SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.40 número1Respuesta de variedades de jitomate (Solanum lycopersicum) a la infección con Clavibacter michiganensis subsp. michiganensisCaracterización y sensibilidad a fungicidas de aislados de Phytophthora cinnamomi causante de pudrición de raíz en aguacate en Zitácuaro, Michoacán índice de autoresíndice de assuntospesquisa de artigos
Home Pagelista alfabética de periódicos  

Serviços Personalizados

Journal

Artigo

Indicadores

Links relacionados

  • Não possue artigos similaresSimilares em SciELO

Compartilhar


Revista mexicana de fitopatología

versão On-line ISSN 2007-8080versão impressa ISSN 0185-3309

Rev. mex. fitopatol vol.40 no.1 Texcoco Jan. 2022  Epub 03-Out-2022

https://doi.org/10.18781/r.mex.fit.2109-1 

Artículos científicos

Extractos acuosos de Acalypha gaumeri y Bonellia flammea para el control del tizón foliar en crisantemo (Chrysanthemum morifolium)

Arely Anayansi Vargas-Díaz1 

Jairo Cristóbal-Alejo*  2 

Blondy Canto-Canché3 

María Marcela Gamboa-Angulo3 

1Laboratorio de Bioprocesos, CONACYT−Colegio de Postgraduados, Campus Campeche, Carretera Federal Haltunchén-Edzna km 17.5. Sihochac, Champotón, Campeche, CP 24450, México;

2 Instituto Tecnológico de Conkal. Conkal, Yucatán, México, km 16.3 antigua carretera Mérida-Motul. Conkal, Yucatán, CP 97345, México;

3 Centro de Investigación Científica de Yucatán, A.C., Calle 43 No. 130 x 30 y 32, col. Chuburná de Hidalgo, Mérida, Yucatán, CP 97205, México.


Resumen

El crisantemo es la segunda flor de corte más importante en el mundo, sin embargo, su calidad y valor comercial es afectado por el tizón foliar causado por Alternaria spp. El objetivo del presente trabajo consistió en identificar el agente causal del tizón foliar en crisantemo y su control con extractos acuosos de Acalypha gaumeri y Bonellia flammea en campo. Se realizó la colecta e identificación del hongo a partir de hojas y tallos de plantas de crisantemo. Posteriormente, se hizo la identificación molecular y prueba de patogenicidad en plantas de crisantemo. En campo, se evaluaron los tratamientos con aplicaciones semanales de: T1: extracto de corteza de B. flammea, T2: extracto de raíz de A. gaumeri, T3: control negativo (agua) y T4: fungicida Captan®. Previamente a la aplicación de los tratamientos, se inocularon las plantas del hongo aislado (2.5 × 106 esporas mL-1) y se evaluó severidad. Alternaria chrysanthemi se identificó como el agente causal del tizón foliar. Con base en el porcentaje de severidad, se observaron los menores promedios del área bajo la curva del progreso de la enfermedad, tasas de infección aparente, severidad final y mayor efectividad para controlar la enfermedad con el T2 (165, 0.017, 8 y 67%, respectivamente), seguido por T1 (186, 0.022, 13 y 50%, respectivamente) y T4 (179, 0.023, 14 y 45%), observando diferencia con respecto a T3 (369, 0.025, 25 y 0%, respectivamente). Los extractos evaluados presentan potencial para usarse como alternativa de manejo del tizón foliar de Alternaria en crisantemo.

Palabras clave: Patosistema; enfermedad; extractos vegetales; Alternaria chrysanthemi.

Abstract

The chrysanthemum is the second most important cut flower in the world, however, its quality and commercial value is affected by the leaf blight produced by Alternaria spp. The objective of this work was to evaluate the causal agent of leaf blight in Chrysanthemum, and its control with aqueous extracts of Acalypha gaumeri and Bonellia flammea. The fungus was collected and identified from leaves and stems of chrysanthemum plants. Subsequently, molecular identification and pathogenicity tests were performed on chrysanthemum plants. In the field, treatments were evaluated with weekly applications of: T1: B. flammea bark extract, T2: A. gaumeri root extract, T3: negative control (water) and T4: Captan® fungicide. Prior to the application of the treatments, plants were inoculated with the isolated fungus (2.5 × 106 spores mL-1) and severity was evaluated. Alternaria chrysanthemi was identified as the causal agent. Based on the severity percentage, the lowest averages of the area under the disease progress curve, the lowest rates of apparent infection, the lowest intensity of the disease and the greater effectiveness in controlling the disease were observed for T2 (165, 0.017, 8 and 67%, respectively) followed by T1 (186, 0.022, 13 y 50 %, respectively) and T4 (179, 0.023, 14 y 45%, respectively), observing a significantly different than negative control T3 (369, 0.025, 25 and 0%, respectively). Plant extracts have potential to be used as an alternative in the management of Alternaria leaf blight in chrysanthemum.

Key words: Pathosystem; disease; plants extract; Alternaria chrysanthemi

La industria de plantas ornamentales cada año va en aumento (Silva et al., 2018), sin embargo, las influencias ambientales y tecnológicas de producción intensiva dificultan la producción de plantas libres de enfermedades. Por tal razón, es prioritario establecer estrategias eficaces para la prevención y manejo de enfermedades en plantas ornamentales (Barrera-Necha y Bautista-Baños, 2016). El crisantemo (Chrysanthemum morifolium) es uno de los cultivos ornamentales de mayor importancia en la producción de flores en el mundo (Anderson, 2007; Kumar et al., 2011; Olejnik et al., 2021). Esta planta es originaria de Asia Oriental y se adapta a diversos climas (Villanueva-Couoh et al., 2005). En México, se registró una superficie de 3,203 ha, con un valor de producción 1,915,691.00 de pesos (SIAP, 2020).

