Es motivo de especial satisfacción presentar públicamente el número 100 de la revista Estudios Demográficos y Urbanos. Si bien el hecho de alcanzar dicha cifra entraña una connotación simbólica, la publicación de manera ininterrumpida desde 1986 de una centena de números constituye motivo de regocijo y celebración. La excelencia y larga trayectoria de esta revista se origina en su antecesora, Demografía y Economía, que estuvo vigente de 1967 a 1984.

Es pertinente realizar un ejercicio de reflexión y de revisión de aquellos aspectos que hoy consideramos avances importantes en el quehacer de la revista. A la vez, debemos identificar los principales retos que vamos a encarar ante la evolución de las materias que hemos definido como contenidos propios de nuestra publicación. Varios indicadores nos permiten afirmar que la revista, en tanto medio de difusión de trabajo científico, se ha convertido en un referente de los estudios demográficos, urbanos y ambientales, consolidándose como una expresión confiable y rigurosa en sus campos temáticos, tanto en el ámbito nacional como regional. Las contribuciones de la comunidad científica han permitido que en sus páginas se dé cuenta de sus principales aportes teóricos y metodológicos, así como de los hallazgos empíricos producto de la investigación actual. En sus páginas se han desarrollado importantes discusiones sobre sus áreas de especialidad, abarcando una gran diversidad de temas específicos, enfocados principalmente en México y seguidamente en la región hispanoamericana, manteniendo su vocación de servir al público de habla hispana. En los últimos años, se ha comenzado a incursionar también en zonas geográficas que se extienden más allá de los límites de la región, siempre en sus áreas de especialidad.

Desde el punto de vista de su posición en el contexto de la difusión científica en sus campos de especialidad, la revista está incorporada en 50 índices, bases de datos y directorios académicos de reconocido prestigio nacional e internacional. Está incluida en el cuartil 3 del Sistema de Clasificación de Revistas Mexicanas de Ciencia y Tecnología de Conacyt, institución que ha colaborado con recursos para la producción de la revista. Ello es producto del reconocimiento de su calidad y cumplimiento de normas internacionalmente establecidas para este tipo de medios de comunicación del conocimiento científico.

En el ámbito de su visibilidad e influencia, es un desafío insertarnos en el mundo académico digital y poder aprovechar sus ventajas tecnológicas. En los años recientes, al tiempo que la revista ha conservado su presentación impresa, ha transitado a su versión digital, lo cual ha potenciado su visibilidad de manera significativa. También es preciso destacar que se ha logrado digitalizar toda la colección de la publicación, así como de su antecesora, disponible en su sitio web, con acceso abierto.

En cuanto a su contenido, pretendemos consolidar a la revista como referente regional y transitar hacia convertirla también en un referente internacional, cuidando siempre su rigurosidad y seriedad académica.

Finalmente, es momento propicio para realizar un homenaje y un sincero reconocimiento a quienes durante todos estos años han conformado el equipo de producción editorial de Estudios Demográficos y Urbanos, pero también a aquellos que, sin ser parte de él, con sus aportes y apoyos han contribuido a todos los logros alcanzados. Autores, dictaminadores, directores del Centro, directores de la revista, integrantes del Comité Editorial, editores, secretarias, diseñadores, tipógrafos, técnicos en edición digital, bibliógrafos, correctores, traductores, becarios, entre otros, han hecho posible la consolidación de la revista. También debemos agradecer a las autoridades de El Colegio por su apoyo continuo e irrestricto al desarrollo de todas las tareas que nos hemos impuesto. De igual manera, reconocemos el papel clave de distintas áreas de El Colegio, como son los casos de la Dirección de Publicaciones, la Coordinación de Servicios de Cómputo, la Biblioteca “Daniel Cosío Villegas” y el área de Asesoría Legal, así como a los colegas directores y editores de las otras revistas de El Colegio, y por último, pero no por ello menos importante, al Centro de Estudios Demográficos, Urbanos y Ambientales, especialmente a sus profesores-investigadores.