Editorial

Mensaje del Dr. Gregorio Pérez Palacios en su toma de posesión

Words of Dr. Gregorio Pérez Palacios

En primer término, quiero expresar mi agradecimiento a la Junta de Gobierno del Instituto Nacional de Perinatología "Isidro Espinosa de los Reyes" que preside el Señor Secretario de Salud, por la designación que ha hecho en mi persona para dirigir esta prestigiada institución, verdadero orgullo de la medicina mexicana, para el periodo 2005–2010. Al asumir este honroso cargo, me comprometo a dar lo mejor de mis esfuerzos para consolidar y acrecentar su liderazgo en una labor de vanguardia, en beneficio de la salud y calidad de vida de las mujeres, niñas y niños de nuestra gran nación.

El siglo XXI se presenta para México como un escenario complejo, cambiante, con enormes transiciones e inmerso en un proceso continuo de globalización. La gestión de operación de los Institutos Nacionales de Salud, requiere cada vez más de un proceso de adaptación de manera integral a las necesidades globales nacionales, sectoriales e individuales de los ciudadanos, debidamente alineado al Programa Nacional de Salud. Nuestro Instituto debe estar preparado para incorporarse a este proceso y enfrentar los nuevos desafíos: aceptar los retos significa estar preparado para responder a los mismos.

Las diversas transiciones: demográficas, epidemiológicas, sociales y económicas por las que nuestro país ha cursado en las últimas décadas, han condicionado indudables beneficios en el horizonte de la salud, al tiempo que han creado nuevos retos y desafíos a través de un número relevante de problemas emergentes y de rezagos epidemiológicos. Como bien lo ha señalado el secretario Frenk: "...en salud somos víctimas de nuestros propios éxitos." Pero afortunadamente la transición política de México ha institucionalizado un proceso de democratización de la salud, que junto con los enormes avances de la ciencia y la tecnología médica contemporánea, permiten dar respuestas efectivas a estos cambios transicionales.

Hay un viejo proverbio latino que señala: "Los tiempos están cambiando y nosotros estamos cambiando con ellos". Esta aseveración es cierta, pero el cambio no se da en ocasiones a la misma velocidad. Es relevante, por lo tanto, señalar que la redefinición de metas y el diseño de nuevos instrumentos en materia de salud del Programa Nacional, coincide en tiempo con los grandes avances de la ciencia y la tecnología, una circunstancia que nos permite enfrentar los retos actuales.

La atención perinatal es un elemento fundamental de salud pública, se inscribe en el concepto integral de la "salud reproductiva" y constituye un eje prioritario del Programa de Salud del Ejecutivo Federal. Por ello, es importante subrayar que, desde su fundación, este Instituto ha sido un verdadero pilar de la medicina mexicana, cuna de la Perinatología, de la Medicina Reproductiva y de otras disciplinas médicas afines, así como un semillero donde se han formado las nuevas generaciones de destacados especialistas que actualmente se desempeñan en posiciones importantes en centros hospitalarios de instituciones de salud, tanto en el ámbito nacional, como en otros países de Latinoamérica.

Mis reconocimientos a todos los señores directores generales de esta institución, que me han presidido en el cargo y que han sabido conducir a la comunidad institucional (que indudablemente constituye el más valioso capital de esta institución), por los senderos de la asistenta médica de alta especialidad, la formación de recursos humanos y la generación de conocimientos, a través de la investigación científica en sus diversas modalidades. Gracias a ellos, el Instituto constituye un baluarte en sus áreas de competencia, no sólo a nivel nacional, sino en el escenario internacional. En particular mi agradecimiento y mi reconocimiento a mi excelente y excepcional amigo, Dr. José Roberto Ahued Ahued, por todos los éxitos logrados al frente de esta institución en los últimos diez años, y agradecerle todas las facilidades que me ha brindado para iniciar el proceso de transición de esta nueva dirección. ¡Muchas gracias, Roberto!

