahí sí fueron salón de usos múltiples pero nadie me ganó y yo quería comprar maquinaria pesada, nada mas que cuando yo quise ya iba yo a salir y me dijeron eso lo hubieras hecho cuando entraste, porque hay mucha tierra ociosa pa roturar, pero mucha y yo quería roturar todo eso...

El reconocimiento a la labor realizada como presidentas puede ser identificado incluso en las labores posteriores que las expresidentas realizan por su comunidad ya pasado su periodo de gestión, como en el caso de Clementina, quien se dedicó "a proveerlos de obras materiales"

Sí mire, por ejemplo esta calle, toda esta calle, es una calle que era de tierra, cuando estuve en la presidencia, para evitarme líos no la... no la hice, entonces ahorita que ya terminé la diputación, gestionamos y se hizo toda la calle hasta aquí hasta el final, me dieron todo el material y ahorita gestioné allá otras dos, tres, cuadras más de otra calle y están trabajando. Y tengo la solicitud para otra, o sea que seguimos, calladamente, pero seguimos trabajando. Hablé con la presidenta y le dije que tenía yo esas gestiones y que le comunicaba para evitar problemas. Y no, no hay ningún problema. Bueno, está avisada...

Algunas presidentas son más elocuentes que otras respecto de las obras realizadas y cómo manejaron los recursos o cómo hicieron para gestionar dinero extra cuando fue el caso. Teresa por ejemplo, que distribuyó "lo mejor posible el dinero" y priorizó la organización del cuerpo de policía, la construcción de pozos para llevar agua potable a las comunidades y el drenaje. Gabriela resaltó la aplicación de los programas de solidaridad y la participación que logró por parte de la población.

Podemos decir que destaca el hecho de que el trabajo realizado por estas presidentas se apoya básica y efectivamente en una optimización de recursos para lo cual buscan el consenso permanente de sus cabildos, como nos indicó Emma Yolanda

Mire, las obras que cada presidente designó, con el apoyo de la presidencia... lo que pasa es que en mi período se estaba terminando una etapa de habilitación, de adiestramiento, de todo eso, porque los pueblos carecían de esas obras, la mayoría de la gente pasaba batiéndose en el lodo y todo eso, entonces seguía y dije bueno, ¿Qué es más importante? Hacer un auditorio en x parte o hacer tres calles, tres calles son tres calles, sin embargo yo hice, casi se terminó un centro de salud en un lugar... ahí también lo hice sin el permiso de salubridad y del gobierno, pero era importante, porque iba a ser un Centro de Salud y lo hice, nada más que se quedó para habilitarlo, que a la fecha no se ha usado...

De manera general destaca el interés de cada una de estas alcaldesas por dejar evidencia de su administración a través de obras de pavimentación, construcción de auditorios, de bibliotecas, remodelación de las plazas públicas y los edificios de gobierno locales, así como algunos programas de salud como el de detección oportuna del cáncer en Tzompantepec o de colposcopía de Totolac, que eran programas dirigidos a mujeres y destacaron como los más relevantes.

La dedicación es otro aspecto que resalta en el trabajo de estas presidentas, tal como lo deja ver el siguiente testimonio

yo resumiría mi administración en trabajo diario sin escatimar un minuto en tiempo, porque aquí eran 14 horas de luz que hay en el día buscando que todos los apoyos que el gobierno manda llegaran a la gente. Entonces mi idea, mi gestión de que a pesar de todos los problemas y los obstáculos que me pusieron no pudieron vencerme en ningún momento porque yo estaba convencida de lo que estaba haciendo y porque trabajes o no yo vivo acá, mis hijos viven acá (Socorro)

En todos los casos preguntamos si habían realizado obras para mujeres, pues en muchas ocasiones fue reiterado el argumento del compromiso con ellas. En este aspecto destacó el hecho de que no hubo una política dirigida ex profeso a las mujeres bajo una perspectiva de género; es decir, que tuviera una intención explicita para combatir la condición de desigualdad de este sector de la población.