El crisantemo es susceptible a varios patógenos especialmente cuando se cultiva a gran escala. El tizón foliar causado por Alternaria spp. es una de las principales enfermedades que afectan su cultivo (Xu et al., 2010). Varias especies de Alternaria son las responsables de esta enfermedad, entre ellas Alternaria alternata, A. tenuissima y A. chrysanthemi, las cuales pueden infectar de manera individual o en interacción, lo que reducen la calidad y el valor en el mercado (Domínguez-Serrano et al., 2016; Trolinger et al., 2018; Xu et al., 2010). Los síntomas aparecen en los bordes de las hojas con lesiones de color amarillo, marrón a negruzco y la presencia en algunos casos de halos cloróticos. El progreso de la enfermedad se observa por las zonas necróticas de tamaño variable que pueden causar defoliación de la planta. Cuando la enfermedad es severa, los pétalos florales presentan lesiones de color marrón rojizo los que se tornan totalmente necróticos (Borah et al., 2019; Domínguez-Serrano et al., 2016; Trolinger et al., 2018). Si no existe un control adecuado, puede causar la muerte de la planta (Deng et al., 2012; Xu et al., 2010; Zhu et al., 2014).

La principal estrategia de control del tizón foliar es con el uso de fungicidas sintéticos (Kumar et al., 2017; Trolinger et al., 2018; Villanueva-Couoh et al., 2005; Xu et al., 2010). Sin embargo, el uso recurrente e inadecuado de estos productos han causado problemas de resistencia en cepas de hongos, contaminación ambiental e intoxicaciones en los productores (Carvalho, 2017; Kim et al., 2017; Barrera-Necha y Bautista-Baños, 2016; Shuping y Eloff, 2017). Esta situación exige explorar alternativas biorracionales para el control de la enfermedad. Entre éstas, se encuentran los compuestos naturales, como el quitosano, los aceites esenciales y los extractos de plantas (Barrera-Necha y Bautista-Baños, 2016). Estos últimos, han mostrado potencial para el control de hongos fitopatógenos, debido a su alta efectividad, bajo costo y baja toxicidad sobre organismos benéficos (Breda et al., 2016; Ngegba et al., 2018; Tomazoni et al., 2017). No obstante, existen pocos estudios sobre el uso de extractos vegetales para el control de enfermedades de plantas en ornamentales (Barrera-Necha y Bautista-Baños, 2016). En condiciones in vitroNivedha et al. (2019) evaluaron 24 extractos de plantas para el control de A. alternata en Jasminum grandiflorum; los extractos de Allium sativum, Datura metel y Azadirachta indica presentaron las mayores actividades fungicidas, con inhibiciones en el crecimiento micelial del hongo en un 100, 68 y 59%, respectivamente. También hay reportes con extractos acuosos de Capsicum annuum, Helianthus annuus y Tagetes erecta (en concentraciones de 4-8%) efectivos contra Fusarium oxysporum f. sp. gladioli, con rangos de inhibición micelial de 45-57%, 33-85 y 54-79%, en su orden (Riaz et al., 2008).

Acalypha gaumeri y Bonellia flammea son plantas endémicas de la Península de Yucatán que han mostraron efectos antifúngicos contra A. alternata, A. chrysanthemi, Curvularia verruculosa, C. lunata, Corynespora cassiicola, Bipolaris setariae, Colletotrichum gloeosporioides, Exserohilum rostratum, F. oxysporum, Helminthosporium sp. y Lasiodiplodia parva (García-Sosa et al., 2011; Gamboa-Angulo et al., 2008; Moo-Koh et al., 2014; Vargas-Díaz et al., 2014). En estudio previo in vitro los extractos acuosos de la raíz de A. gaumeri y la corteza de B. flammea tuvieron un efecto inhibitorio sobre el crecimiento micelial (ICM) y la esporulación (IS) de A. chrysanthemi (ICM = 51 - 57%, IS = 77 - 82%, respectivamente) (Vargas-Díaz et al., 2014).

La inhibición de hongos fitopatógenos mediante el empleo de extractos de origen vegetal está bien documentada a nivel laboratorio, sin embargo, los estudios para determinar su eficacia en campo son escasos (Castillo-Reyes et al., 2018). Por otro lado, se ha documentado que los extractos acuosos son ambientalmente más seguros y fácil para utilizarse en campo en comparación con otros métodos de extracción con disolventes. A pesar de que las especies de A. gaumeri y B. flammea presentan efectos inhibitorios contra hongos fitopatógenos, carecen de estudios en campo para controlar enfermedades en plantas. Con base a lo anterior, el objetivo del presente trabajo consistió en identificar el agente causal del tizón foliar en crisantemo y su control en campo con extractos acuosos de Acalypha gaumeri y Bonellia flammea.

Materiales y métodos

Aislamiento y caracterización del fitopatógeno causante del tizón foliar. El aislamiento de Alternaria sp. se realizó a partir de hojas y tallos de plantas de crisantemo con signos y síntomas asociados al tizón foliar. Las muestras fueron colectadas en la Unidad Florícola “Nicte-Ha”, en el municipio de Chocholá, Yucatán, México (20° 41’ N y 89° 49’ W). A partir de material infectado se hicieron cortes de aproximadamente un cm2 y se desinfestaron en una solución de hipoclorito de sodio al 2% durante 2 min. Se depositaron de cuatro a cinco piezas de tejido vegetal en cajas Petri con medio agar dextrosa y papa (PDA) y se incubaron a 28 °C (Villanueva-Couoh et al., 2005). Después de tres días, el hongo se purificó mediante cultivos monospóricos. Para lograr la esporulación del hongo se utilizó el medio agar extracto de malta y a partir de éstos, se realizó la identificación del hongo mediante características morfotaxonómicas que incluyeron: color y tipo de micelio, número de conidios y conidióforos (Barnett y Hunter, 1972; Simmons, 2007), medición del ancho y largo de 100 conidios con microscopio compuesto (Estándar Modelo K7) y en aumento 400x.

