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Ciencias marinas

versión impresa ISSN 0185-3880

Cienc. mar vol.32 no.1b Ensenada mar. 2006

 

Artículos

 

Efecto de la pesca artesanal de camarón sobre la ictiofauna en el sistema lagunar de Santa María la Reforma, suroeste del Golfo de California

 

Effect of the artisanal shrimp fishery on the ichthyofauna in the coastal lagoon of Santa María la Reforma, southeastern Gulf of California

 

F Amezcua1*, J Madrid-Vera2 y H Aguirre-Villaseñor2

 

1 Instituto de Ciencias del Mar y Limnología, UNAM, Unidad Mazatlán, Av. Joel Montes Camarena s/n, CP 82040 Mazatlán, Sinaloa, México. * E-mail: famezcua@ola.icmylunam.mx

2 Instituto Nacional de la Pesca. Centro Regional de Investigación Pesquera, Mazatlán, Av. Sábalo Cerritos s/n, CP 82010 Mazatlán, Sinaloa, México.

 

Recibido en julio de 2004;
aceptado en septiembre de 2005.

 

Resumen

Se evaluó el impacto de la pesca artesanal de camarón sobre la fauna de peces en el sistema lagunar de Santa María la Reforma. Para ello, se muestrearon diariamente, durante cinco días, 29 estaciones a lo largo del sistema lagunar, con los artes de pesca utilizados en el área de estudio para capturar camarón, que fueron la red de arrastre, la red agallera y la red suripera. Los muestreos fueron mensuales de diciembre de 2001 a mayo de 2002. Se recolectaron un total de 11,368 organismos correspondientes a 173 especies. Las especies más importantes en cuanto a abundancia y biomasa incluyeron organismos de interés comercial tales como Eucinostomus entomelas, Sphoeroides annulatus, Urotrygon chilensis y Diapterus peruvianus. La mayor abundancia y biomasa de organismos, de acuerdo con el bootstrapping del estimador log normal, fue capturada con la red de arrastre. El promedio de la longitud de los peces capturados fue de 17.4 cm para la red agallera, 15.8 cm para la red de arrastre y 13.4 cm para la suripera. Los artes de pesca que presentaron un mayor impacto sobre la comunidad de peces fueron la red de arrastre y la red agallera, ya que estas dos artes capturaron la mayor abundancia, biomasa y diversidad de peces, entre los que se incluyen una gran cantidad de organismos de tallas pequeñas. Estos dos artes capturaron peces del fondo así como de la columna de agua, además fueron las que presentaron la menor proporción en kg pez: camarón; la red de arrastre capturó una proporción de 6:1, la red agallera capturó una proporción de 15:1, mientras que la red suripera capturó una proporción de 1:1.

Palabras clave: fauna de acompañamiento, pesca artesanal, frecuencia de tallas, estimador log normal, análisis de comunidades.

 

Abstract

The effect of the artisanal shrimp fishery on the fish fauna in the coastal lagoon of Santa María la Reforma, Mexico, was assessed. Twenty-nine stations were sampled monthly for shrimp and fin fish during six months, from December 2001 to May 2002, using small boats fitted with outboard engines and the three fishing gears employed by shrimp fishermen in the area: small shrimp trawl net, gillnet, and suripera net. Each sampling period lasted five days. In total, 11,368 individuals were caught, comprising 173 fish species. The species best represented in terms of number and biomass included the commercially important species Eucinostomus entomelas, Sphoeroides annulatus, Urotrygon chilensis, and Diapterus peruvianus. The highest abundance and biomass, as determined by boostrapping of the lognormal-based estimator, were caught with the shrimp trawl net. The mean total length of the fish captured was 17.4 cm for the gillnet, 15.8 cm for the shrimp trawl net, and 13.4 cm for the suripera net. The fishing gear that had a greater impact on the fish fauna were the shrimp trawl net and the gillnet, because they caught the greatest number of fish, biomass and diversity, and a large quantity of small individuals. These two fishing gears caught fish fauna from both the bottom and the water column, and showed the lowest fish/shrimp ratio in kilograms. The shrimp trawl net caught a 6:1 ratio, the gillnet a 15:1 ratio, and the suripera net a 1:1 ratio.

