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Política y cultura

Print version ISSN 0188-7742

Polít. cult.  n.42 México Dec. 2014

 

Diversa/Reseña de libros

 

La analogía como instrumento de la argumentación inductiva. Una propuesta para su enseñanza

 

Humberto Guerra*

 

* Profesor-investigador, Departamento de Política y Cultura, UAM-Xochimilco, México [orfeo67@hotmail.com; ehguerra@correo.xoc.uam.mx].

 

LA ENSEÑANZA DE LAS CUATRO HABILIDADES DE LA LENGUA MATERNA EN EL NIVEL PROFESIONAL

El perfeccionamiento de las cuatro habilidades (escuchar, hablar, escribir y leer) en la lengua materna1 vivió un fuerte cuestionamiento dentro de la formación universitaria hacia finales de la década de 1980 que provocó, en muchos casos, la disminución de las horas dedicadas a los cursos agrupados bajo el nombre general de "Redacción", el detrimento de la calidad del conocimiento que en ellos se enseñaba, el número de créditos obtenidos con su aprobación y, en los ejemplos más extremos, en su eliminación de la currícula universitaria.2

La justificación metodológica señalaba que dichas habilidades deberían ser parte de una tarea implícita que atravesara toda la formación universitaria. Es decir, el alumno una vez hecho su ingreso institucional, se dedicaría por completo e inmediatamente al conocimiento de su área de especialización y en este transcurso, perfeccionaría simultáneamente sus procesos de comunicación oral, escrita, de hábitos de estudio e igualmente mejoraría su capacidad cognoscitiva. Una de las explicaciones tradicionales de este procedimiento es que con el paso del tiempo, de las lecturas, de las exigencias académicas y con la madurez emocional e intelectual obtenida, el estudiante leería mejor, escribiría claramente y podría expresarse de forma efectiva en la comunicación oral.3 La vieja idea de que para escribir bien, es suficiente leer bien, apoyaba este movimiento al mismo tiempo que se soslayaba el hecho de que el ámbito académico seguía produciendo profesionales con serias deficiencias en los aspectos mencionados.

Ahora se revalora la importancia de esta área bajo la idea de que las cuatro habilidades son instrumentos en constante perfeccionamiento, pero que no necesariamente son entendidas, utilizadas o decodificadas con suficiencia ni siquiera en el ciclo de posgrado.4

Frente a este panorama, el presente texto tiene como finalidad exponer una sistematización de la enseñanza de una habilidad específica que puede ser de gran utilidad en las cuatro áreas de dominio de la lengua. Sabemos que el hablante hace uso de las herramientas de manera espontánea, inconsciente y en algunos casos de manera sorprendentemente eficaz. Sin embargo, la mayoría de los hablantes no están conscientes de los recursos que utilizan para comunicarse efectivamente o presentan desniveles de eficiencia en las áreas del dominio de la lengua o, por el contrario, presentan problemas para realizar equivalencias de registro. Es decir, pueden comunicarse con efectividad oralmente, pero al querer verter su comunicación oral en una comunicación escrita demuestran serias dificultades que no en pocos casos se traducen en el abandono de la puesta en texto, por ejemplo.5

Las deficiencias en la enseñanza de habilidades de perfeccionamiento de la lengua materna radicaban en su segmentación. Por un lado, se insistía en el nivel morfológico de la redacción, en un ejercicio de gramática descriptiva; pero raramente se vinculaba este conocimiento con el nivel sintáctico y mucho menos con sus implicaciones semánticas. Incluso, la evidencia de que no necesariamente quien lee más escribe con eficacia puede utilizarse como comprobación de que una habilidad no necesariamente traduce su pericia en la otra, en un ejercicio que de ser factible podría denominarse de ósmosis de habilidades intelectuales.6

Ante la anterior fragmentación, se propone la vinculación de los diferentes componentes de dominio de la lengua de manera simultánea conjuntando los niveles morfológico, sintáctico y semántico. La primera área brinda el entendimiento de la forma flexible que contiene cualquier discurso y permite apreciar que en realidad la efectividad del mismo radica, en gran parte, en saber utilizar deliberadamente dicha flexibilidad. Esta postura se extrapola al área sintáctica y así, en realidad, se duplica la caracterización de la lengua como un atributo dinámico, maleable y ajustable a las necesidades del emisor. Por último, el área semántica habilita al hablante para detectar el propósito comunicativo que cualquier mensaje quiere producirle o para impregnar los mensajes propios con una significación probable y, por lo tanto, con un mayor control de las posibilidades de interferencia o ruido.7

