Señor editor: A pesar de que la vacunación representa una de las estrategias preventivas más efectivas en salud pública, su aplicación siempre ha generado cierto escepticismo. Una caricatura del siglo XIX ilustra a personas con grotescas protuberancias en forma de vacas que emergen después de haber sido vacunadas por Edward Jenner.1 En nuestra época, las redes sociales proporcionan una plataforma abierta para grupos en contra de la vacunación,2,3 pero no se conoce el impacto que pueden estar teniendo. Complicando las cosas, la personalización que servicios como Facebook proveen puede crear burbujas ideológicas, de tal manera que al usuario puede aparecerle sólo información acorde a sus puntos de vista, sean estos correctos o erróneos.4 Con esto en mente, presentamos los resultados de una encuesta, cuyos objetivos fueron conocer el estado de confianza hacia las vacunas en nuestra región5 y explorar si existe asociación entre el uso de internet y redes sociales y las actitudes de rechazo hacia las mismas.
A partir de encuestas previas,5,6 elaboramos un cuestionario que fue aplicado a padres de familia en 10 jardines de niños públicos seleccionados al azar con la ayuda de la SEPyC, y 11 privados, en Culiacán, Sinaloa, entre enero y diciembre de 2015.
Un total de 555 padres de familia contestaron la encuesta para una respuesta de 69.5%, con una edad promedio de 33.8 años (rango 18-60), en su mayoría mujeres (80%). El 85.5% de los participantes usa internet a diario o casi a diario, 95.8% ha buscado información de salud en internet en el último año, y 44.4% sobre vacunas. El 18.1% de los encuestados en jardines de niños privados refieren haber dejado de vacunar a sus hijos por dudas acerca de los beneficios o efectos secundarios de las vacunas, en comparación con 6.3% en jardines públicos. Al realizar una regresión logística, se identificaron tres factores asociados con el rechazo a la vacunación: acudir a un jardín de niños privado, razón de momios (RM) 2.48 (IC95% 1.22 a 5.06); buscar información sobre vacunas en internet, RM 1.86 (IC95% 1.09 a 3.17); y presionar Me gusta en artículos de salud en Facebook, RM 2.51 (IC95% 1.03 a 6.11) (Cuadro I).
Los resultados son, por un lado, esperados al ver que la mayoría de las personas usa internet y redes sociales para consultar temas de salud; y por otro, sorprendentes y alarmantes por el alto porcentaje de rechazo a la vacunación encontrado que potencialmente puede interrumpir la inmunidad en rebaño en esta ciudad, al igual que su asociación con el uso de redes sociales y la asistencia a escuelas privadas.
Al ser un estudio transversal, no podemos inferir causalidad. Sin embargo, los hallazgos de esta encuesta permitirán investigar más a fondo la relación que existe entre el uso de internet y redes sociales, así como las actitudes hacia la vacunación; y además, justifican el desarrollo de estrategias para fomentar en la población la lectura crítica de la información disponible en línea.