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Papeles de población

versión On-line ISSN 2448-7147versión impresa ISSN 1405-7425

Pap. poblac vol.24 no.97 Toluca jul./sep. 2018

https://doi.org/10.22185/24487147.2018.97.22 

Presentación

Presentación

Juan Gabino González Becerril1 

1Universidad Autónoma del Estado de México


En esta ocasión la presentación estará centrada en el tema de la democracia (electoral) y desarrollo (la pobreza y la desigualdad en el crecimiento económico). Para ello partimos del argumento de que la democracia y el desarrollo son complementarios y se refuerzan mutuamente. El vínculo entre ambos es tanto más fuerte cuanto que emana de las aspiraciones de las personas y los pueblos, y de los derechos que se les reconocen.1 En los términos de Rolando Cordera, sobre este tema sostiene que entre la democracia y el desarrollo hay una relación positiva.2 Sin embargo, se debe tener presente que las relaciones complejas entre la democracia y el desarrollo económico no hay lugar para explicaciones monocausales ni unidireccionales.3

En la más reciente elección en México se dio en el contexto en que 7 de cada 10 mexicanos estaban descontentos con la democracia y 7 de cada 10 privilegiaban la importancia del desarrollo de nuestro país. Ello convocó a los mexicanos con una mayor participación para emitir el sufragio con un fuerte mensaje: privilegiar el desarrollo y la democracia. En ese sentido los resultados electorales publicados por el Instituto Nacional Electoral (INE), en México, sostienen que López Obrador ganó con 30 millones de votos emitidos por los mexicanos y mexicanas, y representó el 53.17 por ciento, del total de los votos emitidos el 1º de julio de 2018, un porcentaje que ni en los cuestionados comicios de 1988 obtuvo Carlos Salinas de Gortari (50.36 por ciento), y muy por encima del 38.20 por ciento que apuntaron las cifras oficiales para Enrique Peña Nieto en el 2012. Demográficamente significa que capturo el 33.6 por ciento de la población registrada en la lista nominal en edad de votar. Pero lo destacable es la participación importante de la población de más del 60 por ciento de la lista nominal en todas las entidades federativas siendo el más alto Yucatán con el 75 por ciento, Tabasco con 71 por ciento y la Ciudad de México con el 70 por ciento, los cuales reflejan un voto anti-sistémico. 4

Este resultado los analistas sostienen que se debió al hartazgo social de la sociedad mexicana que la vio reflejada en las urnas en día 1º de julio de este año. El candidato de Morena, López Obrador, supo interpretar y aprovechar el malestar de la sociedad mexicana, lo que lo ha llevado a adoptar y hacer popular la calificación de “La mafia en el poder”, en donde encasilla a todo aquel actor, partido, grupo empresarial, etc. que es corrupta (que por cierto el PRI, recientemente ha reconocido que perdieron por la corrupción y los malos resultados).5 En el discurso del presidente electo posicionó el argumento “vamos a construir una verdadera democracia” o después de su triunfo llamo a la reconciliación pero sin dejar de argumentar la abolición de privilegios (empezando por las pensiones de los expresidentes y compactar la burocracia), a la vez que destinará su esfuerzo a impulsar el desarrollo del país porque la patria es primero.6

Todo esto pareciera que vamos bien, pero la democracia y el desarrollo está en crisis, esto es porque la democracia dejó de funcionar el día en que los partidos dejaron de gobernar para el bien común, y se apegaron a malas decisiones fiscales para preservarse en el poder, que han hundido al país (México) más en su crisis económica.7 Además, la crisis de la democracia y el desarrollo se expresa en el desgaste por descredito de partidos políticos y los gobiernos dada su incapacidad de hacer frente a reclamos sociales, como la pobreza,8 la desigualdad, la marginación social y económica, la exclusión social, la inseguridad, las desigualdades indígenas, las migraciones masivas, los desplazamientos forzados, etcétera. En México hay una brecha entre partidos y el electorado similar a varios países del mundo y América Latina. En el contexto volátil de la globalización han proliferado las opciones populistas de izquierda y derecha como alternativas ante el desgaste de los partidos políticos tanto en México como en América Latina. También hay avances de la derecha en Europa o en Estados Unidos. Porque existen entornos sociales y económicos favorecidos por la globalización en las que la democracia consolidada ha ofrecido a sectores sociales que perciben amenazas en términos del empleo, la pobreza, de la cancelación de opciones de bienestar familia, o tal como lo dijera recientemente González Casanova, “la muerte de miles de expulsados del sistema capitalista es peor que el exterminio Nazi”, etc.

En este tenor, investigadores sostienen que hoy, ya no hay explotados ni excluidos. Ahora hay expulsados. Esto es con el propósito de que mantengan los niveles de acumulación de riqueza tienen que expulsar cada vez a más gente, y dejarla fuera del sistema económico porque simplemente sobra.9 En este tenor, Saskia Sassen, en su texto “Expulsiones. Brutalidad y Complejidad en la Economía Global”,10 sostiene que, lo que se ha hecho es redefinir el concepto de economía de manera que se invisibiliza a los expulsados de la economía. Esta idea es apoyada por los argumentos de Boaventura De Sousa Santos el cual sostiene que el capitalismo extractivista obtiene mejores condiciones de rentabilidad en sistemas políticos dictatoriales o democracia de bajísima intensidad (sistema de partido único, como ejemplo sería el caso de México y sobre el cual deberá luchar AMLO) donde es fácil de corromper a las élites a través de su involucramiento en la privatización de concesiones y las rentas (los ejemplos en nuestro país abundan).11

