Introducción
Dejar la casa de los padres, uno de los aspectos más discutidos en estudios sobre la juventud, es una transición en la vida que, junto con la incorporación al mercado laboral, encontrar pareja y tener independencia económica, marcan el inicio de la vida adulta.
Los factores que condicionan la formación de un hogar independiente son de diversa índole. Por un lado, están los factores económicos como la percepción de los costes y beneficios asociados a la decisión de dejar la casa de los padres, o las condiciones del mercado de la vivienda o del mercado laboral. Por otro lado, aspectos como los patrones familiares, la actitud o valores ante la vida y factores culturales y del entorno en el que vive el joven, también pueden influir en la decisión de la emancipación familiar.
En el proceso de la independencia residencial hay jóvenes que optan por alquilar la vivienda. El alquiler es una opción adecuada para algunos jóvenes cuando deciden independizarse, ya que les permite una movilidad geográfica recurrente o imprevista. Además, si el empleo o la pareja no se consolida permite una vuelta rápida y poco costosa al hogar paterno (Stone et al., 2014). Otros jóvenes optan por comprar la vivienda, generalmente, son jóvenes que tienen recursos acumulados o un apoyo familiar que les permite poder realizar la inversión financiera necesaria para adquirir su vivienda (Mulder, 2006). En muchos casos estos jóvenes han alargado la emancipación residencial para acumular riqueza y poder disfrutar de la vivienda en propiedad en el momento de su emancipación.
Estudios previos han establecido que la edad a la que los jóvenes dejan la casa de sus padres difiere considerablemente entre países (Becker et al., 2010; Chiuri y Del Boca, 2010). Generalmente, en aquellos países donde la emancipación familiar es más tardía, los jóvenes abandonan el hogar paterno coincidiendo con un emparejamiento estable y optan por viviendas más duraderas y en régimen de propiedad. En estos países, la propiedad suele tener un valor emocional; además de representar un aspecto importante de la calidad de vida de la gente y del estatus social.
En el sistema residencial español, como en la mayoría de los países mediterráneos, la propiedad de la vivienda es el régimen de tenencia predominante, y se extiende por todas las capas sociales, propiciando que los individuos tiendan a tener un nivel de movilidad residencial bajo. En las últimas décadas las nuevas tecnologías y la globalización de la economía han producido cambios en las relaciones familiares y culturales que han llevado a que se observen cambios en los niveles de movilidad residencial, principalmente entre los jóvenes, así como en la propiedad de la vivienda.
En España, en las pasadas décadas, el panorama de la familia se ha transformado en muchos aspectos, y este cambio ha sido más rápido que en los países de nuestro entorno. Los cambios más destacados han sido el incremento del número de separaciones y divorcios, el aumento del porcentaje de mujeres sin hijos y de la fecundidad extramarital; así como un mayor porcentaje de hogares unipersonales. También hay que mencionar el notable aumento en la formación académica de las mujeres y de la ocupación femenina. Todos estos cambios han afectado al funcionamiento del mercado de la vivienda, pero su influencia en el acceso a la vivienda no ha tenido la misma forma ni la misma intensidad para los hombres que para las mujeres.
En este trabajo se estudia la situación residencial de los jóvenes en España. Para ello, analizamos la independencia residencial conjuntamente con el régimen de tenencia de la vivienda. El análisis nos proporcionara una amplia visión del camino hacia la adultez de los jóvenes y de la situación del mercado inmobiliario.
Otro punto de interés en el trabajo es determinar si en el contexto español los hombres y las mujeres jóvenes presentan diferencias de comportamiento en la emancipación residencial y el régimen de tenencia de la vivienda. Aunque existen estudios en diversos países que analizan la independencia familiar de los jóvenes separadamente para hombres y mujeres (Lauster, 2006; Blaauboer y Mulder, 2010; Chiuri y Del Boca, 2010); pocos estudios han examinado conjuntamente la emancipación familiar y el régimen de tenencia de la vivienda por género.