El proceso analógico es la estructura tanto cognoscitiva como lingüística que se ha seleccionado para demostrar su utilidad desde varias dimensiones y para proponer un plan didáctico. El ejercicio va del entendimiento de la palabra en su calidad de significante con cualidades fónicas definidas, pero que se presenta para su comprensión dentro de una cadena sintáctica producida con propósitos específicos para influir sobre su receptor. Esta triple atención es de naturaleza pragmática, el alumno aprende a distinguir estos tres rasgos y procede a utilizarlos en la recepción y producción de mensajes. En fin, le proporciona una forma concreta de acometer la difícil y siempre enriquecedora actividad de la interpretación en su rol de receptor, pero igualmente lo habilita para acrecentar sus posibilidades como emisor de mensajes que sean conductores adecuados de sus argumentaciones.

 

LA COMPRENSIÓN Y UTILIZACIÓN DE LA ESTRATEGIA ANALÓGICA COMO HERRAMIENTA EN LA ELABORACIÓN DE LA ARGUMENTACIÓN INDUCTIVA

Existen áreas de estudio tanto en la lingüística como en la investigación literaria y los estudios culturales y de comunicación que parten del examen detallado de los recursos de estilo en la conformación de los mensajes, la argumentación y los discursos de todo tipo (escritos, orales o visuales). De esta manera, se detecta y entiende la función de la comparación, la alegoría, la metáfora, el paralelismo, la metonimia, la ironía, el doble sentido, los rasgos de humor, las imágenes e incluso del albur. La predominancia de una o más de estas figuras del lenguaje, de estos recursos, es un indicador seguro de la naturaleza inductiva del mensaje bajo examen y de los probables contenidos semánticos implícitos.8

Se sabe que la efectividad de la elaboración y recepción de un discurso radica en el conocimiento de sus estructuras internas, subyacentes, articuladoras del contenido. Es decir, el control informativo se logra por el dominio de la forma; ambas van tan imbricadas que es sorprendente que algunos hablantes con un grado superior de estudios no puedan utilizarlas de forma efectiva.

Frente a este panorama, se pensaría que únicamente el estudio de cada una de estas estructuras permitiría al hablante hacer uso virtuoso de las mismas. En realidad, la situación es más manejable si se toma en cuenta que todas las figuras retóricas antes mencionadas parten de una matriz estructural y cognoscitiva: la analogía.9 Este procedimiento mental y textual permite describir la experiencia, el fenómeno o el objeto; haciéndolos manejables para el emisor y comprensibles para el receptor. En su proceso de elaboración, el emisor en realidad se apropia del conocimiento, lo adecua a sus necesidades y consecuentemente puede transmitirlo a diferentes receptores que igualmente incluyen al mismo emisor, como primer receptor de su propia elaboración mental y textual.10

La analogía se fundamenta en la realización de actos de relación o comparación por similitud o semejanza, pero tiene la ventaja de no anular la diferencia entre ambos polos de la relación o comparación. Por el contrario, al resaltar la similitud hace más comprensibles las diferencias, las acentúa y, por tanto, esclarece el objeto de conocimiento. Así, el proceso analógico abstrae, universaliza y hace comunicable la experiencia.11

Igualmente, al elegir los términos constitutivos de la analogía se le aporta un sesgo inductivo fundamental. Digamos, entonces, que al querer comprender el objeto se le relaciona o compara con un término que no es fortuito, gratuito o meramente circunstancial, sino que se ajusta a las necesidades o propósitos del emisor. De esta manera, la analogía cobra relevancia fundamental en la elaboración y recepción de discursos escritos, orales o visuales; tan recurridos en la experiencia social e informativa como la crónica periodística, el reportaje (escrito o audiovisual), el documental y el comentario social de coyuntura, por ejemplo el editorial.12

Otro beneficio de la enseñanza de la estrategia analógica radica en el hecho de que la toma de conciencia del proceso involucra tanto herramientas del pensamiento abstracto como de su concretización discursiva. Así, el emisor o receptor parte de la concreción específica (sea ésta textual, oral o visual) o cualquiera de sus combinaciones posibles, las cuales se hacen más frecuentes con los nuevos soportes de contenido que la informática ensancha de forma constante, y puede penetrar en el contenido abstracto de forma más directa, segura o guiada.

