SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.49¿Dónde son apropiadas las estrategias de gestión basadas en la resiliencia para los arrecifes de coral? Mapeo de las condiciones ambientales y las tendencias de la cubierta coralina en Guam y Samoa AmericanaVariación espaciotemporal del fitoplancton nocivo en playas recreativas de Campeche, sureste del golfo de México índice de autoresíndice de materiabúsqueda de artículos
Home Pagelista alfabética de revistas  

Servicios Personalizados

Revista

Articulo

Indicadores

Links relacionados

  • No hay artículos similaresSimilares en SciELO

Compartir


Ciencias marinas

versión impresa ISSN 0185-3880

Cienc. mar vol.49  Ensenada ene./dic. 2023  Epub 08-Mar-2024

https://doi.org/10.7773/cm.y2023.3381 

Artículos

Efecto de 4 dietas de microalgas sobre la composición proximal, concentración de clorofila y contenido total de carotenoides en Artemia franciscana

Martha I Millán-Almaraz1 

Diana J López-Peraza2 

Mario Nieves-Soto2 

Mario M Peraza-Yee1 

1Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia, Universidad Autónoma de Sinaloa, 80260, Culiacán Rosales, Sinaloa, Mexico.

2Facultad de Ciencias del Mar, Universidad Autónoma de Sinaloa, 82000 Mazatlán, Sinaloa, Mexico.


Resumen

Las microalgas son la principal fuente de alimento de Artemia franciscana. A su vez, Artemia sirve como alimento vivo para diversas especies en cultivo. La composición química de Artemia es de gran importancia porque afecta la calidad nutricional de los organismos producidos en los sistemas acuícolas. Por esta razón, el presente estudio tuvo como objetivo caracterizar el valor nutricional, composición proximal, concentración de clorofila a y b y contenido total de carotenoides en las microalgas Thalassiosira weissflogii, Chaetoceros muelleri, Tetraselmis suecica y Nannochloropsis sp., que fueron utilizadas para alimentar a juveniles de A. franciscana durante 6 h. Los juveniles de Artemia alimentados con estas especies de microalgas exhibieron concentraciones más altas de proteínas, carbohidratos, lípidos, clorofila a y b y carotenoides totales que los del control. Los organismos alimentados con Tetraselmis suecica presentaron el mayor contenido de clorofila b, mientras que los alimentados con Thalassiosira weissflogii y Chaetoceros muelleri mostraron los valores más altos de carotenoides totales y clorofila a.

Palabras clave: Artemia; microalgas; composición proximal; clorofilas; carotenoides

Abstract

Microalgae are the primary source of food for Artemia franciscana. In turn, Artemia serve as live food for various species in culture. The chemical composition of Artemia is of great importance because it affects the nutritional quality of the organisms produced in aquaculture systems. For this reason, the present study aimed to characterize the nutritional value, proximal composition, concentration of chlorophyll a and b, and total carotenoid content in the microalgae Thalassiosira weissflogii, Chaetoceros muelleri, Tetraselmis suecica, and Nannochloropsis sp., which were used to feed juvenile A. franciscana for 6 h. Artemia juveniles fed with these microalgae species exhibited higher concentrations of proteins, carbohydrates, lipids, chlorophyll a and b, and total carotenoids than those in the control. The organisms fed with Tetraselmis suecica presented the highest content of chlorophyll b, while those fed with Thalassiosira weissflogii and Chaetoceros muelleri showed the highest values of total carotenoids and chlorophyll a.

Key words: Artemia; microalgae; proximal composition; chlorophylls; carotenoids

Introducción

Las microalgas contienen nutrientes de alto valor, como carotenoides, vitaminas y ácidos grasos esenciales (Hamed 2016). En consecuencia, son una fuente primaria de alimento para muchos organismos marinos durante sus primeras etapas de vida, incluidos bivalvos, peces y camarones, así como zooplancton como Artemia, cladóceros y copépodos (Martínez-Córdova et al. 2014).

Los carotenoides, que son precursores de la vitamina A, pueden secuestrar las especies reactivas de oxígeno, protegiendo las células del daño agresivo de los radicales libres y mejorando el sistema inmunológico (De la Vega-Naranjo 2014, Ruiz-Soto 2017). De manera similar, las clorofilas funcionan como antioxidantes al interrumpir la reacción en cadena de peroxidación (Rigane et al. 2013). Ácidos grasos poliinsaturados (AGPIs), como el ácido eicosapentaenoico (EPA, 20:5 n-3), ácido docosahexaenoico (DHA, 22:6 n-3) y ácido araquidónico (AA, 20:4 n-6; Ramírez-Mérida et al. 2015), son esenciales para los organismos. Estos compuestos desempeñan funciones importantes como precursores de eicosanoides y hormonas y mejoran el sistema inmunológico (Vizcaíno-Ochoa et al. 2010).

Las diatomeas Thalassiosira weissflogii y Chaetoceros muelleri producen principalmente los carotenoides fucoxantina, diadinoxantina, diatoxantina y β-caroteno (Marella y Tiwari 2020). Sin embargo, pueden producir otros carotenoides, como violaxantina, zeaxantina y feofitina a, en cantidades menores dependiendo de las condiciones de luz, nutrientes y temperatura (Long et al. 2018). Tetraselmis suecica se caracteriza por tener trans-violaxantina, anteraxantina, astaxantina, luteína, α-caroteno y β-caroteno (Ahmed et al. 2014), mientras que Nannochloropsis sp. contiene principalmente violaxantina y vaucheriaxantina, además de zeaxantina, cantaxantina, α-caroteno y β-caroteno (Paliwal et al. 2016). Los principales ácidos grasos de Thalassiosira weissflogii son 16:1n, 16:0, 14:0 y EPA, mientras que los de Chaetoceros muelleri son 16:1n, 16:0, 14:0, EPA y AA (Aranda- Burgos et al. 2014, Marella y Tiwari 2020). La microalga verde Tetraselmis suecica contiene principalmente ácido 16:0, 16:2, 16:3 y ácido α-linolénico (18:3), mientras que Nannochloropsis sp. contiene principalmente EPA y AA (Chaisutyakorn et al. 2018, Pugkaew et al. 2019).

Artemia es uno de los alimentos vivos más utilizados en la acuicultura, aunque los nauplios y juveniles de Artemia son deficientes en AGPIs y carotenoides. Estas deficiencias pueden resolverse mediante técnicas de enriquecimiento o bioencapsulación, que pueden proporcionar varios compuestos de interés nutricional a organismos cultivados con alimentos vivos, incluida Artemia (Tlusty et al. 2005). El empleo de juveniles o adultos de Artemia tiene ciertas ventajas sobre el uso de nauplios, ya que su valor nutricional es mayor que el de los nauplios recién eclosionados o en etapa temprana (Léger et al. 1986).

En etapas tardías de desarrollo, Artemia se utiliza como alimento vivo para organismos más grandes, incluida la langosta Homarus americanus, el camarón Macrobrachium americanum y el pulpo Octopus vulgaris (Méndez-Martínez et al. 2018). Además, Artemia se utiliza ampliamente en los protocolos de cultivo de peces ornamentales. Por ejemplo, Azimirad et al. (2016) evaluaron el efecto de alimentar al pez ángel (Pterophyllum scalare) con Artemia adulta no enriquecida (control), Artemia adulta enriquecida con probiótico liofilizado, Artemia adulta enriquecida con prebiótico y Artemia adulta enriquecida con simbiótico y encontraron mejores resultados en términos de peso final, ganancia de peso y tasa de crecimiento específica en los juveniles de peces ángel alimentados con Artemia enriquecida con simbiótico.