Un análisis más exhaustivo sobre las diferencias observadas en las tasas de formación de hogar y propiedad de la vivienda entre los hombres y las mujeres jóvenes se ha realizado mediante técnicas de descomposición. Estas técnicas nos permitirán cuantificar el peso que tienen las características propias de cada grupo de jóvenes en la diferencia entre ambos grupos y el peso asociado a las diferencias entre los gustos o preferencias de cada grupo.
Revisión de la literatura
Dejar la casa de los padres es una de las principales transiciones a lo largo de la vida. La independencia residencial de los jóvenes ha sido analizada en distintos países cuyas características sociales, familiares y culturales son diferentes; así como los contextos económicos. Los trabajos previos han obtenido que tanto los factores económicos como los demográficos tienen gran importancia en la emancipación familiar.
La edad y el género del joven son factores clave en esta decisión (Lauster, 2006; Stone et al., 2011; Chiuri y Del Boca, 2010; Blaauboer y Mulder, 2010). La formación académica presenta un efecto ambiguo. En los países del norte de Europa, los jóvenes con mayor educación se independizan antes de casa de sus padres (Billari y Liefbroer, 2010); mientras que, en los países del sur, los jóvenes con niveles de estudios universitarios muestran una trayectoria de independencia tardía (Aassve et al., 2002; Stone et al., 2011; Schwanitz, 2017).
La capacidad económica del joven es determinante en la emancipación residencial, también la situación económica del hogar familiar es un factor que puede condicionar la decisión (Stone et al., 2011; Schwanitz, 2017, entre otros). Una situación confortable en la vivienda familiar hace que el joven permanezca en la casa de los padres durante más tiempo. Otros factores del hogar como la estructura familiar o las normas sociales tienen también influencia en la emancipación residencial (Manacorda y Moretti, 2006; Billari y Liefbroer, 2007).
Las trayectorias de la vida, y especialmente esas relacionadas con la transición a la vida adulta, como la emancipación familiar, son muy diferentes según el género. Chiuri y Del Boca (2010) muestran que, aunque existen diferencias por país, un patrón común es que las mujeres se independizan entre dos y tres años antes que los hombres. Blaauboer y Mulder (2010) obtienen que el impacto de la historia familiar afecta más a las mujeres que a los hombres. Lauster (2006) estudia la formación de hogar en Suecia por género y cohortes de edad destacando las diferencias entre hombres y mujeres.
El proceso de la independencia familiar está muy relacionado con la tenencia de la vivienda. Andrew y Meen (2003) analizan la emancipación residencial y la propiedad de la vivienda y obtienen que los factores demográficos son cuantitativamente más importantes en explicar la formación de hogar; mientras que los factores económicos juegan un papel fundamental en la tenencia de vivienda. Sin embargo, Lee y Painter (2013), para épocas de recesión económica en Estados Unidos concluyen que cambios en las condiciones económicas tienen generalmente más influencia en la independencia residencial que en la elección de tenencia; así que dejar la casa de los padres es un factor fundamental en la demanda de vivienda. También Haurin y Rosenthal (2007) y Yu y Myers (2010) concluyen que cambios en las condiciones económicas, generalmente, tienen más influencia en la independencia familiar que en la elección de tenencia.
Tanto la emancipación residencial como la elección del régimen de tenencia de la vivienda de los jóvenes muestran diferencias entre países. Martins y Villanueva (2009) analizan las discrepancias en el ratio de formación de hogar y la compra de la vivienda entre los jóvenes de países del Norte y del Sur de Europa, asociando estas disparidades a las desigualdades en el acceso al mercado hipotecario.
En el contexto español, podemos citar algunos estudios que analizan la situación residencial de los jóvenes. Martínez-Granado y Ruiz-Castillo (2002) realizan un análisis de las decisiones de trabajar, estudiar y emancipación residencial para los jóvenes. Colom et al. (2002, 2003) estudian la formación de hogar junto con decisiones laborales o con la demanda de servicios de vivienda. Holdsworth e Irazoqui (2002) examinan la relación entre dejar la casa de los padres y la adquisición de la primera vivienda.