Estos y otros elementos no citados acá confluyeron en el hartazgo social y definieron la elección reciente. Esto los partidos políticos lo deben de tomar en cuenta, porque tan sólo el 20 por ciento de las personas están satisfechas con la democracia en América Latina y en México es menor a este porcentaje, 18 por ciento (hasta antes de la elección) y esto marca el declive de la confianza en las instituciones ante la ausencia de alternativas a la problemática de las desigualdades económica y social es mucho peor. Y, la gente busca opciones (de la derecha o de la izquierda), como las del Brexit (que marca el surgimiento de argumentos nuevos como el de la desglobalización) el cual viene a fortalecer la percepción de la democracia londinense, la elección de Donald Trump en Estados Unidos (calificado como gobierno fascista y populista como concepción), y el vuelco que ha tomado recientemente Brasil en América Latina. Porque hasta hace poco, vivía un proceso de expansión y universalización de derechos ciudadanos, que comenzaba a conquistar algunas de las aspiraciones de justicia social y de igualdad consagradas en una innovadora y ambiciosa Constitución Nacional que acaba de cumplir 30 años, y hoy se argumenta que con Bolsonaro se institucionaliza del fascismo, por tanto, dicho político no es la causa de una democracia que agoniza, sino su consecuencia.12

Ante este contexto de la crisis de la democracia, el presidente electo Andrés Manuel López Obrador y su cuarta transformación tiene el gran reto y desafío de hacer tangible los resultados de la democracia electoral plasmada en el bienestar de la población que voto o no por él. Es decir, el reto más grande es incluir a los expulsados del modelo económico neoliberal y rapaz de nuestro país. En términos simples, hacer que el desarrollo y la democracia guarden su justo equilibrio reflejados en el bienestar de la población de manera sostenible y participativa. Porque la democracia y desarrollo hoy con la globalización (que incluye agresión y sometimiento imperial) que nadie puede disciplinar ni frenar, apuesta a un desarrollo a toda costa. Es decir, que el dinero corrompe y compra (el ejemplo del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México). Entonces cómo hacer tangible el bienestar y la democracia en un país muy poblado con un crecimiento económico limitado que ha entrado a un espiral de no desarrollo sostenible.13 Un modelo de desarrollo vigente que desplaza a millones de personas y un capitalismo (como el de Estados Unidos) el cual es el responsable de la miseria, la desigualdad, la polarización, la segmentación y los horrores que obligan a huir como el caso de Centroamericanos que según Chomsky, Estados Unidos es el responsable. Que esperamos haya respuesta inmediata como el de “La Caravana de migrantes: AMLO anuncia un inédito programa de visas de trabajo en México para tratar de contener la migración centroamericana a EE.UU”. Que sea para bien la democracia participativa que sin duda redundará en el desarrollo de México, a la vez den orientación a los nuevos análisis de la población de nuestro país, América Latina y el mundo en torno a los desafíos del conservadurismo y el progresismo.

1 Véase en Boutros Boutros-Ghali, “La interacción entre democracia y desarrollo. Informe de síntesis”, disponible en http://unesdoc.unesco.org/images/0013/001323/132343s.pdf

2 Véase en Rolando Cordera Campos, 2016, Recuperación, democracia, desarrollo: el laberinto de la globalidad, disponible en https://www.jornada.com.mx/2016/06/05/opinion/019a1pol

3 Véase Edgar Moncayo Jiménez, 2006, Relaciones entre democracia y desarrollo en los países andinos. Una reflexión desde la Economía Política, disponible en https://www.economiainstitucional.com/pdf/No14/emoncayo14.pdf

4 Véase en INE, 2018, “Cómputos Distritales 2018 Elecciones Federales”, disponible en https://computos2018.ine.mx/#/presidencia/nacional/1/1/1/1

5 Véase en “Perdimos por la corrupción y mal gobierno”, disponible en https://www.eluniversal.com.mx/columna/salvador-garcia-soto/nacion/perdimos-por-corrupcion-y-mal-gobierno-pri

6 Váse en “Este es el discurso completo que dio AMLO en el zócalo, disponible en https://expansion.mx/nacional/2018/07/02/este-es-discurso-completo-que-dio-amlo-en-el-zocalo

7 Véase en “Democracia y desarrollo económico”, disponible en https://www.elnuevodia.com/opinion/columnas/democraciaydesarrolloeconomico-columna-2214495/

8 Sobre este tema algunos actores sociales indican que el balance del gobierno de Enrique Peña Nieto en materia de desarrollo social es “aterrador”: 55.3 millones de mexicanos viven en pobreza –100 mil más que al inicio de su sexenio–, 62 millones no tienen un ingreso suficiente para adquirir lo más básico para vivir, y las brechas de desigualdad entre los estados del sur y el resto del país “se mantienen igual o peor” que cuando el mandatario tomó el poder. Véase en https://www.proceso.com.mx/

9 Véase en “El capitalismo neoliberal ha creado a los expulsados del sistema”, disponible en http://blog.cristianismeijusticia.net/2016/04/05/el-capitalismo-neoliberal-ha-creado-a-los-expulsados-del-sistema

10 Saskia Sassen, 2015, “Expulsiones. Brutalidad y complejidad en la economía global”, disponible en http://revistas.flacsoandes.edu.ec/iconos/article/download/2382/1494/

11 Véase en Boaventura De Sousa Santos, 2014, “Democracia al borde del caos: Ensayo contra la autoflagelación”, disponible en https://books.google.com.mx

12Véase en “Brasil en el abismo del fascismo”, disponible en https://elpais.com/elpais/2018/10/08/contrapuntos/1538983816_661454.html

13 Véase en Giovani Sartori, 2009, “La democracia en treinta lecciones”, disponible en https://drive.google.com

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