SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.6 número1Contiendas agrarias internacionales: los campesinos migrantes y su derecho a la movilidad. (Análisis trasnacional)El costo emocional de la separación en niños migrantes: un estudio de caso de migración familiar entre Tlaxcala y California índice de autoresíndice de materiabúsqueda de artículos
Home Pagelista alfabética de revistas  

Servicios Personalizados

Revista

Articulo

Indicadores

Links relacionados

  • No hay artículos similaresSimilares en SciELO

Compartir


Agricultura, sociedad y desarrollo

versión impresa ISSN 1870-5472

agric. soc. desarro vol.6 no.1 Texcoco ene./abr. 2009

 

La migración de jornaleros agrícolas tlaxcaltecas a Canadá : un sistema complejo

 

Agricultural workers migration from Tlaxcala to Canada: a complex system

 

María del S. Arana-Hernández, José de J. Rodríguez-Maldonado, Guillermo D. Carrasco-Rivas*

 

* CA Análisis regional: población, desarrollo y procesos socioculturales. Universidad Autónoma de Tlaxcala. Centro de Investigaciones Interdisciplinarias Sobre Desarrollo Regional (CIISDER). Blvd. Mariano Sánchez #5 Col. Centro Tlaxcala, Tlax. Tel-fax: (246)46 29 92 2. (socoara2002@yahoo.com.mx) (iglesiaprofeticadesardis@yahoo.com.mx) (memo54@prodigy.net)

 

Resumen

En este trabajo se retoma la teoría de sistemas o enfoque sistémico, para explicar las interrelaciones del proceso migratorio complejo y multifactorial que cientos de tlaxcaltecas viven cada año, especialmente en la temporada en que Canadá requiere de mano de obra para su trabajo agrícola, que va desde la preparación del invernadero, hasta la cosecha y empacado de frutas y verduras; migración que es legal bajo la operación del Programa de Trabajadores Agrícolas Temporales Mexicanos a Canadá (PTAT), manejado en México por la Secretaria del Trabajo y Previsión Social, en cada una de las entidades federativas participantes del país. Se trata de un proceso histórico que, debido a su complejidad, precisa de un enfoque holístico para abordar no sólo lo económico, demográfico, o cultural del proceso, sino también lo político, lo ambiental, y aun lo visible e invisible de lo subjetivo que presentan el proceso y actores involucrados: violencia intrafamiliar, trastornos psicológicos, crisis emocionales, morales y hasta existenciales. De esta manera se utiliza una nueva perspectiva para el análisis del proceso migratorio del estado de Tlaxcala.

Palabras clave: Canadá, laboral, migración, teoría de sistemas, Tlaxcala.

 

Abstract

In this article, system theory or a systemic approach is used in order to explain interrelations in the complex and multi-factorial migratory process that hundreds of people from Tlaxcala go through every year, especially during the season when Canada requires labor for its agricultural work, which spans from greenhouse preparation to harvesting and packing fruits and vegetables; migration is legal under the implementation of the Seasonal Agricultural Workers Program México — Canada (PTAT, for its initials in Spanish), which is managed in México by the Ministry of Labor and Social Prevision, in each of the participating entities in the country. This is a historical process which, due to its complexity, requires a holistic approach in order to tackle not only the economic, demographic or cultural aspects of the process, but also the political, environmental and even the visible and invisible of subjective aspects that the process and actors involved present: domestic violence, psychological disorders, and emotional, moral and even existential crises. Thus, a new perspective is used for the analysis of the migratory process from the state of Tlaxcala.

Key words: Canada, labor, migration, systems theory, Tlaxcala.

 

Introducción

Se denomina migración a los desplazamientos de un lugar a otro, que suponen un cambio de residencia habitual, de forma permanente o definitiva. Retomar éste y otros componentes facilita la construcción de tipologías: por el número de personas que emigran, pueden ser individuales o familiares; por desastres naturales, guerras, persecuciones políticas, religiosas o por causas socioeconómicas y culturales, se habla de migraciones voluntarias o forzosas. Si se realizan dentro del país o cruzan los límites políticos administrativos y geográficos del mismo, es migración interna, externa o internacional. Implica, en términos jurídicos si es legal, cuando se cumplen los requisitos de entrada. Y es ilegal cuando no se cubren, parcial o totalmente, estos requisitos legales.

El proceso migratorio que se describe en este artículo, por sus características, se reconoce en la tipología como: legal, internacional, temporal, individual y voluntario, determinado propiamente por motivos laborales.

Es legal porque es un programa de contratación de trabajadores mexicanos a nivel gubernamental (Direcciones Estatales de Empleo-Secretaría del Trabajo y Previsión Social, México) y con carácter bilateral (México-Canadá, a través del Programa de Trabajadores Agrícolas Temporales Mexicanos a Canadá: PTAT). Se tienen expedienten personalizados, con documentación requisitada por parte de los empleadores y contratistas, un contrato qué cumplir en tiempo y forma, en el que se establecen también los derechos y obligaciones de trabajadores y patrones. Los trabajadores portan pasaporte y visa especial que demanda Canadá para ingresar a su territorio, cubren y pagan las cuotas correspondientes por su trabajo y estancia en ese país, como cualquier otro ciudadano canadiense.

Es internacional porque implica traspasar fronteras. Los lugares de trabajo a los que llegan los seleccionados contratados previamente en México, y específicamente del estado de Tlaxcala son siete de diez provincias en Canadá: Nueva Escocia, Nuevo Brunswick, Isla Príncipe Eduardo, Alberta, Manitoba, Québec y Ontario, los dos últimos reciben 90% de los trabajadores. Leamington, en la provincia de Ontario, es el lugar al que llegan 50% de los trabajadores tlaxcaltecas entrevistados. El empleo es temporal, porque está sujeto a la demanda de los empleadores y a las actividades agrícolas a realizar. Hay un mínimo de seis semanas de trabajo de tiempo completo (entre ocho y 12 horas diarias), y un máximo de ocho meses, en el que se garantiza que las granjas e invernaderos tengan trabajadores cuando más se necesitan: la siembra y especialmente en la cosecha. Pasado el ciclo agrícola, al acercarse los meses del invierno canadiense (octubre-noviembre), los trabajadores vuelven a casa; o antes, si ya no hay trabajo. Antes del 15 de diciembre ningún trabajador agrícola debe estar en Canadá.