Entre las especies de Artemia, A. franciscana es el alimento vivo más utilizado en los criaderos marinos a pesar de ser deficiente en carotenoides y AGPIs. No obstante, como las microalgas constituyen la principal fuente de alimento de Artemia, la composición bioquímica de la dieta del criadero puede modificarse ajustando la dieta de Artemia (Fábregas et al. 2001). Por ejemplo, varios estudios han demostrado que los AGPIs pueden transferirse de las microalgas a los nauplios de Artemia a través de la alimentación, es decir, de la presa al depredador (Bhuvaneshwari et al. 2018). De hecho, se observó que un corto período de enriquecimiento de 6 a 8 h mejoraba la calidad nutricional de Artemia, aumentando el contenido de AGPIs al 56.50% cuando se enriquecía con Nannochloropsis salina (Chakraborty et al. 2007). Además, las tasas de mortalidad de Artemia disminuyeron cuando se les alimentó con una dieta enriquecida con esta microalga (Chakraborty et al. 2007).

Muchos estudios han evaluado el enriquecimiento de los nauplios de Artemia con microalgas. Sin embargo, muy pocos se han centrado en Artemia en etapas tardías de su desarrollo (i.e., juveniles y adultos). Por lo tanto, este estudio tuvo como objetivo caracterizar la composición proximal, la concentración de clorofila a y b y el contenido de carotenoides totales de las microalgas más utilizadas en acuicultura, a saber, Thalassiosira weissflogii, Chaetoceros muelleri, Tetraselmis suecica y Nannochloropsis sp., para evaluar los efectos de estas dietas de microalgas en la composición bioquímica de los juveniles de A. franciscana.

Materiales y métodos

Cultivos de microalgas

Las microalgas se cultivaron en medio de cultivo f preparado con agua de mar a 35 ups (unidades prácticas de salinidad) filtrada y desinfectada con hipoclorito de sodio comercial al 5% (Guillard y Ryther 1962). Se suministró aire continuamente mediante un soplador de 2.5 HP y los cultivos se iluminaron con 6 lámparas fluorescentes de luz blanca (6,000-6,500 lux). La temperatura se mantuvo a 25 ± 1 °C. Los cultivos de microalgas se realizaron siguiendo la técnica de transferencias sucesivas de Zazueta- Patrón (2016) utilizando las cepas Thalassiosira weissflogii (TH-W-1), Chaetoceros muelleri (CH-M-1), Tetraselmis suecica (TE-S-1) y Nannochloropsis sp. (NN-X-1). La densidad inicial de cada cultivo fue de 10,000 cel∙mL-1 (TH-W-1), 200,000 cel∙mL-1 (CH-M-1), 25,000 cel∙mL-1 (TE-S-1) y 300,000 cel∙mL-1 (NN-X-1). Los cultivos se mantuvieron hasta la fase exponencial. La densidad celular se determinó mediante conteos directos utilizando un microscopio compuesto y una cámara de Neubauer. Se tomaron muestras representativas de cada microalga para analizar la composición proximal de proteínas, carbohidratos y lípidos, así como la concentración de clorofila a y b, y el contenido total de carotenoides. Todas las muestras se mantuvieron a -60 °C hasta su análisis.

Cultivo de juveniles de Artemia franciscana

Para obtener nauplios de A. franciscana (Great Salt Lake Artemia, INVE Aquaculture, lote 7116496181), seguimos el procedimiento estándar de hidratación-decapsulación- incubación de quistes descrito por Sorgeloos et al. (1986). Basado en análisis mitogenómicos, Sainz-Escudero et al. (2021) propusieron el nombre Artemia monica Verrill, 1869 como nombre válido de A. franciscana Kellogg, 1906 para el Linaje del Nuevo Mundo. La hidratación se realizó en agua dulce con aireación constante. Para la decapsulación se utilizó hipoclorito de sodio comercial al 5% y los quistes se incubaron durante 24 h en agua de mar (35 ups y 28 °C) con aireación e iluminación constante (2,000 lux). Después de la eclosión, los organismos de A. franciscana se transfirieron a un recipiente de 14 L con 2 Artemia∙mL-1 y se cultivaron durante 9 días. Durante este período, A. franciscana fue alimentada diariamente con Chaetoceros muelleri según la tasa de alimentación reportada por Millán-Almaraz et al. (2021). El agua de mar se cambió (30%) cada día. El experimento de bioencapsulación comenzó el día 9 del cultivo. Artemia franciscana se cultivó durante 9 días, ya que este tiempo es necesario para que los organismos alcancen la etapa juvenil (longitud mínima de 2.7 mm; Sorgeloos et al. 1986).

Experimento de bioencapsulación de nutrientes en juveniles de Artemia franciscana

Los cultivos de microalgas y A. franciscana se sincronizaron para que los juveniles de A. franciscana estuvieran disponibles cuando las microalgas alcanzaran la fase exponencial. Por lo tanto, pudimos alimentar a los juveniles con dietas isolipídicas. La equivalencia isolipídica de las microalgas se ha determinado en estudios previos no publicados (Tabla 1). Para ello, se tomó como referencia la microalga Chaetoceros muelleri y las condiciones experimentales se basaron en los resultados de Millán-Almaraz et al. (2021), quienes observaron que la mayor tasa de ingestión de juveniles de A. franciscana se produjo cuando fueron alimentados on una densidad de 900,000 cel∙mL-1 en la oscuridad. Por lo tanto, considerando el contenido de lípidos de la microalga Chaetoceros muelleri (12.84 pg de lípidos∙cel-1) y la densidad celular reportada, la dieta isolipídica consistió en 11,556,000 pg de lípidos∙mL-1. Por lo tanto, necesitábamos 77,541 cel∙mL-1 de Thalassiosira weissflogii, 457,482 cel∙mL-1 de Tetraselmis suecica y 4,736,065 cel∙mL-1 de Nannochloropsis sp. para alcanzar esta concentración (Tabla 1).

Tabla 1 Concentración de lípidos en pg∙cel-1 y equivalencia en cel∙mL-1 de las microalgas Thalassiosira weissflogii (TH-W-1), Chaetoceros muelleri (CH-M-1), Tetraselmis suecica (TE-S-1) y Nannochloropsis sp. (NN-X-1). 

CH-M-1 TH-W-1 TE-S-1 NN-X-1
Lipids in pg∙cell-1 12.84 149.03 25.26 2.44
Equivalence in cell∙mL-1 900,000 77,541 457,482 4,736,065

Es importante mencionar que antes del experimento, se confirmó que los intestinos estaban vacíos mediante observación directa utilizando un microscopio Olympus CH30. El experimento constó de 4 tratamientos, cada uno con una especie de microalga y 4 réplicas, dando como resultado 16 contenedores con microalga + Artemia. El control no incluyó microalgas. En total, hubo 20 unidades experimentales, cada una con una densidad de 0.5 Artemia∙mL-1. Las unidades experimentales estuvieron compuestas por recipientes plásticos de paredes transparentes, cada uno con un volumen útil de 14 L. Durante el experimento, la salinidad (35 ups), temperatura (25 °C), aireación y oscuridad (recipientes protegidos de la luz con cortinas negras) se mantuvieron constantes. Al inicio (0 h) y al final (6 h) del experimento, se tomaron muestras de juveniles de A. franciscana para determinar la composición proximal de proteínas, carbohidratos y lípidos, así como la concentración de clorofila a y b y contenido total de carotenoides.

Análisis proximal

La composición proximal de las microalgas y los juveniles de A. franciscana se determinó con base en el peso seco de proteínas (Lowry et al. 1951), carbohidratos (extracción, Whyte 1987; cuantificación, Dubois et al. 1956) y lípidos (extracción, Bligh y Dyer 1959; cuantificación, Pande et al. 1963). Para obtener las muestras, se filtró un volumen conocido de cultivo de A. franciscana a través de filtros GF/C de 25 mm Whatman. Luego, las muestras se colocaron en una estufa a 45 °C para secar y se almacenaron a -60 °C hasta su análisis.