Datos y variables
La información empírica del estudio proviene de la Encuesta de Presupuestos Familiares del año 2015 (EPF-2015). Dicha encuesta está realizada por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y proporciona datos demográficos y económicos sobre los miembros del hogar. Para nuestro análisis se ha considerado una muestra formada por 10,614 jóvenes cuya edad está comprendida entre 18 y 35 años.
La definición de las variables explicativas utilizadas y sus estadísticos descriptivos (media y desviación típica) se muestran en la Tabla 1. Entre las características sociodemográficas se incluyen la edad, definida en tres tramos, y el sexo. Presumiblemente estas variables van a ser factores determinantes, tanto en la independencia residencial del joven como en la tenencia de su vivienda.
Variables | Definición | Media | Desv. típica |
---|---|---|---|
Edad18 | Si el joven tiene entre 18 y 23 años de edad = 1; en otro caso = 0 (variable de referencia) | 0.36 | 0.48 |
Edad24 | Si el joven tiene entre 24 y 29 años de edad = 1; en otro caso = 0 | 0.29 | 0.45 |
Edad30 | Si el joven tiene entre 30 y 35 años de edad = 1; en otro caso = 0 | 0.35 | 0.48 |
Sexo | Si el joven es hombre = 1; en otro caso = 0 | 0.50 | 0.50 |
Primarios | Joven con estudios como máximo primarios = 1; en otro caso = 0 (variable de referencia) | 0.33 | 0.47 |
Secundarios | Joven con estudios secundarios o FP2 = 1; en otro caso = 0 | 0.45 | 0.50 |
Universitarios | Joven con estudios universitarios = 1; en otro caso = 0 | 0.22 | 0.41 |
Estudiante | Si el joven es estudiante = 1; en otro caso = 0 | 0.30 | 0.46 |
Extranjero | Si el joven tiene una nacionalidad distinta a la española = 1; en otro caso = 0 | 0.09 | 0.28 |
Renta Individual | Ingresos monetarios del joven (en logaritmos) | 484.61 | 603.11 |
Precio | Precio por metro cuadrado de compra de la vivienda (en logaritmos) | 1407.71 | 458.62 |
Tmuni1 | Si el joven reside en un municipio con menos de 10000 habitantes = 1; en otro caso = 0 (variable de referencia) | 0.23 | 0.42 |
Tmuni2 | Si el joven reside en un municipio entre 10,001 y 50,000 habitantes = 1; en otro caso = 0 | 0.27 | 0.44 |
Tmuni3 | Si el joven reside en un municipio entre 50,001 y 100,000 habitantes = 1; en otro caso = 0 | 0.10 | 0.30 |
Tmuni4 | Si el joven reside en un municipio con más de 100,000 habitantes = 1; en otro caso = 0 | 0.40 | 0.49 |
Tasa Paro | Tasa de paro por Comunidad Autónoma | 0.34 | 0.19 |
Fuente: INE: EPF-15: http://www.ine.es/dyngs/INEbase/es/categoriahtm?c=Estadistica_P&cid=1254735976608
Tasa de paro: https://www.ine.es/jaxiT3/Tabla.htm?t=4966&L=0
MFOM: Precio de la vivienda: http://www.fomento.gob.es/
El nivel de educación se ha introducido con tres variables ficticias que recogen los estudios alcanzados (primarios, secundarios y universitarios) y una variable que indica si el joven está o no cursando estudios en la actualidad. Conocer el nivel de formación académica permite aproximar las ganancias futuras del joven, ya que es una medida de capital humano. Para los jóvenes más educados se debería esperar una mayor tendencia a independizarse de sus padres y a ocupar viviendas en propiedad; sin embargo, el efecto de la educación presenta ambigüedad, ya que en los países del sur de Europa se ha encontrado que la prolongación de la formación académica lleva a una caída en la formación de hogar (Moreno, 2012).
También se ha incluido una variable que indica si el joven tiene o no nacionalidad española. Los jóvenes con una nacionalidad diferente a la española posiblemente presenten mayor propensión a vivir independientemente en alquiler.