Es individual porque la mano de obra que se contrata es particular y exclusivamente de jefes de familia, hombres casados y con dependientes económicos. Hay participación femenina en menor grado, siendo mujeres solas o madres solteras, que deben sostener económicamente a la familia. El requisito para hombres y mujeres que participan en el PTAT es que obliga y precisa su retorno a sus comunidades. Es voluntario porque la convocatoria del PTAT se hace de forma escrita con trípticos de información, internet o boletines que las instituciones que lo conducen generan. Ayuda a su difusión y aceptación, la comunicación oral de los participantes que regresan e invitan a otros vecinos, familiares, y conocidos, que pretenden mejores condiciones económicas que las que actualmente tienen.

Toda la población interesada es sujeto de atención, y puede aspirar a ser contratada. El propósito principal para inscribirse y participar en el programa es meramente laboral, ya que el sector de los productos no susceptibles de ser cosechados con máquinas en el agro canadiense, tanto al aire libre como en invernaderos, es intensivo en mano de obra, por su fragilidad y periodos variables de maduración. Cultivos de frutas como manzana (Malus sylvestris), pera (Pirus comunis), durazno (Prunus persica), fresa (Fragaria vesca) y cereza (Prunus avium); hortalizas como jitomate (Lycopersicum esculentum), brócoli (Brassica oleracea), lechuga (Lactuca sativa), pimiento (Capsicum annuum), pepino (Cucumis sativus), zanahoria (Daucus carota); y plantaciones, sobre todo de tabaco (Nicotina tabacum).

Además, la diversidad de elementos, aspectos, condiciones, factores, relaciones y variantes que confluyen en la tipología del proceso migratorio dinámico de tlaxcaltecas en el PTAT, conduce también a múltiples y complejas perspectivas, enfoques, posiciones ideológicas y estudios disciplinarios, interdisciplinarios y hasta multidisciplinarios. Se infiere que nos encontramos con problemas de complejidad organizada en todos los niveles de la estructura jerárquica, de lo cual se desprende que tal complejidad debe ser abordada mediante leyes sistémicas (Covarrubias, 2002).

 

Perspectiva teórica: teoría de sistemas

El enfoque sistémico trata de comprender el funcionamiento de la sociedad desde una perspectiva holística e integradora, donde lo importante son las relaciones entre los componentes. Se llama holismo al punto de vista que se interesa más por el todo que por las partes. En este sentido, se retoma el enfoque sistémico y su contribución, al no admitir la posibilidad de explicar un elemento, si no es precisamente en su relación con el todo. La Teoría General de Sistemas (TGS) fue propuesta por el biólogo austriaco Ludwig von Berthalanffy a mediados del siglo veinte (Coll, 2001). Criticó la aplicación del método científico en los problemas de la Biología, debido a que éste se basaba en una visión mecanicista y causal, que lo debilitaba como esquema para la explicación de los grandes problemas que se dan en los sistemas vivos. De este cuestionamiento, que reformula el paradigma intelectual para entender mejor el mundo que nos rodea, surge formalmente el paradigma de sistemas.

La TGS propone terminología y métodos de análisis que se han generalizado en todos los campos del conocimiento y están siendo usados extensamente por tecnólogos y por científicos de la Física, la Biología y las Ciencias Sociales, gracias a que el enfoque sistémico es integrador, tanto en el análisis de las situaciones como en las conclusiones que nacen a partir de ellos, proponiendo soluciones en las cuales se tienen que considerar diversos elementos y relaciones que conforman la estructura de lo que se define como sistema, así como también de todo aquello que conforma el entorno del sistema definido.

La base filosófica que sustenta esta posición es el holismo -del griego holos = entero. Sistema es un conjunto organizado de elementos que interactúan entre sí o son interdependientes, formando un todo complejo, identificable y distinto. Por elementos de un sistema se entiende no sólo sus componentes físicos sino las funciones que éstos realizan. Algún conjunto de elementos de un sistema puede ser considerado un subsistema si mantiene una relación entre sí que los hace también un conjunto identificable y distinto.

Otra definición, más común, establece que un sistema es un conjunto de elementos en interacción, de manera tal que un ser vivo, una célula, incluso una ciudad o el motor de un automóvil pueden pensarse como sistemas. Una definición como ésta es demasiado general, sobre todo cuando trabajamos con sistemas complejos como, sin duda, lo son los procesos sociales (Peisajovich, 2005).

El aporte de esta perspectiva sistémica, fenomenológica y hermenéutica es lo que hace posible ver a la organización ya no como un fin predeterminado (por alguien), como lo plantea el esquema tradicional, sino que dicha organización puede tener diversos fines en función de la forma como los involucrados en su destino la vean, surgiendo así la variedad interpretativa. De ahí que el enfoque sistémico contemporáneo, aplicado a estudios sociales, plantea una visión inter, multi y transdisciplinaria que ayudará a analizarlos de manera integral, permitiendo identificar y comprender, con mayor claridad y profundidad, sus múltiples causas y consecuencias.

El enfoque sistémico contempla la totalidad de los componentes, centrándose en las entradas y salidas de materia, en los flujos de energía y en las interrelaciones entre sus componentes.

Por ello, hay dos aspectos fundamentales para definir los sistemas: las características de las partes que los forman, y la manera o las relaciones que establecen entre sí. Es decir, la estructura y la función. El aspecto estructural se refiere a la disposición espacial de los componentes de un sistema. El funcional, a la manera en la que se integran dichos componentes y que se refleja en fenómenos dependientes del tiempo, tales como los cambios, flujos e intercambios energéticos (Peisajovich, 2005).

Dentro de un sistema las interrelaciones son importantes porque permiten analizar la dinámica de los elementos que lo conforman y se refieren a las interrelaciones entre los componentes. El vocabulario básico de la TGS, integrado por diversos campos científicos incluye, entre otros, los siguientes conceptos: sistemas y subsistemas, entradas y salidas, cajas negras y realimentación.

Del exterior, los sistemas reciben entradas en forma, por ejemplo, de información, o de recursos físicos, o de energía. Las entradas son sometidas a procesos de transformación como consecuencia de los cuales se obtienen salidas o resultados.

Hay realimentación cuando parte de las salidas de un sistema vuelven a él en forma de entrada. La realimentación es necesaria para que cualquier sistema pueda ejercer control sobre sus propios procesos. Cuando en un subsistema se conocen sólo las entradas y las salidas, pero no los procesos internos, se dice que es una caja negra (Peisajovich, 2005).