Proteínas

Los filtros que contenían las muestras se colocaron en tubos de centrífuga y a cada uno se le agregaron 2 mL de NaOH 1 N. Posteriormente se maceraron los filtros y se agregaron 3 mL de NaOH 1 N. Luego, los tubos se cubrieron con papel de aluminio y se colocaron en un baño de agua a 100 °C durante 10 min. Posteriormente, las muestras se mezclaron y centrifugaron a 3220 x g durante 15 min y el sobrenadante se transfirió a los tubos de ensayo. Se realizó una doble extracción. Posteriormente se recogió 1 mL de cada muestra y se colocó en cada tubo de ensayo y se agregaron 5 mL de solución C. La solución C era una mezcla de las siguientes soluciones: solución A (carbonato de sodio anhidro al 2% en NaOH 0.1 N), solución B1 (sulfato de cobre al 0.5% en agua destilada) y solución B2 (tartrato de sodio y potasio al 1% en agua destilada). Después de agregar la solución C, los tubos de ensayo se dejaron reposar durante 10 min. Luego, se agregaron a cada tubo 0.5 ml de solución D (mezcla de Folin Ciocalteu y agua destilada) y se agitó vigorosamente hasta que la mezcla se volvió azul. Después de lo cual, los tubos de ensayo se dejaron reposar durante 90 min en la oscuridad. Se utilizó una celda de cuarzo de 1 cm para leer las muestras en un espectrofotómetro Hach DR5000 a una longitud de onda de 750 nm.

Carbohidratos

Los filtros que contenían las muestras se colocaron en tubos de centrífuga y se agregaron 2 mL de H2SO4 1 M a cada tubo. Posteriormente se maceraron los filtros y se agregaron 2 mL de H2SO4 1 M. Los tubos se cubrieron con papel de aluminio y se colocaron en un baño de agua a 100 °C durante 60 min. Posteriormente, las muestras se mezclaron y se centrifugaron a 3,220 × g durante 15 min.

Después de la centrifugación, se tomó 1 mL del sobrenadante de cada tubo y se colocó en un tubo de ensayo y se añadió 1 ml de solución de fenol al 5%. Después de reposar durante 40 min, se agregaron lentamente 5 mL de ácido sulfúrico concentrado y se mezclaron hasta que las muestras se volvieron amarillas. Finalmente, se utilizó una celda de cuarzo de 1 cm para leer las muestras en el espectrofotómetro Hach DR5000 a una longitud de onda de 485 nm.

Lípidos

Los filtros que contenían las muestras se pusieron en tubos de ensayo y se colocaron en un baño de hielo. Luego se añadieron a cada tubo 0.5 mL de agua destilada y 2 mL de metanol y se maceró el contenido. Posteriormente, a cada tubo se le agregaron 2 mL de cloroformo y 2 mL de metanol y se centrifugaron a 3,220 × g durante 15 min. Luego, se realizó una doble extracción utilizando 1 mL de metanol y 2 mL de cloroformo. Al sobrenadante obtenido de las 2 extracciones se le añadió un total de 2 mL de agua destilada y los tubos se agitaron vigorosamente para la formación de bifase. Los tubos con el sobrenadante se cubrieron con papel de aluminio y se refrigeraron durante al menos 24 h. Posteriormente se descartó la capa superior y el resto se dejó secar en estufa a 45 °C.

Al concentrado restante se le añadió un total de 3 mL de la solución ácida de dicromato de potasio al 2%, que luego se cubrió con papel de aluminio y se colocó en un baño de agua a 100 °C durante 15 min. Posteriormente, se agregaron 4.5 mL de agua destilada a cada tubo, se mezclaron vigorosamente y se enfriaron a temperatura ambiente. Finalmente, se utilizó una celda de cuarzo de 1 cm para leer las muestras en el espectrofotómetro DR5000 (Hach) a una longitud de onda de 590 nm.

Análisis de clorofilas y carotenoides totales

Se trituraron muestras de microalgas y Artemia en acetona al 100% en un baño de hielo en la oscuridad y se dejaron reposar durante 24 h en refrigeración a 4 °C. El sobrenadante se recuperó por centrifugación a 3,220 × g durante 15 min a 4 °C. Posteriormente, se realizó una doble extracción del precipitado y se mezclaron los sobrenadantes resultantes. Luego, se utilizó una celda de cuarzo de 1 cm para leer las muestras en el espectrofotómetro Hach DR5000 a 662 nm (clorofila a), 645 nm (clorofila b) y 470 nm (carotenoides totales). Las concentraciones de estos pigmentos se presentan en µg·mL-1 y se calcularon según las ecuaciones propuestas por Lichtenthaler y Wellburn (1983):

Chla = 11.75 A662 - 2.350 A645 , (1)

Chlb = 18.61 A645 - 3.960 A662 , (2)

TC = 1,000 A470 - 2.270 Chla - 81.4 Chlb/227 , (3)

donde Cla es clorofila a en µg∙mL-1, Clb es clorofila b en µg∙mL-1, CT son carotenoides totales en µg∙mL-1 y A es absorbancia.

Análisis estadístico

Los datos de la composición proximal, concentración de clorofila a y b, y contenido total de carotenoides de las microalgas y juveniles de A. franciscana fueron evaluados mediante las pruebas de normalidad de Lilliefors y homocedasticidad de Bartlett (Zar 2010) para determinar si eran necesarias pruebas estadísticas paramétricas o no paramétricas. Cuando los datos cumplieron con los supuestos de estas pruebas, se realizó un análisis de varianza de una vía (ANDEVA). Por el contrario, cuando los datos no cumplieron con estos supuestos, se realizó una prueba no paramétrica de Kruskal-Wallis. Cuando se encontraron diferencias significativas, se realizó una prueba de comparaciones múltiples de Student-Newman-Keuls (SNK) para datos tanto paramétricos como no paramétricos. Los datos analizados con pruebas no paramétricas están marcados en las tablas con un asterisco (*). Todos los análisis estadísticos se realizaron en SigmaStat v.3.5 con un nivel de significancia del 5%.

Resultados

Análisis proximal de microalgas

El análisis proximal basado en peso seco (PS) reveló que el contenido de proteína de TE-S-1 (426.28 mg∙g-1) fue mayor que el de TH-W-1 y CH-M-1 (P < 0.05; Tabla 2). El contenido de carbohidratos de TE-S-1 (231.70 mg∙g-1) fue mayor que el de CH-M-1 y NN-X-1 (P < 0.05; Tabla 2). Por otro lado, TE-S-1 mostró el mayor contenido de lípidos (154.43 mg∙g-1), que solo fue significativamente mayor que el de NN-X-1 (P < 0.05; Tabla 2).

Tabla 2 Proteínas, carbohidratos y lípidos en mg∙g-1 de peso seco de las microalgas Thalassiosira weissflogii (TH-W-1), Chaetoceros muelleri (CH-M-1), Tetraselmis suecica (TE-S-1) y Nannochloropsis sp. (NN-X-1) durante su fase exponencial. Los resultados son valores promedio ± error estándar (n = 4). 

Determination Concentrations in mg∙g-1
TH-W-1 CH-M-1 TE-S-1 NN-X-1
Proteins 244.70 ± 22.17a 286.05 ± 19.19ab 426.28 ± 57.26c 389.75 ± 24.13bc
Carbohydrates 185.57 ± 10.89b 77.42 ± 7.37a 231.70 ± 30.00b 116.50 ± 8.32a
Lipids 117.99 ± 2.89ab 123.96 ± 5.67ab 154.43 ± 19.64b 105.89 ± 6.25a

Equal letters indicate that there are no significant differences between species (P > 0.05).