Key words: bycatch, artisanal fishery, length frequency, lognormal-based estimator, community analysis.

 

Introducción

Los descartes de peces no comerciales, de tamaño pequeño o dañados, son una práctica común en muchas pesquerías del mundo. Las pesquerías de camarón pueden capturar hasta 10 kg de peces por uno de camarón (Alverson et al. 1994). En la actualidad las pesquerías de camarón son las mayores productoras de fauna de acompañamiento, alcanzando hasta el 35% de las capturas de fauna de acompañamiento a nivel mundial. Como producto de la gran cantidad de descartes, el estudio y registro de sus datos son importantes para obtener estimados reales, para el cálculo de las capturas y stocks de las especies comerciales, y evaluar los efectos de la pesca sobre las especies no comerciales y el ecosistema. Estos datos son también útiles para evaluar la efectividad de medidas de conservación que ayuden a reducir la mortalidad por pesca, tales como el incremento en el tamaño de la luz de malla o el diseño de áreas marinas protegidas. Por tanto, es necesaria la realización de estudios detallados para analizar todos los posibles componentes de la pesquería, tanto de las especies comerciales como de las no comerciales, así como las diversas prácticas pesqueras (Rochet et al. 2002). También es necesario determinar qué especies son parte de la fauna de acompañamiento en un área dada, porque las listas de especies ayudan a definir las áreas protegidas y también ayudan a evaluar los efectos de las actividades humanas sobre el ecosistema (Cushing 1982). Las listas también dan información comparativa para estudios de biodiversidad, que son la base para los estudios de biología en las pesquerías (May 1992).

Practicamente no existen estudios sobre el tema en la parte sur del Golfo de California. Los estudios en el Pacífico norte de México son pocos y comprenden, en su mayoría, listas de especies (Balart et al. 1992, Amezcua-Linares 1996, Madrid-Vera et al. 1998, Aguilar-Palomino et al. 2001), pero ninguno de éstos fue específico para la zona de estudio.

La pesquería de camarón en los estuarios y lagunas de Santa María la Reforma (estado de Sinaloa, costa sureste del Golfo de California), es una de las actividades económicas más importantes en la región. De acuerdo con el Instituto Nacional de la Pesca, los desembarques de camarón durante la temporada 2003-2004 fueron de aproximadamente 512 t, que pueden representar un ingreso de 4.5 millones de dólares para aproximadamente 2100 pescadores registrados, el segundo mayor grupo de pescadores en la región. En estos estuarios y laguna costeras, la pesca de camarón está permitida para embarcaciones de hasta 7.5 m, con motores fuera de borda de hasta 175 HP. Los artes de pesca permitidos son la red suripera dentro de la laguna y la red de arrastre camaronero o chango en la ribera hasta profundidades no mayores a 12 m. La red agallera está prohibida para pescar camarón en todo el sistema. Sin embargo, los pescadores utilizan tanto la red de arrastre como la agallera para pescar dentro del sistema. En este estudio se evalúan algunos de los efectos de estos tres artes de pesca sobre la ictiofauna de estuarios, lagunas y bahías de Santa María la Reforma como una primera aproximación para estudiar los descartes de peces en el área.

 

Material y métodos

El sistema lagunar estuarino de Santa María la Reforma se encuentra en la plataforma continental del Pacífico central mexicano. Está clasificada como una laguna costera del tipo IIIA (Lankford 1977). Está habitada por manglares, su salinidad es variable (durante nuestro estudio varió de 25.1 a 38.6%o), la profundidad máxima es 24 m, y la profundidad media es 7 m. Se conecta con el Océano Pacífico a través de dos bocas de 5 km de anchura y profundidades que van de 12 a 17 m (fig. 1). Los muestreos se realizaron por el Instituto Nacional de la Pesca durante la evaluación de la pesquería del camarón. Con el objetivo de muestrear todos los ambientes del sistema, y debido a que el pico de la época de desove del camarón es durante el mes de abril, se nuestrearon 29 estaciones alrededor del sistema durante cinco días en intervalos mensuales, de diciembre de 2001 a mayo de 2002, de tal manera que se muestrearon los meses antes y durante la época de desove. Los muestreos se llevaron a cabo a bordo de pangas equipadas con motores fuera de borda de 115 HP, y con los tres artes de pesca utilizados en el sistema para pescar camarón: (a) red de arrastre, con 24 m de relinga y 50 mm de luz de malla en el copo; (b) red agallera, de 300 m de longitud y con luz de malla de 75 mm; y (c) red suripera, que es una atarraya modificada para arrastrar y consiste de una sección trapezoidal, con figura cónica y bolsas de 40 cm que funcionan como trampas en las que los camarones quedan atrapados al tratar de huir hacia la superficie. Esta última red tiene una luz de malla de 3.5 cm, y se arrastra utilizando la fuerza del viento o de la corriente que se genera con la marea (Hernández Carballo y Macías 1996, INP 1996, Aguilar-Ramírez 2002).