La importancia del enfoque sistémico se deriva de su interrelación con el carácter de sistema con el que se presentan los hechos sociales. Toda sociedad puede dividirse en cuatro subsistemas: el biológico (mantenido por organizaciones de parentesco y por organizaciones de salud pública), el económico (mantenido por relaciones de producción, intercambio, y consumo), el cultural (mantenido por relaciones de información), y el político (mantenido por relaciones de poder y de participación en éste). Puesto que los cuatro subsistemas son parte de una misma sociedad, están fuertemente ligados entre sí y, por estarlo, ninguno de ellos puede estudiarse adecuadamente con independencia de los otros. Por consiguiente, todas las ciencias sociales son necesariamente sistémicas antes que individualistas, porque tratan con sociosistemas.

 

Metodología

La estrategia metodológica combinó el uso de información cuantitativa y cualitativa para investigar diferentes aspectos de los trabajadores agrícolas, sus núcleos familiares, la comunidad donde viven, así como de su experiencia laboral en Canadá, sus relaciones de carácter social, laboral, organizacional y ambiental, tanto en su lugar de origen como en el de destino o laboral.

Se aplicaron 200 cuestionarios con 88 preguntas, que en 90% de los casos se convirtieron y sirvieron como guía de entrevista. Las localidades seleccionadas fueron: de la región centro-sur del estado San Antonio Atotonilco, Ixtacuixtla (50 entrevistas); de la región poniente, las cabeceras municipales de Sanctórum de Lázaro Cárdenas (80) y, Nanacamilpa de Mariano Arista (70). Selección basada en el criterio del mayor número de registro de participantes en el Programa de Trabajadores Agrícolas a Canadá (PTAT), de acuerdo con la base de datos proporcionada por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social-México. Aun con la ventaja que ofreció dicha base al tener los nombres de los trabajadores, a muchos no se pudo localizar, pues se les conocía por otro nombre, o no se les encontraba en la dirección referida. Sin embargo, se aprovechó la visita y se utilizó la estrategia denominada "bola de nieve".

Por el carácter y tipo, la información requerida y obtenida se sistematizó en una base de datos, construyéndose cinco grandes bloques o subsistemas: el social integra datos generales del entrevistado (edad, número de hijos, ocupación, dependientes económicos, características de construcción y servicios básicos en la vivienda); el subsistema económico-laboral considera condiciones, tiempo de trabajo y actividades que realiza en Canadá, promedio de gasto en alimentos, herramienta, salud, diversión, actividades en su tiempo libre; y, en general, desempeño durante su estancia en Canadá; subsistema técnico: condiciones de trabajo y procesos de producción en su comunidad de origen, requerimientos actuales como trabajadores agrícolas; subsistema organizacional: disponibilidad para el trabajo en equipo, resultados de experiencias previas y cómo mejorar la participación y distribución de cargas de trabajo colectivo; finalmente, el subsistema ambiental, con información respecto a las condiciones actuales de su medio ambiente en sus lugares de origen: ¿qué hacen, o deben hacer para su uso, conservación-administración, medidas de prevención y mitigación del deterioro existente?

 

Resultados

Subsistema 1: social

La edad es un indicador determinante en este subsistema del proceso migratorio. Cada vez más se demanda mano de obra joven, con ganas de trabajar y, sobre todo, con fuerza y aguante físico para iniciar y terminar las actividades, así como el soporte de las condiciones climáticas del país al momento de su desempeño. De los entrevistados, 40.5% estuvo en el intervalo de 32 a 36 años de edad y 31% de 24 a 30. Todo el grupo ha sido contratado de una a nueve veces. El resto (28.5%) tiene entre 38 y 53 años. En este último grupo el número de veces que han sido contratados para ir a Canadá varía de 2 hasta 17 veces. Algunos de estos trabajadores se iniciaron a la edad de 36 años, edad que aún es aceptada en el rango que se precisa para ingresar.

Actualmente, el rango de edad va de 22 a 45 años, aunque hubo un periodo en el que se promovió la edad de 16 años para su contratación. Tal estrategia en el PTAT, especialmente en el Estado de Tlaxcala, acarrea consecuencias de índole social tanto en la persona que participa como en su comunidad de origen: condiciones inestables de sus unidades familiares, especialmente económicas inducen la iniciativa de migrar, que les resulta atractiva y fácil por la opción de salir de sus unidades familiares y trabajar en el exterior a través del Programa, al ser candidatos idóneos con sólo tener dependientes económicos, requisito que cubren al contraer matrimonio o estar en unión libre con mujeres madres solteras que ya tienen uno o más hijos, escenario que se presenta en algunas localidades del estado de Tlaxcala.

Otros elementos importantes de este subsistema son el nivel de escolaridad y oficio u ocupación. De los entrevistados 52%, mencionaron haber cursado la primaria completa; 27% hasta la secundaria, y 21% cursó sólo tercero, cuarto y quinto grado de primaria.

Respecto al oficio, migran quienes son requeridos y se ofertan como mano de obra especializada. De los entrevistados 54% cubre tal requisito; de oficio son jornaleros y campesinos. El 46% restante se ocupa como albañiles, obreros, intendentes o vigilantes en sus comunidades antes de irse y después de regresar del trabajo temporal realizado en Canadá.

Después de 33 años los mexicanos, y especialmente los tlaxcaltecas, se han vuelto indispensables, estructuralmente necesarios para que las granjas e invernaderos de cultivos canadienses intensivos en mano de obra sobrevivan. No sólo porque hay muchos tlaxcaltecas y mexicanos, y pocos canadienses dispuestos a trabajar, sino porque tlaxcaltecas y mexicanos también son más productivos. Un mexicano en el campo rinde lo que dos, tres y hasta cuatro canadienses, no sólo porque trabajan más rápido y aguantan más horas, sino porque están dispuestos a laborar en días feriados y domingos (Basok, 2002).

En época de cosecha, tener canadienses en el campo o en los invernaderos equivale a perder millones de dólares. No sólo porque rinden menos, sino porque justo en el momento en que más se les necesita no están; exigen y hacen valer sus prestaciones. Y si no se cosecha un tomate maduro en el momento exacto, empieza a pudrirse y su calidad decae. Se destina entonces a fábricas de salsa de tomate (catsup), pero su valor monetario es menor. Y si pasan unas horas más, ni para industrializarse sirve. En un lapso de muy pocos días, si no se levanta lo sembrado, el productor pierde cientos de miles o millones de dólares.

