Introducción
En la porcicultura rural de México o porcicultura de traspatio se utilizan cerdos que se mantienen en sistemas de manejo de bajos insumos, en los que se aprovecha la rusticidad y los bajos requerimientos nutricionales que caracterizan a estas poblaciones. En las comunidades rurales en las que estos animales se desarrollan su alimentación consiste primordialmente de raíces, tubérculos, frutas, subproductos agrícolas y desperdicios de cocina1,2. Cabe señalar que la porcicultura de traspatio en México es una actividad importante que contribuye a la economía familiar y al consumo de proteína animal de los habitantes de comunidades rurales marginadas.
Adicionalmente, la importancia de las poblaciones locales de cerdos reside en que algunas de éstas pueden ser reservorios de variación genética útil como fuente de nuevos alelos para las poblaciones comerciales de cerdos3. De lo anterior se reconoce la importancia de caracterizar fenotípica y genéticamente a las poblaciones locales de cerdos considerándose que entre las distintas alternativas que existen para la caracterización, y que son complementarias, la caracterización morfométrica es un paso básico para el uso eficiente de estos recursos genéticos. Así, diferentes estudios han sido publicados sobre la caracterización morfométrica de cerdos criollos evaluando, entre otras, características asociadas al crecimiento y al comportamiento reproductivo de estas poblaciones en diferentes sistemas de producción3,4,5.
Por lo anterior y considerando la importancia de la porcicultura de traspatio en el país, el presente estudio se plantea como una contribución a la caracterización morfométrica, cualitativa y cuantitativa, de las poblaciones de cerdos ubicadas en las comunidades rurales de México.
Material y métodos
El estudio se realizó durante el año 2013 en 18 estados de la República Mexicana. La información se obtuvo mediante 241 encuestas aplicadas a propietarios de cerdos de traspatio ubicados en comunidades rurales de los estados de Chihuahua, Coahuila, Durango y Zacatecas (regiones árida y semiárida, n= 45), de los estados de Colima, Guerrero, Nayarit y Oaxaca (región de trópico seco, n= 71), de los estados de Campeche, Chiapas, Quintana Roo, Tabasco, Veracruz y Yucatán (región del trópico húmedo, n= 88) y de los estados de México, Hidalgo, Jalisco y Querétaro (región templada, n= 37).
El tamaño de muestra se determinó con la fórmula recomendada por la FAO6 de acuerdo a lo siguiente: n=(z/m) 2 p(1-p); z es el valor de z (1.64 para 90 % de nivel de confianza), m es el margen de error (0.05= ± 5 %), y p es el valor estimado de la proporción de la muestra que responderán a la encuesta en el mismo sentido, que para este caso se consideró de 0.45. La elección de los encuestados fue con la aplicación del método no probabilístico de bola de nieve, con el cual se identificó a propietarios de cerdos de traspatio, y con la información del primer productor se encuestó al siguiente y así sucesivamente hasta completar el tamaño de muestra estimado7. El mismo día de la entrevista los cerdos se pesaron, se midieron y se fotografiaron, generándose así un respaldo documental mediante el cual cada animal se asignó a una de tres poblaciones consideradas en el estudio y definidas como cerdo Pelón Mexicano (PPM, n= 65), cerdo Cuino (PCU, n= 25) y cerdos de cruza indefinida (PCI, n= 151).
Las variables analizadas fueron: peso corporal (Peco); longitud de la cabeza (Loca) que se obtuvo al medir desde la punta del hocico hasta la base de la cabeza; longitud del cuerpo (Locu) que se obtuvo al medir desde la base de la nuca hasta el nacimiento de la cola; circunferencia del pecho (Circu) que correspondió al valor de la circunferencia torácica tomada detrás de la espalda; altura a la cruz (Acruz) que correspondió a la altura del animal medida desde el suelo hasta la cruz; ancho de la pelvis (Anpe) que se midió como la distancia entre las dos tuberosidades ileacas; número de pezones (Nupe); pelo denso o escaso (Cape); presencia o ausencia de colmillos (Colm); hocico corto o largo (Hoc) ; orejas erguidas o no erguidas (Posio) y temperamento tranquilo o inquieto (Tem). El temperamento se clasificó al momento de las mediciones corporales de acuerdo a dos categorías de comportamiento: moderadamente manejable o difícil de manejar. Adicionalmente se calcularon los índices zoométricos siguientes: índice de proporcionalidad (IP) = (Acruz *100)/Locu; índice corporal (IC) = (Locu *100)/Acruz e índice de peso relativo (IPR) = (Peco *100)/Acruz.