La capacidad económica del joven se mide con la renta individual. Parece razonable esperar que la independencia residencial venga determinada por la estabilidad económica. Probablemente los jóvenes que disponen de mayores rentas serán más propensos a dejar la casa de sus padres y tener la vivienda en propiedad.
Para conocer la situación del mercado inmobiliario, que presumiblemente afectará tanto en la independencia residencial como en el régimen de tenencia de la vivienda, se ha incluido el precio de compra de las viviendas por Comunidad Autónoma que ofrece el Ministerio de Fomento. A nivel de municipios se aprecian diferencias en el mercado inmobiliario y para matizarlas se consideran cuatro variables ficticias que recogen el tamaño del municipio de residencia. Estas variables también sirven para reflejan las diferencias socioculturales entre los municipios. El comportamiento del joven puede variar según el ámbito de residencia en el que éste vive, una gran ciudad o un municipio más pequeño.
Finalmente, para recoger la situación económica de la Comunidad Autónoma en la que reside el joven se ha considerado la tasa de paro por Comunidad Autónoma, proporcionada por el INE. El panorama económico y social del entorno puede afectar la permanencia del joven en casa de sus padres. Los jóvenes pueden retrasar la salida del hogar paterno y la formación de una familia si hay una situación de inestabilidad económica en su entorno.
Especificación econométrica y análisis de resultados
Modelo Logit Multinomial
En este trabajo analizamos la situación residencial de los jóvenes considerando tres alternativas: no emanciparse de los padres, vivir independientemente en alquiler o vivir independientemente en propiedad. Para determinar el efecto que los factores demográficos y económicos tienen en la independencia residencial y el régimen de tenencia de la vivienda, planteamos un modelo Logit Multinomial en el que la probabilidad de que un joven i elija una determinada alternativa j se obtiene a partir de la expresión:
Siendo x i las características observables del individuo i y β j un vector de parámetros desconocidos, con j = 0, 1, 2 las posibles alternativas.
El uso del modelo Logit Multinomial comporta el cumplimiento de la llamada
propiedad de Independencia de Alternativas Irrelevantes (IIA), es decir, que la
razón entre las probabilidades de dos alternativas cualesquiera no depende de la
existencia de otras alternativas en el conjunto de elección. La comprobación de
la adecuación de los datos al modelo Logit Multinomial se realiza con un test de
tipo Hausman. El test de Hausman lo realizamos mediante el estadístico
En el modelo Logit Multinomial, las estimaciones de los coeficientes no permiten la interpretación directa del efecto que tiene cada variable explicativa sobre la probabilidad de las distintas alternativas y, por ello se calculan los correspondientes efectos marginales, dados por la derivada parcial2 (Greene, 2002):
Análisis de resultados
En la Tabla 2 se presentan los resultados de la estimación por máxima verosimilitud del modelo Logit Multinomial. Por identificabilidad de parámetros, los coeficientes asociados a las variables explicativas que no varían con las alternativas se consideran iguales a cero para una de las alternativas de elección. En este análisis se ha considerado la alternativa No Independizarse de los Padres como la alternativa de referencia (j = 0).
Para determinar la significatividad conjunta de los coeficientes de las variables explicativas se ha calculado el estadístico de Wald. En la última columna de la Tabla 2 están los valores de dicho estadístico y se puede observar que todas las variables incluidas en el modelo han resultado ser determinantes.