A nivel mundial Canadá es una potencia media con niveles de competitividad que la han hecho parte del grupo de los siete países industrializados más ricos del mundo, con una política social muy dinámica y eficiente que la coloca en uno de los primeros lugares entre los países con un elevado nivel de vida (Gutiérrez Haces, 2000). Por ello, solicita fuerza de trabajo, especialmente para actividades agrícolas, en las que por las características demográficas de su población no es posible contratar a ciudadanos canadienses. En contraparte, México ofrece abundante mano de obra con las características y requisitos solicitados por los empleadores.

Sin duda, el aspecto social en el proceso migratorio tlaxcalteca es perceptible a nivel individual, familiar y comunitario, tanto en los lugares de origen de los trabajadores como en los de destino; pues llevar, ver y encontrarse con cientos o miles de trabajadores extranjeros cada viernes por la tarde en los pueblos y ciudades canadienses más próximos a las granjas -sus lugares de trabajo-, para abastecerce de víveres necesarios para la semana de trabajo, comprar sus tarjetas telefónicas, llamar a casa y enviar la remesa semanal a sus familiares en el estado de Tlaxcala, no sólo genera la sensación de "sentirse invadidos" entre los ciudadanos canadienses, también causa fobias y aversiones.

En los lugares de origen los efectos se observan en los hijos adolescentes y jóvenes que, en ausencia del padre jefe de familia adoptan distintas personalidades. En palabras de sus madres, adquieren malas costumbres. No obedecen, se salen de casa cuando quieren, no participan ni cumplen con las tareas de casa y si lo hacen es de mala gana, obligados y amenazados de que en la próxima comunicación telefónica que su papá realice desde Canadá será informado de su conducta y regañado por vía telefónica. Problemas de drogadicción y alcoholismo, de los más conocidos, se acrecientan en estos casos. Respecto a los niños pequeños de dos, tres y hasta ocho años de edad, presentan y sufren depresión emocional, física y moral ante la ausencia de la figura paterna. Comúnmente pierden el apetito, se resfrían, permanecen en cama, el desánimo para seguir con sus actividades diarias como ir a la escuela, jugar con otros niños se hace presente, y pierden todo interés de salir de casa. El tiempo que lleva la asimilación y adaptación a la situación que se vive cada año cuando el papá se va a Canadá varía de una semana a un mes. Múltiples y complejos escenarios viven cada uno de los involucrados de forma directa e indirecta en las familias de los trabajadores temporales que se van a Canadá. De los entrevistados, 75% tienen de uno a tres hijos. El 25% restante tiene de cuatro a seis. De acuerdo al indicador de dependientes económicos, sólo al 30.5% se le suman los padres del trabajador, es decir, los abuelos de los hijos. Y sólo en 7% de los casos se agregan como dependientes económicos los hermanos.

El retorno a sus lugares de origen, especialmente al núcleo familiar, de los trabajadores agrícolas que se fueron a Canadá, es otro proceso de adaptación y aceptación por parte de los hijos. Hay casos en los que éstos desconocen al papá ...no es lo mismo hablarle por teléfono que estar aquí y verlo, salir con él, jugar y reconocerlo. A su retorno, les resulta muy difícil llamarlo, ubicarlo y aceptarlo como papá, pues el tiempo de abandono se prolonga hasta ocho meses, y esto genera una serie de pensamientos y sentimientos adversos a la aceptación incondicional; es un proceso difícil, sobre todo en términos emocionales que enfrenta no sólo el hijo, también el padre recién llegado, la mamá y el resto de los integrantes de la familia.

Se amplía el abanico de los efectos en cada uno de los que viven o están cerca del trabajador migrante temporal. Por respeto a las mujeres que nos permitieron conocerlos, y para salvaguardar sus identidades, sólo escribiremos en términos generales que afrontan diversos escenarios negativos y aberrantes de carácter moral, ético, político, religioso, cultural y social, por sus familiares, sus vecinos comunales y, en general, con su entorno, en el cual debe seguir su cotidianeidad en ausencia de la figura masculina: padre, esposo, protector, sustento versus el despliegue que la masculinidad o machismo en la sociedad mexicana implica.

Por supuesto se presenta la excepción a la regla, por lo que ésta trama no puede generalizarse. Hay casos excepcionales en el que viajar, salir y estar fuera de la familia temporalmente es un elemento que provoca cambios positivos tanto en el migrante que se va, como en la esposa e hijos que se quedan y aguardan el retorno.

 

Subsistema 2: económico

La obtención de ingresos, o maximizarlos, es el impulso principal de un tlaxcalteca para involucrarse en una serie, no siempre clara, de trámites, visitas y pagos para lograr calificar al Programa. Cuando el trabajador empieza a enviar por diferentes medios sus dólares al estado de Tlaxcala; este dinero, denominado remesas, se canaliza al menos a cuatro aspectos: el pago de deudas que el trabajador y su familia generaron durante los trámites relacionados con el programa en México y Tlaxcala, así como a las que adquiere mientras se recibe el primer envío. En segundo lugar se canaliza al pago de gastos relacionados con la escuela de sus hijos o dependientes económicos. En tercer lugar se dirige a los gastos de fiestas familiares como cumpleaños, quince años, bodas, bautizos y fiestas del pueblo asociadas al santo patrón. Organizadas en su mayoría por el sistema de mayordomías conformados por trabajadores temporales, los cuales en algunas ocasiones deben dejar el programa para cumplir con los compromisos adquiridos, y al año siguiente volverse a incorporar, otros optan por irse mejor a EE. UU. Finalmente, como prioridad casi universal, el destino de las remesas va a la compra de lotes, remodelación, compra o construcción de la vivienda. Se prevé, en muchos casos, que la vivienda tenga una o más accesorias, con objeto de que un mínimo de los recursos económicos ganados se utilicen para actividades y fines comerciales de la familia, o que puedan alquilarse, o prestarse a algún pariente necesitado que estará siempre agradecido, y por supuesto generar cierta plusvalía o renta.

El PTAT depende de la demanda de trabajo agrícola estacional por parte de los agricultores de Canadá. Implica, para los trabajadores, retornar al término de la temporada -no más de ocho meses-, llevando consigo su evaluación laboral en un sobre cerrado que entregará a la oficina de la Secretaría del Trabajo-México, y que es un factor decisivo para ser contratado de nuevo el año siguiente.

Este escenario está ligado al indicador de cuántas veces han sido contratados. Sólo 7.5% de los entrevistados han ido de 10 hasta 17 años consecutivos.