Cada muestreo duró 10 min para todas las artes por igual. La captura por unidad de esfuerzo (CPUE) para todos los artes se estandarizó para poder hacer comparaciones entre los diferentes artes. Para ello, la CPUE se calculó midiendo el tamaño de los diferentes artes de pesca, y la distancia que cada uno de ellos arrastró mediante el uso de GPS. Estos datos se registraron en cada operación, y con ellos se elaboró una base de datos que incluye al menos 950 lances de los tres artes utilizados en los muestreos. El área total arrastrada en cada operación se convirtió en un rectángulo para hacer los cálculos más fáciles. Mediante el uso de las medidas de tendencia central y dispersión de lo arrastrado por cada arte, a los datos se les aplicó la rutina de bootstraping aproximadamente 2000 veces hasta que se ajustaron a una distribución normal, y luego se estandarizaron para la relación N (μ, σ2)/ΣN (μ, σ2 ) en donde N es la distribución normal, μ es el promedio poblacional y σ2 es la varianza poblacional. Finalmente, se generó una integración del error mediante otra rutina de boostrapping del área arrastrada por cada arte de pesca y el área total arrastrada por todas las artes de pesca, de tal manera que se obtuvo un valor de CPUE en términos del área arrastrada por cada arte.

Posterior a cada lance, los peces y los camarones se recolectaron y guardaron en bolsas por separado; cada una se etiquetó con la fecha, número de estación y arte de pesca utilizado. Posteriormente cada bolsa fue congelada. En el laboratorio, los peces se identificaron hasta el nivel de especie, y se registraron la longitud total y el peso de cada individuo.

La abundancia y biomasa relativa mensual de cada especie capturada con cada arte se estimó en relación con la abundancia y biomasa total capturada respectivamente (Aguilar-Palomino et al. 2001).

Se estimaron los promedios de la abundancia y la biomasa capturadas por hectárea por cada arte de pesca en cada mes de muestreo para determinar que arte de pesca capturó el mayor número y biomasa de peces. Para generar una estimación precisa se utilizó el estimador basado en la discusión de la distribución normal de Pennington (1983). Se sabe que los datos de muestreos de camarón están cargados hacia la derecha y usualmente tienen acumulaciones de valores muy pequeños cercanos a cero (Folmer y Pennington 2000). Debido a que valores tan pequeños pueden provocar que los estimadores basados en la distribución log-normal presenten sesgos (Pennington 1991), se utilizó el estimador de la densidad media (μi) propuesto por Folmer y Pennington (2000). Las ecuaciones para resolverlo se calcularon usando el programa de cómputo NANSIS Grafer desarrollado por Jeppe Kolding (Folmer y Pennington, 2000). Los datos se calcularon mediante la ecuación:

donde F es la abundancia o la biomasa de peces capturados por hectárea, T es la abundancia o biomasa total de peces capturados, y A es el área total arrastrada por cada arte, s es la estación y d el día. Con cada uno de estos resultados se alimentó el programa para cada mes y arte de pesca, de tal manera que los resultados fueron la abundancia o biomasa en promedio por hectárea para cada mes y arte de pesca. Estos resultados se compararon con los resultados obtenidos para el camarón por el Instituto Nacional de la Pesca usando el mismo método para determinar la relación pez:camarón de las capturas por cada arte de pesca.