Asimismo, se corroboró con la identificación molecular del fitopatógeno. Para estos propósitos, se registró la cepa del hongo como CICY004 y se cultivó en medio papa-dextrosa-agar (PDA) en placas de Petri e incubadas a 25 °C y 12 h de luz/ 12 h de oscuridad durante cuatro días. El ADN genómico se extrajo de acuerdo a Johanson y Jeger (1993). La mezcla de reacción (1X) contenía 100 ng de ADNg, 2 mM MgCl2, 200 mM dNTPS, 0.4 mM de cada primer ITS1 e TS4 (White et al., 1990) y 1U de Taq polimerasa, en un volumen total de 25 mL. La reacción de PCR se llevó a cabo con una desnaturalización inicial de 95 °C durante 3 min, y 30 ciclos con 1 min a 95 °C, 45 s a 53 °C y 30 s a 72 °C. Después de los ciclos, se dio una etapa de elongación de 3 min a 72 °C.

Los productos de PCR se analizaron mediante electroforesis en gel de agarosa al 1% (Invitrogen®). Los productos amplificados fueron purificados con un kit de purificación de PCR (Gene Clean II, Roche) y posteriormente fueron secuenciados en el Instituto de secuenciación de Davis, CA (http://www.davissequencing.com) usando 100 ng del producto de PCR. Se secuenciaron ambas hebras de ADN, usando el oligo ITS1 para la hebra sentido y el oligo ITS4 para la hebra antisentido.

Las secuencias obtenidas se editaron con el programa BioEdit Sequence Alignment (Hall, 1999) para eliminar las secuencias correspondientes a los iniciadores y las regiones mal secuenciadas (ruido con Ns). Una vez editadas, la secuencia antisentido se convirtió en sentido con la herramienta Reverse Complement (https://www.bioinformatics.org/sms/rev_comp.html), en ambas secuencias se alinearon con el programa ClustalW (Madeira et al., 2019), para obtener una secuencia consenso en la cual cada base fue confirmada por ambas hebras; se obtuvo una secuencia consenso de 533 nucleótidos y se comparó con las bases de datos del NCBI (https://www.ncbi.nlm.nih.gov/) y RDP “Ribosomal Database Project” (https://rdp.cme.msu.edu/classifier/classifier.jsp) con el algoritmo BLAST. La secuencia de 533 nucleótidos se depositó en el GenBank con el número de accesión MH846127.

Se realizó un análisis BLASTN con la secuencia MH846127, y se seleccionó una accesión de cada especie entre los primeros 100 comparaciones que tuvieron homología con la secuencia MH846127; adicionalmente se incluyó la accesión MN153803 de la cepa HN4-9 deA. eichhorniaeya que no estuvo entre los primeros 100 homólogos. El análisis se realizó con el programa MEGA X mediante el método Maximum Likelihood (Tamura y Nei, 1993).

La patogenicidad de la cepa CICY004 se determinó en 15 plantas sanas de crisantemo en condiciones protegidas. Las plantas fueron laceradas superficialmente en la parte axial de las hojas con un pincel y se inocularon 20 µL de una suspensión de 2.5 × 106 esporas mL-1. Las plantas se colocaron en contenedores de plástico por separado y se cubrieron para regular la temperatura y la humedad durante dos días. Después de cinco días, a partir de las lesiones necróticas en las hojas se reaisló el patógeno (Riego et al., 1997).

Preparación de los extractos acuosos. El extracto acuoso del material vegetal deshidratado de raíz de A. gaumeri y la corteza de B. flammea (30 g de cada uno) se obtuvo mediante infusión (20 min) en 500 mL de agua destilada a punto de ebullición (Herrera-Parra et al., 2009). La infusión se filtró a través de papel y se aforó a 1000 mL para obtener el extracto acuoso al 3% (30 g L-1, p/v) (Vargas-Díaz et al., 2014). El extracto se almacenó a temperatura ambiente (menos de 24 h) hasta su aplicación en campo.

Evaluación de extractos en el control de la enfermedad. Para asegurar la presencia del patógeno en el cultivo en campo, la cepa CICY004 se creció por 15 días en medio PDA a 23 °C. A partir de este cultivo, se realizó una suspensión de 2.5 × 106 esporas mL-1 (Vargas-Díaz et al., 2014). El cultivo se estableció en los meses de marzo a mayo, en la Unidad Limones Cheé en el área Florícola Ulu´umil lool, en el municipio de Maní, Yucatán, México (20°39’ N y 89°40’ W), se utilizaron esquejes de C. morifolium cv. Polaris Yellow con 20 días de edad; éstos fueron proporcionados por la Unidad Florícola “Nicte-Ha” del municipio de Chocholá, Yucatán, México. Los esquejes se trasplantaron en camas de 1 m de ancho x 12 m de largo, y como sustrato se utilizó una mezcla local de suelo, abono orgánico de bovinaza y grava en proporción 2:2:1. El diseño experimental fue bloques completamente al azar, con cuatro repeticiones por tratamiento; para cada repetición se utilizaron parcelas de 1 m por 2.5 m. Cuando las plantas alcanzaron una altura de 30 cm, cada parcela experimental fue inoculada con una suspensión de 2.5 × 106 esporas mL-1 de la cepa fúngica indicada. Después de ocho días de la inoculación, las plantas se asperjaron semanalmente con los tratamientos, durante siete semanas. Los tratamientos evaluados fueron T1: extracto acuoso de la corteza de B. flammea (30 g L-1), T2: extracto acuoso de la raíz de A. gaumeri (30 g L-1), paralelamente dos testigos, T3: Control negativo (agua) y T4: fungicida comercial Captan (2 g L-1).

El control de la enfermedad se realizó con la estimación de la severidad de la enfermedad, con el uso de una escala logarítmica diagramática de severidad para el patosistema C. morifolium-A. chrysanthemi (Villanueva-Couoh et al., 2005). Las mediciones se iniciaron al observarse los síntomas de la enfermedad (ocho días después de la inoculación con el fitopatógeno) y se continuaron semanalmente con muestreos al azar, y en cada repetición, un total de 20 plantas centrales, de las cuales se consideraron 30 hojas basales de cada planta. Con base en el porcentaje de severidad, se construyeron curvas del progreso de la enfermedad y se estimó el Área Bajo la Curva del Progreso de la Enfermedad (ABCPE), mediante el método de integración trapezoidal (Campbell y Madden, 1990); tasas de infección aparente con el modelo de descripción de Weibull, con el parámetro inverso b -1 (Thal et al., 1984) y severidad final de la enfermedad (Yfinal) con la última evaluación y con la que se calculó la efectividad del control de la enfermedad (Abbott, 1925).