Todos los trabajadores, no importa los años en que han participado, deben demostrar que son capaces de trabajar duro, sin importar las horas que podrían estar laborando en el campo, pues no tendrían derecho a retornar en la siguiente temporada, y perderían la oportunidad de trabajar en esas granjas o en otras, con otros compatriotas que también tienen necesidad de mejorar su calidad de vida; por lo que además de alejarse de sus familias y trabajar en un clima extremoso y difícil (frío, calor, lluvia), tienen la responsabilidad de que si el programa no funciona es por culpa de ellos, y las puertas se podrían cerrar. Esto, por supuesto no ha sucedido. Por el contrario, año con año se va incrementando la plantilla de trabajadores temporales agrícolas mexicanos y tlaxcaltecas, gracias al rendimiento mostrado por los campesinos, y no por las gestiones que debía haber realizado el gobierno mexicano (Vanegas, 2001).

Existen otros incidentes, en los que se avizora esta falta de gestión mexicana a favor de los connacionales: ante la amenaza de no ser aceptados en el PTAT el próximo año, a la hora de sufrir enfermedades o lesiones los trabajadores son reticentes a atenderse en los servicios de salud. Los trabajadores, comúnmente prefieren seguir laborando aún enfermos o lesionados para no contrariar al patrón.

De los entrevistados, 90% declaró no haber tenido problemas de salud. Sólo 10% dijo que sus problemas de salud fueron atendidos por ellos mismos. Dos trabajadores mencionaron sufrir alguna fractura: uno sigue activo, y otro quedó imposibilitado clínicamente para seguir trabajando en estas actividades que requieren un esfuerzo físico considerable. El diagnóstico y dictamen médico fue hecho en México, después de seis meses de que empezó a sentir las molestias y, una vez que el trabajador se encontraba en casa, acudió a un doctor particular.

Como éste, hay otros tópicos que sólo describiremos: el fondo de retiro, que para el caso anterior y el resto de los trabajadores, ni el gobierno canadiense, ni el mexicano, proporciona información suficiente para facilitar que los trabajadores lo cobren o lo exijan. Al Fondo para el Desempleo los trabajadores mexicanos nunca lo ven, pues durante su estancia en Canadá están empleados, pero al regresar a México la ley canadiense no reconoce la posibilidad de que el trabajador esté desempleado. Al término de su contrato de ocho meses máximo, sin importar también los años que han trabajado, los mexicanos en el PTAT no pueden permanecer en Canadá, mucho menos solicitar la ciudadanía o residencia.

Sobre el pago laboral de días feriados, pago vacacional, reintegro del IVA o VAT canadiense, que a diferencia de los canadienses los trabajadores mexicanos tienen derecho a su devolución, no hay información. Sin embargo, de acuerdo con las entrevistas realizadas, en 90% de los casos gastan de 100 a 700 pesos en rubros como alimentación; salud -especialmente medicinas (antigripales, antidiarreicos, desinflamatorios, pomadas y ungüentos para dolores musculares, vendas), que en muchos de los casos prefieren llevarlos desde su casa a comprarlos allá- herramienta, ropa, vivienda, electrodomésticos y diversión. En algunos casos, estos enseres se traen de regreso a sus lugares de origen, otros los dejan pensando en su regreso la próxima temporada: posibilidad para 39% de los entrevistados, dado que nos contestaron que han regresado a trabajar a la misma granja. No así para el restante 61% que cambia sus lugares de trabajo cada año. Pueden llegar al mismo pueblo o ciudad, pero no a la misma granja.

Ontario es la provincia a la que llega 64% de los entrevistados. De éstos, 45% respondió más a detalle en qué lugar de Ontario trabajó: Leamington. Québec recibe 33% de los trabajadores entrevistados. La provincia de Alberta es primera opción para 2.5%; y 1.5% va a otro destino.

De los trabajadores entrevistados 36% ha estado en dos y hasta tres lugares de trabajo; sin embargo, no son diferentes a los mencionados en el párrafo anterior.

Otro elemento considerado en este subsistema es el contrato de empleo. Para 85% de los trabajadores, el periodo más corto de trabajo es de dos, tres y cuatro meses y el más largo (40%) de seis y para 24% de cinco y ocho.

Hay datos que se correlacionan con las actividades-tareas que realizan. Los que trabajan periodos de cinco, seis y ocho meses, ejecutan todas las actividades de la producción agrícola: preparación de las camas en invernadero o del suelo, siembra, proceso de riego, fertilización, las podas y el deshoje o desyerbe que demanda la semilla, hasta la cosecha y empaque de los productos agrícolas.

En periodos cortos, de seis semanas, a dos, tres y cuatro meses, la actividad es exclusivamente cosecha y empaque de la producción. De los entrevistados, 35% ha tenido experiencia de trabajo con dos cultivos, 27% con uno; 22% con tres; 10% con cuatro; y sólo 6% ha trabajado hasta con seis. ¡La experiencia se torna especialización! Los cultivos se diversifican tanto para los que trabajan uno, como para los que han trabajado seis: lechuga (Lactuca sativa), manzana (Malus sylvestris), jitomate (Solanum lycopersicum), pepino (Cucumis sativus), pimiento (Capsicum annuum), tabaco (Nicotiana tabacum), entre los principales. Col (Brassica oleracea), zanahoria (Daucus carota) y flores entre los menos. Para 62% de los entrevistados, en cada salida y tareas encomendadas se aprende algo nuevo, aún cuando se realizan las mismas actividades.

El 53% de los entrevistados se ha desempeñado tanto en invernadero como en campo abierto, 23% sólo en invernadero y 24% exclusivamente en campo abierto, lo que sin duda proporciona a los trabajadores mayores conocimientos en el manejo de diversos cultivos y sus condiciones óptimas para lograr buenas cosechas, y en consecuencia altos niveles de producción.

Concluimos la descripción de este subsistema con datos referentes al salario. No en todas las provincias se paga igual. Y el aumento del salario en los años que ha funcionado el programa ha sido sólo de uno o dos dólares, abuso conocido por las autoridades que participan en el proceso. En 1993 se les pagaba a los trabajadores mexicanos entre cinco y seis dólares canadienses. En 2005, 12 años después, el salario fue $7.50 (74 pesos mexicanos, con una conversión del dólar de 9.68 a la compra y 9.88 a la venta, agosto 2006). En las reglas del contrato se establece que el trabajador agrícola recibirá el salario mínimo o lo que se pague en el medio a trabajadores canadienses por el mismo trabajo, lo que resulte más alto (Anónimo, 2003). Sin embargo, el trabajador canadiense difícilmente acepta $7.50 u $8.00, por labores agrícolas.

