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Frontera norte

versión On-line ISSN 2594-0260versión impresa ISSN 0187-7372

Frontera norte vol.24 no.48 México jul./dic. 2012

 

Reseñas bibliográficas

 

¿Cuántos votos necesita la democracia? la participación electoral en México 1961–2006

 

Jaime Antonio PRECIADO CORONADO

 

Silvia Gómez Tagle, México, Instituto Federal Electoral, 2009

 

Profesor–investigador de la Universidad de Guadalajara. Dirección electrónica: japreco@megared.net.mx

 

¿Cuánto abstencionismo aguanta la legitimidad democrática? Es la pregunta de contraste que se hace Silvia Gómez Tagle en su libro, editado por el Instituto Federal Electoral (IFE), ¿Cuántos votos necesita la democracia? la participación electoral en México 1961–2006. Digo de contraste porque en su desarrollo este libro plantea un debate permanente entre la participación electoral y el abstencionismo, pues en la misma medida que analiza las condiciones legales, institucionales o de cultura política que propician votar, las preguntas de la autora rebotan hacia la contraparte negativa: una abstención que no es políticamente neutra y que tiene repercusiones tanto al cuestionar la legitimidad del sistema electoral, y hasta de la democracia realmente existente, como en los resultados de la votación, de los que pueden salir beneficiados los partidos que han logrado conformar el "voto duro", o una clientela relativamente estable a través de diversos medios en los que, todavía en el presente, se combinan coacción, compra del voto y lealtades pragmáticas.

La hipótesis que ilumina al conjunto de este minucioso y agudo trabajo de investigación de Gómez Tagle gira en torno del funcionamiento de la democracia política y el peso que tienen los votos como expresión de la voluntad popular. Particularmente, se trata de comprender los condicionamientos técnicos, las definiciones institucionales y legislativas relacionadas con la "contabilidad de los votos".

Sufragar "es la forma más extendida y generalizada, que está al alcance de casi toda la población adulta de la mayor parte de países del mundo, en el presente siglo", sin embargo, este libro mantendrá un interés permanente en la contrahipótesis derivada de la importancia de la participación electoral: la pérdida de credibilidad e interés ciudadano en las elecciones y los partidos políticos; la preocupación del abstencionismo, el cual se percibe como amenaza frente a la legitimidad política de la democracia.

Desde estas preocupaciones contemporáneas, la autora incorpora su larga experiencia en el estudio electoral en una obra que se propone analizar un dilatado período, 45 años, de 1961 a 2006, como el marco de referencia que permite entender mejor el presente. En este libro se combina la rigurosidad y precisión de los enfoques cuantitativos con la fuerza interpretativa de una mirada cualitativa que sitúa el tema de la participación electoral dentro del debate democrático general.

Partiendo de una definición de participación electoral acotada a la emisión del sufragio, la autora es capaz de incorporar diversas dimensiones relativas a la democracia, pues su texto aborda desde las teorías democráticas que inspiran su estudio, las evidencias empíricas que le permiten comprobar o corregir sus hipótesis de partida, hasta la elaboración de una sugerente geografía electoral que da luz sobre las diferencias entre la escala nacional, la de las entidades federadas y un nivel muy poco tratado en el análisis político electoral mexicano: el del conjunto de las secciones electorales de país.

La caracterización de la democracia que se propone Gómez Tagle en esta obra se inspira en las propuestas de Norberto Bobbio (1984) y de Robert Dahl (2006), las cuales reivindican tres ideas: sufragio universal efectivo, competitividad electoral y legitimidad de las instituciones mediante el ejercicio regular y pacífico de las elecciones. Además, ambos politólogos coinciden en que los conceptos básicos de la democracia, en este caso acotados en su relación con los procesos electorales, son la inclusión de todos las/os mayores de edad con derecho a votar y ser votados, con libertad para deliberar y organizarse políticamente, con libertad de expresión, con alternativas reales para escoger, con instituciones que aseguren la equidad, libertad y justicia del sufragio. En todo caso, los matices que presentan estos autores se refieren al derecho de las minorías para convertirse en mayorías (Bobbio, 1984) y la concepción de los liderazgos políticos con derecho a competir electoralmente, incluyendo la dimensión de las políticas públicas sensibles a las aspiraciones ciudadanas (Dahl, 2006).

Un dilema que recorre toda esta obra es registrar las tensiones establecidas entre las contiendas electorales y la acción colectiva, que enmarca sus demandas sobre derechos políticos en una visión integral de ciudadanía, lo que está más allá de la participación electoral.

Estas preocupaciones no le son indiferentes a la autora, pues ella cuestiona la calidad de la participación, la dialéctica establecida entre lo individual y la acción colectiva en el marco de las estrategias de lucha por el poder político y social, para lo cual se distancia de la sociología del Rational y del Public Choice, así como otras maneras de exclusión o de negación de derechos de ciudadanía, por lo cual concluye, apoyándose en el politólogo francés Guy Hermet, que sin aspirar a una competencia electoral perfecta, se requiere reforzar tres dimensiones del sufragio: la libertad del elector, la pluralidad de la oferta política y el impacto de la elección en la estructura del poder, en la medida que sea posible cambiar a las élites en el gobierno, aunque la autora no se deslinda del enfoque elitista de Hermet y en la medida que se evidencie el poder, o lo que "está en juego".

El proyecto "Geografía de la transición en México", que tiene la autora con El Colegio de México, sirve de telón de fondo para profundizar en su conocimiento de ese período de 46 años analizados (1961–2006) y en particular para establecer las condicionantes institucionales de la participación electoral: el desafío de contar con una organización electoral autónoma respecto del gobierno y relativamente de los partidos, el desafío de la administración electoral eficiente, principalmente planteando el problema del padrón electoral, tema sobre el que se abunda prioritariamente en esta obra, el desafío de contar con recursos jurisdiccionales suficientes, la transparencia y justicia del sistema electoral.