Efectividad=% severidad del control negativo-% severidad del tratamiento% severidad del control negativo×100

En adición, como variables de crecimiento se registraron el número de botones y diámetro del racimo en 20 plantas centrales. El experimento se repitió dos veces y los resultados se promediaron para sus análisis estadísticos. El manejo general del cultivo se realizó de acuerdo a las prácticas tradicionales del productor. Al finalizar del experimento se aisló el hongo para verificar la presencia de la cepa CICY004.

Análisis de datos. Los datos obtenidos de los parámetros epidemiológicos, así como las variables de crecimiento, se analizaron con el paquete computacional SAS para Windows versión nueve, mediante un análisis de varianza de una vía y prueba de comparación de medias (Tukey, p≤0.01).

Resultados

Identificación morfológica y molecular. La cepa del hongo CICY004 en medio extracto de malta mostró un crecimiento aterciopelado, inicialmente de color olivo en los bordes y posteriormente de color café; al reverso de la caja Petri se observó de color negro. Los conidios presentaron forma obclavada o cilíndrica de color oscuro. En su morfometría, con una longitud de 52 a 82 μm por 12.5 a 15 μm de ancho en la parte más ancha. Con 5 a 9 septos trasversales y 0 a 4 longitudinales, solitarios o en cadenas de dos frecuentemente (Figura 1). El análisis morfológico de la cepa CICY004 mostró diferencias con las cepas reportadas por Domínguez-Serrano et al. (2016), ya que presentó conidios de mayor tamaño (52-82 × 12.5-15 µm) que A. alternata (15-35 × 7.5-12.5 µm) y A. tenuissima (30-67,5 × 7,5-12,5 µm). De igual forma, la cepa CICY004 presentó cadenas cortas con uno o dos conidios, mientras en A. alternata cadenas de 10-37 conidios y en A. tenuissima cadenas de 5-12 conidios (Barnett y Hunter, 1972; Simmons, 2007). Estos datos confirmaron que la cepa CICY004 es diferente y de acuerdo a la descripción del hongo este correspondió a la especie de A. chrysanthemi (Barnett y Hunter, 1972; Simmons, 2007). La patogenicidad de la cepa se comprobó al ser inoculado y reaislado en plantas de crisantemo.

Figura 1 Características morfológicas de la cepa CICY004 (A. chrysanthemi), A). Morfología de la colonia en medio agar extracto de malta, B) conidios de la cepa CICY004. 

En el análisis BLAST de la región ITS de la cepa CICY004, fue homóloga a secuencias que corresponden con Alternaria con 100% de cobertura y 99.81% de identidad, por lo que se confirmó que la cepa pertenece a este género. Para confirmar la cepa con registro CICY004 corresponde con alguna de las especies de Alternaria previamente reportadas en México (Domínguez-Serrano et al., 2016), se comparó la secuencia de la región ITS de CICY004 con esas cepas (A. alternata KF728748, KF728750 y A. tenuissima KF728749, KF728751), se encontró con ambas especies una identidad del 99.62 %, lo que descarta que CICY004 se trate de alguna de ellas.

Con base en la identificación morfológica, y al análisis de la secuencia, la cepa con registro CICY004, se identificó como A. chrysanthemi. La secuencia se depositó en el GenBank como A. chrysanthemi CICY004 con el número de acceso MH846127.

Efecto de extractos en campo sobre el control de la enfermedad. Los síntomas de la enfermedad del tizón foliar en el cultivo se presentaron a los 37 días después del trasplante (ddt). En el control negativo (agua) el progreso de la enfermedad fue mayor que en el resto de los tratamientos (Figura 2).

Figure 2 Progress curves of the severity of leaf blight caused by A. chrysanthemi on the chrysanthemum crop and effect of the application of treatments T1: Aqueous extract of the cortex of B. flammea, T2: Aqueous extract of the root of A. gaumeri, T3: Negative control (water) and T4: Captan ® fungicide. 

Cuadro 1 Efecto de la aplicación de tratamientos sobre la intensidad epidemiológica del tizón foliar causado por A. chrysanthemi en el cultivo de crisantemo. 

Tratamientos ABCPE(% día-1) Tasa de infecciónaparente (Weibull 1/b % día-1) Ajuste del modeloWeibull (r2) Yfinal(%)
T1: Extracto acuoso de cortezade B. flammea 186 b 0.022 a 0.97 13 b
T2: Extracto acuoso de raíz de A. gaumeri 165 b 0.017 b 0.98 8 b
T3: Control negativo (agua) 369 a 0.025 a 0.96 25 a
T4: Fungicida Captan®(2 g L-1) 179 b 0.023 a 0.96 14 b
DE 12 0.003 - 1.3

Medias con la misma letra entre columnas son estadísticamente iguales (Tukey, p≤0.05). DS: desviación estándar.

Figura 3 Efecto de tratamientos en el control del tizón foliar en crisantemo, T1: Extracto acuoso de la corteza de B. flammea, T2: Extracto acuoso de la raíz de A. gaumeri, T3: Control negativo (agua) y T4: Fungicida Captan ® . 

Con base al ABCPE y Yfinal los extractos acuosos A. gaumeri (T2) (165% por día, 8 y 67%, respetivamente) y corteza de B. flammea (T1) (186% por día, 13 y 50%, respetivamente) redujeron la severidad de la enfermedad, con diferencia significativa con respecto al control negativo (T3) (369% por día, 25 y 0%, en su orden). Asimismo, la aplicación de estos extractos fue significativamente igual al fungicida Captan® (T4) (179% por día, 14 y 45%, respectivamente) (Cuadro 1 y 2). Sin embargo, cuando se estimó la velocidad de la enfermedad mediante la tasa de infección con el modelo de descripción Weibull (b -1), solo el extracto acuoso de A. gaumeri T2 (0.017 unidad día-1) redujo significativamente el progreso de la enfermedad (Cuadro 1) (Figura 3).