En el cultivo de flores el salario por hora es 7.70. La cosecha mecánica del tabaco para ahumar se paga de otra forma. Por el primer horno que se llena en un día se paga a los trabajadores 75 dólares, y a partir de ese momento el resto del día se les paga por hora. La cosecha del tabaco negro tiene un salario por hora de 8.80 dólares canadienses.

 

Subsistema 3: técnico

El campo es el principal vivero de migrantes, más aún cuando su destino es Canadá. Como hemos dicho, uno de los requisitos del candidato ideal al PTAT es que sea campesino: mano de obra calificada en la siembra y la cosecha de productos agrícolas. Mejor si no tiene tierra propia, o si la tiene, poca. Pareciera contradictoria esta demanda-oferta. Por un lado, se pide mano de obra especializada y, por otro que no tenga tierra. ¿De dónde, entonces, se obtiene la experiencia? De los entrevistados 31% no realiza actividad alguna relacionada con la siembra; es decir, no se dedica en sus lugares de origen a las actividades de campo: son trabajadores de albañilería, vendedores informales, maquiladores y otros oficios del sector servicios.

El 69% dijo sembrar maíz, no en su tierra, por supuesto: son jornaleros, peones y trabajadores por su cuenta que arrendan, se alquilan o se van a medias con las personas que sí son dueñas de la tierra en sus comunidades.

El maíz (Zea mays) es el principal cultivo en Tlaxcala. Aun cuando 73% contestó que la tierra de labor es temporal, consideran que es posible que se produzca también jitomate (Lycopersicum esculentum), calabaza (Cucurbita pepo) y otras hortalizas. Esto reforzaría, según sus comentarios, la economía y alimentación de sus familias, así como el fomento del mercado local, la actividad de traspatio, e incluso la producción de hortalizas orientadas al mercado de alimentos orgánicos (libre de agroquímicos). Asimismo, se pueden implementar actividades de educación ambiental enfocadas al uso, reuso o reciclaje de desechos orgánicos (composta) e inorgánicos en la casa-familia, en las escuelas, en las colonias e incluso a nivel municipal.

Sólo 20% ha decidido sembrar otra especie distinta al maíz, por las siguientes razones: se usa una semilla mejorada, y porque sí se ha dado lo que se siembra (tomate (Lycopersicum esculentum), cilantro (Coriandrum sativum), brócoli (Brassica oleracea), con todos los riesgos que implica este cambio o rotación de cultivos.

No obstante, por la relación nada redituable de que se invierte más de lo que se obtiene, la superficie de tierra cultivable en las comunidades se va reduciendo, y el cambio de uso del suelo es acelerado, especialmente la construcción de viviendas de interés social y particular, que se hace dentro del terreno o solar. Es una forma de crecimiento con alto costo ambiental al cambiar el uso del suelo. En otros casos la opción es el abandono definitivo de la agricultura, porque no se vende bien, y no deja regalías o dinero para ahorrar.

De los entrevistados 13%, afirma "ya no es igual que tiempos atrás", infieren que la tierra ha perdido sus nutrientes, no se le permite descansar, y mucho menos se ha pensado en cómo mejorar las condiciones de la tierra. En el estado de Tlaxcala la mayoría de las regiones presentan suelos poco profundos (10 a 15 cm), facilitando el deslave cuando se presentan lluvias torrenciales.

Fueron los mismos trabajadores entrevistados quienes sugieren, frente a las condiciones de deterioro, conservar o mejorar las condiciones de la tierra, con el uso de bioabonos. De los entrevistados 67%, necesitan apoyo económico para producir. No apoyos económicos como créditos o préstamos, sino más bien regalos y obsequios económicos, en donde ellos no se vean forzados a trabajar y pensar en alternativas de producción, comercialización o transformación de la materia prima.

 

Subsistema 4: organizacional

Prácticas y formas en que interactúan personalidades, actitudes, ideologías, y objetivos e intereses personales, familiares y comunitarios en cuestiones de actividades productivas; los tlaxcaltecas que migran a Canadá son actores importantes en sus comunidades, aún cuando no están presentes. Ahí viven, ahí está su familia, y de donde desde el punto de vista social, económico, político, cultural y ambiental, su palabra y opinión se emite, se percibe y se respeta.

La pluralidad impera, según el tipo de comunidad, de trabajador o migrante, de sus recursos, del mercado laboral, de los programas gubernamentales, de los lazos y relaciones que se establecen. De los entrevistados, 94.5% dice no conocer alguna organización exclusiva de trabajadores o participantes activos al PTAT. Sin embargo, en Nanacamilpa -comunidad de estudio-, los reunen actividades sobre todo deportivas, especialmente a los que se van a Canadá. Un caso excepcional es Don Mede, que promueve y facilita su cancha de squash a todos los trabajadores agrícolas, que como él, retornan de Canadá. Planean competencias entre jugadores aficionados de otras localidades cercanas, y aun lejanas como Apan Hidalgo, o Calpulalpan, ubicadas entre 40 y 50 km.

En este contexto se confirma la percepción de "saber" de muchos que se van, pero "pocos" de esos muchos son considerados los amigos más cercanos. ¿Cuántas personas conocen de su comunidad que también se van a Canadá y se inscriben en el PTAT? Hicimos la pregunta pensando en la viabilidad de trabajar u organizarse todos aquellos similares por su condición y situación laboral. El resultado fue interesante, sobre todo al ampliar el entorno; es decir, se les preguntó a cuántas personas conoce de su calle que se van a Canadá (38% dijo que a diez); luego preguntamos a cuántos conocía en toda su manzana o alrededor de su casa (15% dijo que 20); luego en su colonia (15% respondió que 30), finalmente en todo el municipio; 32% dijo que más de 60.

Respecto a trabajar en forma conjunta con sus iguales, el resultado varía: por ejemplo en Nanacamilpa, 51% dijo no estar dispuesto a trabajar con sus congéneres, 49% dijo que sí, pero sólo se "juntan" para solicitar infraestructura o servicios a la presidencia municipal.

Es notable la falta de "aceptación" entre los trabajadores; se resisten a organizarse, sobre todo para poner en marcha actividades productivas. Esto requiere educación, cursos-talleres no sólo cívicos, sino morales y psicológicos, que les faciliten integrarse y coordinarse en grupo.