¿De qué manera se logran estos beneficios que innegablemente resultan atractivos? La doble articulación de la lengua al señalar simultáneamente la especificidad del significante y la flexibilidad del significado es la llave maestra de todo el proceso analógico. Si se acerca a la cuestión desde el punto de vista de la estructuración mental, la flexibilidad de los lenguajes nulifica el sentido unívoco del significante favoreciendo la equivocidad acotada del significado, entre otros factores por su inserción contextual en una relación sintáctica. Además, la analogía establece una relación concreta de significantes, pero no de significados; lo cual puede ser punto de apoyo para captar la atención del emisor y permite la observación de lo universal en lo particular, de lo semejante en lo diferente como indica Paz:

La analogía es la ciencia de las correspondencias. Sólo que es una ciencia que no vive sino gracias a las diferencias: precisamente porque esto no es aquello, es posible tender un puente entre esto y aquello. El puente es la palabra como o la palabra es: esto es como aquello, esto es aquello. El puente no suprime la distancia: es una mediación; tampoco anula las diferencias: establece una relación entre términos distintos. La analogía es la metáfora en la que la alteridad se sueña unidad y la diferencia se proyecta ilusoriamente como identidad. Por la analogía el paisaje confuso de la pluralidad y la heterogeneidad se ordena y se vuelve inteligible; la analogía es la operación por medio de la que, gracias al juego de las semejanzas, aceptamos las diferencias. La analogía no suprime las diferencias: las redime, hace tolerable su existencia.13

 

PROPÓSITOS DEL MANEJO ANALÓGICO

El conocimiento y utilización de los procesos analógicos redunda en el mejoramiento de las cuatro áreas del dominio de una lengua por las siguientes razones. En primer lugar, propician la objetivación del pensamiento puesto que la elaboración analógica requiere de la reflexión y ésta, a su vez, permite la apropiación del conocimiento y facilita su comunicabilidad. De esta manera, se abandona el territorio de la mera especulación solipsista y se convierte en un verdadero mecanismo de representación y transformación, es decir, ubica al sujeto en una realidad susceptible de ser modificada. Igualmente, evidencia la capacidad argumentativa del emisor y abre la capacidad de diálogo entre pensamiento e individuo, entre individuo y realidad y entre sujetos. Cuando se establece la analogía, se abren las estrechas compuertas de la experiencia humana, se les redimensionan, se les proporciona profundidad al develar significados no aparentes gracias a la relación entre seres esencialmente distintos. Es necesario enfatizar este último beneficio, la analogía logra sorprender porque devela contenidos que en un primer examen pueden no ser perceptibles, pero que indiscutiblemente conforman al mensaje y al no ser percibidos se imponen sobre el receptor, dejándolo a merced del propósito del mensaje mismo ubicándolo en un territorio donde son improbables el cuestionamiento, el diálogo o la crítica.14

Finalmente, el uso deliberado de la analogía logra que el emisor se haga consciente de su capacidad de retroalimentación con la realidad circundante al concebir el lenguaje como una herramienta efectiva para incidir en la realidad misma, puesto que su ejercicio y después dominio le hace tomar en cuenta que el lenguaje no es una estructura rígida, inflexible o mecánica sino que, por el contrario, es flexible, útil y adecuable a sus necesidades de reflexión y de comunicación.15

 

EJEMPLIFICACIONES ANALÓGICAS

La enseñanza de cualquier estructura lingüística, retórica o estilística (en realidad para nuestros intereses cualquiera de las denominaciones anteriores es adecuada) puede iniciarse con ejemplos modélicos que inductiva y gradualmente muestren la elaboración, utilidad y efectos del proceso analógico. A continuación se muestran tres ejemplos textuales en los cuales es reiterado el uso analógico.