En las variables de crecimiento del cultivo evaluadas: número de botones y diámetro del racimo, los tratamientos que incluyeron a los extractos y al fungicida sintético, mejoraron significativamente estas variables (p ≤ 0.01) (Cuadro 2).

Cuatro 2 Efectividad de los extractos acuosos vegetales para controlar al tizón foliar y variables de crecimiento en crisantemo. 

Tratamientos Efectividad (%) Variables Agronómicas
Número de Botones (n planta-1) Diámetro de racimo (cm)
T1: Extracto acuoso de cortezade B. flammea 50 az 18 a 15 a
T2: Extracto acuoso de raíz de A. gaumeri 67 a 17 a 14 a
T3: Control negativo (agua) 0 b 12 b 10 b
T4: Fungicida Captan®(2 g L-1) 45 a 19 2 a 14 a
DEy 5.57 2.63 1.44

DE: desviación estándar de la media. Medias con la misma letra entre columnas son estadísticamente iguales (Tukey, p≤0.05).

Discusión

Las enfermedades causadas por hongos afectan severamente la industria del crisantemo (Borah et al., 2019; Trolinger et al., 2018). En este trabajo se identificó a A. chrysanthemi como agente causal del tizón foliar del crisantemo en México. Esta especie se ha reportado en crisantemo en otros países como Australia, EE.UU., Holanda e India (Sobers, 1965). En México, Domínguez-Serrano et al. (2016) reportaron a las especies A. alternata (KF728748, KF728750) y A. tenuissima (KF728749, KF728751) como agentes causales del tizón en crisantemo, cuyos análisis morfológico y molecular no coinciden con la cepa aislada en este estudio. El alineamiento con las secuencias previamente reportadas de A. alternata (KF728748, KF728750) y A. tenuissima (KF728749, KF728751) presentan dos y tres nucleótidos diferentes con la cepa CICY004. Es importante mencionar que Domínguez-Serrano et al. (2016) encontraron una sola diferencia en la región que estudiaron (540 nucleótidos) de los ITS de A. alternata y A. tenuissima; una sola inserción de un nucleótido “T” en la secuencia de la segunda y ausente en A. alternata, mientras lo demás fue idéntico. Esta diferencia fue aceptada como criterio para distinguir ambas especies, ya que los autores secuenciaron 5 veces cada especie y esa diferencia fue reproducible.

En el presente trabajo las diferencias encontradas entre CICY004, A. alternata y A. tenuissima también fueron pocas, y estas diferencias aceptadas ya que la secuencia de CICY004 corresponde a una secuencia consenso, confirmada al 100% con las secuencias de la hebra sentido y de la hebra antisentido. Estas diferencias nucleotídicas son informativas, y diferencian a CICY004 de A. alternata y A. tenuissima, y también de A. eichhorniae. La morfología reveló que se trata de A. chrysanthemi, por lo que este es el primer reporte de la secuencia ITS de este fitopatógeno, ya que previamente no existía en el GenBank o en el RDP. Este estudio ahora permite ser referencia de futuras investigaciones sobre A. chrysanthemi como agente causal del tizón foliar en crisantemo.

En el control del tizón foliar, ambos extractos acuosos de A. gaumeri y de B. flammea y el Fungicida Captan® mostraron el mismo efecto, para detener el progreso de la enfermedad y mejoraron lo reportado por Kumar et al. (2017) cuando evaluó extracto de ajo (efectividad 36.64%) en el mismo cultivo. También, los extractos acuosos de A. gaumeri y de B. flammea, mostraron un mayor efecto, en comparación con extractos acuosos de Eucalyptus globolus y Ocimum sanctum al 5% contra el tizón temprano de la papa (20.83 y 25.37%) (Debbarma et al., 2017). Estos resultados indicaron que los extractos de A. gaumeri y de B. flammea al 3% son capaces de reducir la severidad causada por A. chrysanthemi, y se confirmó lo previamente reportando en las pruebas in vitro contra este patógeno (Vargas-Díaz et al., 2014).

En los parámetros ABCPE y Yfinal, ambos extractos resultaron igual de efectivos para reducir la severidad que el fungicida Captan®. Un estudio, Ortega-Centeno et al. (2010) reportaron con extractos de coliflor, brócoli y rábanos (Brassicaceae), misma efectividad de control con fungicidas sintéticos (captan, amistar y manzate) contra Uromyces transversalis causante de la roya en gladio.

Las plantas A. gaumeri y B. flammea son consideradas endémica de la Península de Yucatán, lo que significa poca información sobre sus propiedades fitoquímicas y biológicas (Hernández-Bolio et al., 2019). A. gaumeri es una planta en la que existen pocos reportes de su actividad antifúngica (Gamboa-Angulo et al., 2008; Vargas-Díaz et al., 2014). En el género se han reportado familias químicas, que de acuerdo con el disolvente utilizado están presentes: terpenos, esteroides, taninos, saponinas alcaloides, antocianinas, policétidos y flavonoides principalmente responsables de actividades antifúngicas (Adesina et al., 2000; Gutierrez-Lugo et al., 2002; Hungeling et al., 2009; Seebaluck et al., 2015).

En cuanto a B. flammea,García-Sosa et al. (2011), a partir de extractos metanólicos de raíces, reportaron efecto inhibitorio contra C. gloeosporioides. Sánchez-Medina et al. (2010) identificaron la presencia de una sakurososaponina a partir del residuo acuoso procedente de la partición líquido-líquido del extracto, con actividad citotóxica y contra C. gloeosporioides. La sakurososaponina es uno de los principales metabolitos responsables de actividad antifúngica de B. flammea, y se sabe que tiene la habilidad de formar complejos con esteroles de la membrana celular, lo que causa una pérdida en la integridad de la misma y la muerte del hongo (Morrissey y Osbourn, 1999).