Independizarse en alquiler |
Independizarse en propiedad |
Wald | ||||
---|---|---|---|---|---|---|
Variables | Coefic. | Estad. t | Coefic. | Estad. t | Estad. | gl |
Constante | -5.564 | -5.831 | -1.015 | -1.060 | ||
Edad24 | 1.036 | 7.104 | 1.221 | 7.085 | 1150.8 | 4 |
Edad30 | 2.248 | 14.529 | 3.301 | 18.649 | ||
Sexo | -0.743 | -10.605 | -0.962 | -14.007 | 229.7 | 2 |
Secundarios | -0.428 | -5.348 | -0.166 | -2.123 | 64.1 | 4 |
Universitarios | -0.622 | -6.842 | -0.477 | -5.478 | ||
Estudiante | -2.119 | -10.257 | -1.167 | -6.437 | 188.9 | 2 |
Extranjero | 2.362 | 22.265 | 0.339 | 2.416 | 722.1 | 2 |
Renta Individual | 0.179 | 15.223 | 0.240 | 20.278 | 530.6 | 2 |
Precio | 0.387 | 3.190 | -0.255 | -2.123 | 25.2 | 2 |
Tmuni2 | 0.195 | 1.953 | -0.109 | -1.222 | 52.6 | |
Tmuni3 | 0.277 | 2.110 | -0.094 | -0.762 | 6 | |
Tmuni4 | 0.375 | 4.047 | -0.287 | -3.379 | ||
Tasa Paro | -0.248 | -0.664 | -0.885 | -2.159 | 4.8 | 2 |
Nº observaciones | 10614 | |||||
Log-verosimilitud | -6321.3 |
Fuente: elaboración propia a partir de la estimación del modelo con el programa STATA.
En la Tabla 3 se presentan los efectos marginales calculados como la media de los efectos individuales3 . Podemos ver que los jóvenes de 24 años o más, incrementan las preferencias por las alternativas de la independencia familiar, especialmente la de ser propietarios. Destaca el elevado valor del efecto marginal para la probabilidad de la alternativa de propiedad en los jóvenes con más de 30 años. También se observa que las mujeres tienen mayor propensión a independizarse que los hombres y a decantarse por las viviendas en propiedad.
Los jóvenes que están cursando estudios (Estudiante) muestran una clara preferencia por permanecer en casa de los padres. Este resultado es semejante al de los países mediterráneos, en los que los jóvenes permanecen en la casa paterna durante el periodo de formación. Para el nivel de estudios alcanzado se observa que los jóvenes que tienen estudios secundarios o universitarios, con respecto a los de estudios primarios, presentan, en general, mayor preferencia por la alternativa de No Independizarse. Con estos resultados vemos de nuevo un comportamiento típico de los países mediterráneos, en los que se ha observado una prolongación de la permanencia en casa de los padres asociada con una mayor formación académica.
Los efectos marginales de la variable Extranjero indican que los jóvenes que no tienen nacionalidad española presentan mayor tendencia que los españoles a la emancipación residencial en régimen de alquiler, como se preveía.
Respecto a los factores económicos podemos ver que un incremento en la renta del joven favorece la formación de un hogar independiente, tanto en propiedad como en alquiler. Para el precio de compra de las viviendas hemos encontrado un efecto positivo en la alternativa de Independizarse en Alquiler. Según Ermisch (1999), el efecto esperado debido al precio de compra de las viviendas es ambiguo y depende de la elasticidad-precio de la demanda de vivienda de los padres.
Variables | No
independizarse |
Independizarse En alquiler |
Independizarse en propiedad |
---|---|---|---|
Edad24 | -0.1378 | 0.0490 | 0.0887 |
Edad30 | -0.3414 | 0.0746 | 0.2669 |
Sexo | 0.1044 | -0.0309 | -0.0735 |
Secundarios | 0.0348 | -0.0367 | 0.0020 |
Universitarios | 0.0660 | -0.0419 | -0.0240 |
Estudiante | 0.1948 | -0.1649 | -0.0299 |
Extranjero | -0.1544 | 0.2307 | -0.0763 |
Renta Individual | -0.0257 | 0.0070 | 0.0187 |
Precio | -0.0050 | 0.0529 | -0.0479 |
Tmuni2 | -0.0038 | 0.0257 | -0.0219 |
Tmuni3 | -0.0093 | 0.0335 | -0.0242 |
Tmuni4 | -0.0022 | 0.0533 | -0.0510 |
Tasa Paro | 0.0717 | 0.0171 | -0.0888 |
Fuente: elaboración propia a partir de la estimación del modelo con el programa STATA
Los resultados obtenidos para las variables que recogen el ámbito de residencia indican que los jóvenes incrementan la probabilidad de independizarse a viviendas en alquiler a medida que se incrementa el tamaño del municipio. Este resultado puede ser debido a que, en España, en los pequeños municipios hay un sentido familiar más tradicional que produce un retraso en la independencia familiar y por otra parte en este país el alquiler es un fenómeno mayoritariamente urbano.