Clorofila a, clorofila b y carotenoides totales en microalgas

El contenido de clorofila a de TE-S-1 fue de 12.59 pg Cla·ng-1 PS, el valor más alto para todas las microalgas (P < 0.05; Tabla 3). El contenido de clorofila b de TE-S-1 fue de 3.64 pg Clb·ng-1 PS y no fue significativamente diferente del de NN-X-1 (2.45 pg Clb·ng-1 PS; P > 0.05; Tabla 3). El contenido total de carotenoides de CH-M-1 (2.98 pg CT·ng-1 PS) y TE-S-1 (3.72 pg CT·ng-1 PS) reflejaron las concentraciones más altas de carotenoides totales y no fueron significativamente diferentes (P < 0.05; Tabla 3).

Tabla 3 Clorofila a (Chla), clorofila b (Chlb) y carotenoides totales (TC) presentados como pg·ng-1 de peso seco (DW) de las microalgas Thalassiosira weissflogii (TH-W-1), Chaetoceros muelleri (CH-M-1), Tetraselmis suecica (TE-S-1) y Nannochloropsis sp. (NN-X-1) cultivadas durante su fase exponencial. Los resultados son valores promedio ± error estándar (n = 4).  

Unit TH-W-1 CH-M-1 TE-S-1 NN-X-1
Chlorophyll a
pg Chla·ng-1 DW 8.93 ± 0.41a 7.50 ± 0.54a 12.59 ± 1.42b 7.60 ± 0.72a
Chlorophyll b
*pg Chlb·ng-1 DW 1.02 ± 0.08b 0.76 ± 0.05a 3.64 ± 0.46c 2.45 ± 0.26c
Total carotenoids
pg TC·ng-1 DW 1.96 ± 0.12a 2.98 ± 0.18b 3.72 ± 0.40b 1.61 ± 0.14a

Equal letters indicate that there are no significant differences between the species per unit of measure (P > 0.05). * Non-parametric test.

Contenido de proteínas, lípidos y carbohidratos en juveniles de Artemia franciscana

Después de 6 h, todos los juveniles alimentados con diferentes especies de microalgas exhibieron concentraciones y porcentajes más altos de proteínas, lípidos y carbohidratos en comparación con los valores iniciales y el control (Tabla 4). Los organismos alimentados con TE-S-1 mostraron el mayor contenido de proteínas (41.12 µg∙org-1), lípidos (11.90 µg∙org-1) y carbohidratos (8.70 µg∙org-1), los cuales fueron significativamente mayores (P < 0.05) que los de los otros tratamientos. Por otro lado, los tratamientos TH-W-1 y TE-S-1 mostraron mayores porcentajes de proteínas (53.36% y 54.11%) y carbohidratos (11.32% y 11.45%), mientras que TE-S-1 exhibió un mayor porcentaje de lípidos (15.66%; P < 0.05).

Tabla 4 Proteínas, lípidos y carbohidratos (µg∙org-1 y porcentajes) con base al peso seco de los juveniles de Artemia franciscana al inicio (0 h) y después (6 h) de alimentarlos con Thalassiosira weissflogii (TH-W-1), Chaetoceros muelleri (CH-M-1), Tetraselmis suecica (TE-S-1) y Nannochloropsis sp. (NN-X-1). Los resultados son valores promedio ± error estándar (n = 4). 

Determination Initial Control TH-W-1 CH-M-1 TE-S-1 NN-X-1
Concentrations in µg∙org-1
Proteins *Lipids Carbohydrates 30.01 ± 0.22 5.55 ± 0.04 5.40 ± 0.02 27.89 ± 0.19a 5.11 ± 0.03a 4.92 ± 0.02a 37.89 ± 0.25c 9.76 ± 0.06c 8.04 ± 0.05d 39.79 ± 0.34d 11.15 ± 0.14d 7.46 ± 0.03c 41.12 ± 0.31e 11.90 ± 0.07e 8.70 ± 0.03e 34.33 ± 0.25b 7.58 ± 0.06b 6.68 ± 0.05b
Percentages
Proteins 44.54 ± 0.25 43.56 ± 0.17a 53.36 ± 0.68d 47.02 ± 0.52b 54.11 ± 0.73d 49.30 ± 0.47c
*Lipids 8.24 ± 0.04 7.98 ± 0.04a 13.74 ± 0.24c 13.18 ± 0.23c 15.66 ± 0.19d 10.88 ± 0.11b
Carbohydrates 8.01 ± 0.02 7.68 ± 0.03a 11.32 ± 0.17d 8.81 ± 0.06b 11.45 ± 0.15d 9.59 ± 0.09c

Clorofila a y b y carotenoides totales en juveniles de Artemia franciscana

Después de 6 h de alimentación, todos los organismos tuvieron concentraciones de pigmentos más altas que el control (Tabla 5), pero los juveniles alimentados con TH-W-1 mostraron concentraciones más altas de clorofila a (0.482 ng Cla·µg-1 PS) y carotenoides totales (0.345 ng CT·µg-1 PS; P < 0.05). Los alimentados con TE-S-1 exhibieron el valor más alto de clorofila b (0.131 ng Clb·µg-1 PS).

Tabla 5 Clorofila a, clorofila b y carotenoides totales en ng·µg-1 peso seco (DW) de los juveniles de Artemia franciscana al inicio (0 h) y después (6 h) de alimentarlos con las microalgas Thalassiosira weissflogii (TH-W-1), Chaetoceros muelleri (CH-M-1), Tetraselmis suecica (TE-S-1) y Nannochloropsis sp. (NN-X-1). Los resultados son valores promedio ± error estándar (n = 4). 

Determination Initial Control TH-W-1 CH-M-1 TE-S-1 NN-X-1
Concentrations in ng·µg-1 DW
*Chlorophyll a 0.010 ± 0.000 0.010 ± 0.001a 0.482 ± 0.009e 0.437 ± 0.002d 0.248 ± 0.006c 0.193 ± 0.002b
Chlorophyll b 0.005 ± 0.000 0.004 ± 0.000a 0.102 ± 0.004c 0.081 ± 0.002b 0.131 ± 0.004e 0.121 ± 0.003d
*Total carotenoids 0.050 ± 0.001 0.043 ± 0.001a 0.345 ± 0.002d 0.328 ± 0.001c 0.229 ± 0.006b 0.228 ± 0.004b

Different letters indicate significant differences between treatments (P < 0.05). *Non-parametric test.

Discusión

Composición proximal de microalgas, concentración de clorofila a y b y contenido total de carotenoides

Como es de esperar, las diatomeas presentan menores concentraciones de materia orgánica que las microalgas verdes debido a que poseen frústulas con mayores porcentajes de materia inorgánica. Sin embargo, no se ha observado una tendencia en la que las proteínas, carbohidratos y lípidos exhiban valores más bajos en las diatomeas que en otras especies, como observaron Renaud et al. (1999). En este estudio, sólo el contenido de proteínas fue mayor en las microalgas verdes que en las diatomeas.

El contenido de proteína de TH-W-1 (244.70 mg∙g-1) fue similar al valor de 289 mg∙g-1 reportado por García et al. (2012). En cuanto al contenido de proteína de CH-M-1, nuestro valor fue inferior al reportado por Carbajal-López (2008) para Chaetoceros calcitrans, mientras que nuestros valores para TE-S-1 y NN-X-1 fueron superiores a los reportados por el mismo autor (274.57 mg∙g-1 para TE-S-1 y 169.34 mg∙g-1 para Nannochloropsis oculata). Estas diferencias podrían deberse a las diferentes especies de microalgas, medios (e.g., Carbajal-López [2008] usó medio f/2) o metodologías empleadas entre los estudios.