En el cultivo de ornamentales se considera que el daño estético en follaje y flores causado por fitopatógenos es de vital importancia, ya que merman la calidad, la vida de anaquel y el precio de su comercialización (Barrera-Necha y Bautista-Baños, 2016). La disminución de la intensidad de la enfermedad mediante las aplicaciones de los extractos y el fungicida, permitieron mayor número de botones y diámetro del racimo, con diferencia significativa al control negativo, lo que es fundamental para obtener mayores rendimientos en la producción de crisantemo (Kumar et al., 2011).

Además de su obtención fácil para aplicarse en campo por productores, los extractos acuosos son ambientalmente más seguros en comparación con otros métodos de extracción con disolventes, Esto representa un paso importante en el desarrollo de plaguicidas amigables con el ambiente a base de plantas. Este estudio es el inicio de futuras investigaciones que contribuye a plantear estrategias de control de enfermedades en el cultivo sustentable del crisantemo.

Conclusiones

Se identificó a Alternaria chrysanthemi como el agente causal del tizón foliar en crisantemo. Los extractos acuosos de raíz de A. gaumeri y corteza de B. flammea fueron igual de efectivos que el fungicida Captan® para controlar la enfermedad del tizón foliar bajo condiciones de campo.

Agradecimientos

Agradecemos al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología por el apoyo financiero para el desarrollo de esta investigación (Proyecto PDCPN- 2015-266) y al proyecto Cátedra CONACYT 364 “Reconversión productiva sustentable para el desarrollo de los productores rurales de Campeche” del cual es integrante el primer autor del manuscrito. Al apoyo técnico de Filogonio May Pat, Paulino Simá Polanco e Irma L. Medina Baizabal.

REFERENCIAS

Abbott WS. 1925. A method of computing the effectiveness of an insecticide. Journal of Economic Entomology 18: 265-267. [ Links ]

Adesina SK, Idowu O, Ogundaini AO, Oladimeji H, Olugbade TA, Onawunmi GO and Pais M. 2000. Antimicrobial constituents of the leaves of Acalypha wilkesiana and Acalypha hispida. Phytotherapy Research 14: 371-374. https://doi.org/10.1002/1099-1573(200008)14:5<371::AID-PTR625>3.0.CO;2-F. [ Links ]

Ahmad F, Raziq F, Ullah N, Khan H and Din N. 2017. In vitro and in vivo bio-assay of phytobiocidal effect of plant extracts on Alternaria solani causing agent of early blight disease in tomato. Archives of Phytopathology and Plant Protection 50(11-12 ): 568-583. https://doi.org/10.1080/03235408.2017.1352247. [ Links ]

Anderson NO. 2007. Chrysanthemum. Dendranthema× grandiflora Tzvelv. Pp 389-437. In: Anderson NO (ed) Flower breeding and genetics. Springer, Dordrecht. 824 p https://doi.org/10.1007/978-1-4020-4428-1_14 [ Links ]

Barnett HL and Hunter BB. 1972. Illustrated genera of imperfect fungi. Burgess Publishing Minneapolis, USA. 241 p. [ Links ]

Barrera-Necha LLB and Bautista-Baños S. 2016. Prospects for the use of chitosan and other alternatives in ornamental conservation. Pp: 221-249. In: Bautista-Baños S, Romanazzi G and Jiménez-Aparicio A. (eds.). Chitosan in the Preservation of Agricultural Commodities. Academic Press, México. 366p. https://doi.org/10.1016/B978-0-12-802735-6.00008-2 [ Links ]

Borah M, Rajkhowa M and Ali S. 2019. Occurrence of diseases in floricultural crops in and around Jorhat, Assam. International Journal of Economic Plants 6(2): 54-63. https://doi.org/10.23910/IJEP/2019.6.2.0294 [ Links ]

Breda CA, Gasperini AM, Garcia VL, Monteiro KM, Bataglion GA, Eberlin MN and Duarte MCT. 2016. Phytochemical analysis and antifungal activity of extracts from leaves and fruit residues of Brazilian Savanna plants aiming its use as safe fungicides. Natural Product Bioprospecting 6: 195-204. https://doi.org/10.1007/s13659-016-0101-y [ Links ]

Campbell CL and Madden LV. 1990. Introduction to plant disease epidemiology. John Wiley & Sons, New York, USA. 532 p. [ Links ]

Carvalho FP. 2017. Pesticides, environment, and food safety. Food and Energy Security 6:48-60. https://doi.org/10.1002/fes3.108. [ Links ]

Castillo-Reyes F, Castillo-Quiroz D, Muñoz-Flores HJ y Sánchez AR. 2018. Uso de bio-pesticidas de origen vegetal en el manejo de enfermedades de cultivos en México. Mitigación del Daño Ambiental Agroalimentario y Forestal de México 4(5): 107-121. [ Links ]

Debbarma S, Sunil Z and Sobita S. 2017. Effect of plant extracts on early blight potato (Solanum tuberosum L.). Journal of Pharmacognosy and Phytochemistry 6(4): 1415-1417. Disponible en línea: https://www.phytojournal.com/archives/2017/vol6issue4/PartU/6-4-191-590.pdf. [ Links ]

Deng Y, Chen S, Chang Q, Wang H and Chen F. 2012. The chrysanthemum × Artemisia vulgaris intergeneric hybrid has better rooting ability and higher resistance to Alternaria Steel leaf spot than its chrysanthemum parent. Scientia Horticulturae 134: 185-190. https://doi.org/10.1016/j.scienta.2011.11.012 [ Links ]

Domínguez-Serrano D, Yáñez-Morales MJ, García-Velasco R, Alanis-Martínez I and Segura-León O. 2016. First report of Chrysanthemum morifolium leaf spot caused by Alternaria species in Mexico. Plant Disease 100(3): 647. https://doi.org/10.1094/PDIS-06-15-0723-PDN [ Links ]

