SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.41 número1Barragán Aroche, Raquel, Ovidio y Marcial en la risa de la poesía burlesca del Siglo de Oro. Preceptiva, estilos y motivos, México, Universidad Nacional Autónoma de México-Coordinación de Humanidades (Colección Estudios de Cultura Iberoamericana Colonial), 2020, 447 págs., ISBN: 978-607-30-3053-3.Platón. García-Baró, Miguel, La templanza y la prudencia. Hipias menor. Cármides. Edición bilingüe, comentario filosófico de Miguel García-Baró, traducción y estudio final de Claudia Már­sico, Salamanca, Ediciones Sígueme, 2020, 285 págs., ISBN: 978-84-301-2071-0. índice de autoresíndice de assuntospesquisa de artigos
Home Pagelista alfabética de periódicos  

Serviços Personalizados

Journal

Artigo

Indicadores

Links relacionados

  • Não possue artigos similaresSimilares em SciELO

Compartilhar


Nova tellus

versão impressa ISSN 0185-3058

Nova tellus vol.41 no.1 Ciudad de México Jan./Jun. 2023  Epub 31-Mar-2023

https://doi.org/10.19130/iifl.nt.2023.41.1.2300s01x13 

Reseñas

Albrecht, Michael von, Ad scriptores Latinos. Epistulae et collo­quia, traduzione poetica e prefazione di Aldo Setaioli, Perugia, Graphe.it Edizioni, 2022, 185 págs., ISBN: 9788893721578.

aAcademia Nacional de Ciencias de Buenos Aires, Argentina, hfbauza@yahoo.com.ar

Albrecht, Michael von. Ad scriptores Latinos. Epistulae et collo­quia. ,, Setaioli, Aldo. Perugia: Graphe.it Edizioni, 2022. 185p. ISBN: 9788893721578.


Palabras clave: cartas poéticas; epístola; saber

Keywords: Poetical Letters; Epistle; Know

Tal como se desprende del título, Ad scriptores Latinos. Epistulae et colloquia, este volumen recoge cartas escritas en impecables hexámetros latinos por Michael von Albrecht, junto a su traducción poética en ágiles y logrados endecasílabos de la pluma de Aldo Setaioli . La declaración senequista que figura como epígrafe —Nullo nobis saeculo interdictum est, in omnia admittimur, ‘Nessun’epoca ci è preclusa, tutte ci sono aperte’- sugiere el propósito perseguido en estas epístolas. Ya von Albrecht en Scriptorum mortuorum responsa había dado ejemplos de diálogo con autores de la Antigüedad. En tal sentido, y atento a la sentencia unamuniana “Para novedades, los clásicos”, el poeta lo hace, en este caso, con madurada sapiencia y sin solemnidad alguna, intercambiando pareceres con escritores y filósofos de la antigua Roma mediante un conjunto de epístolas versificadas sobre temas, en la mayor parte de los casos, vinculados con el quehacer literario o con cuestiones clave tales como la libertad, el decoro, la clemencia o, entre otros, la sacralidad.

Sorprende que en tiempos modernos, agitados por el vértigo provocado por convulsiones políticas y por acontecimientos aciagos, dos filólogos clásicos se detengan, uno a componer misivas en una lengua soi-disant muerta; el otro, a volcarlas poéticamente en una moderna. En ambos casos, labor encomiable ejercida por estos scholars con maestría ya que en los dos casos —en los poemas latinos y en su versión italiana— los diálogos, sin caer en los artilugios de la retórica, se desenvuelven con soltura y naturalidad.