La información se analizó con el método de cuadrados mínimos generales utilizando los procedimientos GLM y GENMOD del paquete estadístico SAS8. El procedimiento GLM se utilizó para el análisis de las variables bajo el supuesto de distribución probabilística normal (Peco, Loca, Locu, Circu, Acruz, Anpe, Nupe, IP, IC e IPR) y el procedimiento GENMOD para el análisis de las variables bajo el supuesto de distribución probabilística Binomial (Cape, Colm, Hoc, Posio y Tem). Para todas las variables se estimó el coeficiente de variación de acuerdo a la formula siguiente: Coeficiente de variación= (desviación estándar ÷ media) * 100. Para interpretar las medias de cuadrados mínimos (MCM) estimadas con el procedimiento GENMOD se realizó la transformación siguiente: e (MCM) / ((1+e)MCM)9. Para todas las variables los modelos estadísticos finales incluyeron los efectos fijos de Estado (18 niveles) y población (3 niveles). No se incluyeron otros efectos fijos, como sexo o edad, en los modelos finales por no contar con la información respectiva.
El modelo estadístico básico utilizado fue el siguiente:
Donde: µ= media general; Ei= efecto fijo del i-ésimo estado (i=1, 2,…, 18); Pj= efecto fijo de la j-ésima población (j=1, 2 y 3); eijklm= efecto residual distribuido NI(0, σ²e); o distribuido B(n, p).
Resultados y discusión
En el Cuadro 1 se muestran los coeficientes de variación (CV), las medias de cuadrados mínimos y los errores estándar para las diferentes variables e índices evaluados. El efecto de Estado fue importante (P<0.01) para todas las variables analizadas, mientras que población influyó significativamente (P<0.05) sobre Peco, Locu, Circu, Acruz, Cape, Colm, Tem IP, IC e IPR.
BW= body weight (kg); HL= head length (cm); BL= body length (cm); CG= chest girth (cm); HW= height at withers (cm); RW= rump width (cm); TC= teat count; HD= hair density (%); TU= presence or absence of tusks (%); ST= long or short snout (%); ER= upright or floppy ears (%); TM= calm or restless temperament (%); PI= proportionality index= (HW *100)/BL; BI= body index = (BL *100)/HW; RWI= relative weight index = (BW *100)/HW.
abc Different letter superscripts in the same row indicate difference (P<0.05).
Variabilidad morfométrica
Los CV estimados en el presente estudio señalan a Peco y Anpe como las características con menor y mayor variación (CV de 18.8 y 27.8 %, respectivamente). Coeficientes de variación con valores intermedios fueron estimados para Loca (24.9 %), Circu (23.5 %), Locu (23.3 %), Nupe (22.8 %) y Acruz (21.2 %). En contraste con estos resultados, diversos autores han publicado CV más bajos que los estimados en el presente trabajo. Así, un estudio en que se evaluó la morfometría de una población de cerdos criollos cuinos en Nayarit, México, estableció CV de 7.56, 8.46 y 11.79 % para número de pezones, perímetro torácico y longitud corporal3. En otra investigación sobre la morfología del cerdo criollo realizada en Venezuela se encontraron CV de 7.62, 9.26, 9.78 y 10.9 % para las variables alzada a la cruz, ancho de grupa, perímetro torácico y longitud de la cabeza10. De manera similar, un estudio realizado en Colombia sobre caracterización zoométrica de cerdos criollos estimó CV de 10.64, 11.84 y 12.76 % para alzada a la cruz, perímetro torácico y ancho de la grupa, respectivamente11. Coincidiendo con lo anterior, a partir de caracterizaciones zoométricas realizadas en poblaciones de cerdos de la raza local Pampa Rocha en Uruguay, se estimaron CV de 5, 6, 10, 11 y 19 % para alzada a la cruz, longitud corporal, longitud de la cabeza, anchura de la grupa y peso vivo12, y CV de 5.90 y 6.92 % en machos y hembras para alzada a la cruz; de 11.90 y 11.06 % en machos y hembras para ancho de grupa, y de 8.88 y 25.36 % en machos y hembras para peso vivo13. Por otro lado, un estudio realizado con cerdos criollos en Guatemala mostró valores menores de CV para los machos comparados con los de las hembras, de 11.09 y 15.06 % para perímetro torácico, 15.35 y 16.72 % para ancho de la grupa, 16.29 y 19.16 % para longitud de la cabeza, y 17.68 y 23.74 % para peso vivo14.