Gamboa-Angulo MM, Cristóbal-Alejo J, Medina-Baizabal IL, Chí-Romero F, Méndez-González R, Simá-Polanco P and May-Pat F. 2008. Antifungal properties of selected plants from the Yucatan peninsula, Mexico. World Journal of Microbiology and Biotechnology 24(9): 1955-1959. https://doi.org/10.1007/s11274-008-9658-x [ Links ]

García-Sosa K, Sánchez-Medina A, Álvarez SL, Zacchino S, Veitch NC, Simá-Polanco P and Peña-Rodriguez LM 2011. Antifungal activity of sakurasosaponin from the root extract of Jacquinia flammea. Natural Product Research 25(12): 1185-1189. https://doi.org/10.1080/14786419.2010.511215 PMID: 21740284 [ Links ]

Gutierrez-Lugo MT, Singh MP, Maiese WM and Timmermann BN. 2002. New antimicrobial cycloartane triterpenes from Acalypha communis. Journal of Natural Product 65:872-875. https://doi.org/10.1021/np020044g [ Links ]

Hall TA. 1999. BioEdit: a user-friendly biological sequence alignment editor and analysis program for Windows 95/98/NT. Nucleic Acids Symposium Series 41:95-98. [ Links ]

Hernández-Bolio GI, Ruiz-Vargas JA and Peña-Rodríguez LM. 2019. Natural products from the Yucatecan flora: structural diversity and biological activity. Journal of Natural Products 82(3): 647-656. https://doi.org/10.1021/acs.jnatprod.8b00959 [ Links ]

Herrera-Parra E, Cristóbal-Alejo J, Tún-Suárez M, Gamboa-Angulo MM y Marbán-Mendoza N. 2009. Extractos acuosos de Calea urticifolia Mill. para el control of Meloidogyne incognita. Nematropica 39: 289-296. [ Links ]

Hungeling M, Lechtenberg M, Fronczek FR and Nahrstedt A. 2009. Cyanogenic and non-cyanogenic pyridine glucosides from Acalypha indica (Euphorbiaceae). Phytochemistry 70:270-277. https://doi.org/10.1016/j.phytochem.2008.12.011 [ Links ]

Johanson A and Jeger MJ. 1993. Use of PCR for detection of Mycosphaerella fijiensis and M. musicola, the causal agents of Sigatoka leaf spots in banana and plantain. Mycological Research 97: 670-674. https://doi.org/10.1016/S0953-7562(09)80145-7 [ Links ]

Kim KH, Kabir E and Jahan SA. 2017. Exposure to pesticides and the associated human health effects. Science of the Total Environment 575: 25-535. https://doi.org/10.1016/j.scitotenv.2016.09.009 [ Links ]

Kumar A, Kumar M, Ghosh S, Tewari T and Bhardwaj SB. 2017. Effect of weed management practices in chrysanthemum (Dendranthema grandiflora T.) Under Tarai Conditions of Uttarakhand. International Journal of Current Microbiology and Applied Sciences 6(8): 3028-3034. https://doi.org/10.20546/ijcmas.2017.608.362 [ Links ]

Kumar GA, Kamanna BC and Benagi VI. 2011. Management of chrysanthemum leaf blight caused by Alternaria alternata (fr.) Keissler under field condition. Plant Archieves 11: 553-555. [ Links ]

Madeira F, Park YM, Lee J, Buso N, Gur T, Madhusoodanan N, Basutkar P, Tivey ARN, Potter SC, Finn RD and Lopez R. 2019. The EMBL-EBI search and sequence analysis tools APIs in 2019. Nucleic Acids Research 47(W1): W636-W641. https://doi.org/doi:10.1093/nar/gkz268. [ Links ]

Moo-Koh FA, Cristóbal-Alejo J, Reyes-Ramírez A, Tun-Suárez JM, Sandoval-Luna R and Ramírez-Pool JA. 2014. In vitro activity of an aqueous extract of Bonellia flammea against phytopathogenic fungi. Agrociencia 48(8): 833-845. http://www.scielo.org.mx/pdf/agro/v48n8/v48n8a6.pdf. [ Links ]

Morrisse JP and Osbourn AE. 1999. Fungal resistance to plant antibiotics as a mechanism of pathogenesis. Microbiology and Molecular Biology Reviews 63(3): 708-724. https://doi.org/10.1128/MMBR.63.3.708-724.1999. [ Links ]

Ngegba PM, Kanneh SM, Bayon MS, Ndoko EJ and Musa PD. 2018. Fungicidal effect of three plants extracts in control of four phytopathogenic fungi of tomato (Lycopersicum esculentum L.) fruit rot. International Journal Environ of Environment, Agriculture and Biotechnology 3: 112-117. https://doi.or/10.22161/ijeab/3.1.14 [ Links ]

Nivedha M, Ebenezar EG, Kalpana K and Arun Kumar R. 2019. In vitro antifungal evaluation of various plant extracts against leaf blight disease of Jasminum grandiflorum caused by Alternaria alternata (Fr.) Keissler. Journal Pharmacognosy and Phytochemistry 8(3): 2143-2147. https://www.phytojournal.com/archives/2019/vol8issue3/PartAC/8-3-28-815.pdf. [ Links ]

Olejnik A, Parkitna K, Kozak B, Florczak S, Matkowski J and Nowosad K. 2021. Assessment of the Genetic Diversity of Chrysanthemum Cultivars Using SSR Markers. Agronomy 11(11): 2318. https://doi.org/10.3390/agronomy11112318. [ Links ]

Ortega-Centeno S, Guillén-Sánchez D, Ramos-García M, Troncoso-Rojas R, Villanueva-Arce R, Bosquez-Molina E y Bautista-Baños S. 2010. Métodos de inoculación y evaluación de extractos botánicos e isotiocianatos de la familia Brasicaceae en el control de la roya del gladiolo. Revista de Chapingo Serie Horticultura 16(1): 13-21. http://www.scielo.org.mx/pdf/rcsh/v16n1/v16n1a3.pdfLinks ]