Se realizó un análisis de varianza de dos vías para determinar las diferencias que pudieran existir entre las longitudes capturadas por cada arte de pesca y en los diferentes meses de muestreo, utilizando las artes de pesca y los meses como factores y la longitud de los peces como la variable independiente. Se realizó la prueba C de Cochran para determinar la homocedasticidad de varianzas. Si la prueba era significativamente diferente, los datos se transformaron a sus logaritmos base 10, y se volvió a realizar la prueba hasta que se cumplió con las condiciones del análisis de varianza. En caso de encontrarse diferencias significativas se utilizó la prueba de comparaciones múltiples de Tukey para muestras no homogéneas. La frecuencia de tallas capturada por cada arte de pesca en los diferentes meses de muestreo se determinó mediante histogramas de frecuencias de tallas. Todos los análisis estadísticos se realizaron con el programa estadístico Statistica versión 5.1 (StatSoft Inc., Tulsa, OK).

Se utilizó el índice de diversidad de Shannon H' = -Σpi log2pi para determinar la diversidad de especies que cada arte capturó en los diferentes meses de muestreo. Finalmente, se utilizó el análisis de escalamiento multidimensional (MDS), que es un método multivariado de ordenación, para determinar grupos de similitud de las especies capturadas por cada arte en los diferentes meses de muestreo. Se utilizaron las abundancias de cada especie de pez y se transformaron con raíz 4a utilizando el coeficiente de similitudes de Bray Curtis. Para determinar la existencia de diferencias en la composición de la fauna capturada por cada arte de pesca en los diferentes meses, se realizó un análisis de similitudes (ANOSIM) usando los valores del estadístico R en comparaciones pareadas para determinar el nivel de disimilitud entre los grupos formados (Clarke 1993). Los valores de R se encuentran en un intervalo de 0 a 1; valores cercanos a 1 muestran que la composición de cada grupo es diferente, por tanto, no son grupos reales, mientras que valores cercanos a 0 demuestran que la hipótesis nula es cierta y que hay muy poca diferencia en la composición entre los grupos formados, siendo verdaderos grupos. Se utilizó el análisis de similitud de porcentajes (SIMPER) para determinar que especies son las causantes de las disimilitudes entre los grupos encontrados (Clarke 1993). El índice de diversidad de Shannon se obtuvo mediante el programa Primer (Clarke y Warwick 1994), mismo con el que se realizaron los análisis MDS, ANOSIM y SIMPER.

 

Resultados

Los esfuerzos estimados para cada arte de pesca, de acuerdo con la base de datos de las áreas arrastradas perteneciente al Centro Regional de Investigación Pesquera, fueron los siguientes: la red de arrastre camaronera arrastró 0.75 ± 1.8 ha, la red agallera arrastró 2.4 ± 0.6 ha y la red suripera arrastró 0.9 ± 2.2 ha.

En total se identificaron 48 familias (la red de arrastre camaronera capturó 45, la agallera 46 y la suripera 36), 102 géneros (la red de arrastre camaronera capturó 93, la agallera 87 y la suripera 66), y 173 especies (la red de arrastre camaronera capturó 152, la agallera 125 y la suripera 83).

La tabla 1 muestra las siete especies más importantes con respecto a la abundancia y biomasa que cada arte capturó. Eucinostomus entomelas fue la especie más importante porque siempre apareció dentro de las cinco especies más importantes capturadas por las tres artes de pesca y se capturó en todos los meses de muestreo. Cada arte de pesca mostró diferentes porcentajes de las especies capturadas. La red de arrastre camaronera mostró porcentajes similares de abundancia y biomasa en las siete especies mostradas en la tabla 1, mostrando un patrón homogéneo. Entre las especies que capturó este arte se encontraron especies de fondo como rayas, peces guitarra y peces planos. Las especies capturadas por la red agallera también mostraron un patrón similar a la de arrastre; sin embargo, algunas especies presentaron porcentajes muy altos en comparación con las demás especies y otras no se capturaron en todos los meses. Algunas especies típicas del fondo no se encontraron, mientras que fueron comunes algunas especies que habitan la columna de agua; tal fue el caso del género Albula spp. y la especie Scomberomorus sierra. En el caso de la red suripera, las principales especies fueron menos pero con altos porcentajes, entre éstas algunas del género Anchoa spp.