La selección se hizo tratando de cubrir varios requisitos con el fin de producir un aprendizaje contrastado. En primer término, los textos deberían ser de autores variados en su procedencia, formación, época de producción, intereses y, sobre todo, propósitos probables en el receptor. Por ello, se eligió un ejemplo literario de mediados del siglo XX de naturaleza canónica, el capítulo titulado "Para que la cuña apriete" perteneciente a la novela Las tierras flacas de Agustín Yáñez.16 Este capítulo es famoso porque hace uso reiterado de la fórmula del refrán para hacer avanzar su anécdota. En segundo lugar, se utiliza el texto "Patrimonios científicos: el progreso acumulativo y las estrellas de la ciencia" de Dogan y Pahre,17 incluido en el volumen Las nuevas ciencias sociales. La marginalidad creadora porque explica la constitución de los grupos de investigación, necesarios en la ciencia, relacionándolos con la conformación de grupos deportivos. En este caso, se enfatiza lo acertado de la comparación analógica para hacer del contenido una materia fácilmente comunicable; el texto es editado en español en 1993 y es una traducción directa del inglés; sin embargo, por tratarse de un tipo de analogía que más adelante se explica como general, los efectos de la traducción sobre el fenómeno analógico son prácticamente imperceptibles. Por último, se presenta un comentario de corte editorial aparecido en el periódico Milenio Diario de la pluma de Néstor Ojeda18 que comenta las entonces recién aprobadas reformas a la ley del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado (ISSSTE).

Con esta muestra, creo que se cumple con una variedad representativa de los usos analógicos, los tres textos propuestos difieren en contenido, época de producción, efectos sobre el receptor, estrategias de textualización analógica y extensión. Óptimamente, el estudiante recala en la universalidad, utilidad y conveniencia de manejar esta herramienta para la elaboración y decodificación de mensajes.

 

EL REFRÁN EN UN EJEMPLO LITERARIO

Como ya se había afirmado, "Para que la cuña apriete" llama inmediatamente la atención del lector debido a su reiterado uso del refrán como elemento estructurador textual principal. Se recomienda su lectura completa y en el aula se piden las opiniones sobre la misma, más temprano que tarde los alumnos señalan la existencia de estos dichos, refranes o frases ingeniosas que utiliza el autor. Entonces se analizan algunos pasajes donde más reiteradamente se presenta el fenómeno lingüístico, como el siguiente:

No hay más amigo que Dios, ni más pariente que un peso. Hay que aprender a perder antes de saber jugar. Al platicar como amigos; al tratar como enemigos. Lo mismo es chile que aguja: todo pica; y al que le pican se bulle. Con tiento, santos varones, que el Cristo está apolillado. No piensen que soy tan viejo, lo que tengo es mal cuidado, ni crean que soy mala reata, lo que tengo es mal torcido. Al que se aleja lo olvidan y al que se muere lo entierran. Cosa mala nunca muere, y si se muere no hace falta. Las noticias malas tienen alas y las buenas andan apenas. Ánimas que salga el sol pa' saber cómo amanece.19

La reflexión dentro de la clase debe incluir elementos analíticos formales y semánticos. Entre ellos está el hecho de que los refranes son la expresión condensada de la experiencia vital de la comunidad de hablantes donde surgen y guían el comportamiento individual deseado. Son expresión de comunidades lingüísticas en donde el analfabetismo es recurrente y por lo tanto la estructura del pensamiento necesita de apoyos nemotécnicos para su utilización; en este caso los dos hemistiquios que componen los refranes, organizados en octosílabos y la asonancia variable, pero constante, contribuyen a su recuerdo.

A continuación se procura explicar que el refrán en realidad tiene su efectividad al combinar dos campos semánticos (área de significación) que en el plano real difícilmente podrían convivir, combinarse o relacionarse; pero que es la agudeza del observador, su necesidad de explicar de manera concreta un fenómeno que carece de esta posibilidad de concretización, la que logra la organización analógica. Así se puede señalar como algo que puede ser clasificado en el campo semántico de lo inmaterial (sentimientos, sensaciones, actitudes, comportamientos, entre otras experiencias difíciles de explicar directamente), puede hacerse explícito al relacionarlo con fenómenos que pertenecen a campos semánticos visibles, concretos, aparentes.