La comunidad de Sanctórum está, en términos comerciales, económicos y hasta socio-culturales, adscrita a Nanacamilpa. Sin embargo, la identidad del migrante de origen y comunidad rural, que busca mejorar sus niveles de bienestar familiar, individual, y también de su comunidad, es menos egoísta e individualista (respecto al urbano); 79% de los entrevistados considera posible y tiene disposición de trabajar en equipo, especialmente sin son trabajadores migrantes a Canadá.

No obstante, al cuestionarlos frente a los escasos logros cuando han realizado trabajo en equipo, 46% considera que los intereses propios y personales son el principal obstáculo para no alcanzar el éxito en grupo. Por ello, consideran que la mejor manera de trabajar es individual e integrarse sólo con los hijos y la esposa.

Resalta el principal interés de los entrevistados (90%) para participar en proyectos productivos, enfocados a proyectos que los beneficien primero a ellos y su familia, y después a la comunidad.

 

Subsistema 5: ambiental

La interrelación con el medio ambiente no es simplemente una extensión de los estudios de migración que incorporan otra dimensión, sino un requisito de una nueva situación histórica en la cual las relaciones, particularmente la de los migrantes y la naturaleza son cualitativamente distintas (Hogan, 2002). Por ello, la interrelación población medio ambiente, avanza a partir de estudios locales. Se facilita la identificación de las condiciones ecológicas y la gran variación de un lugar a otro. De ahí la importancia de preguntar en la entrevista que realizamos, si los habitantes -principalmente los trabajadores agrícolas migrantes a Canadá, y sus familias- conocen qué pasa con y en su medio ambiente, y cómo ellos han participado a su favor o lo han dejado como si no fuesen parte importante para su restauración y conservación.

El primer resultado, atribuido, queremos suponer al acomodo que resulta de la movilidad del jefe de familia, es importante resaltarlo: en 90% de los casos fueron las esposas e hijos quienes contestaron todo lo que se refiere al tema. En otros casos, fueron de ayuda para que el jefe de familia pudiera contestar, pues ellos no saben lo que cotidianamente viven, y mucho menos el cómo resuelven situaciones que se presentan en asuntos ambientales los que se quedan en casa, mientras él se va a trabajar a Canadá por un largo tiempo. Esto no significa que sean inmunes a los efectos de tales situaciones, o que deban permanecer indiferentes e inactivos ante los costos ambientales. Costos percibidos en dos contextos contrastantes: lugar de origen y lugar de destino. El ambiente canadiense y todos sus riesgos ambientales, propios de la actividad agrícola a cielo abierto y en invernadero (greenhouse), que tiene que ver con las condiciones climáticas extremas y predominantes en Canadá: temperaturas bajas, lluvias invernales, nevadas. Así como el riesgo por exponerse a productos químicos como fertilizantes, pesticidas, insecticidas, sustancias tóxicas como el peligroso químico Thiodan, que puede provocar convulsiones en seres humanos si es aplicado sin las condiciones o medidas adecuadas. No se descartan los riesgos-costos que generan los materiales de construcción usados en los invernaderos. Costos que se reflejan directamente en la salud del trabajador temporal -ejemplar, considerado por algunos dueños de granjas en Canadá-, que en algunos casos es dañada de manera irreversible. Calidad de vida del trabajador que es muy reducida durante su estancia en Canadá, así como en su comunidad-lugar de origen, pues si las lesiones son onerosas, deberá regresar a México y ser atendido en el estado de Tlaxcala, con factores en su contra que lo vulneran aún más, como el hecho de que los médicos en Tlaxcala desconocen los productos químicos y substancias con los cuales el trabajador entra en contacto en su estancia laboral, así como el tipo de alimentos consumidos fuera del país.

Estos costos, que no son valorados claramente por las dependencias y empleados de la ciudad de México y del estado de Tlaxcala, deben ser considerados y atendidos de forma permanente. Otorgar una atención integral que contemple el aumento y aseguramiento de la calidad de vida del trabajador migrante temporal y de su familia en su lugar de origen, así como acciones en este amplio abanico de afectaciones, durante su estancia laboral en Canadá, es incuestionable.

Finalmente describiremos los riesgos o costos ambientales, presentes también en cuatro de los cinco bloques que conforman el medio ambiente tlaxcalteca.

1. Bloque agua: aunado a los costos económicos: el deterioro del suelo que implica la ampliación o una nueva red de agua potable. Por consiguiente, la demanda e incremento de disponibilidad del recurso agua para la población que habita las nuevas casas se reduce drásticamente. La escasez del líquido ya no es una problemática mundial efímera, sino que está en casa, a nivel local. Para 49% de los entrevistados, el problema es que escasea demasiado, sólo se tiene acceso a ella una vez al mes. Problema-insumo que no distingue áreas rurales o urbanas.

2. Bloque suelo: es transformado y alterado, empleado inicialmente para la agricultura, y actualmente para uso urbano. El problema de la erosión se incrementa, por remover la cubierta vegetal del área en la que se construye la casa. Estos efectos, cuenca abajo, tienen una mayor repercusión en el microclima local, el cual reflejará una mayor cantidad de radiación solar, y liberará rápidamente la energía calórica proveniente del sol, incrementando el efecto del cambio climático y del efecto invernadero. En este escenario, urge impulsar la agricultura sostenible, promover el modelo agroecológico que dé énfasis a la biodiversidad, el reciclaje de los nutrientes, la sinergia entre los cultivos, animales, suelos y otros componentes biológicos, así como a la regeneración y conservación de los recursos, pues la forma en que actualmente se operan las políticas económicas y de desarrollo impacta negativamente al siguiente bloque.

3. Bloque biodiversidad: depende no sólo de la riqueza de especies sino también de la abundancia relativa de ellas: cuando unas pocas especies dominan sobre las demás, la diversidad disminuye. Desde la perspectiva conservacionista, son estos elementos poco abundantes -las especies "raras"- los que resultan importantes de preservar, pues son vulnerables a la extinción (Ezcurra, 2002). Al generar cambios en el uso del suelo se destruye el hábitat de la flora y fauna locales. Las áreas elegidas para la nueva construcción de viviendas son terrenos de agricultura de temporal y subsistencia, reservorios de la biodiversidad local. Otros son solares ubicados a un costado de la casa de los padres o abuelos del trabajador tlaxcalteca temporal. Es claro que se necesita reorientar la investigación, la enseñanza, y la extensión agrícola para afrontar numerosos problemas que aquejan a la gran masa de campesinos pobres y a sus ecosistemas frágiles.