El arte de pesca que capturó la mayor abundancia de peces fue la red de arrastre camaronera, seguida de la red agallera y por último la suripera. Las capturas de la red agallera presentaron errores estándar amplios, principalmente durante el mes de febrero, lo que indica que este arte capturó en ocasiones grandes cantidades de peces, pero en otras también pocas cantidades. La abundancia media capturada por la red de arrastre mostró un pico durante enero, mientras que las abundancias medias capturadas por la red agallera y la suripera mostraron picos en febrero (fig. 2a).

La biomasa capturada por hectárea mostró una tendencia similar; sin embargo, los valores capturados por la red de arrastre camaronera están muy por encima de los valores capturados por los otros dos artes de pesca. La red de arrastre mostró en varias ocasiones errores estándar muy amplios, lo que indica que este arte capturó tanto peces pequeños y de bajo peso, como grandes y pesados (fig. 2b).

Se contó con los datos de biomasa media de camarón capturada por hectárea por cada arte de pesca y éstos se compararon con la biomasa media de peces capturados en cada mes con los diferentes artes de pesca. La relación pez:camarón más alta se obtuvo con las capturas de la red agallera, seguida por la de arrastre, mientras que la red suripera fue la que presentó la relación más baja. En el caso de esta última red, la relación kg de peces: kg de camarón de sus capturas fue de 1:1 o menor (tabla 2).

La red que capturó peces de mayor tamaño en promedio fue la red agallera (17.4 cm), seguida de la red de arrastre (15.8 cm), y finalmente la red suripera (13.4 cm) (F (2, 11367) = 85.56; P < 0.01). Los peces de mayor tamaño se capturaron entre marzo y mayo con longitudes medias cercanas a 17 cm. De diciembre a febrero las longitudes medias estuvieron por debajo de 15 cm (F (5, 11367) = 47.3, P < 0.01). Los tres artes de pesca mostraron una tendencia similar durante los meses de muestreo, con excepción del mes de enero en que la longitud media de los peces capturados con la red agallera y la red suri-pera mostraron un pico, mientras que la longitud media de los peces capturados con la red de arrastre disminuyó (F (10, 11367) = 8.8, P < 0.01) (fig. 2c). La red suripera mostró errores estándar amplios en mayo debido a la captura de dos Sphoeroides annulatus de gran tamaño.

Aunque la red de arrastre capturó peces que en promedio fueron más pequeños que los capturados con la red agallera pero mayores que los capturados con la red suripera, la red de arrastre capturó una gran cantidad de peces de tallas pequeñas, y fue la red que capturó también los individuos mas grandes en talla. La red agallera capturó generalmente organismos de tallas medianas, aunque también recolectó una gran cantidad de peces de tallas pequeñas, aunque no tantos como la red de arrastre. La red suripera recolectó organismos de tallas pequeñas en su mayoría, sin embargo, las cantidades de organismos capturados fueron aproximadamente de 1/3 respecto a lo recolectado por los otros dos artes (fig. 3).

El arte de pesca que recolectó la mayor diversidad de peces fue la red de arrastre camaronera. Los valores de H presentados por el conjunto de organismos recolectados por la red de arrastre y la agallera, presentaron una tendencia similar a lo largo de los meses de muestreo, disminuyendo de diciembre a febrero, para luego incrementarse en marzo y abril, y volviendo a decrecer en mayo. Los valores de H de los organismos capturados con la red suripera mostraron un pico en enero, mientras que los valores para los otros dos artes mostraron un decremento durante este mes. Después de este mes los valores disminuyeron, y posteriormente mostraron una tendencia similar a la presentada por los otros dos artes (fig. 4a).

La ordenación de las densidades de las especies de peces de acuerdo al gráfico del análisis MDS, mostró que los diferentes artes de pesca y las estaciones del año explican la posición de las muestras en el gráfico (fig. 4b). La fauna de peces capturada con los diferentes artes de pesca formó grupos para cada arte. De igual manera se formaron grupos de acuerdo a la estación del año colocando las muestras de invierno en la parte izquierda del gráfico, mientras que las de invierno se colocaron en la parte derecha.