Los coeficientes de variación del presente trabajo señalan que, en general, la población evaluada presentó una mayor variabilidad morfológica en relación a otras poblaciones de cerdos criollos de América Latina3,10-14. Esta variabilidad morfológica puede atribuirse a diferencias en los sistemas de manejo y ambientes en los que se desarrollaron las subpoblaciones así como a la diversidad genética existente entre las mismas.
En relación a los índices zoométricos estimados en el presente estudio, la menor dispersión de los datos se observó en el índice de proporcionalidad (CV= 13.0 %) lo cual sugiriere que las poblaciones evaluadas presentaron un patrón racial homogéneo. Por otro lado, los CV para índice de peso relativo (45.8 %) e índice corporal (14.6 %) sugieren poblaciones heterogéneas en cuanto la orientación productiva de los animales. Lo anterior de acuerdo a la clasificación de los índices zoométricos como elementos útiles para la evaluación racial y funcional de los animales15. Valores similares de CV para índice de proporcionalidad (12 %) e índice corporal (10 %) se reportaron en un estudio morfoestructural realizado en una población local de cerdos en la Provincia de Corrientes, Argentina16. Por otro lado, CV menores fueron estimados en una evaluación de cerdos criollos realizada en Venezuela con valores de 7.04 y 7.74 % para índice de proporcionalidad e índice corporal, respectivamente10. Coincidiendo con lo anterior, un estudio sobre caracterización de cerdos criollos realizado en Guatemala determinó CV de 7.89 y 8.04 % para índice corporal de machos y hembras, respectivamente, mientras que para índice de proporcionalidad fueron de 12.72 % (hembras) y 22.39 % (machos)14. En contraste con los resultados previos, valores altos de dispersión fueron estimados para índice de compacidad en una evaluación morfométrica en la que se compararon poblaciones locales de cerdos provenientes de diferentes municipalidades en Brasil, con CV que estuvieron entre 44.87 y 87.09 %17.
Variables cuantitativas
Las MMC del Cuadro 1 para las variables Peco, Locu, Circu y Acruz muestran que, en general, las poblaciones PPM y PCI son similares en morfometría, siendo diferentes ambas de la población PCU. Los resultados también indican que la población PCU es de menor peso y talla comparada con las poblaciones PPM y PCI (Peco de 48.06 ± 6.17, 35.93 ± 3.04 y 61.11 ± 7.42 kg, Acruz de 56.88 ± 2.45, 51.26 ± 1.36 y 60.32 ± 3.31 cm y Circu de 80.55 ± 3.98, 71.72 ± 2.20 y 93.23 ± 5.37 cm para PPM, PCU y PCI, respectivamente.
Promedios similares a los de PPM y PCU del presente estudio se estimaron para cerdos autóctonos en comunidades indígenas de Chiapas, México, con medias de 52.63 ± 4.81 cm, 46.57 ± 13.35 kg y 86.74 ± 10.61 cm para alzada a la cruz, peso vivo y perímetro torácico, respectivamente2. Asimismo, estudios realizados en dos poblaciones de cerdos criollos determinaron promedios de 59.51 ± 4.71 y 56.41 ± 6.0 cm para alzada a la cruz, 17.07 ± 1.57 y 17.29 ± 2.21 cm para ancho de la grupa y 84.85 ± 8.30 y 85.66 ± 10.14 cm para perímetro torácico de cerdos criollos mantenidos en sistemas de producción de bajos insumos en Venezuela y Colombia10,11. Para las mismas características, valores más bajos fueron reportados en cerdos criollos desarrollados en comunidades rurales de Guatemala con promedios de 47 ± 5.8, 15 ± 2.5, 65 ± 7.2 cm y 45.52 kg para alzada a la cruz, ancho de la grupa, perímetro torácico y peso vivo, respectivamente14.