4. Bloque: contaminación y su avance progresivo. Relacionado con la falta de educación ambiental de la población, y la conexión con los escasos e inoperantes servicios municipales como la recolecta de los residuos sólidos, agua potable, alcantarillado y calles pavimentadas que eviten polvaredas que afectan las vías respiratorias de los ciudadanos. Condiciones que definen en un contexto específico la bioseguridad: conjunto de lineamientos, medidas y acciones de prevención, control, mitigación y remediación de impactos y repercusiones adversas a la salud humana y al ambiente, asociadas a factores biológicos (Ortiz y Huerta, 2002).

Los efecto-costo de estos cuatro bloques ambientales, que modifican las condiciones microclimáticas en cada uno de los 60 municipios del estado de Tlaxcala, así como a nivel macro, tomando la forma de grandes y excepcionales inundaciones, heladas, granizadas y sequías cada vez más frecuentes, oleadas de intenso calor e inviernos con fríos extremos.

 

Conclusiones

Desde una perspectiva holística, y a partir de la sistematización de la información obtenida y recopilada en el trabajo de campo, se concluye que el proceso de migración legal a Canadá que se presenta en el Estado de Tlaxcala, está asociado e interrelacionado de manera multifactorial (modelo analítico multifactorial). Elementos, factores e indicadores de carácter diversos explican y definen los porqués del incremento, tanto de población trabajadora inscrita en el PTAT y, las causas también múltiples y complejas que lo estimulan; así como de la extensión-difusión del programa en los sesenta municipios que conforman al estado de Tlaxcala, y sus efectos también de amplio alcance.

Es un proceso histórico que debido a su enorme complejidad: por un lado, indica la cantidad de elementos (complejidad cuantitativa) y, por el otro, sus potenciales interacciones (conectividad, viabilidad) y el número de estados posibles que se producen a través de éstos (variabilidad: indica el máximo de relaciones posibles), sobrepasa explicarlo a partir de un sólo enfoque o una dimensión estricta de análisis, económica por ejemplo, o antropológica, que sin duda tales aportes enriquecen el estudio del proceso.

Es importante subrayar la pertinencia de la idea de Martínez Pizarro (2000): adoptar un enfoque más holístico en que se aborde no sólo lo económico, demográfico o cultural del proceso, sino también lo político, lo ambiental, y aún lo visible e invisible de lo subjetivo del proceso. De esta manera no se tiene ni se detecta un enfoque único de explicación y análisis, sino un modelo incluyente, holístico, donde se analizan interrelaciones de cada uno de los elementos del proceso migratorio.

Lo que se intenta explicar es la perspectiva holística e integradora de describir, analizar y explicar las características, funciones y comportamientos, por un lado, de las partes o componentes que emergen, y por otro de las que guardan estrechas relaciones entre sí. La cualidad esencial de tal perspectiva está dada por la interdependencia e interacción de las partes que la integran, y no la causalidad lineal o unidireccional.

 

Literatura Citada

Anónimo, 2003. Acuerdo para el empleo temporal de trabajadores agrícolas mexicanos en Canadá. Versión 02-2003. Ministerio de Fomento de los Recursos de Canadá (Human Resources Development Canada). pp: 1-4.         [ Links ]

Basok, Tania. 2002. Tortillas and Tomatoes: Transmigrant Mexican Harvesters in Canada. Ed. McGill-Queen's University Press, Montreal y Kingston. pp: 106-1208.         [ Links ]

Coll Martínez, Juan Carlos. 2001. Las decisiones individuales. In: La economía de mercado, virtudes e inconvenientes. Disponible en: http://www.eumed.net/cursecon/1c/sistemico.htm. Consulta: mayo 2008.         [ Links ]

Covarrubias M. Isaías. 2002. Enfoque sistémico e individualismo metodológico: una aproximación. Disponible In: http://www.eumed.net/cursecon/colaboraciones/ICM-ESIM.htm. fecha de consulta: mayo 2008.         [ Links ]

Ezcurra, Exequiel. 2002. La biodiversidad en América Latina a diez años de Rio. In: Leff, Enrique; Ezcurra, Exequiel; Pisanty, Irene; y Romero Lankao, Patricia (comp). La transición hacia el desarrollo sustentable. Perspectivas de América Latina y el Caribe. Ed. SEMARNAT-INE-UAM-ONU-PNUMA. México, D.F. pp: 327-342.         [ Links ]

Gutiérrez-Haces, Teresa (coord). 2000. El libre comercio en Canadá: como política de estado o estrategia corporativa. In: Canadá un Estado Posmoderno. Ed. Plaza y Valdés. México, D.F. pp: 95-127.         [ Links ]

Hogan, Joseph Daniel. 2002. Movilidad poblacional, sustentabilidad y vulnerabilidad. In: Leff; Ezcurra; et al. La transición hacia el desarrollo sustentable. Perspectivas de América Latina y el Caribe. Ed. SEMARNAT-INE-UAM-ONU-PNUMA. México, D.F. pp: 161-185.         [ Links ]

Martínez Pizarro, Jorge. 2000. La migración internacional y el desarrollo en la era de la globalización e integración: temas para una agenda regional. Proyecto Regional de Población CELADE- FNUAP, CEPAL. Santiago de Chile. 84 p.         [ Links ]

Ortiz García, Sol, y Huerta Ocampo, Elleli. 2002. La bioseguridad: una herramienta para el desarrollo sustentable. In: Leff; Ezcurra; et al. La transición hacia el desarrollo sustentable. Perspectivas de América Latina y el Caribe. Ed. SEMARNAT-INE-UAM-ONU-PNUMA. México, D.F. pp: 363-380.         [ Links ]

Peisajovich, Bárbara. 2005. El enfoque sistémico. Una propuesta de trabajo para la enseñanza primaria. Correo del Maestro Núm.113. Disponible In: http://www.correodelmaestro.com/anteriores/2005/octubre/nosotros113.htm. Consulta: octubre 14, 2008.         [ Links ]

Vanegas, Rosa Ma. 2001. Incremento de la fuerza laboral mexicana agrícola en Canadá. Ponencia presentada en el V Seminario Internacional sobre Integración Regional, Fronteras y Globalización. 5, 6 y 7 de Diciembre de 2001. Universidad de Zulia-Cd. de Maracaibo, Venenzuela. Inédito. 17 p.         [ Links ]

Creative Commons License Todo el contenido de esta revista, excepto dónde está identificado, está bajo una Licencia Creative Commons