Michael von Albrecht es ampliamente conocido como latinista (recordemos que, en lo que compete al mundo clásico, ejerce la dirección de la valiosa colección Studien zur klassischen Philologie); además, tal como se señala en el “Prefacio”, se trata de una persona que, con la modestia que caracteriza a un sabio, deja traslucir, cual cultivado hombre del Renacimien­to, la vastedad de su cultura. En lo que concierne a lo musical, por ejemplo, su destreza se pone en evidencia en el particular ritmo de sus hexámetros, maestría, en cierta medida, heredada de su padre —el compositor Georg von Albrecht—; en esa línea, en las palabras liminares, Aldo Setaioli menciona que las dos hijas del poeta-filólogo cultivan la música: una, violoncelista; la otra, pianista de prestigio. Destaco también que su amplia cultura ahonda sus raíces en el ámbito familiar así, pues, en estas cartas nos anoticia de que su abuela rusa le hablaba de la obra de Puskin o que su madre le recitaba el Avaro de Molière.

Von Albrecht pertenece a la selecta pléyade de quienes cultivan la creación poética en lengua latina tal como puede advertirse en composiciones que antes diera a estampa en revistas especializadas —Vita Latina, Vox Latina, Latinitas, Prometheus o, entre otras, el Giornale Italiano di Filologia— (muchos de estos poemas fueron recogidos en los volúmenes Scripta Latina y Carmina Latina, editados en Frankfurt). Sobre esa labor poética de von Albrecht en la lengua del Lacio, el citado Setaioli recuerda la composición —De simia Heidelbergensi— en la que este creador imagina que Lucio, el curioso personaje de la novela de Apuleyo, al retornar a la tierra no con ropaje de asno sino de simio, vive en nuestro mundo situaciones pintorescas vertidas en este poema en tono satírico.

En cuanto al traductor y prologuista, Aldo Setaioli , formado en la prestigiosa Universidad de Florencia, ha sido durante décadas Profesor ordinario de Grammatica latina en la Universidad de Perugia, en la que, tras su retiro, fue honrado como Profesor emérito. De su vasta labor como estudioso del mundo antiguo, evoco su magnífico trabajo sobre Séneca (Seneca e i Greci, Bologna, Pàtron Editore, 1988) o, entre otros, sus estudios virgilianos recogidos en el volumen Si tantus amor… (Bologna, Pàtron Editore, 1998).

Las epístolas que comentamos están presentadas como cálido homenaje a la “sagrada memoria de A. Traina”. Son catorce composiciones dirigidas desde el presente a diversos autores de la antigüedad clásica: la primera, destinada a Cicerón; la última, a san Agustín. Independientes entre sí, son de variada extensión: la más larga, a Tito Livio, tiene 118 versos; la más corta, a Horacio, 95; el corpus poético suma, en total, 1481 hexámetros. Además de los cuatro literatos y filósofos ya mencionados, los restantes destinatarios son Plauto, Lucrecio, Catulo, Virgilio, Ovidio, Séneca, Lucano, Quintiliano, Tácito y Apuleyo. Estos poemas dejan ver el espíritu de la obra de cada uno de ellos, a la vez que constituyen una suerte de conversación entre dos épocas.

En la dirigida al orador de Arpino, al preguntarle Dicendi unde tibi nata est tam mira facultas? (v. 1) —Donde ti venne sì grande eloquenza? traduce Setaioli— Cicerón le responde que en su obra Domina il concetto. Von Albrecht, por su parte, le revela que Vox tua vas sophiae: doctorum lingua remansit (v. 104). En este diálogo alienta la idea de que la lengua latina pueda obrar como lazo semántico-afectivo capaz de religar a los pueblos. Idea similar se aprecia en el coloquio con el poeta de Mantua cuando le dice: Habes Europae, provide, claves: / Iustitiae doctor, pacis, pietatis amator (vv. 45-46). En otro orden de cuestiones Cicerón declara que, al indagar la naturaleza de los dioses, Perspicio numen cunctis a gentibus unum / iure coli (vv. 71-72), noción que en nuestros días von Albrecht la ve manifiesta al decir que Christicolis hodieque probatur (v. 72).

En coloquio con Plauto, después de recordar Laeta mihi mater repetebat verba poetae / Gallorum summi (vv. 50-51), exalta al viejo comediógrafo en tanto ciudadano del mundo a la vez que lo considera precursor de la fraternidad preconizada hoy por el cristianismo. Lo pone también en conocimiento de que sus piezas inspiraron comedias de valía, así muchas de Molière.