El proyecto del Instituto para los próximos cinco años, bajo mi dirección, considera fortalecer la visión institucional. Esto es, que el Instituto se debe abocar a la resolución de los rezagos y problemas emergentes en salud reproductiva y perinatal. Subrayo, a nivel nacional. A través del círculo virtuoso de la investigación científica de excelencia, de la enseñanza asentada en evidencias y competencias, así como del aprendizaje basado en problemas y de servicios de alta especialidad, con calidad y con calidez. La visión institucional de este proyecto contempla convertir a la institución en líder de referencia y consulta en medicina y ciencias reproductivas, cuya labor tenga un gran efecto en los indicadores nacionales de salud, para así contribuir a incrementar el nivel de salud de la población mexicana, a quien tenemos el privilegio de servir. El proyecto salvaguarda todo el legado histórico del Instituto, así como sus principios y valores, con un gran énfasis en la atención a la salud con calidad. La operación del proyecto será totalmente incluyente, equitativa y consensuada, en un ambiente laboral de cordialidad y de respeto, con una adecuada planeación estratégica de optimización de los recursos.

El reto es enorme, pero sé que cuento con la capacidad de liderazgo profesional, técnico y administrativo de todo el personal de esta importante institución, así como con el respaldo y apoyo del Señor Secretario, del Señor Coordinador General de los Institutos Nacionales de Salud, de todas las instancias del Sistema Nacional de Salud y de la comunidad científica y médica nacional e internacional.

Para lograr cristalizar este nuevo proyecto pondré al servicio de la institución toda la inmensa pasión y la vocación de servicio en el área de la salud reproductiva y perinatal que me han acompañado a lo largo de toda mi vida profesional, que ciertamente ha transcurrido en el seno de los Institutos Nacionales de la Secretaría de Salud, así como en instituciones de educación superior. Mi experiencia en el área de investigación e innovación tecnológica, docencia, capacidad de gestión y concertación están al servicio de la institución, y de todos ustedes que constituyen esta casa, a partir del día de hoy.

Quisiera, en esta ocasión, hacer mío el mensaje que hace unos años dio el profesor Egon Diczfalusy, uno de los más eminentes científicos en el campo de la salud reproductiva del siglo XX, cuando un grupo de jóvenes médicos lo cuestionó sobre qué hacer frente a los enormes retos actuales en ciencia reproductiva, en un mundo cada vez más globalizado, y al mismo tiempo más dividido. El mensaje del profesor Diczfalusy fue muy corto, pero muy claro, señaló tres elementos claves para enfrentar el desafío: ciencia, humildad y esperanza. ¿Por qué?, bueno, porque la ciencia es una actividad humana que es realmente acumulativa y progresiva; humildad porque es la única sabiduría que no tiene límites; y la esperanza, porque todos nosotros somos prisioneros de la esperanza, que es la quinta esencia de la condición humana. Como bien lo dijo Martín Luther King: "...La esencia de un hombre no es lo que él es, ni lo que él hace, sino es su esperanza."

Para concluir mi intervención, quisiera expresar mi agradecimiento a todos mis profesores y mentores, colaboradores, alumnos y ex alumnos que han contribuido a mi formación, y que han hecho posible que alcanzara, el día de hoy, esta gran distinción. En particular, mi agradecimiento va para el Dr. Carlos Gual Castro, que está presente aquí el día de hoy, quien me condujo con gran sabiduría por el fascinante mundo de la Endocrinología Reproductiva y la Biología de la Reproducción Humana, muchas gracias. Finalmente, quiero recordar, con todos ustedes, las palabras del destacado médico mexicano, un hombre adelantado a su tiempo, Don Isidro Espinosa de los Reyes, cuyo nombre orgullosamente lleva nuestro Instituto, cuando en 1929 señaló que: "... durante el embarazo deben combatirse las causas más importantes de la mortalidad en la primera infancia y señalar que en una vida intrauterina saludable interviene en el futuro del hombre". Muchas gracias.

Dr. Gregorio Pérez Palacios
Director General del Instituto Nacional de
Perinatología