Riaz T, Khan SN and Javaid A. 2008. Antifungal activity of plant extracts against Fusarium oxysporum-the cause of corm-rot disease of Gladiolus. Mycopath 6 (1-2): 13-15. [ Links ]

Riego E, Hayes O, Musacchio A y Lleonart R. 1997. Los postulados de Koch y la neuropatía epidémica. Biotecnología Aplicada 14: 137-141. [ Links ]

Sánchez-Medina A, Peña-Rodríguez LM, May-Pat F, Karagianis G, Waterman PG, Mallet AI and Habtemariam S. 2010. Identification of sakurasosaponin as a cytotoxic principle from Jacquinia flammea. Natural Product Communications 5(3): 1934578X1000500304. https://journals.sagepub.com/doi/pdf/10.1177/1934578X1000500304. [ Links ]

Seebaluck R, Gurib-Fakim A and Mahomoodally F. 2015. Medicinal plants from the genus Acalypha (Euphorbiaceae)-A review of their ethnopharmacology and phytochemistry. Journal of ethnopharmacology 159: 137-157. https://doi.org/10.1016/j.jep.2014.10.040 [ Links ]

Shuping DSS and Eloff JN. 2017. The use of plants to protect plants and food against fungal pathogens: a review. African Journal of Traditional, Complementary and Alternative Medices 14: 120-127. https://doi.org/10.21010/ajtcam.v14i4.14. [ Links ]

SIAP (Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera). 2020. Cierre de la producción agrícola. Crisantemo (planta). http://www.siap.gob.mx/index (Consulta el 10 de diciembre de 2021). [ Links ]

Silva DPCD, Ozudogru EA, Reis MVD and Lambardi M. 2018. In vitro conservation of ornamental plants. Ornamental Horticulture 24(1): 28-33. http://dx.doi.org/10.14295/oh.v24i1.1163. [ Links ]

Simmons EG. 2007. Alternaria: an identification manual. CS biodiversity series 6: 1-775. [ Links ]

Sobers EK. 1965. Alternaria chrysanthemi in Florida. Annual meeting of the Florida State. Plant Pathology Circular 36. https://www.fdacs.gov/content/download/11042/file/pp36.pdfLinks ]

Tamura K and Nei M. 1993. Estimation of the number of nucleotide substitutions in the control region of mitochondrial DNA in humans and chimpanzees. Molecular Biology and Evolution 10:512-526. https://doi.org/10.1093/oxfordjournals.molbev.a040023. [ Links ]

Thal WM, Campbell CL and Madden LV. 1984. Sensibity of weibull model parameters estimates to variation in simulated disease progression data. Phytopatology 74: 1425-1430. https://doi.org/10.1094/phyto-74-1425. [ Links ]

Tomazoni EZ, Pauletti GF, Da Silva Ribeiro RT, Moura S and Schwambach J. 2017. In vitro and in vivo activity of essential oils extracted from Eucalyptus staigeriana, Eucalyptus globulus and Cinnamomum camphora against Alternaria solani Sorauer causing early blight in tomato. Scientia Horticultura 223: 2-77. https://doi.org/10.1016/j.scienta.2017.04.033. [ Links ]

Trolinger JC, McGovern RJ, Elmer WH, Rechcigl NA and Shoemaker CM. 2018. Diseases of Chrysanthemum. Pp. 439-502. In: McGovern R. and Elmer W. (Eds.). Handbook of Florists’ Crops Diseases. Handbook of Plant Disease Management. Springer, Cham. New Haven, CT, USA. 1365 p. https://doi.org/10.1007/978-3-319-39670-5_16 [ Links ]

Vargas-Díaz AA, Gamboa-Angulo M, Medina-Baizabal IL, Pérez-Brito D, Cristóbal-Alejo J y Ruiz-Sánchez E. 2014. Evaluación de extractos de plantas nativas yucatecas contra Alternaria chrysanthemi y espectro de actividad antifúngica de Acalypha gaumeri. Revista Mexicana de Fitopatología 32: 1-11. http://www.scielo.org.mx/pdf/rmfi/v32n1/v32n1a1.pdf. [ Links ]

Villanueva-Couoh E, Sánchez-Briceño MA, Cristóbal-Alejo J y Tún-Suárez J. 2005. Diagnóstico y alternativas de manejo químico del tizón foliar (Alternaria chrysanthemi Simmons y Crosier) del crisantemo (Chrysanthemum morifolium Ramant.) Kitamura en Yucatán, México. Revista Mexicana de Fitopatología 23: 49-56. http://www.redalyc.org/pdf/612/61223107.pdf. [ Links ]

White TJ, Bruns T, Lee S and Taylor J. 1990. Amplification and direct sequencing of fungal ribosomal RNA genes for phylogenetics. Pp. 315-322. In: Innis MA, Gelfand DH, Sninsky JJ and White TJ (Eds.). PCR Protocols: A guide to methods and applications. Academic Press, San Diego, CA. 482 p. https://msafungi.org/wp-content/uploads/2019/03/February-2013-Inoculum.pdf. [ Links ]

Xu G, Chen S and Chen F. 2010. Transgenic chrysanthemum plants expressing a harpinxoo gene demonstrate induced resistance to Alternaria leaf spot and accelerated development. Russian Journal of Plant Physiology 57: 548-553. https://doi.org/10.1134/S1021443710040138 [ Links ]

Zhu WY, Zhang F, Chen SM, Xu LL, Wang L, Wang HB and Chen F. 2014. Intergeneric hybrids between Chrysanthemum morifolium ‘Nannongxiaoli’ and Artemisia vulgaris ‘Variegata’show enhanced resistance against both aphids and Alternaria leaf spot. Euphytica 197(3): 399-408. https://doi.org/10.1007/s10681-014-1076-6. [ Links ]

Recibido: 13 de Septiembre de 2021; Aprobado: 20 de Diciembre de 2021

* Corresponding author: jairoca54@hotmail.com

Creative Commons License This is an open-access article distributed under the terms of the Creative Commons Attribution License