El ANOSIM corroboró que existen diferencias significativas entre la ictiofauna capturada con los artes de pesca (red de arrastre camaronera vs. red agallera: R = 0.74, P < 0.01; red de arrastre camaronera vs. red suripera: R = 0.63, P < 0.02; red agallera vs. red suripera: R = 0.54, P < 0.03), y que la composición faunística de una época del año fue significativamente diferente a la de la siguiente época (R global = 0.5, P < 0.01).

Mediante el SIMPER se determinó que las especies que mejor caracterizaron las muestras de invierno fueron Sphoeroides annulatus, Selene brevoortii y Urotrygon chilensis, mientras que Anchoa walkeri, Microlepidotus brevipinnis, Oligoplites altus, Eucinostomus argenteus, Pliosteostoma lutipinnis, Epinephelus analogus y Eucinostomus gracilis fueron las que mejor caracterizaron las muestras de primavera. En lo que respecta a los artes de pesca, la fauna capturada por la red de arrastre se distinguió de la capturada por los otros dos artes de pesca debido a la abundancia de las especies demersales Achirus mazatlanus, Syacium ovale, Urotrygon chilensis, U. nana, Pomadasys panamensis, Urobatis halleri, Rhinobatos glaucostigma, Selene brevoortii, S. peruviana, Sphoeroides annulatus y Prionotus stephanophrys capturadas por la red de arrastre, mientras que las especies Carangoides otrynter, Diapterus peruvianus, Albula nemoptera y Anchoa walkeri fueron más abundantes en la fauna capturada por la red agallera, y las especies Anchoa walkeri y A. mundeola fueron las más abundantes en la fauna capturada por la red suripera.

Las especies que causaron las diferencias encontradas entre la fauna capturada por la red agallera y por la suripera fueron Selene brevoortii, Scomberomorus sierra, Albula nemoptera, Menticirrhus elongates y Sphoeroides annulatus que se encontraron primordialmente entre las especies capturadas por la red agallera, mientras que Anchoa walkeri presentó una mayor abundancia en las capturas de la red suripera.

 

Discusión

A pesar de que el uso de la red agallera y la red de arrastre está prohibido dentro de la laguna de Santa María la Reforma, estos artes de pesca son utilizados para capturar camarón dentro del sistema. Estos dos artes de pesca capturan una gran cantidad de peces como fauna de acompañamiento del camarón, sin embargo, el efecto real de estas artes sobre la ictiofauna no ha sido evaluado.

El número de especies encontradas en el sistema es alto, posiblemente debido a que las especies utilizan este sistema como área de reproducción o crianza. La importancia de este tipo de sistemas como áreas de crianza para peces ha sido documentada (Allen y Barker 1990, Amezcua-Linares et al. 1992, Nagelkerken et al. 2001). A partir de los primeros resultados, es posible determinar que la red de arrastre de camarón es el arte de pesca que captura mayor diversidad de especies, observándose un patrón que va desde un porcentaje similar entre todas las especies dominantes, hasta especies con gran dominancia con un porcentaje alto, desde la red de arrastre camaronera a la red suripera. Estos resultados son concordantes con el índice de diversidad de Shannon, indicando que estas artes van desde la poco selectiva red de arrastre de camarón, hasta la altamente selectiva red suripera. La red agallera también es una red poco selectiva pero no tan poco como la red de arrastre.

Normalmente se piensa que la red de arrastre de camarón es el arte de pesca que causa mayor efecto sobre la comunidad de peces por encima de los otros dos artes debido a que captura grandes cantidades de peces, en términos de individuos y biomasa. La red agallera y la suripera muestran tendencias similares en términos de individuos y biomasa, y aunque algunas veces el resultado en cuanto a abundancia es muy similar, de diciembre a febrero los resultados de la red suripera son mucho mayores.

Tal y como se esperaba, la relación de captura kg de camarón: kg de pez fue mayor en la red agallera posiblemente debido a que este arte no ha sido diseñado para la captura de camarón. El arte más efectivo fue la red suripera, presentando relaciones de captura kg de camarón: kg de pez de 1:0.1 La red de arrastre rindió los valores que se esperaban de aproximadamente 5 kg de peces por cada kilogramo de camarón capturado.