Finalmente, si la tasa de desempleo de la Comunidad Autónoma en la que reside el joven aumenta, los jóvenes ven disminuida la probabilidad de Independizarse en Propiedad, y muestran mayor tendencia a permanecer en el hogar paterno, ya que les ofrece más seguridad frente a la incertidumbre económica. También vemos un pequeño incremento en la probabilidad de la alternativa de Independizarse en Alquiler, este régimen de tenencia permite cambios rápidos en la configuración de la vivienda si hay cambios económicos y laborales. El alquiler permite a los jóvenes una mayor movilidad geográfica y, si fuera el caso, un regreso rápido al hogar paterno.
Análisis del comportamiento según el género
El siguiente punto de interés del trabajo es explorar la emancipación familiar y la tenencia de vivienda de manera separada para los hombres y las mujeres jóvenes. En primer lugar, compararemos las estimaciones del modelo Logit Multinomial para ambos subgrupos de jóvenes. A continuación, valoraremos más exhaustivamente las diferencias de comportamiento entre los hombres y las mujeres mediante técnicas de descomposición.
Comparación de las estimaciones del modelo Logit Multinomial
Desde los resultados de la estimación del modelo Logit Multinomial para los hombres y las mujeres separadamente (Tablas A1 y A2 del apéndice) vemos que en la submuestra de las mujeres todas las variables explicativas han resultado ser determinantes, y en la submuestra de los hombres, únicamente la tasa de paro de la Comunidad Autónoma no ejerce un efecto significativo en el modelo.
En la Tabla 4 se presentan los efectos marginales para ambas submuestras de jóvenes. Observamos diferencias en la formación académica, los hombres tienden a permanecer en el hogar paterno, tanto con estudios secundarios como universitarios; mientras que las mujeres con estudios secundarios tienden a permanecer en casa de sus padres o a emanciparse a viviendas en propiedad.
Hombres | Mujeres | |||||
---|---|---|---|---|---|---|
Variables | No
Independ. |
Independ.
Alquiler |
Independ.
Propiedad |
No
Independ. |
Independ.
Alquiler |
Independ.
Propiedad |
Edad24 | -0.1184 | 0.0790 | 0.0394 | -0.1404 | 0.0226 | 0.1178 |
Edad30 | -0.3126 | 0.1144 | 0.1982 | -0.3432 | 0.0358 | 0.3075 |
Secundarios | 0.0272 | -0.0261 | -0.0011 | 0.0495 | -0.0497 | 0.0002 |
Universitarios | 0.0367 | -0.0092 | -0.0275 | 0.0947 | -0.0709 | -0.0237 |
Estudiante | 0.1212 | -0.1370 | 0.0158 | 0.2391 | -0.1901 | -0.0490 |
Extranjero | -0.1258 | 0.2214 | -0.0956 | -0.1605 | 0.2370 | -0.0765 |
Renta Individ. | -0.0356 | 0.0108 | 0.0247 | -0.0173 | 0.0027 | 0.0146 |
Precio | -0.0158 | 0.0408 | -0.0250 | 0.0211 | 0.0584 | -0.0795 |
Tmuni2 | -0.0125 | 0.0217 | 0-0092 | 0.0022 | 0.0293 | -0.0315 |
Tmuni3 | -0.0051 | 0.0294 | -0.0243 | -0.0188 | 0.0382 | -0.0194 |
Tmuni4 | -0.0214 | 0.0532 | -0.0317 | 0.0163 | 0.0513 | -0.0676 |
Tasa Paro | 0.0039 | 0.0868 | -0.0906 | 0.1981 | -0.0406 | -0.1575 |
Fuente: elaboración propia a partir de la estimación del modelo con el programa STATA.