Por ejemplo, en "ni crean que soy mala reata, lo que tengo es mal torcido", el comportamiento del emisor, sus hábitos, costumbres, cualidades o capacidades (todas las sustantivaciones remiten al campo semántico de lo actitudinal) se relacionan con un apero importante en la vida campesina. La analogía permite entender que el emisor tiene características constitutivas de buena calidad, pero su desarrollo, su educación, su instrucción no ha sido la adecuada (mal torcido). Se distingue así claramente entre capacidad y habilidad, la primera característica como innata mientras que la segunda como modificable. En este sentido, resulta más factible que se entiendan algunas características del mensaje, el emisor está valorándose críticamente, nota sus deficiencias y a la vez su capacidad de rectificación de las mismas. Por otra parte, la selección del término "reata" podría ser interpretado también como muestra de predominancia de la hegemonía masculina (al analogar el término con el pene); pero además existiría la importancia del apero en la vida campesina, sobre todo en la ganadería, donde el mismo es indispensable para las actividades propias de este trabajo. Lo importante aquí resulta que todas estas significaciones no se anulan, en todo caso enriquecen el elemento descrito, ensanchan su significado, explican implícitamente al emisor y los valores apreciables del contexto en que se producen y, además, facilitan su comunicabilidad.

Una vez establecido el sistema de decodificación, se puede interpretar cualquiera de los refranes incluidos en la lectura o se puede recurrir a su extracción para facilitar su comentario. Esto puede efectuarse de manera plenaria y una vez que se asegura que los alumnos entienden la naturaleza del ejercicio, se puede continuar la sesión por grupos para que elijan e interpreten otros ejemplos.20

 

UN EJEMPLO DE ANALOGÍA GENERAL

El ejercicio anterior podría quedar francamente incompleto si tan sólo se recurre a ejemplos literarios. El estatuto privilegiado que guarda socialmente el discurso literario, su supuesta superioridad estética e interpretativa, ligada a una noción cuestionable de genio creativo innato del emisor, podría causar la sensación de que sólo tales formulaciones son factibles en sujetos que poseen una cualidad especial e innata y que, por lo tanto, no es susceptible de ser aprendida por el redactor no literario, a pesar de la constatación del origen popular y campesino del refranero recogido por Yáñez. Por ello, se deben presentar ejemplos diversos como los que aquí se proponen.

Es el caso de la segunda lectura modélica, "Patrimonios científicos: el progreso acumulativo y las estrellas de la ciencia".21 Ante la diversidad y prodigalidad de la lectura anterior, ésta presenta una unidad remarcable, se trata de un caso textual que puede ser llamado como analogía general; es decir, dos campos semánticos se comparan para develar una serie de valores que, de nuevo, tal vez a primera vista no resalten. Pero la analogía elegida estructura toda la discusión. Esto permite un nivel enfático que en algunas situaciones puede contribuir al propósito autoral: establecer una intencionalidad específica que la analogía permite hacer más perceptible, a la vez que despierta la curiosidad atenta del lector.

Por un lado, la mención de "estrellas" y "vedettes" entre los grupos científicos y el hecho de que muchos de los integrantes de los equipos de investigación actúen "como si la investigación fuera un deporte individual", caracteriza adecuadamente a la mayoría de los ámbitos científicos y académicos, señala algunas de sus deficiencias, aunque de manera un tanto amable al corresponderlas con una situación análoga en el deporte profesional. De esta manera, nos parece, se acierta en varios sentidos.

El mensaje así se hace más comunicable, sobre todo para receptores no especializados o en vías de especialización (como es el caso de estudiantes de los niveles universitarios básicos); pero, igualmente, evidencia algunas situaciones que resulta importante detallar. La analogía logra, efectivamente, enfatizar la naturaleza colectiva del avance científico y entonces puede inferirse fácilmente que el singularizar a algunas figuras, si bien de características o logros encomiables, responde a motivaciones diferentes a las meramente profesionales. La interpretación analógica así recala en la necesidad de crear seres admirables, excepcionales, "triunfantes" que desafortunadamente dejan en el anonimato a los demás que han ayudado en la consecución de sus logros y en la ausencia de reconocimiento hacia el grupo al favorecer la individualidad. La analogía vehicula apropiadamente una actitud contemporánea que no es exclusiva de un campo de acción humana; por el contrario, permea desde los campos socialmente considerados relevantes, como el desarrollo científico; hasta las actividades deportivas consideradas popularmente como carentes de carga ideológica importante. El énfasis radica en que los autores encontraron una relación bastante novedosa entre dos campos que aparentemente se encuentran colocados antípodamente en la percepción social. Tan acertada fue su elección que una única analogía resulta generosa al abrir la posibilidad de develar significados ocultos a lo largo de toda una discusión textual.