Varias presidentas consideraron la importancia de llevar a las mujeres cursos que les permitieran desempeñar mejor su papel femenino: corte, tejido, bordado, reposteria, panadería, bisuteria. Incluso en algunos casos se señaló el reparto de productos como ayuda a mujeres

...ya se les daba su harina, su frijol cuando había, en tiempo de cuaresma su pescado, sardinas y íbamos (sic) a traer eso a Tlaxcala y yo misma iba a repartir... (Leonor)

La ayuda a mujeres se identificó en otros casos como la creación de talleres de maquila para que se incorporaran al trabajo asalariado, y sólo los casos de Porfiria y Juana destacan por sus proyectos de salud hacia las mujeres con los programas de detección oportuna del cáncer y de colposcopía. El primero de ellos trascendió la administración de su creación, y podemos decir que fue el de mayor impacto.

 

Estrategias familiares y estrategias políticas

En este documento hemos visto cómo mujeres de diversas generaciones se han incorporado a la vida política de sus regiones mediante recursos variados. También hemos podido ver que con la emergencia de nuevos partidos no sólo hay mayor participación de gente muy joven, sino que para algunas como Socorro, representa una opción real de avance polítoco. No obstante, los conflictos de poder no desaparecen. Con todo, la percepción que las mujeres tienen de sí mismas y de sus papeles en la política muestran que la sola inclusión de ellas en las presidencias municipales no es suficiente para hablar de una democratización real, toda vez que su aceptación no siempre es completa y su presencia genera muchas veces recelo. Esta situación de desigualdad, que pese a todo sigue presente, obliga a las mujeres a buscar estrategias que les permitan conciliar su papel de madres o esposas, cuando es el caso, o de buscar mecanismos extraordinarios para ser respetadas y reconocidas. Juana es muy elocuente al respecto

...en materia de damas, pus ahí viene la diferencia porque pues, bueno el varón tiene otra cultura, tiene otra manera de ser porque en determinado momento pues no tiene la carga de la casa, de los hijos, de la pareja. Él llega a la mejor aparte de ser militar pus llega el varón a ordenar "oye, dáme de cenar" y tiene otra situación y la mujer no. La mujer es diferente, independientemente yo antes de salir de la casa tengo que pensar que es lo que se va a hacer porque la persona que trabaje pus no va a tomar la decisión, quiere una orden y quiere el material. Entonces a veces diez, once de la noche que andes comprando tus cosas, entonces esa situación de a veces resolver otra cosa que me tocó mucho usar ya como presidente estés en un cabildo, en una reunión importante y que estés tomando decisiones y que suene tu teléfono y te diga tu hija: "mamá, mi hermana no me deja mis calcetas, ven porque ya se puso mis calcetas", entonces es como te pones a ver que son parámetros diferentes. Porque no le van a hablar a él, aunque él esté aquí no le van a decir "papá mis calcetas", sino la mamá siempre resuelve esas situaciones...

Las presidentas municipales no son sólo mujeres que trabajan, son mujeres que desempeñan una actividad que las hace vulnerables porque su vida privada está permanentemente expuesta a la vista de sus gobernados. Algunas son parte de familias con amplia tradición política en la región, otras han sido pequeñas empresarias que dan trabajo a gente de su localidad, todo mundo sabe dónde viven, quienes son los miembros de su familia, sus amistades y en varias ocasiones, según testimonios, tuvieron que hacer a un lado a la familia para evitar conflictos o evadir amenazas.

Encontramos estrategias diferentes a las que las mujeres acudieron para atender las obligaciones de la alcaldía y resolver los asuntos familiares, ya sea del cuidado de los hijos o de los hijos y esposo. El caso de Leonor, por ejemplo, no implicó conflicto mayor, dado que sus hijos eran todos mayores, incluso algunos ya casados y viviendo fuera del hogar materno. Ante su participación en la política, su esposo decidió permanecer fuera del pueblo durante su campaña y más tarde, durante la gestión, se ocupó de atender el negocio de maquila que tienen en su casa, pero siempre al margen de las actividades públicas de ella.

Clementina y Emma Yolanda mantuvieron a su familia lejos del municipio durante sus gestiones. Clementina mantuvo a su hija estudiando en otro estado. Otras acudieron al apoyo del servicio doméstico para el cuidado de los hijos o al apoyo familiar. Los esposos, excepto en el caso de Felícitas, generalmente no se involucran en las actividades de la casa y su apoyo se limita, por así decirlo, a no intervenir ni poner obstáculos para el trabajo de sus esposas. Pese a que el trabajo de la alcandía es de tiempo completo, requiere de dedicación y con frecuencia salen a comunidades o reuniones de carácter estatal, las mujeres siguen cumpliendo el doble papel de madres, madres-esposas y por supuesto supervisoras del buen funcionamiento de sus hogares.

