SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.39 número2Virtud, alma y música: Plat., R., 443d y los desarrollos filosóficos posterioresEn el recinto común dedicado a Apolo y Helios (Platón, Lg., 945 b-948 b) índice de autoresíndice de materiabúsqueda de artículos
Home Pagelista alfabética de revistas  

Servicios Personalizados

Revista

Articulo

Indicadores

Links relacionados

  • No hay artículos similaresSimilares en SciELO

Compartir


Nova tellus

versión impresa ISSN 0185-3058

Nova tellus vol.39 no.2 Ciudad de México jul./dic. 2021  Epub 04-Oct-2021

https://doi.org/10.19130/iifl.nt.2021.39.2.890 

Artículos

El concepto de hetaíros en la Carta séptima de Platón: la importancia de una compañía adecuada

The Concept of Hetaíros in Plato’s Seventh Letter: the Importance of a proper Companionship

Jesús Caos Huerta Rodrígueza  *

aUniversidad Pedagógica Nacional, subsede Ensenada, México, jhuertar@edubc.mx


Resumen:

En este trabajo se aborda el tópico de la amistad como una cuestión central en la Carta séptima de Platón. Se propone que, entre los varios términos empleados para referir a esta temática, la comprensión adecuada de hetaíros (“compañero”) es fundamental para interpretar de manera pertinente el sentido de la amistad en la epístola. Para ello se retoma la distinción efectuada en el escrito platónico entre compañero-amigo, compañero-familiar y compañero-colega con el fin de precisar el uso de hetaíros dentro del propio texto. A través de una lectura de carácter sincrónica se llega a la identificación de una doble estructura triádica para definir el sentido y la relevancia de este concepto en el marco argumentativo del discurso.

Palabras clave: Amistad; compañero; amigo; colega; estructura de composición

Abstract:

In this work the topic of friendship is considered as the main subject in Plato’s Seventh Letter. Among the different terms used to refer to this conception, it is essential to understand hetaíros (“companion”) in order to make a suitable interpretation of its meaning within the letter. So I will recover the distinction made by Plato among companion-friend, companion-relative and companion-fellow to determine the use of hetaíros in the text. Through a synchronic reading I discover a double triadic structure which defines the meaning and relevance of hetaíros within the argumentative structure of the letter.

Keywords: Friendship; Companion; Friend; Colleague; Composition Structure

I. Introducción

La Carta séptima de Platón es la más importante y extensa de todas las epístolas atribuidas al filósofo ateniense (Morrow 1962, p. 44). Sin embargo, los temas de estudio de la epístola se han centrado en un restringido número de tópicos. Así, la línea de discusión académica se ha enfocado principalmente en torno a la autenticidad o no del escrito (Bradley Lewis 2000a; Burnyeat & Frede 2015), en las ideas políticas y su relación con el corpus platónico (Edelstein 1966; Bradley Lewis 2000b), o bien, en el trasfondo histórico que subyace detrás del escenario de la epístola (Araújo 2019; Marren 2019). El estudio reducido de temas de este texto platónico es una oportunidad para explorar otras opciones de lectura que permitan ir en una dirección diferente al acercamiento tradicional.

Una temática fundamental en la carta, habitualmente dejada de lado, es el tópico de la amistad. Dentro del documento se destacan las consideraciones de índole política, pero también se alude a las relaciones de amistad que hay entre sus protagonistas. El texto hace referencia a los intensos lazos afectivos existentes entre Dión y Platón, de igual manera alude en menor grado a la cercanía entre éste y Sócrates, además de las breves referencias a la amistad de Platón con Arquitas, los amigos de Tarento, entre otros. Así pues, sin duda, un aspecto relevante de esta carta son los variados vínculos entre los personajes, lo cual es el objetivo de análisis de la presente investigación.

La epístola ofrece una amplia gama de conceptos para referir a este asunto.1 De manera común, se ha sostenido que entre las diferentes palabras para aludir a la noción de amistad se encuentra el término ἑταῖρος, “compañero” o “camarada”. Sin embargo, el uso de esta palabra resulta un tanto ambiguo porque registra un campo semántico muy extenso de significados.2 Además, como ha señalado Boswell 1980, p. 46, n. 12, también existe el prejuicio de traducir ἑταῖρος simplemente como “compañero” o “amigo”, mientras que el femenino ἑταίρα a menudo implica “cortesana”, “prostituta”.3 A esta variedad de significados también hay que agregar el uso vinculado a las heterías,4 donde ἑταῖρος refiere a la camaradería política típica de las asociaciones aristocráticas atenienses. De igual manera, las diferentes traducciones ilustran la diversidad de sentidos que puede adquirir dicho tér-mino.5 Así, debido a la cantidad de opciones y contextos disponibles de lectura, hay una falta de precisión en la traducción de ἑταῖρος, lo cual conlleva a que no se le preste la atención debida a este concepto, pues queda oculto detrás de palabras que no expresan su significado de manera consistente y termina pasando desapercibido.

Al margen de cualquier especulación sobre la autoría de la carta,6 en este artículo se propone que una adecuada compresión del término ἑταῖρος es fundamental para interpretar de manera pertinente el sentido de la amistad en la Carta séptima. La metodología de trabajo sigue una orientación pre­dominantemente sincrónica; por consiguiente, la epístola es considerada como una unidad literaria en sí misma sin la necesidad de recurrir a la imagen histórica del filósofo ateniense como el escritor original del texto. La intención es abordar su lectura desde el propio léxico del escrito y evitar la comparación-contraste con otros pasajes de la obra de Platón. La epístola propone sus propias pistas de interpretación para el acercamiento al tema de la amistad; por tanto, no existe la necesidad de utilizar recursos externos para su compresión. Es posible que el acercamiento propuesto prescinda del sujeto histórico, pero una lectura de esta naturaleza contribuye a revisar diferentes ángulos de interpretación que también se encuentran presentes en la Carta séptima y que no debieran obviarse como sucede habitualmente en las traducciones.