El precio de compra de las viviendas también muestra efectos diferentes. Para los hombres si el precio crece, disminuye la probabilidad de emanciparse; sin embargo, para las mujeres cuando aumenta el precio crece dicha probabilidad.
Finalmente, la tasa de paro de la Comunidad Autónoma presenta diferencias en la alternativa de independ0encia en régimen de alquiler, los hombres incrementan la probabilidad de esa alternativa cuando crece la tasa de paro; mientras que las mujeres disminuyen dicha probabilidad. Aunque la opción del alquiler permite al joven una mayor movilidad geográfica y un regreso a casa de los padres si fuera necesario, cuando la situación económica no es favorable, las mujeres optan por no formar un hogar independiente.
Técnicas de descomposición
En la comparación de la variable respuesta entre los dos grupos de jóvenes (hombres y mujeres), es útil recurrir a las técnicas de descomposición que permiten separar el efecto que sobre la diferencia de la variable respuesta tienen las propias variables explicativas (factores observados sobre los individuos) del efecto asociado a las preferencias (factores no observables) de los individuos de cada grupo.
Blinder (1973) y Oaxaca (1973) desarrollaron para un modelo lineal Y = βx, la descomposición de la diferencia en el valor medio de la variable respuesta Y entre dos grupos A y B.
El primer término Δx representa las diferencias en las características observables y se denomina parte explicada. El segundo término Δε recoge las diferencias en los coeficientes estimados y se denomina parte no explicada.
Fairlie (2005) adaptó la expresión de la descomposición para los modelos logit y probit de respuesta binaria, y Kalb et al. (2012) para un modelo de respuesta cualitativa con cuatro alternativas ordenadas.
En este trabajo desarrollamos la descomposición de la diferencia de la variable respuesta entre los grupos A y B para el modelo Logit Multinomial con tres alternativas de elección. Las expresiones de la parte explicada y no explicada son:
Donde x
ik es el vector de características observables del individuo
i perteneciente al grupo k = A, B;
Para cada una de las dos partes, explicada y no explicada, es posible determinar la contribución individual de cada una de las características del modelo. En este trabajo, para obtener la contribución individual a la parte explicada, adoptamos el método de Powers et al. (2011). Dicho método considera que el peso o contribución relativa de cada variable a la parte explicada Δx viene dada por la expresión:
Siendo
Fortin et al. (2011) y Kalb et al. (2012) indican que un problema aparece con la descomposición detallada cuando hay variables cualitativas con más de dos categorías. En ese caso, arbitrariamente una de las categorías debe ser omitida y según la elección de dicha categoría los resultados de la descomposición pueden variar considerablemente. Una solución a dicho problema es agregar en dos todas las categorías de aquellas variables con más de dos categorías.
En este trabajo las variables explicativas con más de dos categorías son la edad, el nivel de estudios y el tamaño del municipio de residencia. Para evitar el problema comentado, se han agregado las categorías, obteniéndose tres variables dicotómicas: Edad, que toma el valor 1 si el joven tiene 24 años o más y el valor 0 en otro caso; Universitarios que toma el valor 1 si el joven tiene estudios universitarios y 0 en otro caso; y Urbano que toma el valor 1 si el joven reside en un municipio con más de 10 mil habitantes y 0 en otro caso. Con estas variables se reestima el modelo para ambas submuestras, hombres y mujeres. Los resultados son consistentes con los resultados previos y están en la Tablas A3 y A4 del apéndice.
A partir de las expresiones (4) y (5) y utilizando los resultados de la estimación del modelo (Tablas A3 y A4), se obtienen los valores de la parte explicada y no explicada que se presentan en la Tabla 5. También en dicha tabla están los valores de los pesos w s (en porcentaje) que determinan la contribución individual de cada variable del modelo a la parte explicada.