De manera similar, estas razones también pueden explicar las diferencias observadas en el contenido de carbohidratos y lípidos. El contenido de carbohidratos obtenido en este estudio para TH-W-1 (185.57 mg∙g-1) fue similar al valor de 207.00 mg∙g-1 reportado por García et al. (2012) para la misma especie. Por otro lado, Carbajal-López (2008) reportó un contenido de carbohidratos de 42.55 mg∙g-1 para C. calcitrans, 22.25 mg∙g-1 para TE-S-1 y 18.96 mg∙g-1 para N. oculata, que son inferiores a los reportados en este estudio. El contenido lipídico de TH-W-1 (117.99 mg∙g-1) en nuestro estudio fue inferior al reportado por García et al. (2012), lo que también puede deberse a las diferencias en las condiciones de cultivo entre los estudios (e.g., diferentes medios, temperaturas y salinidades). Sin embargo, las concentraciones de lípidos de CH-M-1 y TE-S-1 en este estudio fueron superiores a las de Carbajal-López (2008) para C. calcitrans (103.27 mg∙g-1) y TE-S-1 (86.63 mg∙g-1). Por último, el contenido de lípidos de NN-X-1 en este estudio fue similar al reportado por Carbajal-López (2008) para N. oculata.

En este estudio, la clorofila a fue el compuesto más abundante en todas las especies de microalgas, mientras que la clorofila b fue el segundo compuesto más abundante en las microalgas verdes. Estos resultados concuerdan con los de Jeffrey y Wright (2005). Aunque no fue evaluada en este estudio, la clorofila c, además de los 2 tipos de clorofila mencionados anteriormente, se encuentra en muchos grupos de algas marinas, incluidas las diatomeas, las algas pardas y los dinoflagelados (Zapata et al. 2006). En este estudio, la concentración de clorofila a en TH-W-1 (8.93 pg Cla∙ng-1 PS) fue superior a las reportadas por Saxena et al. (2022), quienes registraron concentraciones que oscilaron entre 2.79 y 6.01 pg Cla∙ng-1 PS para esta especie. De manera similar, Saxena et al. (2022) reportaron valores de clorofila a que oscilaron entre 2.60 y 4.16 pg Cla∙ng-1 PS para Chaetoceros gracilis. Estas concentraciones fueron inferiores a las registradas en este estudio (7.50 pg Cla∙ng-1 PS para CH-M-1). La concentración de carotenoides totales para TH-W-1 (1.96 pg CT·ng-1 PS) en este estudio fue similar a la reportada por Bhattacharjya et al. (2020) para Thalassiosira sp. (1.50 pg CT·ng-1). La concentración de carotenoides totales para CH-M-1 (2.98 pg CT·ng-1 PS) en este estudio fue superior a la encontrada por Goiris et al. (2012), quienes reportaron un valor de 2.33 pg CT·ng-1 PS para muestras de biomasa liofilizada de C. calcitrans.

Pocos estudios han informado del contenido de clorofila b en las diatomeas. Sin embargo, Ju et al. (2009), quienes trabajaron con Thalassiosira weissflogii, y Wang et al. (2019), quienes analizaron Phaeodactylum tricornutu, reportaron concentraciones inferiores a las obtenidas en este estudio. En el caso de Ju et al. (2009), estas diferencias pueden deberse a diferentes procedimientos utilizados para obtener y analizar las muestras. Respecto a Wang et al. (2019), estas diferencias pueden deberse a las diferentes especies, medios de cultivo y temperaturas empleadas, así como a los diferentes ciclos de luz/oscuridad o a la exposición a 5 concentraciones de p-cloroanilina.

El contenido de clorofila a de TE-S-1 (12.59 pg Cla·ng-1 PS) fue similar a las concentraciones obtenidas por Abiusi et al. (2013), quienes cultivaron la misma especie durante 9 días utilizando LED de diferentes colores y reportaron valores de 7.00 a 16.00 pg Cla∙ng-1 PS. Sin embargo, el contenido de clorofila b (3.64 pg Clb·ng-1 PS) y carotenoides totales (3.72 pg CT·ng-1 PS) obtenidos en el presente estudio fueron inferiores a los registrados por los autores mencionados anteriormente, quienes reportaron valores que oscilaron entre 6.00 y 13.00 pg·ng-1 PS para clorofila b y 6.00 pg·ng-1 PS para carotenoides totales.

En cuanto a las concentraciones de pigmentos, el contenido de clorofila a (7.60 pg Cla∙ng-1 PS) para NN-X-1 obtenido en este estudio fue superior al reportado por Ra et al. (2018), quienes reportaron valores de 4.00 a 6.00 pg Cla∙ng-1 PS para Nannochloropsis oceanica, aunque el valor en este estudio fue similar al obtenido para N. salina (6.00 a 10.00 pg Cla∙ng-1 PS). Ra et al. (2018) evaluaron los efectos de longitudes de onda mixtas de luz LED blanca y verde en microalgas. Sin embargo, la concentración de clorofila b (2.45 pg Clb·ng-1 PS) en este estudio fue superior a la obtenida por esos autores, quienes reportaron concentraciones de clorofila b inferiores a 2.00 Clb∙ng-1 PS en ambas especies. Además, la concentración de carotenoides totales (1.61 pg CT·ng-1 PS) en este estudio fue similar a la reportada por Goiris et al. (2012), quienes reportaron una concentración total de carotenoides de 1.65 pg CT·ng-1 PS en N. oculata.

La temperatura y la intensidad de la luz son factores clave que afectan la productividad de las microalgas (Hindersin et al. 2014). Además, la suplementación con nitrógeno y fósforo influye en la síntesis de componentes bioquímicos de las algas cultivadas (Rasdi y Qin 2015). Por ejemplo, la limitación de nitrógeno y fósforo en los medios de cultivo de algas promueve la acumulación de lípidos (Franz et al. 2013), mientras que el exceso de temperatura o luz induce la síntesis de carotenoides (Panis y Carreon 2016). Las diatomeas en las fases exponencial y estacionaria de cosecha contienen más ácidos grasos que las microalgas verdes o las microalgas verde azules (Wongrat 1995). En el caso de los carotenoides, algunas cepas de microalgas acumulan las mayores concentraciones celulares de carotenoides en la fase exponencial media-tardía de crecimiento (Gómez-Loredo et al. 2016).

Composición proximal, clorofilas y contenido total de carotenoides en juveniles de Artemia franciscana

Los juveniles de A. franciscana alimentados con las dietas isolipídicas de TH-W-1, CH-M-1, TE-S-1 y NN-X-1 presentaron concentraciones y porcentajes de proteínas, carbohidratos y lípidos mayores que los del control. Sin embargo, los juveniles alimentados con TE-S-1 exhibieron concentraciones y porcentajes más altos de proteínas, carbohidratos y lípidos que aquellos alimentados con otras especies de microalgas, lo que concuerda con la composición proximal de TE-S-1. En contraste, los juveniles de A. franciscana alimentados con NN-X-1 presentaron las concentraciones más bajas de proteínas, carbohidratos y lípidos por organismo en comparación con los juveniles alimentados con las otras microalgas, lo que puede deberse a que los nauplios de Artemia no pueden digerir las especies de Nannochloropsis debido a sus rígidas paredes celulares (Gerken et al. 2013).