II. Distinción entre hetaíros y otras formas de amistad

El tema de la amistad tiene un amplio tratamiento dentro de la epístola. De inicio, el encabezado de la carta describe de manera puntual el contenido del documento, pues Platón remite el escrito a los οἰκείοις, “familiares”, “parientes”, y ἑταίροις, “compañeros”, “camaradas”. En consecuencia, desde el título mismo se apela a los diferentes vínculos de amistad existentes entre Dión y sus más cercanos colaboradores. No obstante, esas dos palabras no son las únicas opciones disponibles para conceptualizar un tipo de relación amistosa entre dos o más personas. El texto también ofrece otros términos para designar el acercamiento fraternal; así pues, aparte de οἰκείοις y ἑταίροις, también se emplean las palabras φίλος, ἀδελφός, κοινωνός, σύµ­φωνος, σύµµαχος, σύγγεγονότος como parte del campo semántico de la idea de amistad (Leyh 2019, p. 202). Esa gran diversidad, manifiesta la relevancia del tema e igualmente ilustra la enorme riqueza de matices respecto a la noción de amistad en el escrito platónico.

Sin embargo, esa variedad de vocablos también presenta una dificultad para definir con precisión las ideas de Platón sobre el asunto. Cada una de esas palabras adquiere connotaciones diversas con relación al contexto donde se les utiliza. Las diferentes traducciones no son consistentes al interpretar el sentido de los términos, regularmente se les toma como si fueran sinónimos de “amigo”. Por esta razón, Leyh (2019) propone distinguir dos tipos de amistad para analizar el tema dentro de la séptima carta. El punto de partida para tal diferenciación no tiene como principio el concepto que subyace detrás de la enunciación, sino el campo semántico al cual remiten. Dicho de otro modo, se enfoca en clasificar la noción de amistad desde la agrupación semántica sin tener en cuenta los términos específicos en cada caso, pues asume que todos son parte de ese mismo marco general utilizado para definir la amistad en sí.

De acuerdo con Leyh (2019, p. 202), en la epístola platónica no existe una definición clara de amistad. De ahí que este autor proponga la creación de una noción “débil” y otra “fuerte” con el objetivo de precisar dicha noción (Leyh 2019, pp. 202-203). El fundamento principal para esta distinción lo constituye el pasaje donde se alude explícitamente a dos tipos de amistad; una que surge de la filosofía y otra de la compañía “habitual”: οὐκ ἐκ φιλοσοφίας γεγονότε φίλω, ἀλλ᾽ ἐκ τῆς περιτρεχούσης ἑταιρίας ταύτης τῆς τῶν πλείστων φίλων (333e), “No llegaron a ser amigos a causa de la filosofía, sino producto de la compañía propia de la mayoría de los amigos”.7 Dentro de la caracterización “débil”, ubica aquella que se describe en 333e y 334a como un “compañerismo habitual” que surge de la costumbre. Esta amistad ante la dificultad o la prueba se esfuma rápidamente porque no tiene consistencia ni profundidad. Es el supuesto caso de los dos “amigos” de Dión que lo acompañan en su retorno a Siracusa, pero lo terminan traicionando al escuchar los señalamientos de tiranía en su contra (333e-334a). En cambio, la amistad “fuerte” es estable y confiable. Este tipo de vínculo hace referencia a la relación que surge de una educación liberal común y del amor auténtico por la filosofía. Esa es la razón que hace acudir a Platón a Siracusa para encontrarse con Dión a pesar de las dificultades e implicaciones del viaje. La distinción formulada tiene la intención de cimentar la actividad política en la amistad “fuerte”, porque así se garantiza la durabilidad del gobierno; ésta sería la razón esencial por la cual Platón retoma el tema en su carta.

La propuesta resulta atractiva porque permite organizar el contenido de la epístola a partir de la agrupación semántica de las ideas de amistad sin recurrir explícitamente al léxico. Sin embargo, el fundamento para sostener esa división es cuestionable, ya que el pasaje de 333e-334a admite la po­si­bilidad de leerlo desde diferentes ángulos. Así, por ejemplo, respecto a estas otras perspectivas de lectura, es pertinente aclarar que la unidad narrativa comienza en realidad en 333d con la frase: ἦλθον Ἀθηναῖος ἀνὴρ ἐγώ, ἑταῖρος Δίωνος, σύµµαχος αὐτῷ, πρὸς τὸν τύραννον, “Yo un hombre ateniense, compañero y aliado de Dión, vine a la corte del tirano”. En esta oración se hace referencia a la relación de “amistad” existente entre Platón y Dión, pero no se utiliza propiamente el término φίλος, “amigo”, para designarla. En lugar de ello, aparece una doble caracterización que describe el vínculo entre ambos. Platón se asume como ἑταῖρος, “compañero”, y σύµµαχος, “aliado”, con lo cual se hace una clara distinción entre estos dos términos. Así pues, en la lógica del discurso, “compañero” y “aliado” son dos maneras diferentes de apelar a la relación entre los personajes principales.