 

LA ANALOGÍA EN EL COMENTARIO COYUNTURAL

Para cerrar la reflexión sobre la utilidad de la estrategia analógica, la tercera lectura modélica debería provenir de textos coyunturales impresos en publicaciones periódicas. Su brevedad, la variedad de tratamiento de unos pocos temas prioritarios en el momento y su propósito explícito de incidir en los asuntos mismos a los cuales refieren hace del comentario editorial de corte social, político o económico la pieza más indicada para este propósito.

El texto "Calderón segundo hit"22 se presta a estos fines recién mencionados. Gracias a sus analogías fácilmente se entiende la valoración positiva de las medidas fiscales tomadas por el gobierno en turno. El mismo nombre de la colaboración editorial ya lo anuncia y ve en el proceder de la figura presidencial no un primer, sino un segundo acierto. El corte fundamentalmente economicista de la visión autoral se deja sentir al señalar que la reforma fiscal es una de las medidas que mejorarán la situación nacional ("la llave mágica") que se encuentra falleciente (de ahí la necesidad de darle "oxígeno") y que es un punto de partida más que conveniente ("dio el banderazo"); por último, de aceptarse la propuesta en cuestión servirá para facilitar una reforma en el plano político ("lubricante que aceite la aprobación").

De igual forma, se detectará una serie de analogías que en realidad ya no resultan tan atractivas ("poner orden en la casa", "filtro al crimen", "blanquear dinero", "desde distintas trincheras diversas voces y plumas", "la moneda está en el aire", "la palabra la tienen los diputados"). Es entonces el momento conveniente para señalar la naturaleza intrínsecamente analógica del lenguaje y de distinguir entre analogías novedosas como las que primero se comentan y analogías que podríamos llamar lexicalizadas; es decir, aquellas que en un momento fueron originales y gracias a su efectividad paradójicamente han perdido esa cualidad al sustituir prácticamente a los términos que en su momento trataron de vivificar y que en este caso podrían textualizarse como "restructuración de la administración pública", "combate a la delincuencia", "legalización de dinero mal habido", "diferentes actores sociales e intelectuales con distintas posturas ideológicas", "no se ha arribado a una decisión" y que el "poder decisivo reside en la cámara baja", por referirnos a las analogías con alto grado de lexicalización en el texto de Ojeda.

La nota editorial no es del todo acabada; la mezcla de analogías originales no muy ingeniosas dialogando con analogías lexicalizadas caracteriza al autor, pero también al escaso nivel del debate político en los medios de comunicación en México. De cualquier manera, la estrategia rinde frutos y en este caso evidenciar la mediocridad de las opiniones en los medios nos parece suficiente logro.

Existen muchos ejemplos textuales que pueden cumplir más o menos las mismas funciones, la selección y su pertinencia didáctica es responsabilidad compartida entre docentes y alumnos. Los ejercicios siguientes tendrían que dirigirse a la discusión del tipo de textos que más interesen a los alumnos, que coincidan fuertemente con sus objetivos académicos y que los motiven para realizar sus propias argumentaciones practicando con la estrategia analógica. Simultáneamente a la redacción de comentarios, reseñas, paráfrasis o artículos académicos resulta conveniente ensayar con diferentes registros de la experiencia comunicativa oral. Se sugiere la realización de debates, microconferencias, discursos persuasivos, paneles de discusión o mesas redondas para practicar la misma habilidad al calor de la espontaneidad.