A Lucrecio le habla de lo sublime de sus versos recordándole que ni Virgilio, ni Ovidio ni Manilio edere mundi / non possent sine te mysteria (vv. 66-67). Al dialogar con Catulo, al evocar su Odi et amo, el desdichado poeta le responde: Vae! Verba nitent, res plena doloris (v. 52) y, a propósito de la falaz Lesbia, le hace partícipe que Tuus noster dolor ese probatur (v. 59). En cuanto a Virgilio, al que, según la tradición, llama divine poeta (v. 7), tras aludir al eco órfico de su canto, le recuerda que Terra audit mirans concentum caelitus ortum (v. 16). Concluye la epístola profetizándole Tecum nata nova est eademque aeterna poesis (v. 108), una poesía “che sempre sarà nuova e sempre eterna”, traduce Setaioli.

En la dirigida a Horacio, tras comentarle cómo su lírica ha revelado a Europa el sentido prístino de la poesía, le comenta que su canto ha inspira­do a grandes poetas, así al egregio Hölderlin o a la Musa de México (i. e., sor Juana Inés de la Cruz). Valora en sus carmina el decoro que ofrecen aquellos seres del que hoy carecen los tiranos -vv. 89-90- sobre los que von Albrecht, en nota al pie y con referencia a la actualidad, consigna: Donaldus Trump unus e multis est (p. 80).

A Tito Livio, tras recordarle que Clementia iusque / Romanum Europae caecos domuere furores (vv. 29-30), lo celebra por haber erigido “un gran teatro de la historia”. En carta a Ovidio, lo ve como a un nuevo Pigmalión ya que facis ecce moveri / tu statuas - lapides anima vitaque repleri! (vv. 69-70); al mismo tiempo le testimonia que ha sido modelo para toda Europa. Concluye el coloquio saludándolo con elogios: Tu dux et comes es medicinaque nostra. Venito!

La epístola a Séneca —carmen que el poeta dedica a su amigo Aldo Setaioli , en tanto senequista de valía— justiprecia al filósofo porque Discas fieri tuus ipse magister (v. 23). En nuestro mundo, en que falsus nuntius (v. 85) —en nota al pie von Albrecht añade: anglice fake news— construye un relato arteramente mendaz, la palabra del cordobés se erige sabia. En cuanto a la misiva destinada a Lucano, al evocar monstruosidades de los que detentan el poder, lo recuerda como víctima del despotismo de Nerón. En diálogo con Quintiliano alaba el valor y vigencia de su arte —Sanabit nostras linguas tua lingua Latina (v. 99)— motivo por el cual su magisterio es celebrado y seguido por muchos, así, por Petrarca.

En la misiva dirigida a Tácito recuerda que Libertas omnibus una / carior est vita -Libertà: lei sola a ciascuno è più cara della vita’ (vv. 38-39). Cuando dialoga con Apuleyo le cuenta que su novela le despertó el deseo de saberlo todo. En tanto que en la epístola a san Agustín, le confiesa que cuando tenía quince años sus Confesiones le abrieron las puertas a un coloquio con Dios como otrora le sucedió a aquel al leer el Hortensius, el desaparecido protréptico de Cicerón. Hay en esta carta pasajes memorables, a modo de simple muestra evoco uno de reminiscencias virgilianas:

Conticuit rumor, radiabant astra, silebant / omnes iam voces hominum pecudumque diurnae - / vox audita Dei est per tanta silentia vobis, / vos intrare iubens divina in gaudia vivos, / participes vitae aeternae, dum corpora spirant. / Perpetuae brevis hora fuit praenuntia vitae, ‘tacque ogni rumore; / splendevano le stelle ed ogni voce / del giorno ammutolì - d’uomini e bestie /. E in mezzo a quel silenzio sovrumano / udibile fu a voi di Dio la voce, / che v’invita ad entrare, ancora vivi, / nelle gioie celesti, ad aver parte / ancor nel corpo, della vita eterna: / presagio breve dell’eternità’ (vv. 61-66).