Más adelante, unas pocas líneas después, se vuelve a realizar una aco­tación importante para distinguir los diferentes vínculos dentro de la epís­tola. Cuando Platón describe su encuentro con Dionisio II señala que el tirano trató de sumarlo a su propia causa en contra de Dión. De manera específica, intentó convencerlo para que γενέσθαι µετ᾽ αὐτοῦ ἐµὲ µάρτυρά τε καὶ φίλον (333e), “llegue a ser testigo y amigo suyo”. Destaca aquí el hecho de que se use el término φίλος, “amigo”, y no se recurra a definir la propuesta de amistad dentro de los parámetros de hetaíros o símmachos. Después, dentro del mismo contexto narrativo se vuelve a establecer una distinción lexica, aún más importante, en la caracterización de la amistad. El texto indica que Dión, a su regreso de Atenas, se hizo acompañar de dos “hermanos”, que llegaron a ser amigos y posteriormente se convirtieron en compañeros: καὶ δὴ καὶ τούτω τὼ συγκαταγαγόντε αὐτὸν φίλω ἐκ τούτων τε καὶ ἐκ τῆς πρὸς τὴν κάθοδον ὑπηρεσίας ἐγενέσθην ἑταίρω (333e), “En efecto, estos fueron los dos amigos que le acompañaron en el regreso, y a partir de los servicios en el viaje de vuelta, llegaron a ser compañeros”. Hay dos cosas que destacan en esta cita. Por un lado, una vez más se presenta la distinción entre fílos y hetaíros, estas palabras no se establecen como sinónimos de una misma relación amistosa, sino que apelan a dos formas diferentes de vincularse. Por el otro, también existe implícitamente una especie de “gradualidad” en la tipificación de la amistad, pues en principio se emplea la designación de hermanos, luego de amigos y, por último, llegan a convertirse en compañeros. Pareciera que el estatus de hetaíros, “compañero”, fuera el nivel más elevado de amistad al cual se pudiera aspirar en una relación entre dos sujetos.

La distinción entre amigo y compañero es fundamental para comprender el sentido de la amistad dentro de la séptima carta. Si, efectivamente, la relación de hetaíros implica un vínculo distinto a la simple relación de amigo, entonces resulta comprensible el término con el cual se alude a Dión tras ser asesinado. La responsabilidad en la muerte de Dión de esos dos hermanos, que se volvieron amigos hasta llegar a ser compañeros, resulta totalmente reprochable. Cuando se menciona el acto de traición perpetrado por estos dos “compañeros”, el texto utiliza la palabra hetaíros y no “amigo” para caracterizar a Dión; al respecto, el texto dice lo siguiente: οὐ µόνον τὸν ἑταῖρον καὶ ξένον προύδοσαν, ἀλλ᾽ οἷον τοῦ φόνου αὐτόχειρες ἐγένοντο (334a), “No solo traicionaron al compañero y huésped, sino que, en cierto modo, se convirtieron en autores intelectuales del crimen”. Las traducciones habituales de este pasaje introducen en este lugar la palabra “amigo”;8 no obstante, el término que subyace detrás es hetaíros y no fílos o algún otro. Así pues, lo terrible del asunto es la traición de alguien que llegó a ser considerado compañero.9

La precisión del término hetaíros usado en este sitio sugiere que tiene un sentido técnico dentro de la epístola para describir las relaciones de amistad. Esa posibilidad ya ha sido aludida por Edelstein 1966, quien dice “in the letter the word ἑταίροις has a special meaning” (p. 7). Por tanto, la distinción entre hetaíros y los otros tipos de relación amistosa resulta clave para comprender los diferentes vínculos establecidos dentro de la Carta séptima. A la luz de las ideas desarrolladas hasta ahora, queda claro que la tipificación de amistad “fuerte” y “débil” no es suficiente para explicar las distintas oportunidades de relación amistosa que ofrece el texto. Además, este aparente uso técnico del término hetaíros permite la posibilidad de analizar el tema de la amistad más allá de la mera distinción semántica de ideas, pues al parecer existe una base textual con fundamento en el léxico de la epístola para desarrollar una línea de interpretación que no quede restringida únicamente a la circunscripción de lo “fuerte” o “débil”. La reducción de las relaciones de amistad a estas dos categorías implica dejar fuera otras formas de analizar el tema.10

III. La amistad desde el concepto de hetaíros

La distinción identificada entre hetaíros y otras formas de amistad se mantiene de manera consistente fuera del núcleo narrativo de 333e-334a. En varias ocasiones, a lo largo de la epístola, Platón conserva la misma diferenciación disyuntiva de hetaíros con respecto a otras formas de referir la amistad. Ya en el encabezado mismo de la carta se vislumbra esta demarcación de términos. El escrito está dirigido τοῖς Δίωνος οἰκείοις τε καὶ ἑταίροις, “a los familiares y compañeros de Dión”. De inicio, se apela a dos distintos grupos de personas; es decir, por una parte, el texto interpela a los parientes, por la otra, a un sector de amistades o sujetos que denomina “compañeros”. Esa precisión sugiere que ambos términos no son intercambiables ni sinónimos, sino que Platón divide el núcleo básico de amistades de Dión en dos categorías disyuntivas.

La formulación de esta división de personas en el encabezado de la epístola no es mera casualidad. Cuando Platón narra su primer viaje a Sici­lia, refiere que sus recomendaciones a Dionisio II las hizo πρὶν συµβουλεύειν τοῖς οἰκείοις καὶ ἑταίροις τοῖς περὶ Δίωνα (338a), “antes de dar consejos a los familiares y compañeros de Dión”. Se mantiene el nombramiento diferenciado de personas que aparece entre los destinatarios de la carta. Con ello se da a entender que el círculo de amistad cercano a Dión estaba conformado por dos tipos de relaciones, las de parentesco y las de “com­pañía” o “camaradería”.