Pero no sólo la familia requiere de las mujeres estrategias de funcionamiento. Todas, incluso las más jóvenes reconocen que "las mujeres somos más propensas a las críticas" (María del Rayo), de manera que están muy concientes que su posición las vuelve blanco de ataques continuos. Aunque estos ataques a su reputación y a su papel de buenas hijas o buenas madres fueron más frecuentes durantes las campañas que en el ejercicio de sus gestiones, hay una tendencia de las presidentas por cuidar "la envestidura del presidente, que debe ser seria" (Teresa).

Hemos visto que las presidentas han tenido que enfrentar ataques de los rivales, inconformidades en los cabildos y de una u otra manera tuvieron que "poner orden". Destacan dos anécdotas que relatan cómo mediante estilos muy particulares las alcaldesas logran cierto control de la situación

Otra vez en otro cabildo que empiezan duro y dale y yo ya estaba, discúlpenme pero ya estaba harta y les dije: con una chingada ¿qué es lo que quieren? ¿no han visto el trabajo que yo he hecho? El techo financiero ¿hasta cuando me lo dieron? hasta julio, y no en julio que vino el gobernador a coronar a la reina ¿no inauguró varias obras? ¿qué es lo que quieren de mi? Aquí estoy en un nido de víboras que no sé ni de cuál cuidarme así que ¿qué es lo que quieren? Y abro el cajón y yo tenía una 380, pero no les hice nada, pero se calmaron y después la esposa de un regidor dijo que yo la había balaceado, pasaron las balas 10 cm. arriba de su cabeza, le digo a la otra le doy 10 pa'bajo, pero mire de ahí para acá trabajamos rebien... (Leonor)

...el primer cabildo fue muy pesado para mí pero también decidí, yo dije si yo dejo que este cabildo se me salga de las manos "adiós"... nunca en la vida hablé de diferente manera no solicité ordenes [sólo] que no se volviera a utilizar ninguna palabra altisonante como yo lo había escuchado al inicio de que iniciamos la primer sesión ya había alguien dicho algunas dos o tres groserías y habían mencionado algunas cosas, no en contra mía pero sí habían hablado de diferente manera y no había orden, empezaron con que uno hablaba, otro hablaba, entonces en ese momento así fue tan rápido como cuando alguien va a sobrevivir a un ataque o algo y me dije, si controlo esto desde ahorita lo voy a controlar siempre, y lo logré. Y entonces hablé fuerte y dije señores última situación que yo escucho que se hable de esta manera. Primero por respeto a la presidenta municipal, segundo por el respeto a las compañeras... (Juana)

 

Discusión y Resultados

Resulta altamente significativo que la mayoría de las presidentas de nuestro estudio, previamente a ocupar la presidencia, habían desempeñado actividades que pudiéramos llamar femeninas, como la docencia; pero la actividad de la alcaldía es una donde predominan los hombres y no es precisamente considerada una actividad de mujeres. Asistencia a reuniones fuera del municipio, congresos o actividades que las ocupan hasta altas horas de la madrugada pueden ser motivo de habladurías o incluso de problemas con los esposos, cuando es el caso. Varias declararon haber sido víctimas de chismes relacionados con su reputación o comportamiento sexual, algunas por supuestas relaciones clandestinas con su síndico, con su secretario o algún regidor, otras por generar desconfianza al no ser casadas, ya sea porque la condición de ser esposas les imprime mayor seriedad o porque la soltería las hace sospechosas de preferencias sexuales lésbicas. La mayoría dice estar concientes de estas situaciones, pero no les dan mayor importancia. Una de ellas, sin embargo, nos cuenta cómo hizo acompañarse todo el tiempo de una jovencita a la que puso a su servicio casi como dama de compañía para evitar, por un lado, habladurías de la gente, pero también para evitar la desconfianza del esposo.