La diferencia total entre hombres y mujeres del valor medio de la variable
respuesta es negativa,
Diferencia totala | Parte explicada Δx | Parte no explicada Δε |
---|---|---|
-0.17746 | 0.02934 | -0.20680 |
100% | -16.5% | 116.5% |
Contribución individual de cada variable a Δx | ||
Variable | Peso ws (%) | |
Edad | -23.13 | |
Universitarios | 17.33 | |
Estudiante | 6.45 | |
Extranjero | -31.89 | |
Renta Individual | 81.66 | |
Precio | 0.01 | |
Urbano | 0.72 | |
Tasa Paro | 48.84 |
Fuente: elaboración propia a partir de la estimación del modelo con el programa STATA.
La parte explicada presenta un signo contrario al de la diferencia total, lo que nos indica que, si las mujeres jóvenes utilizaran los mismos criterios y preferencias del grupo de los hombres, su respuesta sería cuantitativamente inferior a la de los hombres, haciendo que la diferencia entre la respuesta de ambos grupos pasara a ser positiva. El valor de la parte no explicada, en términos absolutos, es de magnitud superior a la diferencia total, representando 116.5 por ciento. Esto nos indica que las diferencias de criterios y preferencias entre hombres y mujeres, aunque tengan idénticas características, incrementan aún más la diferencia observada.
Este resultado revela que las diferencias en los factores no observables juegan un papel primordial en la diferencia de la variable respuesta entre los grupos, lo que permite concluir que el género tiene una influencia destacada en la formación de hogar y la elección del régimen de tenencia.
Respecto a la contribución individual de las características a la parte explicada, se observa que la variable que más contribuye a la diferencia entre hombres y mujeres es la renta individual, seguida de la tasa de paro de la Comunidad Autónoma de residencia y la nacionalidad del joven, aunque esta última de manera negativa. También la edad y el nivel de estudios tiene una contribución sustancial (superior a 17 por ciento); sin embargo, la aportación del precio de compra de la vivienda y del ámbito de residencia es inferior a uno por ciento.
Conclusiones
En este trabajo estudiamos conjuntamente la emancipación familiar y la tenencia de la vivienda de los jóvenes en España. El colectivo de jóvenes accede a su vivienda, generalmente, por primera vez y es más sensible a los cambios en el sistema residencial, ya que disponen de menor riqueza acumulada. Observar el comportamiento de las generaciones jóvenes nos permitirá además de estudiar el ciclo de la vida de los individuos, conocer cuál será la evolución de los sistemas residenciales en el futuro.
El modelo estimado nos indica que, como era previsible, la edad, el género y tener o no la nacionalidad española, junto con la capacidad económica, son factores que tienen una gran influencia en la independencia residencial y elección del régimen de tenencia.
Los resultados de nuestro análisis son coincidentes con los obtenidos en estudios anteriores (Stone et al., 2011; Moreno, 2012) y nos permiten concluir que la emancipación de los jóvenes, al igual que la tenencia de la vivienda en propiedad, se incrementa con la edad y es mayor para las mujeres que para los hombres. La formación académica muestra el comportamiento típico de los países mediterráneos, con jóvenes que permanecen en casa de sus padres durante el periodo de formación y que esta estancia en la casa paterna se alarga con el nivel académico alcanzado. Como era previsible, si el joven dispone de una elevada renta individual es más propenso a vivir independientemente de sus padres. Si el joven tiene nacionalidad española presenta mayor tendencia a las viviendas en régimen de propiedad y si es extranjero a las de alquiler.
Las técnicas de descomposición que hemos adaptado para el modelo Logit Multinomial utilizado, nos han permitido realizar un análisis más exhaustivo de las diferencias y similitudes del comportamiento de los jóvenes ante la independencia residencial y la tenencia de vivienda según género. Vemos que las mujeres presentan respuestas cuantitativamente superiores a las de los hombres, pero el resultado se invertiría si las mujeres jóvenes utilizaran los mismos criterios y preferencias que los hombres.
También vemos que, en la diferencia total de la respuesta entre hombres y mujeres, la mayor parte está asociada a los diferentes gustos o preferencias de los jóvenes de dichos grupos, lo que nos indica que la influencia del género es destacable en la formación de hogar y la tenencia de vivienda.