Una distinción similar persiste en otros contextos cuando se hace refe­rencia a la amistad. Así, Platón al narrar la experiencia política de su juventud reflexiona y señala que el ejercicio de gobierno no es posible realizarlo sin la ayuda de “amigos” y “compañeros”. De manera concreta expresa οὔτε γὰρ ἄνευ φίλων ἀνδρῶν καὶ ἑταίρων πιστῶν οἷόν τ᾽ εἶναι πράττειν (325d), “Sin amigos y compañeros de confianza no hay nada que hacer” (Cano Cuenca 2014, p. 37). Una vez más, vuelve a aparecer en el texto una acotación que distingue dos grupos de personas. En esta ocasión, la división resulta más significativa porque establece una diferencia entre fílos y hetaíros. En otras palabras, no se concibe el término “amigo” como sinónimo de “compañero”; más bien, cada uno de estos vocablos hace referencia a los dos grupos de personas imprescindibles para la conformación de un buen gobierno. De esta manera, se busca señalar que, sin amigos y compañeros, la tarea de gobernar resulta prácticamente imposible.

El filósofo ateniense es firme en este planteamiento. Cuando menciona la esencia del consejo dado a Dionisio II, expresa exactamente la misma idea. Primeramente, le recomienda que busque la ἐγκράτεια de sí mismo (331d); luego, que consiga “amigos” y “compañeros”. El consejo señala claramente que ἔσεσθαι µέλλοι καὶ πιστοὺς φίλους τε καὶ ἑταίρους κτήσεσθαι, ὅπως µὴ πάθοι ἅπερ ὁ πατὴρ αὐτοῦ, “procurase amigos fieles y compañeros, para que no le pasara como a su padre” (331e). Platón de nuevo retoma la distinción entre “amigos” y “compañeros” como parte de las estrategias de un buen gobierno. El texto realiza una distinción deliberada entre fílos y hetaíros; es decir, en la lógica argumentativa platónica hay dos tipos diferentes de relaciones amistosas necesarias para que un régimen sea duradero. La causa del fracaso de Dioniso I fue la ausencia de compañía de estos grupos en la corte real.

La distinción de hetaíros con referencia a otros términos permite acotar un contexto semántico basado en el uso del léxico. En principio, queda claro que para Platón no es lo mismo hetaíros que oikeîos; por consiguiente, es de esperar que tampoco tengan igual significado hetaíros y fílos. De ahí que resulte totalmente ambiguo que, en algunas ocasiones, en las traducciones de la epístola al castellano, se emplee indistintamente “amigo” para referir hetaíros; en todo caso, habría que preferir la palabra “compañero” o “ca­marada” para puntualizar la distinción sugerida por Platón. Así pues, de acuerdo con las citas revisadas, es posible dar cuenta de un uso específico de hetaíros, en contraste con oikeîos y fílos. En suma, cada uno de estos tres términos hacen referencia a un tipo concreto de relación.

Ahora bien, el uso del término hetaíros en correspondencia a este par de palabras, con base en el léxico del propio texto, brinda un ámbito semántico distinto al propuesto por Leyh (2019) para interpretar el significado de amistad de manera más precisa. El primer núcleo de distinción entre hetaíros y oikeîos coloca al término dentro del contorno doméstico o en el marco de las relaciones familiares. Por consiguiente, no sería inconcebible suponer que, en este contexto de uso, el término posea un matiz cercano a una amistad íntima, casi familiar. El segundo núcleo de distinción entre hetaíros y fílos parece apelar a una relación totalmente distinta. Esta diferenciación se hace dentro de un contexto político para establecer los dos tipos de personas requeridas en el ejercicio de un buen gobierno.

Dentro de la epístola, casi al finalizar, existe una tercera distinción de hetaíros con respecto a otro término. Platón nuevamente lo utiliza dentro de un contexto político para referir ahora a un tipo de vínculo indeseable. El filósofo expresa que un mal gobernante se apodera de las riquezas de los demás de manera injusta y las comparte con sus τοῖς συνεργοῖς τε καὶ ἑταίροις (351b) “colegas y compañeros”. En otras palabras, hace referencia a una asociación perniciosa con la intención de despojar a los ricos de sus bienes con engaños y mentiras. El texto habla de una colaboración malvada entre el gobernante, sus colegas y compañeros con la finalidad de hacerse de riquezas mal habidas.

Esta tercera distinción permite completar el panorama respecto al uso de hetaíros dentro de la Carta séptima. Así pues, se pueden establecer claramente tres contextos específicos en su empleo. Primero, se utiliza el término dentro de un escenario doméstico para referir a las relaciones fraternales, a la pertenencia de un círculo íntimo de amistad. Segundo, se le emplea dentro de un entorno político para describir el tipo de relación deseable que debe prevalecer en la esfera de gobierno. Un buen gobernante requiere amigos y compañeros para emprender con éxito la actividad política. La carencia de compañeros adecuados anticipa la ruina del gobernante. Por último, se usa también dentro de un horizonte político para señalar la relación de complicidad en perjuicio del buen gobierno. No necesariamente toda relación con los compañeros conduce al bien de la ciudad; por el contrario, puede darse el caso de la existencia de una compañía encaminada hacia la práctica del engaño.

En esencia, para resumir, hetaíros puede apelar a dos situaciones concretas. Por un lado, refiere al vínculo cercano, casi familiar, que puede establecerse entre las personas. Por otro, expresa la relación de compañía necesaria para la actividad política, la cual se puede presentar bajo un doble matiz: para un gobierno justo y para un gobierno injusto. Desde estos referentes se procede ahora a analizar las citas donde aparece el término hetaíros sin complemento alguno. La idea de tal revisión es demostrar que existe un uso consistente del término dentro de este marco argumentativo planteado con base en el propio léxico de la carta.