Evidentemente la condición de mujeres al frente de la alcaldía imprime cierta particularidad a las gestiones en aspectos como las relaciones que se establecen con el cabildo o con las mujeres y los varones de la población. En varios casos los testimonios señalaron que hubo un mayor acercamiento de las mujeres a la presidencia por diversas circunstancias, incluyendo el hecho de reportar abusos (golpes) por parte de los esposos.

En este documento hemos querido mostrar cómo, a partir de la propia voz de las actrices, se expresa una muy particular forma de vivir la posición de gestoras y dirigentes de comunidades diversas a nivel municipal. Las experiencias relatadas por las protagonistas dejan ver la manera en que las instituciones sociales forman una parte importante del ser parte de un mundo que de alguna manera determina cierto tipo de accionar y la toma de decisiones en momentos particulares de la vida.

Es posible afirmar que todas las mujeres que formaron parte de este estudio rebasan la media de las mujeres de sus localidades en muchos sentidos: han vivido fuera de sus comunidades por razones de trabajo o estudio por largos periodos de tiempo; han sido exitosas en el trabajo en la iniciativa privada como empleadas, como pequeñas empresarias o como dirigentes de escuelas o sindicales del magisterio; tienen, la mayoría de ellas, un nivel de instrucción superior a la media de sus municipios, alcanzando estudios superiores. En ocasiones han sido herederas de familias con trayectoria política, presencia y arraigo en sus comunidades, pero sobre todo han sido mujeres que, de acuerdo con Agnes Heller (1977), se destacan como personas que han trascendido el nivel de simple cotidianidad para erigirse como seres particulares que quisieron romper con diversos obstáculos que les imponían las tradiciones caciquiles o simplemente las tradiciones sociales a las que se hallan asociadas. Esto significa que, así como aquellas mujeres de los primeros períodos accedieron al poder debido en mucho a su tradición familiar no sólo política, sino porque pertenecían a clases sociales privilegiadas, las presidentas más jóvenes como Janet o Francisca tuvieron que enfrentarse a dificultades familiares y económicas para estudiar en medios que presentan pocas opciones para las mujeres, pero que logran trabajar y llegar a las presidencias municipales con menor trayectoria y militancia política.

 

Conclusiones

Aunque cada una de las presidentas muestra experiencias específicas y muy personales en sus gestiones, es notorio el esfuerzo que cada una de ellas tiene que realizar para resolver las inconformidades que se generan por su acceso al poder. Efectivamente, de acuerdo con nuestra hipótesis, los testimonios despliegan los esfuerzos que cada una de ellas realizó para enfrentar las prácticas de exclusión y estigmatización de que fueron objeto por su condición de género.

En todos los casos, desde aquellas presidentas designadas por la cúpula partidista del PRI, como Leonor, Teresa o Gabriela, hasta las que son electas mediante mecanismos de votación abierta como Marisa o Porfiria, se ven envueltas en conflictos postelectorales, por ser mujeres, debido a su ascenso a la candidatura. Incluso aquellas presidentas que acceden al poder por partidos de alternancia tienen que enfrentar las inconformidades que provoca la presencia de mujeres presidentas en comunidades rurales con amplia tradición de mando masculino.

Destaca, pese a todo, el entusiasmo y energía puestos en las gestiones de las mujeres, la ausencia de una perspectiva de género de las administraciones. La participación de las mujeres en puestos de elección como las alcaldías no es condición del reconocimiento que éstas tengan de la posición de desigualdad y desventaja y sometimiento que existen en las mujeres respecto de los hombres en la sociedad y por tanto en las instituciones como la familia. Por el contrario, la visión que se tiene en relación con las mujeres y las políticas que se instrumentan, cuando llegan a ser explícitamente hacia ellas, en algunos casos están orientadas desde una perspectiva dominante altamente paternalista con miras a la protección de su papel femenino.

Algunos trabajos reportan un cambio importante en las mujeres que han participado en política, el cual se manifiesta en que "han logrado el empoderamiento personal". Particularmente creemos, con base en las experiencias de las presidentas de este estudio, que la toma de decisiones en relación con la vida personal y profesional se da de manera diferenciada y está atravesada por una serie de circunstancias de carácter biográfico que las determina, pero siempre estar a la cabeza de las alcaldías las hace mujeres que aprenden a negociar y a tomar decisiones en ámbitos que trascienden el laboral.

 

Literatura Citada

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