El porcentaje de proteína de los juveniles alimentados con la dieta TE-S-1 (54.11%) en este estudio fue similar al encontrado por Maldonado-Montiel y Rodríguez-Canché (2005), quienes reportaron un porcentaje de 53.1% para los adultos de Artemia sp. alimentados con la misma microalga. En otro estudio, Shanmugam y Rajendran (2018) obtuvieron un 55.55% de proteína en adultos de A. franciscana alimentados con Chaetoceros sp., valor superior al encontrado en este estudio con la microalga Chaetoceros muelleri (47.02%). El porcentaje de lípidos reportado por Shanmugam y Rajendran (2018) del 19.38% para adultos de A. franciscana alimentados con Chaetoceros sp. fue superior al encontrado en este estudio para juveniles de Artemia alimentados con Chaetoceros muelleri (13.18%). Sin embargo, estos autores reportaron un porcentaje de lípidos (16.06%) en organismos alimentados con Tetraselmis sp., similar al obtenido en este estudio en juveniles alimentados con Tetraselmis suecica (15.66%). Sánchez-Saavedra y Paniagua-Chávez (2017) reportaron un porcentaje de carbohidratos del 18.83% para adultos de A. franciscana alimentados con Chaetoceros muelleri, el cual es superior al obtenido en este estudio para juveniles alimentados con la misma especie (8.81%). Sin embargo, Shanmugam y Rajendran (2018) reportaron un porcentaje de carbohidratos del 15.11% (basado en peso seco) para organismos alimentados con Tetraselmis sp., que es similar al valor reportado en este estudio (11.45%) en juveniles de A. franciscana alimentados con Tetraselmis suecica.

El contenido total de carotenoides en juveniles de A. franciscana de este estudio fue mayor que los reportados por Cheban et al. (2020), quienes obtuvieron valores de 0.06 a 0.18 ng CT∙µg-1 PS en nauplios de Artemia salina enriquecidos con las microalgas Desmodesmus armatus, Chlorella vulgaris y Dunaliella viridis durante 24 h. Por el contrario, las concentraciones en este estudio fueron inferiores a las obtenidas por Abdollahi et al. (2019), quienes reportaron un valor de 0.88 ng CT·µg-1 PS para adultos de A. franciscana enriquecidos durante 4 h con β-caroteno de Dunaliella salina. No se encontraron referencias que reporten la concentración de clorofila en crustáceos ni sus posibles funciones. Sin embargo, la actividad antioxidante que previene el daño oxidativo del ADN y la peroxidación lipídica es un efecto beneficioso de la clorofila (Pangestuti y Kim 2011).

Los alimentos de alta calidad, como Artemia enriquecida con microalgas, son cruciales para el éxito de los cultivos de larvas de peces, ya que estas dietas proporcionan los elementos nutricionales necesarios para respaldar la esperanza de vida, el crecimiento ideal y el sistema inmunológico de los peces (Madkour et al. 2022). En este sentido, los juveniles de Artemia enriquecidos con carotenoides provenientes de microalgas, como los evaluados en el presente estudio, también pueden servir como alimento para peces ornamentales, como Xiphophorus maculatus, dado que suplementar su dieta con carotenoides mejora la coloración y la respuesta inmune de las mucosas (Abdollahi et al. 2019). Además, Pérez-Rodríguez et al. (2018) estudiaron los efectos de alimentar a larvas de M. americanum con una dieta de Artemia enriquecida con la microalga C. calcitrans, reportando que el crecimiento general, la tasa de crecimiento y la supervivencia mejoraron.

En conclusión, se observaron efectos positivos en la composición proximal, la concentración de clorofila a y b y el contenido total de carotenoides de juveniles de A. franciscana alimentados con diferentes especies de microalgas después de 6 h. Los organismos alimentados con Tetraselmis suecica exhibieron los mejores resultados en términos de composición proximal y contenido de clorofila b, mientras que aquellos alimentados con dietas de Thalassiosira weissflogii y Chaetoceros muelleri presentaron los mejores resultados en términos de contenido total de carotenoides y clorofila a.

Agradecimientos

Los autores agradecen al CONACYT por la beca (#424079) y el proyecto PRO_A7_041 del Programa de Promoción y Apoyo a Proyectos de Investigación (PROFAPI) 2022.

REFERENCIAS

Abdollahi Y, Ahmadifard N, Agh N, Rahmanifarah K, Amin-Hejazi M. 2019. β-Carotene-enriched Artemia as a natural carotenoid improved skin pigmentation and enhanced the mucus immune responses of platyfish Xiphophorus maculatus. Aquac Int. 27(6):1847-1858. https://doi.org/10.1007/s10499-019-00437-8 [ Links ]

Abiusi F, Sampietro G, Marturano G, Biondi N, Rodolfi L, D’Ottavio M, Tredici MR. 2013. Growth, photosynthetic efficiency, and biochemical composition of Tetraselmis suecica F&M-M33 grown with LEDs of different colors. Biotechnol Bioeng. 111(5):956-964. https://doi.org/10.1002/bit.25014 [ Links ]

Ahmed F, Fanning K, Netzel M, Turner W, Li Y, Schenk PM. 2014. Profiling of carotenoids and antioxidant capacity of microalgae from subtropical coastal and brackish waters. Food Chem. 165:300-306. http://dx.doi.org/10.1016/j.foodchem.2014.05.107 [ Links ]

Aranda-Burgos JA, da Costa F, Nóvoa S, Ojea J, Martínez-Patiño D. 2014. Effects of microalgal diet on growth, survival, biochemical and fatty acid composition of Ruditapes decussatus larvae. Aquaculture. 420-421:38-48. http://doi.org/10.1016/j.aquaculture.2013.10.032 [ Links ]

Azimirad M, Meshkini S, Ahmadifard N, Hoseinifar SH. 2016. The effects of feeding with synbiotic (Pediococcus acidilactici and fructooligosaccharide) enriched adult Artemia on skin mucus immune responses, stress resistance, intestinal microbiota and performance of angelfish (Pterophyllum scalare). Fish Shellfish Immunol. 54:516-522. https://doi.org/10.1016/j.fsi.2016.05.001 [ Links ]

Bhattacharjya R, Marella TK, Tiwari A, Saxena A, Singh PK, Mishra B. 2020. Bioprospecting of marine diatoms Thalassiosira, Skeletonema and Chaetoceros for lipids and other value-added products. Bioresour Technol. 318:124073.https://doi.org/10.1016/j.biortech.2020.124073 [ Links ]

Bhuvaneshwari M, Thiagarajan V, Nemade P, Chandrasekaran N, Mukherjee A. 2018. Toxicity and trophic transfer of P25 TiO2 NPs from Dunaliella salina to Artemia salina: effect of dietary and waterborne exposure. Environ Res. 160:39-46. https://doi.org/10.1016/j.envres.2017.09.022 [ Links ]

Bligh EG, Dyer WJ. 1959. A rapid method of total lipid extraction and purification. Can J Biochem Physiol. 37(8):911-917. https://doi.org/10.1139/o59-099 [ Links ]

Carbajal-López A. 2008. Producción en masa del rotífero Brachionus plicatilis alimentado con 4 diferentes microalgas, para su uso como alimento vivo de larvas de peces marinos. [Mass production of Brachionus plicatilis rotifer fed with 4 different microalgae, for use as live food for marine fish larvae] [BSc thesis]. [Guadalajara (Jalisco, Mexico)]: Universidad de Guadalajara. 48 p. [ Links ]

Chaisutyakorn P, Praiboon J, Kaewsuralikhit C. 2018. The effect of temperature on growth and lipid and fatty acid composition on marine microalgae used for biodiesel production. J Appl Phycol. 30:37-45. https://doi.org/10.1007/s10811-017-1186-3 [ Links ]

Chakraborty RD, Chakraborty K, Radhakrishnan EV. 2007. Variation in fatty acid composition of Artemia salina nauplii enriched with microalgae and baker’s yeast for use in larviculture. J Agric Food Chem . 55(10):4043-4051. https://doi.org/10.1021/jf063654l [ Links ]