IV. La interpretación de la epístola desde la noción de hetaíros

La distinción de diferentes formas de amistad permite captar de manera más precisa el uso específico de hetaíros. En un sentido estricto, dentro de la epístola, no es lo mismo fílos y hetaíros, pues Platón en varias ocasiones establece una evidente diferencia entre estos dos términos. De igual manera, también se separa “compañero” de pariente y de colega o cómplice. Desde este enfoque, el uso particular de hetaíros adquiere un significado singular cada vez que se le usa sin relación a ningún otro término alusivo a la amistad. En todos los casos queda claro que la mejor traducción no sería “amigo”, sino “compañero”, en alguna de las dos acepciones revisadas en la sección anterior; es decir, compañero bajo un contexto de relaciones fraternales o filiales, o bien, compañero en un horizonte político con un doble matiz.

Dentro del primer escenario hay varias citas que permiten clarificar el uso de hetaíros como parte de una compañía fraternal. Destaca aquí la referencia que sitúa a Sócrates como hetaíros de Platón. La carta narra que algunos, por razones fortuitas, llevaron a juicio τὸν ἑταῖρον ἡµῶν Σωκράτη τοῦτον (325b), “a Sócrates, nuestro compañero”. Durante largo tiempo ha llamado la atención esta designación a Sócrates como hetaíros. Al respecto, Cano Cuenca 2014, p. 36, comenta: “resulta un tanto sorprendente, y así ha sido señalado por los comentaristas y críticos, que el autor de la carta se refiera a Sócrates como ἑταῖρος —compañero, no maestro—, pero también se le llama así en su narrativa de su muerte en Fedón 188a”. De hecho, esa manera de nombrar a Sócrates11 ha causado suspicacia, pues “These epithets surely would not lead anyone to suppose that Plato was a disciple of Socrates” (Edelstein 1966, p. 7). Esta observación adquiere importancia dentro del marco de la controversia sobre la autenticidad del escrito. Sin embargo, ese asunto no tiene relevancia cuando se deja el tema del autor de la epístola y se analiza el contenido del texto sin tener presente la autoría o no de Platón. Por consiguiente, desde un enfoque meramente literario, esa designación no debería causar asombro si se ubica el término dentro de las relaciones de amistad más íntimas que se desarrollan dentro del texto en sí, tal y como lo plantea el vínculo establecido entre “pariente y compañero”.

La epístola le confiere una importancia fundamental a hetaíros al definir la relación de Sócrates y Platón en esos términos. En otras palabras, el acompañamiento entre estas dos figuras se convierte en el paradigma para juzgar otras relaciones descritas en la carta. Aparte de la relación de Sócrates y Platón, también es destacable el vínculo entre Platón y Dión que igualmente se define desde la noción de hetaíros. Cuando Platón fue puesto bajo custodia por Dionisio II, con la intención de sumarlo a su causa en contra de Dión, se negó a traicionar a su compañero. Ambos afirmaban sus lazos de amistad, pues los dos ἔφαµεν ἑταῖροί γε εἶναι πρὸς πᾶσαν Σικελίαν (348a), “decíamos todavía que éramos compañeros en toda Sicilia”. De ahí que no resulte extraño que Platón anteriormente ya haya utilizado el atributo de “compañero” para puntualizar su relación con Dión ante el propio Dionisio II, ἦλθον Ἀθηναῖος ἀνὴρ ἐγώ, ἑταῖρος Δίωνος, σύµµαχος αὐτῷ, πρὸς τὸν τύραννον, “Yo un hombre ateniense, compañero y aliado de Dión, vine a la corte del tirano”. Así, al paradigma inicial de amistad Sócrates-Platón se le agrega un componente más para quedar redefinido en una dimensión compuesta por la tríada Sócrates-Platón-Dión.

Este modelo de amistad, ejemplificado en el vínculo Sócrates-Platón-Dión, sirve para juzgar los lazos afectivos restantes en la epístola. De la misma manera, las relaciones de carácter político se ven afectadas por la conceptualización tríadica de la amistad desde la perspectiva de hetaíros. Bajo este criterio de interpretación, adquiere un sentido relevante la gradualidad amistosa establecida entre Dión y los dos atenienses que le acompañaron cuando éste regresó a Sicilia. El texto los designa primeramente como “hermanos”, luego se refiere a ellos como “amigos”, por último, se especifica patentemente que “llegaron a ser compañeros-hetaíros” (333e). Así, la progresión en el modelo de amistad quedaría plenamente configurada en una estructura cuádruple; es decir, el modelo de compañía estaría ejemplificado bajo el siguiente esquema: Sócrates-Platón-Dión-los dos atenienses. Sin embargo, este equilibrio se rompe y queda desconfigurado, pues surge lo inaudito, Dión es traicionado por aquellos que habían llegado a ser sus compañeros. Resulta verdaderamente significativo en el texto que al hablar del suceso de la traición se emplee la palabra hetaíros y no fílos o algún otro término para referirse a Dión (334a). La situación trágica de la historia no radica en la traición de un amigo, sino en la deslealtad hacia un “compañero”. La secuencia Sócrates-Platón-Dión-compañeros atenienses se trunca, la línea de continuidad se ve interrumpida.

Al proyectar esta estructura relacional sobre otros actores en la epístola, el consejo proporcionado por Platón a Dionisio II adquiere un sentido paradigmático. La recomendación de procurar compañeros de confianza para gobernar descansa sobre este modelo de relaciones de amistad (325d, 331e). El texto indica que Dionisio I, al conquistar varias ciudades, οὐχ οἷός τ᾽ ἦν κατοικίσας πολιτείας ἐν ἑκάσταις καταστήσασθαι πιστὰς ἑταίρων ἀνδρῶν (331e), “no fue capaz de establecer en ellas, una vez repobladas, gobiernos de confianza en manos de sus compañeros” (Pl., trad. Cano Cuenca 2014, p. 63). De acuerdo con la epístola, tampoco Dionisio II tuvo la precaución de rodearse de compañeros fieles; más bien, con la finalidad de enriquecer a sus hetaíroi (351a), se asoció en complicidad con ellos, para engañar y despojar a otros de sus bienes (351b). No obstante, los tiranos Dioniso I y II no fueron los únicos que fallaron al seleccionar a sus compañeros de confianza. Tal vez, el caso más emblemático sea el propio Dión, quien no supo escogerlos de manera debida. Así pues, en realidad en la epístola existen tres ejemplos que ilustran las terribles consecuencias de la falta de compañeros fieles y confiables. Las historias de Dionisio I, Dionisio II y Dión coinciden en el mismo error, ninguno de los tres se rodeó de compañeros de confianza. Implícitamente, se podría también configurar una tríada para ilustrar la ausencia de compañías adecuadas la cual quedaría integrada de la siguiente manera: Dionisio I-Dionisio II-Dión.