El hilo conductor de este libro es una hipótesis aparentemente sencilla, pero que tiene fuertes implicaciones metodológicas, pues considera que la medición tradicional de la participación electoral que compara los votos válidos con el padrón electoral ofrece resultados sesgados porque no se toma en cuenta distintos grados de manipulación que ha experimentado y sigue experimentando la lista de electores: su aumento artificial en épocas autoritarias para "inflar" la legitimidad que da la participación; la eliminación de electores, su "rasurado", cuando aumenta la competitividad partidaria, pero el control de las elecciones sigue en manos del partido hegemónico y su gobierno; la dificultad para eliminar personas fallecidas, cambios de dirección o migraciones internas e internacionales, a pesar de la alternancia que ha traído candados explicables sobre el padrón electoral. Incluso en su origen, nunca se ha logrado un listado fiel de los votantes potenciales, lo que trae consigo una crónica falta de cobertura. Por ello, la autora realiza un trabajo monumental al calcular la población en edad de votar para cada uno de los años que estudia, en las elecciones presidenciales y sus legislativas concurrentes y las elecciones intermedias.

Este análisis le permite a la autora concluir que la participación disminuye cuando se compara el padrón contra los votos válidos, pero que al comparar los votantes potenciales, representados por la población en edad de sufragar, con los votos válidos, entonces aumenta el porcentaje de participación, lo que a su vez ofrece una visión menos pesimista del abstencionismo; afirmaciones constatables en las elecciones presidenciales y legislativas concurrentes, que muestran tendencia al incremento de votantes, lo cual sitúa a México en un nivel aceptable en las comparaciones internacionales. Sin embargo, en las elecciones legislativas intermedias se confirma la tendencia a la disminución de votantes, aunque con un ligero declive, no tan pronunciado como cuando se comparan votos y padrón.

Una consecuencia metodológica de su enfoque teórico es el esfuerzo de Gómez Tagle por hacer una periodización en función del sistema de partidos, que se constituyó en distintos formatos durante los 45 años analizados. Las etapas de cambio en el sistema de partidos se sitúan: entre 1961 y 1976, el partido hegemónico; de 1977 a 1985, partido predominante; 1988 y 1994, un período de liberalización contradictoria, tensada entre el rechazo al fraude electoral y el ensayo de reformas electorales. De 1997 a 2006 es la transición con alternancia en la presidencia de la república a partir de tres categorías de análisis: libertad del elector, pluralismo político, poderes en juego, con lo que se hace un rico análisis sobre la correlación entre reformas al sistema electoral, formas de cultura política, corporativista–clientelista, y cambios de gobiernos locales, diputados, gobernadores y tendencias en municipios; no se analiza el caso de los senadores.

Así como el trabajo esclarece tendencias nacionales también aporta una nueva comprensión de estas etapas en la dimensión de las entidades e, incluso, al nivel de las secciones desde 1994, cuando hay información comparativa disponible. Silvia no encuentra "una relación clara entre una mayor participación y el desarrollo de un sistema electoral más competitivo", pues la hipótesis de que a mayor debilitamiento del partido hegemónico corresponde un incremento de las diferencias políticas entre las entidades no se cumple. Su análisis muestra que, al contrario, tanto las elecciones presidenciales como las intermedias se vuelven más regulares después de 1988, lo que puede indicar que "el efecto de la modernización fortalece la soberanía del Estado nacional sobre los gobiernos locales y regionales y la centralización del poder en instituciones legalmente reconocidas".

Otro elemento que puede limitar o potenciar la participación electoral se puede aprehender al analizar sus condicionantes socioestructurales, lo que hace entrar a la autora en la discusión sobre modernización, urbanización y desarrollo, para lo cual echa mano de los índices que elaboró en su propio trabajo: la geografía de la transición, y su complementación con los índices de marginación ofrecidos por el Consejo Nacional de Población (Conapo). Su conclusión es que después de 1997 hay mayor participación en zonas urbanas de baja o muy baja marginación, pues aquí ya no se encuentra el espacio de la movilización electoral inducida; aunque el clientelismo se recicla, el control político es menor que en las zonas rurales marginadas y crece la pluralidad política. Pero cuando la izquierda es competitiva (1988 y 2006), hay dinámicas espaciales múltiples tanto en espacios urbanos, donde predomina el Partido Acción Nacional (PAN), como rurales, donde tradicionalmente predomina el Partido Revolucionario Institucional (PRI); y cuando compiten pri y pan, la competencia y la mayor participación se ubican principalmente en los espacios urbanos.

Este libro ofrece un amplio potencial para reforzar investigaciones en curso o para propiciar nuevas búsquedas. Una inquietud que dejan las elecciones de 2009 es la tendencia creciente del abstencionismo y la aparición con mayor vigor que antes de la anulación intencional del voto. Por ello este libro también nutre el debate que plantea mi contrapregunta: ¿cuánto abstencionismo aguanta la legitimidad democrática? Sin duda, el trabajo de Silvia Gómez Tagle abona al esclarecimiento de este polémico tema desde un conjunto de escenarios del sistema político y de partidos: un horizonte de casi medio siglo virtuosamente analizado.

 

BIBLIOGRAFÍA

Bobbio, Norberto, 1984, Il futuro della democrazia, Turin, Italia, Giulio Einaudi Editore, s.p.a.         [ Links ]

Dahl, Robert, 2006, La democracia, una guia para los ciudadanos, Costa Rica, Taurus.         [ Links ]

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