Más que un simple ejercicio de estilo, estas composiciones en lengua latina y su traducción endecasilábica al italiano valen tanto por la calidad de sus versos, cuanto por el diálogo, sincero y profundo, con pensadores de la Antigüedad sobre asuntos fundamentales que competen al hombre. De ellos puede extraerse un sinnúmero de valiosas enseñanzas para el presente.

Hugo Francisco Bauzá es doctor en Letras por la Universidad Nacional de La Plata, Argentina, y docteur por la Université de Paris IV-Sorbonne. Perfeccionó sus estudios sobre Filología clásica en las Universidades de Roma y en la de París-Sorbonne. Es Profesor titular consulto en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires, donde ha impartido la materia de Lengua y Cultura Latinas por cuatro décadas. Ha sido Profesor visitante en varias universidades europeas y conferencista, entre otros ámbitos, en el Dartmouth College (USA) y en la Scuola Normale Superiore di Pisa. Es miembro titular de la Academia Nacional de Ciencias de Buenos Aires. Tradujo a Virgilio, Propercio, Terencio, Tibulo y el Corpus Tibullianum. Es autor de más de un centenar de artículos en revistas especializadas y de una veintena de volú­menes sobre el mundo grecolatino, entre ellos destacan Voces y visiones. Poesía y representación en el mundo clásico (con varias ediciones y traducido al francés), Sortilegios de la memoria y el olvido (Akal) y Miradas sobre el suicidio (Fondo de Cultura Económica). Con los años orientó sus investigaciones al campo de los estu­dios del “imaginaire”, en la Academia Nacional dirige el Centro de Estudios del Imaginario (CEI) cuyas investigaciones están orientadas al ámbito de la Antigüedad clásica.

BIBLIOGRAFÍA

Albrecht, Michael von, Ad scriptores Latinos. Epistulae et collo­quia, traduzione poetica e prefazione di Aldo Setaioli , Perugia, Graphe.it Edizioni, 2022, 185 págs., ISBN: 9788893721578. [ Links ]

Recibido: 21 de Marzo de 2022; Revisado: 25 de Abril de 2022; Aprobado: 30 de Diciembre de 2022

*

Hugo Francisco Bauzá es doctor en Letras por la Universidad Nacional de La Plata, Argentina, y docteur por la Université de Paris IV-Sorbonne. Perfeccionó sus estudios sobre Filología clásica en las Universidades de Roma y en la de París-Sorbonne. Es Profesor titular consulto en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires, donde ha impartido la materia de Lengua y Cultura Latinas por cuatro décadas. Ha sido Profesor visitante en varias universidades europeas y conferencista, entre otros ámbitos, en el Dartmouth College (usa) y en la Scuola Normale Superiore di Pisa. Es miembro titular de la Academia Nacional de Ciencias de Buenos Aires. NOVA TELLVS, 41/1, Enero-Junio, 2023, pp. 263-267, ISSN 0185-3058 / e-ISSN 2683-1759 267 Tradujo a Virgilio, Propercio, Terencio, Tibulo y el Corpus Tibullianum. Es autor de más de un centenar de artículos en revistas especializadas y de una veintena de volúmenes sobre el mundo grecolatino, entre ellos destacan Voces y visiones. Poesía y representación en el mundo clásico (con varias ediciones y traducido al francés), Sortilegios de la memoria y el olvido (Akal) y Miradas sobre el suicidio (Fondo de Cultura Económica). Con los años orientó sus investigaciones al campo de los estudios del “imaginaire”, en la Academia Nacional dirige el Centro de Estudios del Imaginario (cei) cuyas investigaciones están orientadas al ámbito de la Antigüedad clásica.

Creative Commons License Este es un artículo publicado en acceso abierto bajo una licencia Creative Commons