En conformidad con las ideas desarrolladas hasta ahora, el término hetaí­ros resulta crucial para definir las relaciones amistosas dentro de la Carta séptima. Un acercamiento al texto, sobre la base del uso de hetaíros, permite en realidad establecer dos triadas para dar cuenta de la estructura de la relación de compañerismo. De un lado, se ubica el vínculo Sócrates-Platón-Dión, del otro Dionisio I-Dionisio II-Dión. El punto central de ambas asociaciones lo constituye Dión, por lo cual, en realidad se tendría una especie de quiasmo donde el elemento central serían los amigos de Dión. La estructura final quedaría representada de la siguiente manera:

Tabla 1 

ESTRUCTURA DE LAS RELACIONES DE COMPAÑERISMO (HETAÍROS) EN LA CARTA SÉPTIMA DE PLATÓN
Tríada virtuosa Punto de inflexión Tríada corrupta
Sócrates - Platón - Dión Compañeros de Dión Dión - Dionisio II - Dionisio I
A B C D C B A
Compañía deseable Compañía indeseable

Fuente: elaboración propia.

La secuencia de las relaciones amistosas tiene la siguiente disposición. Sócrates tuvo una relación de amistad caracterizada desde la noción de hetaíros con Platón. A su vez, Platón mantuvo una relación con Dión, definida a partir de ese mismo concepto. Dión, aparte de Platón, sostuvo también una relación de amistad con dos atenienses situada desde el horizonte de hetaíros. No obstante, estos últimos traicionaron al compañero-hetaíros. Esta serie de paralelismos plantea la siguiente interrogante: ¿verdaderamente Dión logró la compañía de personas fieles y de confianza? De acuerdo con el texto, la relación Sócrates-Platón-Dión siguió el esquema de la amistad conforme al criterio de hetaíros. No obstante, dicha relación se vio interrumpida, pues Dión no fue capaz de encontrar en los dos atenienses el modelo de hetaíros. La situación de Dión viene a ser la misma que prevaleció con Dionisio I y con Dionisio II, ninguno de ellos pudo desarrollar relaciones similares a la representada en la estructura Sócrates-Platón-Dión.

V. Conclusiones

Definitivamente el tema de la amistad tiene un lugar importante dentro del contenido de la Carta séptima de Platón. La gran variedad de términos para describir las relaciones de amistad complica el entendimiento adecuado de este tópico en la estructura de la carta. Esa dificultad se percibe claramente en la inconsistencia con la cual se traducen los diferentes términos que aluden a la amistad. Tal situación se expresa con nitidez en el uso y traducción de hetaíros, ya que en ocasiones se le traduce como “amigo”. Sin embargo, no resulta pertinente asumir que hetaíros corresponda a “amigo”, porque Platón introduce varias veces una distinción fundamental entre hetaíros y amigo, hetaíros y familiar, hetaíros y colega. De ahí que la misma epístola sugiere un uso técnico para hetaíros.

A partir de esta distinción esencial de hetaíros respecto de otras relaciones afectivas, es posible perfilar un uso específico del término. La particularidad de este concepto ofrece indicios importantes para interpretar los diferentes matices que adquiere la amistad en el contenido de la carta. Más allá de las consideraciones de índole histórica de Sartori, 1957 y 1958, o de Boswell, 1980 y 1996, que intentan fijar el significado de hetaíros a las condiciones culturales y políticas de la época, la carta proporciona un marco único de lectura para delimitar con precisión el significado de esta palabra. Con base en la distinción hecha entre hetaíros y otros tipos de relación, es posible identificar una estructura de composición hacia el interior del escrito con referencia al empleo del término. La disposición de las ideas está claramente integrada en dos secuencias argumentativas de relaciones triádicas. Por un lado, se ubica el ordenamiento Sócrates-Platón-Dión; por el otro, en un sentido totalmente inverso se encuentra Dión-Dionisio II-Dionisio I. En el centro, como una especie de pivote, subyacen las relaciones de Dión y los dos “amigos” atenienses, que a la postre fueron los autores intelectuales de la muerte del protagonista.

La identificación de esta estructura muestra la relevancia del término hetaíros dentro del argumento general de la epístola. La relevancia del término viene dada desde el encabezado de la carta, continúa con la relación entre Platón y Dión y culmina con el asesinato de Dión por parte de sus compañeros. Aún más, la importancia de esta estructura reside en la confección de un marco interpretativo general para leer el drama de la epístola. Dentro de esta estructura, el término hetaíros puede adquirir cualquier significado específico, ya sea que remita a un compañero sexual, a un compañero político, a ambos o alguna otra situación concreta, lo importante es situar esa relación como un elemento paradigmático en la interpretación de la carta. Dicho de otro modo, en un primer momento no es fundamental dar cuenta del tipo de compañía específica, desde el punto de vista histórico, que existía entre Sócrates y Platón, Platón y Dión, Dión y los dos atenienses, todas ellas juzgadas con el criterio de hetaíros, sino que lo relevante es rescatar este marco estructural donde hetaíros tiene un lugar destacado para definir las relaciones de amistad. De ahí, la necesidad de realizar una traducción que recupere esta estructura de composición y no que la oculte.