Cheban L, Khudyi O, Prusińska M, Duda A, Khuda L, Wiszniewski G, Kushniryk O, Kapusta A. 2020. Survival, proximate composition, and proteolytic activity of Artemia salina bioencapsulated with different algal monocultures. Fish Aquat Life. 28(4):205-215. https://doi.org/10.2478/aopf-2020-0025 [ Links ]

De la Vega-Naranjo M. 2014. Aislamiento, caracterización y manipulación genética de microalgas marinas para la producción de compuestos de alto valor añadido [Isolation, characterization, and genetic manipulation of marine microalgae for the production of high added value compounds] [dissertation]. [Spain]: Universidad de Huelva. 204 p. [ Links ]

Dubois M, Gilles KA, Hamilton JK, Rebers PA, Smith F. 1956. Colorimetric method for the determination of sugars and related substances. Anal Chem. 28(3):350-356. https://doi.org/10.1021/ac60111a017 [ Links ]

Fábregas J, Otero A, Domínguez A, Patiño M. 2001. Growth rate of the microalga Tetraselmis suecica changes the biochemical composition of Artemia species. Mar Biotechnol. 3(3):256-263. https://doi.org/10.1007/s101260000074 [ Links ]

Franz AK, Danielewicz MA, Wong DM, Anderson LA, Boothe JR. 2013. Phenotypic screening with oleaginous microalgae reveals modulators of lipid productivity. ACS Chem Biol. 8:1053-1062. https://doi.org/10.1021/cb300573r [ Links ]

García N, López-Elías JA, Miranda A, Martínez-Porchas M, Huerta N, García A. 2012. Effect of salinity on growth and chemical composition of the diatom Thalassiosira weissflogii at three culture phases. Lat Am J Aquat Res. 40(2):435-440. http://doi.org/10.3856/vol40-issue2-fulltext-18 [ Links ]

Gerken HG, Donohoe B, Knoshaug EP. 2013. Enzymatic cell wall degradation of Chlorella vulgaris and other microalgae for biofuels production. Planta: 237:239-253. https://doi.org/10.1007/s00425-012-1765-0 [ Links ]

Goiris K, Muylaert K, Fraeye I, Foubert I, de Brabanter J, de Cooman L. 2012. Antioxidant potential of microalgae in relation to their phenolic and carotenoid content. J Appl Phycol. 24:1477-1486. https://doi.org/10.1007/s10811-012-9804-6 [ Links ]

Gómez-Loredo A, Benavides J, Rito-Palomares M. 2016. Growth kinetics and fucoxanthin production of Phaeodactylum tricornutum and Isochrysis galbana cultures at different light and agitation conditions. J Appl Phycol. 28:849-860. https://doi.org/10.1007/s10811-015-0635-0 [ Links ]

Guillard RRL, Ryther JH. 1962. Studies of marine planktonic diatoms: I. Cyclotella nana Hustedt and Detonula confervacea (Cleve). Rev Microbiol. 8:229-325. https://doi.org/10.1139/m62-029 [ Links ]

Hamed I. 2016. The evolution and versatility of microalgal biotechnology: a review. Compr Rev Food Sci Food Saf. 15(6):1104-1123. https://doi.org/10.1111/1541-4337.12227 [ Links ]

Hindersin S, Leupold M, Kerner M, Hanelt D. 2014. Key parameters for outdoor biomass production of Scenedesmus obliquus in solar tracked photobioreactors. J Appl Phycol. 26:2315-2325. https://doi.org/10.1007/s10811-014-0261-2 [ Links ]

Jeffrey SW, Wright SW. 2005. Photosynthetic pigments in marine microalgae: insights from cultures and the sea. In: Subba-Rao DV (ed.), Algal Cultures, Analogues of Blooms and Applications. New Hampshire (USA): Science Publishers. p. 33-90. [ Links ]

Ju ZY, Forster IP, Dominy WG. 2009. Effects of supplementing two species of marine algae or their fractions to a formulated diet on growth, survival and composition of shrimp (Litopenaeus vannamei). Aquaculture. 292:237-243. https://doi.org/10.1016/j.aquaculture.2009.04.040 [ Links ]

Léger P, Bengston DA, Simpson KL, Sorgeloos P. 1986. The use and nutritional value of Artemia as a food source. Oceanogr Mar Biol Annu Rev. 24:521-623. [ Links ]

Lichtenthaler HK, Wellburn AR. 1983. Determinations of total carotenoids and chlorophylls a and b of leaf extracts in different solvents. Biochem Soc Trans. 11(5):591-592. https://doi.org/10.1042/bst0110591 [ Links ]

Long M, Tallec K, Soudant P, Le Grand F, Donval A, Lambert C, Sarthou G, Jolley DF, Hégaret H. 2018. Allelochemicals from Alexandrium minutum induce rapid inhibition of metabolism and modify the membranes from Chaetoceros muelleri. Algal Res. 35:508-518. https://doi.org/10.1016/j.algal.2018.09.023 [ Links ]

Lowry OH, Rosebrough NJ, Farr AL, Randall RL. 1951. Protein measurement with the folin phenol reagent. J Biol Chem. 193(1):265-275. https://doi.org/10.1016/S0021-9258(19)52451-6 [ Links ]

Madkour K, Dawood MAO, Sewilam H. 2022. The use of Artemia for aquaculture industry: An updated overview. Ann Anim Sci. 23(1):3-10. https://doi.org/10.2478/aoas-2022-0041 [ Links ]

Maldonado-Montiel TDNJ, Rodríguez-Canché LG. 2005. Biomass production and nutritional value of Artemia sp. (Anostraca: Artemiidae) in Campeche, México. Rev Biol Trop. 53(3-4):447-454. https://doi.org/10.15517/rbt.v53i3-4.14613 [ Links ]

Marella TK, Tiwari A. 2020. Marine diatom Thalassiosira weissflogii based biorefinery for co-production of eicosapentaenoic acid and fucoxanthin. Bioresour Technol . 307:123245. https://doi.org/10.1016/j.biortech.2020.123245 [ Links ]

Martínez-Córdova LR, Martínez-Porchas M, López-Elías JA, Enríquez-Ocaña LF. 2014. Uso de microorganismos en el cultivo de crustáceos = Use of microorganisms in crustacean culture. Biotecnia. 16(3):50-55. https://doi.org/10.18633/bt.v16i3.141 [ Links ]

Méndez-Martínez Y, García-Guerrero MU, Lora-Vilchis MC, Martínez-Córdova LR, Arcos-Ortega FG, Alpuche JJ, Cortés-Jacinto E. 2018. Nutritional effect of Artemia nauplii enriched with Tetraselmis suecica and Chaetoceros calcitrans microalgae on growth and survival on the river prawn Macrobrachium americanum larvae. Aquac Int . 26:1001-1015. https://doi.org/10.1007/s10499-018-0264-0 [ Links ]

Millán-Almaraz MI, Nieves-Soto M, López-Peraza DJ, Peraza-Yee MM. 2021. Effect of light and feed density on ingestion rate, protein and lipid content of Artemia franciscana juveniles. Lat Am J Aquat. 49(5):717-724. https://doi.org/10.3856/vol49-issue5-fulltext-2695 [ Links ]

Paliwal C, Ghosh T, George B, Pancha I, Maurya R, Chokshi K, Ghosh A, Mishra S. 2016. Microalgal carotenoids: Potential nutraceutical compounds with chemotaxonomic importance. Algal Res . 15:24-31. http://doi.org/10.1016/j.algal.2016.01.017 [ Links ]

Pande SV, Khan RP, Venkitasubramanian TA. 1963. Microdetermination of lipids and serum total fatty acid. Anal Biochem. 6(5):415-423. https://doi.org/10.1016/0003-2697(63)90094-0 [ Links ]