La similitud entre las tendencias observadas en la red agallera y la suripera puede deberse a que ambas capturan principalmente peces de la columna de agua, como lo muestran los resultados del análisis SIMPER, mientras que la red de arrastre captura principalmente peces del fondo. Las diferencias observadas entre los artes de pesca utilizados podrían estar relacionadas no sólo con la selectividad de cada una de ellas, sino también con que éstas operan en diferentes zonas dentro de la laguna; sin embargo, a lo largo de este estudio los tres artes de pesca se utilizaron en las mismas áreas. Por lo tanto, las diferencias encontradas en este estudio están relacionadas con su selectividad más que con las posibles diferencias en fauna que se pudieran encontrar en las diferentes áreas.

Las variaciones mensuales encontradas en la abundancia y biomasa seguramente están relacionadas con los hábitos de reclutamiento, reproducción o migración de las especies más abundantes; sin embargo, dicho análisis no es el objetivo del presente trabajo.

En general se piensa que aun cuando la red agallera captura una gran cantidad de peces, éstos son principalmente de tallas grandes, por lo que los pescadores podrán venderlos más fácilmente además de que el efecto en las poblaciones podría no ser tan alto debido a que son peces adultos que ya se han reproducido al menos una vez. Sin embargo, los resultados de este estudio indican que la red agallera captura individuos tan pequeños como los capturados por la red de arrastre. Por ejemplo, en el transcurso de este estudio se capturaron individuos de 14 cm de longitud de Hoplopagrus guentherii, Lutjanus guttatu y L. argentiventris tanto por la red agallera como por la de arrastre. Piñón (2003), en un estudio realizado en la misma localidad, determinó que la longitud de primera madurez de estas especies es de 35, 30 y 33 cm, respectivamente, lo cual indica que ambos artes de pesca capturan organismos que no se han reproducido aún, y por tanto, su pesca tiene un efecto negativo en el reclutamiento de estas especies reduciendo el stock. Probablemente esto sucede con otras especies. Otro problema es que, debido a su talla pequeña los peces no son vendidos y son desechados, devolviéndolos al medio.

El resultado de los análisis multivariados indica que la fauna íctica cambia a lo largo de las estaciones del año, y que la composición específica de las especies capturadas por cada una de ellas es diferente, lo cual implica que el efecto combinado de los tres artes de pesca elimina gran cantidad de peces del sistema, principalmente las redes de arrastre y agallera que capturan 169 especies de un total de las 173 registradas en este estudio. Debido a que la composición de las especies ícticas cambia estacionalmente, estos dos últimos artes afectan diferentes poblaciones de peces que concurren en este sistema para reproducirse o para desarrollarse (Allen y Barker 1990, Amezcua Linares et al. 1992, Nagelkerken et al. 2001).

Si bien durante la temporada de pesca de camarón algunos de los peces son consumidos o vendidos por los pescadores, su proporción es mínima. Generalmente los pescadores recolectan sólo los camarones y descartan lo demás. Durante el periodo de muestreo se observó que sólo los peces de tallas grandes y de ciertas especies eran recogidos. Tal es el caso de Sphoeroides annulatus, Rhinobatos spp., Lutjanus spp., Scomberomorus sierra y Bagre panamensis, que son de interés para los pescadores. Muchas de las especies que son capturadas en gran cantidad, aunque puedan tener importancia comercial son descartadas, como son las especies de la familia Albulidae, Haemulidae, Gerreidae y Sciaenidae. Los peces descartados son devueltos al mar una vez que los pescadores han terminado de recolectar los camarones y los peces con un alto valor comercial. Los peces descartados generalmente se encuentran muertos al momento de ser devueltos al mar debido al tiempo que pasan en superficie o al daño físico sufrido durante la maniobra en cubierta, caso particularmente cierto para la red agallera. Aun cuando los peces se regresen vivos al mar, éstos seguramente mueren después de ser liberados. La depredación sobre estos peces es intensa después de la liberación debido a que estos sistemas están habitados por un gran número de aves marinas y delfines que se encuentran merodeando la embarcación en el transcurso de la maniobra (Baum et al. 2003).