Bibliografía: Fuentes antiguas

Novum Testamentum Graece, 28th, eds. Barbara and Kurt Aland, Johannes Karavidopoulos, Carlo M. Martini, Bruce M. Metzger, Stuttgart, Deutsche Bibelgesellschaft, 2012. [ Links ]

Plato, Timaeus, Critias, Cleitophon, Menexenus, Epistles, trad. R. G. Bury, Cambridge, Harvard University Press, 1952. [ Links ]

Plato, Epistles, trad., ensayo crítico y notas Glenn R. Morrow, Indianapolis-New York, The Bobbs Merrill, 1962. [ Links ]

Plato, “Πλάτων τοῖς Δίωνος οἰκείοις τε καὶ ἑταίροις εὖ πράττειν”, trad. Jonah Radding, en Heather L. Reid and Mark Ralkowski (eds.), Plato at Syracuse. Plato at Syracuse: Essays on Plato in Western Greece with a new translation of the Seventh Letter by Jonah Radding, Fonte Aretusa, Parnassos Press, 2019, pp. 1-74, DOI: 10.2307/j.ctvcmxptk.7. [ Links ]

Platón, Cartas, ed. y prol. Margarita Toranzo, Madrid, Instituto de Estudios Políticos, 1970. [ Links ]

Platón, Diálogos VII: Dudosos, apócrifos, cartas, intr., trad. y notas Juan Zaragoza y Pilar Gómez Cardó, Madrid, Gredos, 1992. [ Links ]

Platón, Carta VII, intr., trad., notas y comentario Jorge Cano Cuenca, Madrid, Cátedra, 2014. [ Links ]

Sagrada Biblia. Versión crítica sobre los textos hebreo, arameo y griego, trad. Francisco Cantera Burgos y Manuel Iglesias González, Madrid, Biblioteca de Autores Cristianos, 2000. [ Links ]

Fuentes modernas

Araújo, Carolina, “What was Plato up to in Syracuse?”, en Heather L. Reid and Mark Ralkowski (eds.), Plato at Syracuse: Essays on Plato in Western Greece with a new translation of the Seventh Letter by Jonah Radding, Fonte Aretusa, Parnassos Press, 2019, pp. 77-90, DOI: 10.2307/j.ctvcmxptk.8. [ Links ]

Boswell, John, Christianity, Social Tolerance, and Homosexuality. Gay People in Western Europe from the Beginning of the Christian Era to the Fourteenth Century, Chicago, The University of Chicago Press, 1980. [ Links ]

Boswell, John, Las bodas de la semejanza, Barcelona, Muchnik Editores, 1996. [ Links ]

Bradley Lewis, Victor, “The Rhetoric of Philosophical Politics in Plato’s Seventh Letter”, Philosophy and Rhetoric, vol. 33, 2000a, pp. 23-38, DOI: 10.1353/par.2000.0007. [ Links ]

Bradley Lewis, Victor, “The Seventh Letter and the Unity of Plato’s Political Philosophy”, The Southern Journal of Philosophy, 38, 2000b, pp. 231-250, DOI: 10.1111/j.2041-6962.2000.tb00899.x. [ Links ]

Burnyeat, Myles and Michael Frede, The Seventh Platonic Letter. A Seminar, Oxford, Oxford University Press, 2015. [ Links ]

Edelstein, Ludwig, Plato’s Seventh Letter, Leiden, Brill, 1966. [ Links ]

García Pérez, David, “Retórica y política en torno a Alcibíades”, Nova Tellvs, 27-1, 2009, pp. 41-58. [ Links ]

Leyh, Tony, “Friendship and Politics in the Seventh Letter”, en Heather L. Reid and Mark Ralkowski (eds.), Plato at Syracuse: Essays on Plato in Western Greece with a new translation of the Seventh Letter by Jonah Radding, Fonte Aretusa, Parnassos Press, 2019, pp. 201-214, DOI: 10.2307/j.ctvcmxptk.15. [ Links ]

Liddell, Henry George, Robert Scott and Henry Stuart Jones, A Greek-English Lexicon, Oxford, Clarendon Press, 1996. [ Links ]

Marren, Marina, “The Historical Background of the Seventh Letter: Political Philosophy in Context”, en Heather L. Reid and Mark Ralkowski (eds.), Plato at Syracuse: Essays on Plato in Western Greece with a new translation of the Seventh Letter by Jonah Radding, Fonte Aretusa, Parnassos Press, 2019, pp. 91-104, DOI: 10.2307/j.ctvcmxptk.9. [ Links ]

Sartori, Franco, Le eterie nella vita politica ateniense del vi e v secolo a. C., Roma, “L’Erma” di Bretschneider, 1957. [ Links ]

Sartori, Franco, “Platone e le eterie”, Historia: Zeitschrift für Alte Geschichte, 7, 1958, pp. 157-171. [ Links ]

1Así lo señala igualmente Leyh 2019, p. 201, quien dice: “There is much talk of friendship (φιλία) and its various cognates in the Seventh Letter”.

2A manera de ejemplo, se puede mencionar el caso del diccionario Liddell, Scott & Jones 1996, p. 700, que registra ocho acepciones para el uso masculino del término: 1) comrade, companion, of the followers of a chief, comrades-in-arms; messmate; fellow-slave; partner; 2) metaph., of things, of a fair wind; 3) pupil, disciple; 4) of political partisans; 5) members of a religious guild; 6) rarely of lovers; 7) the guards, i.e. the cavalry of the Macedonian kings; 8) as Adj., associate of. Es de llamar la atención que en él nunca se da la acepción de friend (amigo) para el término. Sin embargo, al castellano en ocasiones se traduce como “amigo”.