Pangestuti, R, Kim, SK. 2011. Biological activities and health benefit effects of natural pigments derived from marine algae. J Funct Foods. 3(4):255-266. https://doi.org/10.1016/j.jff.2011.07.001 [ Links ]

Panis G, Carreon JR. 2016. Commercial astaxanthin production derived by green alga Haematococcus pluvialis: a microalgae process model and a techno-economic assessment all through production line. Algal Res . 18:175-190. https://doi.org/10.1016/j.algal.2016.06.007 [ Links ]

Pérez-Rodríguez JC, Yamasaki-Granados S, García-Guerrero MU, Martínez-Porchas M, Méndez-Martínez Y, Latournerié-Cervera JR, Cortés-Jacinto E. 2018. Growth and survival of juvenile cauque river prawn Macrobrachium americanum fed with diets containing different protein levels. Lat Am J Aquat Res. 46(3):534-542. http://doi.org/10.3856/vol46-issue3-fulltext-6 [ Links ]

Pugkaew W, Meetam M, Yokthongwattana K, Leeratsuwan N, Pokethitiyook P. 2019. Effects of salinity changes on growth, photosynthetic activity, biochemical composition, and lipid productivity of marine microalga Tetraselmis suecica. J Appl Phycol. 31:969-979. https://doi.org/10.1007/s10811-018-1619-7 [ Links ]

Ra CH, Sirisuk P, Jung JH, Jeong GT, Kim SK. 2018. Effects of light-emitting diode (LED) with a mixture of wavelengths on the growth and lipid content of microalgae. Bioprocess Biosyst Eng. 41:457-465. https://doi.org/10.1007/s00449-017-1880-1 [ Links ]

Ramírez-Mérida LG, Ragagnin de Menezes C, Queiroz Zepka L, Jacob-Lopes E. 2015. Microalgas: potencial para la producción de compuestos bioactivos nanoencapsulados [Microalgae: potential for the production of nanoencapsulated bioactive compounds]. Ciencia e Natura. 37(5):7-17. https://doi.org/10.5902/2179-460X19690 [ Links ]

Rasdi NW, Qin JG. 2015. Effect of N:P ratio on growth and chemical composition of Nannochloropsis oculata and Tisochrysis lutea. J Appl Phycol . 27:2221-2230. https://doi.org/10.1007/s10811-014-0495-z [ Links ]

Renaud SM, Thinh LV, Parry DL. 1999. The gross chemical composition and fatty acid composition of 18 species of tropical Australian microalgae for possible use in mariculture. Aquaculture 170(2):147-159. https://doi.org/10.1016/S0044-8486(98)00399-8 [ Links ]

Rigane G, Bouaziz M, Sayadi S, Salem RB. 2013. Effect of storage on refined olive oil composition: stabilization by addition of chlorophyll pigments and squalene. J Oleo Sci. 62(12):981-987. https://doi.org/10.5650/jos.62.981 [ Links ]

Ruiz-Soto A. 2017. Implementación de una metodología por cromatografía líquida de alta resolución para la determinación del carotenoide all-trans-β-caroteno en la microalga Arthrospira platensis [Implementation of a high performance liquid chromatography methodology for the all-trans-B-carotene carotenoid determination o in the microalgae Arthrospira platensis] [Bsc thesis]. [Lima (Peru)]: Universidad Nacional de Ingeniería. 125 p. [ Links ]

Sainz-Escudero L, López-Estrada EK, Rodríguez-Flores PC, García-París M. 2021. Settling taxonomic and nomenclatural problems in brine shrimps, Artemia (Crustacea: Branchiopoda: Anostraca), by integrating mitogenomics, marker discordances and nomenclature rules. PeerJ. 9:e10865. https://doi.org/10.7717/peerj.10865 [ Links ]

Sánchez-Saavedra MP, Paniagua-Chávez C. 2017. Potential of refrigerated marine cyanobacterium Synechococcus elongatus used as food for Artemia franciscana. Lat Am J Aquat Res. 45(5):937-947. http://doi.org/10.3856/vol45-issue5-fulltext-9 [ Links ]

Saxena A, Mishra B, Tiwari A. 2022. Cost-effective mass cultivation of marine diatoms with local salts and its impact on growth and productivity. Bioresour Technol . 352:127128. http://doi.org/10.2139/ssrn.4035281 [ Links ]

Shanmugam S, Rajendran R. 2018. Influence of different diets on the growth, survival, fecundity and proximate composition of brine shrimp Artemia franciscana (Kellog, 1906). Aquac Res. 50(2):1-14. https://doi.org/10.1111/are.13882 [ Links ]

Sorgeloos P, Lavens P, Leger P, Tackaert W, Versichele D. 1986. Manual for the culture and use of brine shrimp Artemia in aquaculture. Belgium: Belgian Development Agency; FAO. 319 p. [ Links ]

Tlusty MF, Goldstein JS, Fiore DR. 2005. Hatchery performance of early benthic juvenile American lobsters (Homarus americanus) fed enriched frozen adult Artemia diets. Aquac Nutr. 11(3):191-198. https://doi.org/10.1111/j.1365-2095.2005.00339.x [ Links ]

Vizcaíno-Ochoa V, Lazo JP, Barón-Sevilla B, Drawbridge MA. 2010. The effect of dietary docosahexaenoic acid (DHA) on growth, survival and pigmentation of California halibut Paralichthys californicus larvae (Ayres, 1810). Aquaculture . 302:228-234. https://doi.org/10.1016/j.aquaculture.2010.02.022 [ Links ]

Wang X, Miao J, Pan L, Li Y, Lin Y, Wu J. 2019. Toxicity effects of p-choroaniline on the growth, photosynthesis, respiration capacity and antioxidant enzyme activities of a diatom, Phaeodactylum tricornutu. Ecotoxicol Environ Saf. 169:654-661. https://doi.org/10.1016/j.ecoenv.2018.11.015 [ Links ]

Whyte JNC. 1987. Biochemical composition and energy content of six species of phytoplankton used in mariculture of bivalves. Aquaculture . 60(3-4):231-241. https://doi.org/10.1016/0044-8486(87)90290-0 [ Links ]

Wongrat L. 1995. Phytoplankton. Bangkok (Thailand): Faculty of Fisheries, Kasetsart University. [ Links ]

Zapata M, Garrido JL, Jeffrey SW. 2006. Chlorophyll c pigments: current status. In: Grimm, B, Porra RJ, Rüdiger W, Scheer, H. (eds.), Chlorophylls and Bacteriochlorophylls: Biochemistry, Biophysics, Functions and Applications. Dordrecht (The Netherlands): Springer: p. 39-53. https://doi.org/10.1007/1-4020-4516-6_3 [ Links ]

Zar JH. 2010. Biostatistical analysis. New Jersey (USA): Prentice Hall. 663 p. [ Links ]

Zazueta-Patrón IE. 2016. Crecimiento, biomasa y composición proximal de microalgas cultivadas en medios limitantes de nitrógeno [Growth, biomass, and proximal composition of microalgae cultured in limiting nitrogen media] [MSc thesis]. [Mazatlan (Sinaloa, Mexico)]: Facultad de Ciencias del Mar de la Universidad Autónoma de Sinaloa (FACIMAR-UAS). 55 p. [ Links ]

Traducido al español por MacTavish Scientific Editing.

Recibido: 02 de Octubre de 2022; Aprobado: 22 de Mayo de 2023; Publicado: 05 de Diciembre de 2023

Todos los coautores están de acuerdo con su publicación y realizaron aportes significativos; no hay conflicto de interés.

Creative Commons License This is an open-access article distributed under the terms of the Creative Commons Attribution License