Aún cuando todos los peces de tallas comerciales se utilizaran, lo cual no sucede, la mayoría de los peces serían descartados. Los resultados de este estudio muestran que la mayoría de los peces son de tallas menores a 23 cm, por lo que sólo 15% de los peces capturados con la red de arrastre, 18% de los capturados con la red agallera y 8% de los capturados con la suripera son susceptibles para la venta o el autoconsumo por los pescadores. El resto de los peces serán descartados. Las 1024 embarcaciones registradas descartan entre 80% y 90% de los peces que capturan a lo largo de la temporada de pesca del camarón.

Es difícil evaluar la cantidad de peces que son descartados durante una temporada de pesca debido a que no se sabe con precisión que tipo de arte de pesca utilizan los pescadores. De acuerdo con los datos del Centro Regional de Investigación Pesquera-Mazatlán, de 512 t de camarón capturadas en la temporada 2003-2004 en este sistema, aproximadamente sólo 70% (360 t) de la captura es reportada, aproximadamente 60% (3101) capturada con red suripera y 10% (50 t) con red de arrastre. El restante 30% corresponde a la captura no reportada por redes agalleras y de arrastre, aproximadamente 15% (80 t) para cada arte de pesca. Utilizando los valores mínimos y máximos de la tabla 2 para cada arte de pesca, la red suripera capturaría de 30 a 400 t de peces que son descartados, la red agallera alrededor de 775 t y la red de arrastre de 490 a 720 t. El total de peces descartados en la temporada 2003-2004 podría estar en el orden de 1300 a 1900 t. Aún si 20% de estos peces se utilizara, las toneladas de peces descartados serían de 1000 a 1500 t. Además, hay una cantidad importante de embarcaciones y pescadores furtivos que no reportan su producción, por lo que las toneladas de peces descartados deben de ser mucho mayores tan sólo en este sistema. Es necesario considerar que en otros sistemas lagunares-estuarinos del área se usan las mismas artes de pesca y se presenta esta misma problemática, además de que en algunos como los del estado de Sonora, existe oposición de los pescadores a usar la red suripera y, de acuerdo con el Instituto Nacional de la Pesca, se permite la captura de camarón con red agallera, por lo que las cantidades de peces que se desechan en la pesquería artesanal de camarón deben de ser muy altas.

El descarte de las cantidades de peces estimadas en este trabajo afecta potencialmente la dinámica de los stocks explotados, al igual que los de otras especies de la comunidad (Rochet et al. 2000). Los tres artes seguramente tienen un efecto negativo sobre el reclutamiento de muchas especies debido a que capturan una gran cantidad de individuos pequeños. Las artes de pesca móviles alteran los hábitats del fondo marino (Auster et al. 1996). Los artes de pesca de fondo, como la red de arrastre, pueden reducir la complejidad del hábitat al remover la epifauna emergente, aplanando las capas sedimentarias y quitando especies que forman estructuras como los corales y las esponjas (Auster et al. 1996, Jennings y Kaiser 1998, Auster y Langton 1999). Desde nuestro punto de vista, es urgente promover el uso de la red suripera dentro del sistema, así como maneras de reducir la cantidad de organismos capturados como fauna de acompañamiento por las redes de arrastre que se utilizan afuera del sistema lagunar. Sin embargo, también es necesario sentar las bases para un manejo de las pesquerías tomando en cuenta al ecosistema (Gislason et al. 2000) debido que hay que considerar que la red suripera también tiene efectos en el sistema, aun cuando éstos sean mucho menores a los causados por los otros dos artes de pesca. Para esto, es necesario el conocimiento preciso de las cantidades de peces desechados, así como un mejor conocimiento de las prácticas de descarte (Rochet et al. 2002), por lo que es necesario incrementar los muestreos y, en general, profundizar en esta línea de investigación. De momento, la composición y abundancia de las especies es claramente afectada de manera adversa.

 

Agradecimientos

Agradecemos al personal del Centro Regional de Investigación Pesquera en Mazatlán, y a todos los pescadores que participaron en este estudio, por su ayuda durante la recolección de las muestras. También agradecemos a G. Ramírez y C. Suárez por su ayuda durante la edición del manuscrito, y a E. Glazier por la edición del texto en inglés.

 

Referencias

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