3Al respecto, Boswell 1996, p. 40, señala claramente: “En lo que respecta al griego clásico, existe la convención (sobre todo entre las sociedades con acusada antipatía por los sentimientos homosexuales) de traducir ἑταῖρος como «compañero», y ἑταίρα como «cortesana» o «amante», aunque básicamente ambos términos tenían el mismo significado y todas las razones apuntalan (sobre todo en lo que se refiere a la Atenas clásica) la creencia de que prácticamente no había diferencia importante de naturaleza en las relaciones de uno y otro caso”.

4Está claramente documentada la existencia de estas asociaciones o agrupaciones en la Grecia clásica. Estas organizaciones tenían un fin político y participaron activamente en los movimientos sociales de Atenas en torno a los años 411 y 404 a. C. (Sartori 1957). De hecho, la Carta séptima, en el caso de que sea auténtica, es el único testimonio explícito de la participación política de Platón en la vida de Atenas (Sartori 1958). La participación de otros personajes destacados en las heterías también está registrada, tal como es el caso de Alcibíades (García Pérez 2009).

5En las traducciones al inglés, se observa claramente esa diversidad de sentidos. Así, Bury (1952) emplea las palabras associates, companions y comrades para traducirla; Morrow (1962) utiliza followers, friend, loyal followers, comrades; mientras Radding (2019) emplea companions, friend, associates. En la traducción al castellano ocurre una situación similar; se traduce como “amigos”, “camaradas”, “colaboradores”, Zaragoza y Gómez Cardó 1992.

6Se decide omitir el tema de la autenticidad porque como expone Cano Cuenca 2014, p. 150: “La cuestión sigue aún sin encontrar una solución. Ya que difícilmente aparecerán nuevas pruebas en una u otra dirección, quizá lo mejor sea suspender el juicio y estudiar el documento dejando al margen esta larga polémica”. Por consiguiente, cuando en el artículo se habla de Platón como el autor de la epístola no se asume necesariamente a la figura histórica, sino al personaje literario que adopta su lugar. En otras palabras, se apela a la imagen “canónica” y no real del filósofo, independientemente de si haya sido o no el compositor original del documento.

7A menos que se señale específicamente lo contrario, las traducciones de las citas son propias.

8Las versiones en castellano de este pasaje traducen el término hetaíros como “amigo” en lugar de “compañero” o “camarada” (Toranzo 1970, p. 76; Zaragoza y Gómez Cardó, 1992, p. 501; Cano Cuenca 2014, p. 71); sin embargo, en otros sitios de la epístola donde aparece hetaíros utilizan diferentes palabras para la traducción. En este sentido, no hay consistencia, pues se genera ambigüedad en la comprensión del significado de hetaíros. Algo similar sucede con las traducciones a otros idiomas.

9Esa es la misma idea que años más adelante también se retomará en el Evangelio de Mateo para referir la traición de Judas hacia Jesús. El texto bíblico dice lo siguiente: καὶ εὐθέως προσελθὼν τῷ Ἰησοῦ εἶπεν· χαῖρε, ῥαββί, καὶ κατεφίλησεν αὐτόν. ὁ δὲ Ἰησοῦς εἶπεν αὐτῷ· ἑταῖρε, ἐφ’ ὃ πάρει. τότε προσελθόντες ἐπέβαλον τὰς χεῖρας ἐπὶ τὸν Ἰησοῦν καὶ ἐκράτησαν αὐτόν (Ev. Matt., 26.49-50), “Y al instante se acercó a Jesús y le dijo: «¡Salve, Rabbí!», y le dio un beso. Jesús le dijo: «Amigo, ¡a lo que estás aquí!». Entonces aquéllos se acercaron, echaron mano a Jesús y le prendieron” (Cantera-Iglesias 2000).

10Un ejemplo distinto en la organización de este tópico es la propuesta que hace Cano Cuenca, en una de sus notas a pie de página, 2014, p. 71, n. 668. Sobre la base 334b donde aparece el termino fílos expone lo siguiente: “se mencionan tres clases de amistad: la vulgar (βαναύσου φιλότητος), la que surge de la afinidad física y psíquica (συγγενείᾳ ψυχῶν καὶ σοµάτων) y la que surge de la comunidad de una cultura liberal (ἐλευθέρας παιδείας κοινωνίαν)”. Aunque la propuesta es interesante, sólo la menciona, pero no la desarrolla ampliamente.

11En ese mismo contexto, además de hetaíros, el texto se refiere a Sócrates como ἄνδρα ἐµοὶ πρεσβύτερον Σωκράτη (324e), “mi ‘amigo’ anciano Sócrates”.

Recibido: 06 de Abril de 2021; Revisado: 07 de Mayo de 2021; Aprobado: 19 de Mayo de 2021

*

Jesús Caos Huerta Rodríguez es doctor en Filología Clásica por la Universidad Nacional de Educación a Distancia de Madrid, España; Profesor Titular de tiempo completo en la Universidad Pedagógica Nacional, subsede Ensenada. Es miembro del equipo de trabajo del proyecto de investigación Edición y estudio de textos bí­bli­cos y parabíblicos, con referencia FFI2017-86726-P, del Instituto de Lenguas y Culturas del Mediterráneo y Oriente Próximo (csic). Pertenece al Sistema Nacional de Investigadores de Conacyt, con la línea de investigación: Filosofía antigua, textos e interculturalidad. Su publicación más reciente es “Abraham el astrólogo: una lectura intercultural de la obra de Clemente de Alejandría”.

Creative Commons License Este es un artículo publicado en acceso abierto bajo una licencia Creative Commons