En contraste a los promedios para PPM y PCU del presente estudio, valores más altos han sido publicados para diferentes poblaciones de cerdos criollos. Así, en poblaciones de cerdo Pelón Mexicano en Nayarit, México se estimaron para cerdos en confinamiento y pastoreo promedios de 68.34 ± 1.39 y 68.14 ± 1.84 cm para alzada a la cruz, de 102.53 ± 1.57 y 102.66 ± 2.08 cm para perímetro torácico y de 82.10 ± 3.01 y 79.52 ± 4.0 cm para longitud de la espalda18; y peso vivo de 57.42 kg a los 175 días de edad en engorda intensiva19. Coincidiendo con lo anterior, estudios sobre caracterizaciones zoométricas con poblaciones locales de cerdos de la raza Pampa Rocha en Uruguay reportaron promedios de 72.7 ± 3.55, 74.97 ± 5.18 y 82.33 ± 4.85 cm para alzada a la cruz, de 27.2 ± 2.89, 26.97 ± 2.98 y 25.66 ± 3.05 cm para ancho de la grupa, de 103.68 ± 6.69, 102.02 ± 6.95 y 99 ± 9.16 cm para longitud corporal y de 137 ± 26.2, 148.6 ± 37.69 y 173.66 ± 15.41 kg para peso vivo12,13. Mayores pesos corporales a los de PPM y PCU también fueron estimados en cerdos locales muestreados en diferentes granjas porcinas de Brasil (peso vivo de 54.40 kg17 y en cerdos criollos de áreas rurales de Argentina con peso vivo de 60.47 ± 10 kg y perímetro torácico de 94.29 ± 5.83 cm16, cabe señalar que en esta última población se estimaron promedios similares a los de PPM para alzada a la cruz (56.09 ± 3.49 cm), largo del cuerpo (75.82 ± 4.96 cm) y ancho de grupa (17.26 ± 1.54 cm). Por otro lado, un estudio realizado en Nayarit, México sobre cerdos Criollos Cuinos reportó valores menores que los de PCU para altura a la cruz (47.60 ± 4.14 cm) y largo del cuerpo (62.25 ± 7.69 cm), pero mayores para perímetro torácico (87.28 ± 7.39 cm) y peso vivo (43.84 ± 10.55 kg)3.
Variables cualitativas
Las MMC del Cuadro 1 para las variables Cape, Colm y Tem señalan a PCU como la población con mayor densidad de pelo, mayor presencia de colmillos y menor porcentaje de animales con temperamento tranquilo mostrando promedios de 71 ± 19, 70 ± 14 y 56 ± 12 % para Cape, Colm y Tem, respectivamente. Cabe mencionar que la presencia o ausencia de pelo y el tipo de temperamento son características cualitativas que se han evaluado en diferentes poblaciones de cerdos criollos. Así, en un estudio sobre el cerdo criollo del Chocó en Colombia se encontró que el 85.29 % de la población muestreada tenía pelaje11, mientras que una caracterización faneróptica de cerdos criollos en comunidades rurales de Venezuela reportó 63.24 y 36.76 % de animales con presencia abundante y escasa de pelo, respectivamente14. De igual manera, la presencia de pelo fue reportada en el 100 % de una población de cerdos criollos muestreada en áreas rurales de Argentina16, mientras que un estudio realizado con cerdos autóctonos de comunidades indígenas en Chiapas, México encontró que estos animales mostraron el cuerpo cubierto de grandes cerdas gruesas más abundantes en la parte superior del cuello y en la región de la cruz2. Por otro lado y en contraste con los resultados del presente trabajo, un estudio realizado sobre caracterización morfométrica de cerdos criollos en Nayarit, México reportó a los cerdos Cuinos como animales de temperamento tranquilo comparados con el temperamento agresivo detectado en los animales de la raza Pelón Mexicano18. De igual manera, en una población local de cerdos ubicada en diferentes granjas del Noreste de Brasil se reportó un temperamento agresivo entre los animales muestreados17.
Conclusiones e implicaciones
En general, la información revisada sobre variabilidad morfométrica señala mayor variabilidad de las tres poblaciones evaluadas en relación a otras poblaciones de cerdos criollos de América Latina. La variabilidad morfométrica detectada puede atribuirse a diferencias en los sistemas de manejo y ambientes en los que se desarrollaron las tres poblaciones y a la diversidad genética existente entre las mismas. Las poblaciones PPM y PCI fueron similares en morfometría siendo diferentes ambas a la población PCU. La población PCU mostró mayor densidad de pelo, menor peso, menor talla, y temperamento más inquieto comparada con las poblaciones PPM y PCI. Es importante caracterizar a las poblaciones de cerdos de traspatio para diseñar estrategias que contribuyan a la conservación y el uso eficiente de estos recursos genéticos.