 

CONCLUSIÓN

El mejoramiento en el dominio de la lengua debe combinar simultáneamente sus cuatro habilidades, pero sobre todo debe considerar que el desarrollo de las mismas vincula rasgos formales (sintácticos, morfológicos, semánticos) con actitudes y habilidades cognoscitivas. Puesto que ambas están imbricadas en la vida cotidiana y profesional, es decir, en la interacción social, el aula debe procurar reproducir las circunstancias para la apropiación del aprendizaje analógico por los medios textuales aquí descritos, pero no constreñirse a ellos. La utilización de otros soportes informativos: imágenes de todo tipo (fotografía, caricatura política, cartel), documentales altamente analógicos (por ejemplo los planteamientos analógicos del documental La corporación23 o las afirmaciones analógicas formuladas por trabajadores mexicanos ilegales en Estados Unidos en el documental Farmingville24 deben ser discutidos desde la misma perspectiva teórica con la finalidad de comprender que el discurso puede desplazarse de lo textual a lo audiovisual y de nueva cuenta a lo textual. La experiencia se redondearía así al hacer evidente una pragmática de la experiencia lingüística: del concepto mental a su concreción textual, de ésta a su comunicabilidad oral y su apoyatura en otros soportes de corte informático y audiovisual, para finalmente, percibir en el uso analógico una práctica con orígenes, propósitos y consecuencias sociales que, como indica Octavio Paz, "vuelve habitable el mundo".

 

Notas

1 Aquí las cuatro habilidades se entienden como se conceptualizan en Anna Camps (comp.), Secuencias didácticas para aprender a escribir, Barcelona, Grao, 2003.         [ Links ]

2 Como sucedió en la UAM-Iztapalapa, que desapareció el área general de formación de redacción, dejando a criterio de cada disciplina el mejoramiento de las habilidades de la lengua.

3 Si bien esto era más o menos acertado, también es cierto que en el pasado inmediato el acceso informativo era más "letrado", a través del texto impreso sobre todo. Los avances tecnológicos han formulado paradójicamente mayor acceso informativo y un menor manejo del mismo. Así, los cursos de redacción y habilidades cognitivas han recuperado su importancia.

4 Deficiencias que desafortunadamente en muchos casos no se subsanan con el ejercicio profesional. Por circunstancias laborales he tenido acceso a manuscritos aceptados para su publicación en editoriales académicas y cuyos autores se dedican a la investigación y a la producción de textos y es sorprendente comprobar que las deficiencias persisten.

5 Al ingresar (y en ocasiones al egresar) de la formación universitaria el alumno presenta preocupantes deficiencias en la competencia lingüística y en la competencia comunicativa. Para una definición de dichos conceptos, véase Raúl Ávila, La lengua y los hablantes, México, Trillas/ANUIES, 1999, p. 74.         [ Links ]

6 En este caso no se distinguen las diferentes funciones de la lengua y, por tanto, no se pueden mejorar. Ibid., pp. 63-68.

7 En este sentido, el estudio de la lengua debe alcanzar una reflexión como la que propone Coseriu: "[...] la lengua puede considerarse como conjunto de imposiciones, pero también, y quizá mejor, como conjunto de libertades, puesto que admite infinitas realizaciones y sólo exige que no se afecten las condiciones funcionales del instrumento lingüístico". Ibid., p. 51.

8 En este sentido, la presente propuesta procura poner en práctica una de las finalidades de la hermenéutica. Es decir, arribar a la práctica lingüística y mental a través de la reflexión teórica. Véanse Mauricio Beuchot, Perfiles esenciales de la hermenéutica, México, IIF-UNAM (De bolsillo, 3), 1999, pp. 8-11;         [ Links ] y María José González Labra, Aprendizaje por analogía. Análisis del proceso de inferencia analógica para la adquisición de nuevos conocimientos, Valladolid, Trotta, 1997, p. 13.         [ Links ]

9 Como indica Núñez: "La analogía, pues, es la base y el alma de todo el lenguaje humano, el hombre entiende, conoce y razona por medio de comparaciones y ejemplos porque el entendimiento por su natural tendencia a la unidad se inclina a descubrir los vínculos y relaciones entre las cosas diversas para superar su multiplicidad". Antonio Núñez Martínez, "Analogía: unidad en la multiplicidad", en Manuel Velázquez y Miguel Ángel Sobrino (comps.), Analogía e interpretación filosófica, Toluca, UAEM, 2000, p. 10.         [ Links ]

10 Sobre el desarrollo histórico y beneficios del proceso analógico general puede consultarse Octavio Paz, "Analogía e ironía", en Los hijos del limo, México, Seix Barral, 1991, pp. 89-114;         [ Links ] y para conocer los beneficios de este proceso dentro del aprendizaje, véase María José González Labra, Aprendizaje por analogía..., op. cit.

