Introducción
La Colitis ulcerosa crónica idiopática (CUCI), es un trastorno inflamatorio difuso que afecta el recto y se extiende en dirección proximal y continua de forma simétrica e ininterrumpida, para comprometer el colon en grado variable, pudiendo afectar en ocasiones a la totalidad del intestino grueso, respetando el resto del tubo digestivo. Su evolución es crónica y alterna períodos de actividad con fases de latencia. La mayoría de los casos presentan manifestaciones clínicas características: diarrea, dolor abdominal, sangrado rectal y aumento de la secreción mucosa. Para el diagnóstico de esta enfermedad es necesario, además de una sospecha clínica, toda una serie de estudios complementarios, donde la colonoscopia, tanto en su modalidad diagnóstica como terapéutica, es de gran ayuda para el manejo de los pacientes con CUCI. Sirve tanto en el diagnóstico inicial, así como el diagnóstico diferencial, permite determinar la extensión, actividad y severidad. La colonoscopia muestra la reacción inflamatoria de la mucosa del colon, con frecuencia edematosa y friable, con pérdida del patrón vascular y con lesiones ulcerosas y polipoideas; una característica constate en la CUCI es la continuidad de las lesiones, así como la afectación del recto. El estudio histológico es junto con la endoscopia la base para el diagnóstico del CUCI. Las características histológicas sugestivas son: disminución y distorsión de las criptas, aumento difuso e intenso del infiltrado inflamatorio de la lámina propia de la mucosa, plasmocitosis basal difusa e intensa depleción de mucina, con formación de abscesos en las criptas. Existen varios grados de actividad histológica: grado 0 (Mucosa normal); grado I (Infiltrado inflamatorio ligero, con disminución de los globets cells y pérdida del paralelismo tubular con ramificaciones y la presencia de eosinófilos); grado II (Infiltrado inflamatorio moderado, con disminución de los globets cells, y pérdida del paralelismo tubular con ramificaciones y la presencia de eosinófilos y atrofia glandular y mucosa: pérdida glandular); grado III (Infiltrado inflamatorio severo, con disminución de los globets cells y pérdida del paralelismo tubular con ramificaciones y la presencia de eosinófilos y atrofia glandular y mucosa: pérdida glandular, y pérdida del epitelio y absceso críptico: criptitis). Cuando se realiza una adecuada correlación clínico-endoscópica-histopatológica el paciente tiene una mayor probabilidad de mantener controlado su padecimiento y evitar las complicaciones graves que ya se conocen.
Objetivo
Determinar la relación entre los hallazgos endoscópicos sugestivos de CUCI y su contraparte histológica en el Hospital Regional “General Ignacio Zaragoza”.
Material y métodos
Puesto que se trata de un estudio observacional analítico, retrospectivo, no se realizará cálculo de la muestra. Se incluirán todos los pacientes con reporte endoscópico con diagnóstico de CUCI, en un periodo comprendido de enero 2015 a julio 2019. Se obtendrán datos de forma manual de los expedientes clínicos, solicitados en el archivo clínico del hospital Regional “General Ignacio Zaragoza” con el objeto de determinar género y edad; los reportes de biopsia se revisarán en el programa institucional TESI. View y de la base de datos electrónica del servicio de patología. La base de datos final se capturará en una hoja de cálculo usando el programa Excel.
Análisis estadísticos
Para el presente estudio no hubo cálculo de la muestra ya que se incluyeron todos los pacientes del periodo establecido del 2015 al 2019. La evaluación estadística se realizará con la base de datos final capturada en una hoja de cálculo usando el programa Excel. Se realizará análisis estadístico básico descriptivo usando porcentajes.
Resultados
Se encontraron 57 pacientes con hallazgos endoscópicos compatibles con CUCI, de éstos 27 fueron mujeres y 30 hombres. Con respecto a las edades, 43 pacientes fueron menores de 35 años, 9 mayores de 40 años y 5 pacientes estuvieron entre 36 y 40 años, por lo que 91.22% estuvieron dentro de los dos picos de edad reportados en la bibliografía. Del total de pacientes, 37 fueron, verdaderos positivos, es decir el reporte histológico describió hallazgos compatibles con CUCI) de los cuales 26 pacientes con CUCI (70.27%) no tuvieron displasia, 9 se reportaron con adenoma tubular y displasia de bajo grado (24.32%) y 2 se reportaron con adenoma tubular y displasia de alto grado (5.40%).
Discusión
La incidencia y la prevalencia de la enfermedad inflamatoria intestinal (EII) se ha incrementado en los últimos años en varios países de Latinoamérica. Existe una necesidad de concientizar a gastroenterólogos y a la población en general para poder tener un diagnóstico y tratamiento oportunos en la enfermedad inflamatoria intestinal. De esta población un gran porcentaje es erróneamente diagnosticado como síndrome de intestino irritable, enfermedad hemorroidal o gastroenteritis infecciosas. En el presente estudio se estudió la relación entre hallazgos endoscópicos e histológicos en el servicio de endoscopia del Hospital Regional “General Igsnacio Zaragoza” en el cual se pudo realizar prevención de potenciales complicaciones y disminuir ingresos hospitalarios por patologías crónicas mal controladas. Por lo anterior es importante la toma de biopsias en los pacientes con hallazgos endoscópicos sugerentes de enfermedad inflamatoria intestinal ya que también es importante determinar la progresión y el estado actual de la enfermedad, puesto que de los pacientes con CUCI, más del 29% ya tenían datos de displasia. Cabe mencionar que los reportes histológicos carecen de estadificación de actividad.