11 Es innegable su utilidad en los estudios humanísticos y sociales, como afirma Beuchot: "Pues bien, el modelo hermenéutico analógico permite, por su elasticidad, interpretar tanto textos metafóricos y otros textos figurados, como textos no figurados o no trópicos, sino históricos, psicológicos, sociológicos, etcétera, que por la atribución y la proporcionalidad no pierdan la riqueza de sus diferencias principales, pero que también puedan manejarse discursivamente". Mauricio Beuchot, Perfiles esenciales de la hermenéutica, op. cit., p. 31. Véase también Tratado de hermenéutica analógica. Hacia un nuevo modelo de interpretación, México, FFyL-UNAM/Itaca, 2005.         [ Links ]

12 El recurso analógico provoca varias reacciones en el sujeto como indica González Labra al glosar a Ortony de la siguiente manera: "Según Ortony (1975), la analogía puede desempeñar varias funciones en el ámbito educativo: 1) la analogía puede utilizarse como un conjunto compacto de instrucciones para reconstruir la experiencia de los sujetos, 2) también permite expresar algunas experiencias que son difíciles de describir en términos puramente lingüísticos sin tener que recurrir a una descripción literal, y 3) además es un medio de comunicación vivo que se encuentra más cercano a nuestra experiencia perceptiva, cognitiva o emocional. Todo esto permite que se pueda transferir de forma más dinámica aquello que es semejante y útil de un dominio ya conocido hacia otro dominio desconocido para que este último pueda ser comprendido e integrado en la base de conocimiento del sujeto". María José González Labra, Aprendizaje por analogía..., op. cit., p. 10.

13 Octavio Paz, "Analogía e ironía", op. cit., p. 110 (cursivas en el original).

14 Como indica Paz, la estructuración analógica libera al sujeto de la mera contemplación y representación y se convierte en una herramienta de "intervención en la realidad". Ibid., p. 94. Algo similar afirma Beuchot al indicar que "[... ] una hermenéutica analógica se coloca en el entrecruce de la interpretación del mundo y de su transformación, interpreta para transformar". Mauricio Beuchot, Perfiles esenciales de la hermenéutica, op. cit., p. 56.

15 Como indica Lázaro Carreter: "La analogía supone, pues, una actividad espiritual del hablante en contra de las leyes mecánicas del lenguaje". Fernando Lázaro Carreter, Diccionario de términos filológicos, Madrid, Gredos, 1990, s. v. analogía.         [ Links ]

16 Agustín Yáñez, "Para que la cuña apriete", en Las tierras flacas. Seis novelas, tomo 1, México, Alfaguara, 2004, pp. 723-739.         [ Links ]

17 M. Dogan y R. Pahre, "Patrimonios científicos: el progreso acumulativo y las estrellas de la ciencia", en Las nuevas ciencias sociales. La marginalidad creadora, México, Grijalbo, 1993, p. 145-146.         [ Links ]

18 Néstor Ojeda, "Calderón segundo hit", Milenio Diario, "Vuelta prohibida", junio de 2007 [www.milenio.com/firmas/nestor_ojeda/]         [ Links ].

19 Agustín Yáñez, "Para que la cuña apriete", op. cit., p. 729.

20 En el Anexo 1 se proporciona una lista exhaustiva de los refranes que organizan la lectura.

21 M. Dogan y P. Pahré, "Patrimonios científicos...", op. cit., p. 145. Cfr. Anexo 2.

22 Néstor Ojeda, "Calderón segundo hit", op. cit., cfr. Anexo 3.

23 Mark Achbar y Jennifer Abbott (dirs.), The Corporation, Zeitgeist video, DVD, 145 minutos, Canadá, 2005.         [ Links ]

24 Carlos Sandoval y Catherine Tambini, Farmingville, Zafra video/Conaculta, DVD, 79 minutos, México, 2003.         [ Links ]

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